El ambicioso L.A. Noire regresa tras más de seis años con una remasterización tanto para PlayStation 4 y Xbox One como para Nintendo Switch. En este análisis de L.A. Noire profundizamos en los aspectos de cada versión, pero también hacemos un repaso a las nuevas funciones y a lo que fue y es esta obra tan característica que a día de hoy sigue sin tener igual.
Es realmente sorprendente cómo pasa el tiempo. Hace seis años, cuando esperábamos con ganas L.A. Noire, sorprendidos por su propuesta y, sobre todo, por sus animaciones faciales, no sabíamos qué camino iba a tomar el videojuego. A día de hoy, L.A. Noire es un rara avis. Uno de esos videojuegos irrepetibles, porque nadie en su sano juicio dedicaría un monumental presupuesto (cuando 50 millones eran un montón de millones) a una aventura calmada, elegante, sin mucha acción y con una tecnología patentada extremadamente cara. Sí que pasa el tiempo.
El MotionScan, el método de captura facial que usó el juego de Rockstar y Team Bondi por aquél entonces, está superada a día de hoy. ¿O no? Lo cierto es que son pocos los juegos que se atreven a bucear incluso en la actualidad en la animación facial. Naughty Dog utiliza una mezcla de captura facial retocada a mano, mientras que la fórmula de Hellblade es una de las técnicas de captura más representativas; pero incluso en estos ejemplos, y teniendo en cuenta la falta de detalle para los tiempos que corren del MotionScan de L.A Noire, el juego de Rockstar sigue dando unos resultados sorprendentes, con expresiones y detalles en ellas muy difíciles de conseguir hoy día.
Si no te has vuelto a acercar a la historia del detective Cole Phelps desde su lanzamiento, jugar ahora a L.A. Noire es un ejercicio de humildad. Por aquél entonces era fácil pensar que este bien podría ser el futuro de la aventura y que muchos otros juegos aprenderían un par de cosas de su tecnología, de su tono o de su estilo, uno que dosifica el ritmo, los tiroteos y el cuidado por el detalle. Pero la industria ha avanzado por otros derroteros convirtiendo a esta aventura detectivesca en un videojuego singular. Único. Sin apenas juegos que se le parezcan. Prácticamente una excepción a la regla.
Es por ello que, si no te planteaste jugarlo en la pasada generación o la posterior versión para ordenadores, tanto la edición de L.A. Noire para PlayStation 4 y Xbox One como la de Nintendo Switch, con sus diferencias, son una buena oportunidad para ver otra forma de hacer videojuegos. No perfecta, pues el tiempo deja más en evidencia los errores en el desarrollo de algunos casos, su sistema de interrogatorios o el poco explotado mundo abierto, pero su finura a la hora de representar la bonanza y decadencia de finales de la década de los 40 es realmente destacable.
Hablamos de un nivel de detalle que roza la enfermedad, a la hora de representar una orografía de la Los Ángeles de los 40 increíblemente fiel así como investigar casos verídicos de homicidios de la época como inspiración. La carrera de Cole Phelps desde oficial de policía, pasando por los departamentos de Tráfico, Homicidios, Antivicio e Incendios rezuma un trabajo de investigación y de guión excelente, incluso para los estándares de hoy día, salpicado quizá por algunos Deus Ex Machina de libro, momentos donde las motivaciones del propio Phelps no quedan claras y ese sistema de interrogatorio que en algunos momentos no reflejaba fielmente las respuestas del jugador, hasta el punto de que en esta remasterización han sido retocadas.
Así, las clásicas reacciones de Verdad, Duda o Mentira han sido modificadas, respectivamente, por Poli Bueno, Poli Malo o Acusar. Lo cierto es que aunque Acusar queda algo más definido a la hora de presentar las pruebas, entre Poli Malo y Acusar sigue habiendo dudas a la hora de elegir correctamente la forma de proceder. Por lo demás, el juego se presenta en su apartado jugable tal y como lo hizo en su lanzamiento en 2011, con la inclusión de todos los DLCs que aparecieron en el momento, La Ciudad Desnuda, El Lapsus, Galvanizados Nicholson y Un Montón de Hierba, que ofrece nuevos casos a cada uno de los departamentos por los que pasaremos, algunos más conseguidos que otros. También se añaden los objetos que ya se incluyeron como contenido para la reserva, como armas y trajes.
Dos versiones: PS4/XOne y Switch
L.A. Noire regresa en dos formatos bien diferencias. La correspondiente a PlayStation4 y Xbox One es una remasterización en toda regla, mientras que la de Nintendo Switch se adapta con los nuevos cambios, mejorando algunos aspectos y manteniendo otros de la original.
