Con el estreno de la película del mismo título, Activision vuelve a la carga con los simpáticos protagonistas de Vecinos invasores. Unos “indefensos” animalitos que vienen a repartir leña a diestro y siniestro, para defender su territorio.
Como viene siendo habitual, cada película de animación tiene su versión en videojuego y Vecinos Invasores no se queda atrás. Nos encontramos con una especie de continuación o historia alternativa a la película original, cosa que es de agradecer si no se ha visto la película y se piensa ver, o mejor dicho, este juego va destinado a aquellos que quedaron enamorados de estos animales de armas tomar y tienen ganas de más aventuras suyas. Así tomamos el papel de una pareja de animalitos a escoger entre RJ, Verne, Hammy y Stella (mapache, tortuga, ardilla y mofeta respectivamente).
¡A pegar mamporros!
La mecánica del juego es de lo más simple: avanza, golpea y encuentra los objetos marcados como objetivos de misión. Estas misiones serán tan variopintas como entrar en una casa para rapiñar toda la comida existente, o robar un proyector de video. Todo esto se sitúa en lugares plagados de enemigos y trampas mortales que habrá que esquivar, si no queremos perder uno de nuestros valiosos (pero abundantes) puntos de vida.
Para llevar a cabo nuestro trabajo necesitaremos la ayuda de un compañero que o bien lo maneja la CPU, o bien un amigo. También dispondremos de un buen repertorio de movimientos y ataques, que son los siguientes:
Tenemos el clásico doble salto para movernos con mayor precisión y algunos ataques en suspensión. Con el botón de ataque conseguiremos que nuestro animalito haga un ataque encadenado pulsándolo seguidamente, o un ataque recargado manteniéndolo pulsado. Como ataque secundario, disponemos de un palo de golf para lanzar pelotas de golf que aturdirán a los enemigos.
Cada personaje se diferencia en el ataque especial, que tendrá un efecto más devastador que el ataque normal, pero se encuentra limitado por una barrita de energía que habrá que llenar eliminando alimañas hostiles o encontrando paquetes de cereales.
Pero lo que más llama la atención son los ataque conjuntos, que se realizan subiéndose encima del compañero, para así poder atacar a la vez o formar un tornado que barrerá a los enemigos de la zona.
Según avancemos en el juego iremos aumentando el número de movimientos disponibles, permitiéndonos acabar más rápidamente con los enemigos y estar preparados para batirnos contra los enemigos más fuertes. Pero a nuestros movimientos también podremos sumarles nuevas armas para nuestro ataque principal, como por ejemplo martillos, mazas, desatascadores, o una pistola de dardos más precisa y rápida que el palo de golf.
También se han incluido una serie de pequeños puzzles para abrir ciertas puertas u otros desencadenantes, que suelen ser muy facilitos y en el caso de jugar en modo cooperativo, han de realizarse entre los dos jugadores.
Atento a tu alrededor
El juego se basa en una linealidad absoluta en la que, a pesar de apreciar amplios entornos tridimensionales, se ve mermada habitualmente por unas paredes invisibles en las que incluso rebotan los proyectiles que lanzamos. Aunque vayamos siempre por estos pasillos de muros invisibles, hay numerosos objetos ocultos y es que, si hay algo de lo que este título puede presumir, es de tener una gran cantidad de objetos rompibles.
De esta manera debemos estar atentos a nuestro alrededor para no dejar “títere con cabeza”, ya que ahí se encuentran ocultos los numerosos extras que contiene este juego. Podemos encontrar imágenes artísticas, videos inéditos sobre los personajes o incluso algunos pequeños minijuegos. Estos minijuegos son bastante sencillos y variados, con pruebas del tipo ganar una carrera de obstáculos, una competición de coches teledirigidos, tiro al blanco… sencillos pero divertidos.
Un mundo mejorable
El acabado visual deja un poco que desear, aunque el diseño de los personajes y enemigos es fiel al de la película, nos queda la sensación de que es un juego de la anterior generación.
De todas maneras el número de enemigos es amplio y su diseño bastante gracioso, al igual que los decorados, bastante bien elaborados pero con un aspecto final muy limitado por los incesantes pasillos invisibles.
En cuanto al apartado sonoro, lo cierto es que queda por debajo del resto, con unas músicas que pasan bastante desapercibidas y unas voces (totalmente en castellano) que oiremos una y otra vez de forma repetitiva, cada vez que hagamos ciertas acciones básicas como un doble salto o un golpe, llegando a cansar.
En cierto modo podríamos decir que lo mismo ocurre con los vídeos entre misiones, que aún siendo muy correctos y sobre todo divertidos, dejan un pequeño vacío debido a su simplicidad y poca coordinación con el doblaje.
Vecinos Invasores es un juego para los más pequeños de la casa. La inclusión del modo cooperativo hace que sea aún más divertido. La mecánica del juego, por cierto muy parecida a la vista en Lego Star Wars, es ideal para jugar un rato y para jugadores poco experimentados debido a su simplicidad.
