Análisis de Starhawk

Análisis de Starhawk
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Warhawk tiene continuación, y ésta se llama Starhawk. Los chicos de LightBox Interactive mejoran sensiblemente la fórmula del original para cuajar un shooter on-line en tercera persona más rotundo. Mejoras jugables, visuales y tecnológicas para un lanzamiento cuyo interés reside en el multijugador. Con mimbres tan buenos, ¿qué le ha faltado para alcanzar el sobresaliente? Algo de profundidad para un título francamente divertido.

En 2007 se lanzaba en exclusiva para PlayStation 3 Warhawk, un juego que ejercía de continuación de un título de 1995 para la primera PlayStation, y que en su nueva versión ofrecía una gran experiencia de acción on-line para hasta 32 usuarios que logró hacerse un hueco en el mercado por su más que notable calidad y su precio reducido. Ahora tenemos una suerte de segunda parte, heredero, secuela o como deseemos considerar a este Starhawk, que se consolida como un título de acción más que notable.

Es divertido, es ágil y es bastante adictivo y, además, mezcla con bastante habilidad varias ramas jugables muy interesantes. Quizá le ha faltado algo de profundidad en la oferta de modalidades para trascender algo más, pero en su estado actual se trata de un shooter multijugador muy recomendable.

Tropas Espaciales
Como en la mayoría de los títulos orientados al on-line, la campaña individual es una especie de tutorial de varias horas en el que nos podemos hacer una idea de los tipos de mecánicas jugables a los que nos vamos a enfrentar en el multijugador. Se trata de descubrir todos los entresijos que mueven a la faceta del juego acompañado, y se trata también de hacerlo con unas misiones que empujan con habilidad el hallazgo por parte del usuario de las fortalezas y flaquezas de los diferentes estilos y mecánicas que se proponen.

Todo esto se lleva a cabo en Starhawk con una campaña de buena presentación pero de contenido narrativo más bien discreto. El punto de partida es bastante interesante, con nuestro protagonista formulado como un héroe dotado de un sorprendente carisma que, sin embargo, va perdiendo interés al poco de comenzar la campaña dado lo limitado de todo lo que se nos cuenta. La galaxia vive sacudida por una suerte de infección masiva que convierte a los humanos en mutantes, y nuestro principal personaje de hecho vive a caballo entre unos y otros tras haber sido ligeramente afectado por este mal.

Emmett Graves es su nombre y, como si de una especie de cazarecompensas galáctico se tratara, va llevando a cabo encargos de diferente tipo por la galaxia, pero siempre luchando contra los "costrosos", el argot con el que se conoce a los mutantes: algo así como el término despectivo "pellejudos" con el que se denominaba a los replicantes en Blade Runner. Por el camino descubriremos que Graves tiene algunas cosas en común con sus enemigos; sin embargo el juego no aprovecha los giros que podría haber creado con esto, ni tampoco el rechazo social que podría haber experimentado la peculiar condición del héroe y que podría haber deparado resultados argumentales muy interesantes.

La campaña está presentada con viñetas, con un estilo cómic muy agradable. Lástima que su interés sea más bien escaso.
La campaña está presentada con viñetas, con un estilo cómic muy agradable. Lástima que su interés sea más bien escaso.

El modo historia no tiene, por lo tanto, demasiado interés desde el punto de vista de lo que se nos cuenta, y tampoco desde el jugable. Cierto que el que se compra Starhawk debe saber perfectamente que el multijugador es el principal atractivo del programa, pero la campaña da la sensación de que podía haber dado algo más de sí como acompañamiento. La IA es bastante discreta y los objetivos bastante repetitivos, de modo que más allá del interés que podamos sentir por coger algo de rodaje de cara al on-line su presencia es prescindible.

¿La Caza de Mutantes? Mejor Acompañado
El multijugador de Starhawk divide su jugabilidad en varias ramas, y es donde reside principalmente el interés de la oferta jugable del título de LightBox Interactive. La clave de su éxito está ubicada en la mezcla de elementos muy distintos que, conjuntamente, conforman una experiencia muy divertida y bastante variada.

