Mario, Peach, Luigi, Bowser y demás fauna de Nintendo saltan a la cancha, pero esta vez a disputar un encarnizado partido de baloncesto donde todo o casi todo está permitido, para colar la bola en el aro y ganar puntos.
A falta aún de unos cuantos meses para ver como se desenvuelve el fontanero Mario y sus amigos con el deporte rey en Wii (Mario Strikers Charged), recibimos en DS otro título deportivo en el que esta querida fauna de personajes de Nintendo se enfrenta con un balón, pero esta vez de baloncesto. Square Enix se ha encargado de realizarlo, vamos a ver el resultado en el marcador.
¡Comienza el partido!
Disponemos de dos tiempos de diez minutos, tiempo en el que tendremos que anotar el máximo de puntos en la canasta rival en equipos de tres contra tres. Hasta aquí parece un partido normal de baloncesto (si obviamos la duración y el número de jugadores), pero tras jugar unos segundos nos daremos cuenta que Mario vuelve a hacer de las suyas. La única regla de este partido es que hay que vencer al rival a toda costa y conseguir más puntos que él. Y digo puntos y no canastas, aunque más que puntos son monedas que deberemos ir recolectando botando con el balón en los distintos bloques de interrogación dispersos por el escenario. Tras esto ya podemos proceder a introducir el balón en la canasta de todas las maneras posibles, ya sea con un gancho, realizando un espectacular mate o bien de un "triplazo".
Así se puede definir la mecánica básica, aunque profundizando y viendo los entresijos del control nos daremos cuenta de que salvando el aspecto arcade del título, nos encontramos ante el que posiblemente tenga el control más preciso del balón de baloncesto, aunque con algunos defectos y carencias. Toda la acción se desarrollará en la pantalla superior, mientras que la inferior nos servirá de mapa para ver donde están los jugadores y demás objetos.
Lo más llamativo del control es que lo realizaremos casi en su totalidad en la pantalla táctil, con el stylus. Para botar el balón debemos tocar la pantalla tomando el centro como si de nuestro personaje se tratara, pudiendo driblar a nuestros rivales pasándola entre las piernas o cubrir el balón con nuestro cuerpo mientras nos movemos con la cruceta (o con los botones si somos zurdos). Para pasar el balón dibujaremos una línea señalando la dirección indicada a nuestro compañero.
Una vez hayamos aprendido a movernos, lo siguiente será dominar los tiros y fintas, para lo cual podremos utilizar un completo tutorial que nos mostrará todos los movimientos básicos y practicarlos. Así aprenderemos a tirar a canasta de diferentes maneras. La más básica será ir corriendo hacia la canasta, y una vez en el área pequeña trazar una línea con el stylus apuntando a la canasta para machacar, o si estamos solos realizar un “mate” con giro para conseguir monedas extras realizando otra línea en vertical una vez que saltemos a la canasta. También podremos tirar a distancia manteniendo el stylus para apuntar y realizando una línea hacia la canasta; o hacer uso de los súper tiros, para lo que deberemos realizar correctamente una secuencia de puntos imaginarios en pantalla, que desencadenará un tiro definitivo de nuestro personaje o un excelente pase para que un compañero realice un alley-oop espectacular.
Conchas y más conchas
Y como no todo en este juego es atacar aunque digan que la mejor defensa es un buen ataque, tendremos que aprender a defendernos muy bien si queremos evitar que nuestra canasta parezca un colador. Cuando no tengamos el balón tendremos que conseguir arrebatárselo al rival de cualquier modo, y para ello habrá que deslizar el stylus de arriba abajo, o bien utilizar métodos más propios del reino champiñón, como crear ondas expansivas saltando contra el suelo, o recoger los prácticos y característicos ítems (estrellas, trueno, champiñón…) que nos proporcionarán habilidades temporales.
Las acciones que realicemos con nuestros tres jugadores serán fundamentales a la hora de realizar nuestra estrategia tanto defensiva como en el ataque, y aquí es donde está el mayor problema que contiene este juego. Y es que durante los partidos, sólo ataca o defiende un jugador de cada equipo mientras que los otros cuatro se limitan a subir y bajar, y no harán nada por si mismos, es más, si el balón choca contra sus manos ni siquiera lo cogerán, sino que chocará contra ellos y tendremos que escogerlo para que pueda cogerlo. En este aspecto la CPU nos superará continuamente en los niveles más avanzados, y nos costará mucho cambiar al jugador que queramos si no está cerca del balón, dejándonos totalmente vendido.
Apúntate al torneo
Tendremos un buen puñado de personajes a elegir, entre los que se encuentran más que una sorpresa de la mano de Square con personajes sacados de los Final Fantasy más clásicos como el Ninja, la Maga Blanca o un simpático Moguri, que se sumarán a los clásicos de Nintendo como Mario, Luigi, Peach, Donkey Kong, Yoshy o Wario.
Siguiendo la línea de Mario Kart, competiremos por una serie de torneos o copas tan originales como la copa champiñón o la estrella, divididas a su vez en varios enfrentamientos que deberemos ganar para desbloquear nuevos personajes, balones y pistas.
Además de ese modo torneo, también podremos probar nuestro “dribling” en el modo carrera, en el que tendremos que conseguir reunir 100 monedas y llegar a la meta en el menor tiempo posible. Además de este minijuego, también existen otros en los que podremos jugar en multijugador y con una sola tarjeta DS.
Finalmente no existe modo online, y la única manera de jugar contra alguien será en dos cartuchos para un máximo de dos jugadores. Hubiese sido más que interesante la posibilidad de jugar un tres contra tres y evitarle a la CPU la ardua tarea de mover los personajes que se quedan inactivos de arriba abajo, pero bueno.
Apartados técnicos
Visualmente Mario Slam Basketball presenta un aspecto muy sólido en nuestra DS. Los movimientos, el balón y las explosiones al realizar un súper tiro son muy resultonas, moviéndose todo el conjunto con mucha fluidez. Si peca de algo es de una escasa variedad de animaciones.
Los diferentes escenarios o canchas en las que jugamos están realizados con todo lujo de detalles, y cuentan con elementos tan pintorescos como que la canasta sea Floro Piraña que no te dejará que realices un mate, o que la cancha sea una balsa en la que desfilen toneles de Donkey Kong y te tumben cuando menos te lo esperes.
El apartado sonoro es un tanto chocante. Por una parte tenemos las voces típicas de cada personaje (aunque bien escasas) y unos efectos más que aceptables, pero con las composiciones musicales se creará una división de opiniones, ya que se le ha querido dar un estilo nuevo más desenfadado y fiestero si cabe, que se sale un poco de lo que Nintendo nos tiene acostumbrados, aún así muy atractivas.
Mario Slam Basketball es una buena elección si te gusta este deporte y encima eres un fan incondicional de Mario. Rápido, vistoso, jugable y con un control muy peculiar que gustará a unos y defraudará a otros, pero divertido. Se echa en falta un modo online que pide a gritos.
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