En cuanto a la de PlayStation 4 y Xbox One, se trata de una remasterización correcta, que se puede disfrutar a 1080p en las consolas estándar y a 4K en las versiones para PS4 Pro y Xbox One X. No se alcanza en esta ocasión los 60 frames por segundo, pero se ha mejorado sustancialmente muchos de los efectos y el modelado de la ciudad de Los Ángeles. Se elimina mucho popping de la versión original alcanzando mejores distancias en los tramos que recorremos en coche la urbe, mientras que los reflejos y el motor de iluminación están mucho más conseguidos.
Rockstar no se ha quedado ahí, llegando incluso a mejorar el comportamiento de las nubes, pero sobre todo cambiando y mejorando algunos planos de cámara y aplicando texturas de alta resolución que permiten ver con mucho más detalle el genial estilo de la época que se representa en sus calles, trajes y estilo de vida. Las animaciones faciales siguen luciendo sorprendentemente bien, aunque ya no lleguen a impresionar tanto como hace seis años, y sólo en los primeros planos empezaremos a notar que la resolución de las caras se antoja algo borrosa comparado con la calidad de imagen y nitidez del resto de la escena.
En cuanto a la versión de Switch, Rockstar ha conseguido un buen trabajo trasladando el juego a la híbrida de Nintendo, optando por elevar la resolución a 1080p cuando jugamos en modo Sobremesa, mientras que el modo portátil se mantiene a la resolución nativa de la pantalla de la máquina. Es en este modo donde conseguimos los mejores resultados, quedando mucho más natural la calidad de las animaciones faciales y la escala de la ciudad que en el modo Sobremesa.
Conectado a la televisión, hemos detectado algunos problemas. La resolución es 1080p, sí, pero la calidad de imagen se resiente en los espacios abiertos y momentos que recorremos la ciudad con nuestro coche patrulla, presentando un aliasing prominente y un exagerado popping en la lejanía. Las resolución de las caras, además, sufre en algunos momentos de un estiramiento de píxeles, mientras que hemos detectado caídas de frames que, si bien no son constantes, pueden llegar a empañar algún momento donde necesitamos más precisión, como las persecuciones y los tiroteos.
Las texturas y efectos lumínicos se asemejan más a las pruebas que hemos realizado con la versión original del juego de Xbox 360 y PS3. Si bien se han logrado realizar algunas mejoras cuando el hardware lo ha consentido, en otros momentos el juego permanece inalterable en comparación con la versión original. En resumen, aunque los dos modos son válidos, nuestra experiencia ha sido mucho más satisfactoria jugando en la propia pantalla de Switch que en el televisor.
La versión de Switch también incorpora algunos añadidos como el giroscopio, que al desconectar los Joy-Con de la consola, nos permiten realizar algunos gestos o girar la cámara, pero que se antojan poco inspirados y no dejan de ser más que una curiosidad. Algo más útil pueden resultar los controles táctiles a la hora de explorar algunos entornos y lograr pistas o la vibración HD a la hora de examinarlas.
Con todo, L.A. Noire supone una gran experiencia que todo el mundo debería disfrutar al menos una vez. Si ya lo hiciste en su momento, no hay tampoco muchas excusas para hacerlo, a no ser que quieras ver cómo ha madurado el juego o dar un repaso a la historia junto a los contenidos descargables. A la hora de escoger una versión, será importante definir si vas a jugar en tu televisor o prefieres el factor portátil. Muchos de los casos de L.A. Noire son rápidos y se sienten perfectos para un dispositivo como Switch, mientras que la experiencia en televisor de PS4 y Xbox One te aseguran una mayor estabilidad y calidad de imagen. Una decisión por seguro más fácil que elegir entre Poli Bueno, Malo o Acusar, pues todas tienen su recompensa.
Excelente
L.A. Noire fue un título muy diferente al resto y lo sigue siendo. Las dos versiones que ha remasterizado Rockstar son más que correctas, definiendo nuevas resoluciones, texturas de alta calidad y realizando algunas mejoras en la propia mecánica del juego. La de PS4 y Xbox One apuesta por la calidad de imagen del remasterizado, mientras que la de Switch, algo más humilde en lo técnico, luce a buen nivel y posee la ventaja de la portabilidad, la cual le sienta como un guante al juego en muchos de sus casos.
Comprar L.A. Noire: Remaster- Buena remasterización, con mejoras en todas las versiones
- Sigue siendo un juego único en su especie, que todo el mundo debería probar
- Las animaciones faciales, pese al tiempo, siguen funcionando
- El guión, así como la propia construcción de Cole Phelps, tiene algunos altibajos
- El sistema de interrogatorio, pese a ser fascinante, sigue sin representar fielmente las intenciones del jugador en algunas ocasiones
- La ciudad no se aprovecha como mundo abierto