En esencia se trata de presentar un título con forma de shooter en tercera persona pero que, en realidad, tiene también a sus espaldas una serie de factores clave que enriquecen sensiblemente su conjunto. En la primera faceta, la que desarrollaremos a pie y la que será más habitual, el juego es convencional pero efectivo. Estaremos siempre en movimiento desplazándonos por unos escenarios descomunales, y abatiendo a nuestros enemigos con un arsenal que se mueve dentro de lo habitual y al que podremos acceder con la cruceta del pad. El manejo es sencillo y efectivo, aunque quizá algo carente de posibilidades por lo limitado de la movilidad del personaje, pero el título da la sensación en todo momento de ser acertadamente accesible y sencillo de entender y manejar.

Puede que las mecánicas shooter sean demasiado sencillas, pero son sin duda efectivas y muy divertidas.
Puede que las mecánicas shooter sean demasiado sencillas, pero son sin duda efectivas y muy divertidas.

¿Por qué es importante esta matización? Porque las otras dos vías que se ofrecen al jugador son algo menos convencionales y era fácil caer en la excesiva complejidad, especialmente una que nos permite erigir edificios a nuestro gusto. Aquí está una de las claves que diferencia Starhawk de otras propuestas similares, y es que este toque estratégico contribuye a dotar de una mayor profundidad a la experiencia.

Así pues, y utilizando créditos que obtendremos abatiendo enemigos o haciéndonos con suministros, podremos acceder a un menú radial in-game con el que podremos construir diferentes tipos de estructuras en tiempo real. Para hacerlo bastará con seleccionar el tipo de edificio que queremos erigir, y a continuación ver como éste cae literalmente de los cielos con enorme estruendo para ofrecernos casi instantáneamente sus bonificaciones. Esto genera a menudo cambios radicales en el transcurso de los combates, ya que podremos levantar entre otras muchas cosas torretas ametralladoras, fábricas de suministros, murallas, bunkers o también talleres para fabricar vehículos... Lo que nos dirige directamente al último de los pilares que sostienen la experiencia: los bólidos.

Aquí el manejo sigue las mismas cotas de sencillez y accesibilidad de las que hablamos en el resto de facetas del programa, y es que hay una generosa variedad de vehículos que podremos pilotar y todos ellos son muy accesibles y casi incluso más ágiles que el propio protagonista. Hay tanques, motos flotantes (sidewinders), mechas que se transforman en naves voladoras... Todo esto genera un enorme dinamismo en los escenarios, ya que los 32 usuarios simultáneos tienen posibilidad de llegar en un santiamén de un punto a otro de éste, y cumplir objetivos con libertad si deseamos salirnos de las "zonas calientes" del mapeado. La idea es que el jugador se sienta poderoso en el sentido de que él solo puede cambiar el curso de una batalla y, al mismo tiempo, dotarle de una libertad que se proyecte en que se puede jugar de formas muy diferentes en función de los gustos de cada aficionado.

Hay vehículos de todo tipo en Starhawk, serán fundamentales para desplazarnos en los grandes mapas de las partidas multijugador.
Hay vehículos de todo tipo en Starhawk, serán fundamentales para desplazarnos en los grandes mapas de las partidas multijugador.

Para apoyar esa sensación el título ofrece también la posibilidad de personalizar el estilo de nuestro protagonista mediante la inversión de puntos de experiencia. Poder cargar con más munición, reparar automáticamente el vehículo que pilotemos, menos dispersión de disparo, mayor energía de fisura para construir edificios, no aparecer en los radares o mayor velocidad obteniendo experiencia, entre muchas otras, son las alternativas en las que podemos invertir nuestros puntos de experiencia. Por otro lado también estará en nuestra mano el definir el aspecto de nuestro personaje, o incluso de los vehículos, con un enorme número de desbloqueables que iremos liberando conforme avancemos en el juego.

