Con buenas ideas de fondo y una sólida base argumental, el sucesor espiritual de X-Blades se ha estrenado en el mercado sin demasiada fortuna, aunque su protagonista, la bella Ayumi, está dispuesta a ganarse el respeto de los aficionados a golpe de katana. ¿Lo conseguirá?
Son muchos los juegos que nacen con buenas ideas de fondo pero luego no llegan a funcionar bien por diversos motivos. Algo que le ha ocurrido al sucesor espiritual de X-Blades, Blades of Time, que si bien ofrece detalles de calidad e ingeniosas ideas basadas en el control del tiempo, al final se ha quedado bastante lejos de lo que quizá pretendía.
Básicamente, porque un juego de acción en tercera persona que pretende ganarse el respeto de los aficionados no puede permitirse el lujo de fallar en lo más importante: el sistema de combate. Y lo nuevo de Gaijin Entertainment erra, precisamente, en ese apartado. No tanto por la cantidad de opciones que brinda, que ya advertimos están muy bien gracias a los diversos combos y ataques especiales que aprenderemos a lo largo de la partida, sino por lo mal implementado que está.
Con dos tipos de ataque básicos, y dos katanas como herramientas de combate principales, la bella y letal protagonista Ayumi cuenta con una amplia gama de movimientos ofensivos que pueden combinarse con golpes especiales ejecutando diversas combinaciones de botones; a la vez que realiza veloces movimientos evasivos o bloquea determinados ataques previa ejecución de una muerte instantánea al estilo de lo visto en juegos como God of War.
¿Cuál es el problema? Que el sistema de combate no se siente natural ni preciso por culpa de una mala ejecución en los tiempos, que impide que podamos enlazar movimientos durante la lucha contra los enemigos. De este modo, tras desencadenar una lluvia de golpes o un movimiento especial sobre estos, Ayumi se quedará quieta durante un segundo que los rivales aprovecharán para golpearle sin compasión.
Un contratiempo que además se ve agravado porque ni siquiera el movimiento de evasión responde como debería, pecando del mismo error: la protagonista se detiene durante un segundo de oro que en muchos casos significa la diferencia entre la vida y la muerte.
Tampoco nos ha gustado nada el desequilibrado y frustrante nivel de dificultad del juego, que sumado a otros errores como la imprecisión de las fases de plataformeo, tanto por problemas de control como por culpa de la cámara, hacen olvidar por momentos las cosas buenas que también ofrece este título.
No podemos obviar que este juego de Gaijin nace sobre una idea realmente interesante, la posibilidad de controlar el tiempo para resolver algunos rompecabezas y superar combates muy concretos con una sencilla ejecución: realizamos cualquier movimiento, pulsamos el botón de rebobinado, y volvemos al punto de inicio junto a un clon de la protagonista que ejecutará el movimiento grabado anteriormente.
Lo destacable es que tendremos que crear varios de estos clones para resolver algunos de los puzles más complejos, o para enfrentarnos a enemigos muy poderosos a los que solo se puede vencer combinando la fuerza de varias Ayumi, generando así un efecto visual de lo más vistoso. También hay situaciones de peligro extremo en las que debemos generar distracciones con estos clones, aunque al final da la sensación de que los desarrolladores se han quedado sobre la superficie de una idea que podía haber dado más de sí.
Sensación que experimentados en todas las facetas del juego. Y es que el sistema de combate tiene las suficientes opciones como para ser bueno, pero su ejecución no ha sido la más acertada. El juego incluye también fases de plataformeo, otorga mucha importancia a la exploración (con una brújula que permite localizar tesoros), y plantea sencillos rompecabezas; pero nunca te sales de la norma y al final sientes que siempre haces lo mismo.
Incluso en lo tecnológico Blades of Time se mueve entre dos aguas, contando con un buen diseño artístico y notable variedad de entornos, al que sigue un discreto modelado de personajes, unas texturas no demasiado detalladas, y alguna que otra ralentización que pueden entorpecer la acción en momentos puntuales. Por fortuna, los españoles podemos disfrutar de un correcto doblaje al castellano, aunque la banda sonora se ha quedado algo corta y no llega a lo esperado en un título de estas características.
Por último, y aunque puede sorprender dado el tipo de juego del que hablamos, Blades of Time incluye un multijugador cooperativo para disfrutar, junto a un amigo más, del modo historia (muy recomendable para afrontar la máxima dificultad); además de un modo versus que, si bien puede resultar interesante al principio, no llega a enganchar lo suficiente como para tenerlo demasiado en cuenta.
Las buenas ideas no siempre llegan a buen puerto, y este es un claro ejemplo de ello. Su impreciso y duro sistema de combate no dicen mucho a su favor, y eso pese a ser un buen título de acción en tercera persona con interesantes añadidos como sus rompecabezas y combates basados en el control del tiempo. Por fortuna el juego se ha lanzado a precio reducido, por lo que puede ser una buena opción para los aficionados al género.
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