Los bandos son dos, Rifter y Outcast, y escogeremos el nuestro antes de entrar a los accesos de modos. Aquí, en la oferta de modalidades, es donde echamos en falta algo más de variedad y profundidad en la propuesta de Starhawk. Lo que tenemos entre manos son sencillamente cinco entornos en cuatro modalidades, una cantidad algo exigua de alternativas para un multijugador que debía ser clave en este sentido. Si sus responsables tienen previsto ampliar la oferta de localizaciones con futuros contenidos descargables es, de momento, una incógnita; pero con dos modos deathmatch (uno individual y otro por equipos), y con una captura la bandera y un modo de dominio de territorios se nos antoja una baraja de posibilidades limitada. Hay, eso sí, un cooperativo para dos usuarios a través de internet o a pantalla dividida, aunque es algo limitado ya que sólo nos permite enfrentarnos junto a otro usuario a oleadas de enemigos.

El desbloqueo será un incentivo más para jugar. No sólo liberaremos habilidades sino también ropa y detalles cosméticos para nuestro personaje y vehículos.
El desbloqueo será un incentivo más para jugar. No sólo liberaremos habilidades sino también ropa y detalles cosméticos para nuestro personaje y vehículos.

Polvo Galáctico -Gráficos y Tecnología-
Si algo consigue Starhawk a nivel visual es ser un título que llena la pantalla. Se trata de un videojuego muy sólido en lo visual, quizá no capaz de alcanzar el sobresaliente en lo gráfico por una dirección artística algo conformista y una ejecución que no pasa de lo notable, pero es un título resultón y muy efectivo que genera mucho movimiento. En todo momento vamos a estar viendo fuego, disparos, efectos, vehículos en movimiento, naves surcando los cielos... LightBox Interactive logra un título muy compacto, y ese es el mayor triunfo del programa.

De hecho si es algo genérico todo lo que tiene que ver con lo artístico de los modelados de personajes y vehículos, sí se logran mejores resultados en unos escenarios bastante variados. La oferta no es demasiado amplia en número, pero sí que trae consigo una diversidad fuerte que ayuda a transportarse mentalmente a unos entornos siempre enormes y con un diseño y arquitectura francamente buenos. A nivel de campaña destaca el estilo de viñetas con las que el juego nos cuenta su historia.

Tecnológicamente el programa es más rotundo, con un buen soporte para los 32 usuarios simultáneos sobre los que pivota su jugabilidad, coronado con una tasa de imágenes por segundo fluida y unos efectos de vídeo contundentes. Las físicas quizá no sean apabullantes, pero hacen su trabajo con efectividad, y el juego es fluido también en el código de red y en su frenética y ágil fórmula.

A nivel visual Starhawk es un título muy efectivo. El retrato de personajes y vehículos es bastante bueno, pero lo mejor es la escala épica de lo que se muestra en pantalla.
A nivel visual Starhawk es un título muy efectivo. El retrato de personajes y vehículos es bastante bueno, pero lo mejor es la escala épica de lo que se muestra en pantalla.

En cuanto al sonido este lanzamiento llega traducido y doblado a nuestro país con un nivel bueno, muy en la línea de la calidad que los productos que Sony suele localizar en España. Por otra parte la banda sonora no es tan inspirada, aunque su presencia es más bien inocua. Los efectos de audio cumplen con solvencia.

Muy Bueno

Recomendado

Starhawk

Por: El equipo de 3DJuegos
Recomendado

Starhawk es un título de acción multijugador notable al que sólo algo más de profundidad en su faceta shooter y de variedad en sus modos han privado de llegar más lejos. Campaña prescindible para un juego que brilla en lo on-line gracias a su divertido planteamiento, a sus muchas posibilidades y a un punto adictivo muy agradecido.

Comprar Starhawk
Jugadores: 1-32
Idioma: Manual en español, textos en español y voces en español
Duración:
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