Análisis de Need for Speed. Velocidad y Prestigio

Análisis de Need for Speed. Velocidad y Prestigio
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Need for Speed regresa tras dos años de descanso para replantear su estilo de conducción y las distintas vertientes que nos han ofrecido las últimas carreras. El resultado es un título multidisciplinar que intenta, por encima de todo, contentar a toda su base de fans ofreciendo distintos tipos de control, una historia con actores reales y opciones de personalización y tuning.

Ocurre algo curioso con la saga Need for Speed, a diferencia de otras entregas anuales (aunque esta vez se hayan dado dos años de descanso): aquí no hay patrón claro, más allá de la velocidad en la conducción. Un año puede estar centrado en la historia, como el Most Wanted clásico o The Run; otro en el tuning, como Underground y Carbono; otro siguiendo la estela de Criterion y Need for Speed III, con el nuevo Most Wanted y Hot Pursuit a la cabeza. Todas parecidas, todas distintas.

Hay que reconocer un gran valor en esta decisión, pero así se ha creado una disgregación del aficionado que lo lleva persiguiendo desde hace tiempo. Porque unos prefieren historia, otros tuning, otros una conducción más enfocada en el derrape y otros clásicos. Echa un vistazo a cada análisis y verás amantes y detractores. No nos extraña que haya llegado a los oídos de Ghost Games, que con este Need for Speed han querido hacer tabula rasa.

Need for Speed. A secas. Creado con todos los aficionados en mente para que nadie pueda decir eso de "le falta…". Una historia a la antigua usanza, repleto de FMVs que sirven de hilo conductor en tu carrera a lo más alto de la conducción underground. Personalización máxima: tanto en lo estético como en lo técnico, pudiendo hacer tu sueño realidad con todo tipo de modificaciones y mejorando hasta el coche más humilde para que sea capaz de medirse cara a cara con el más potente de todos. Y sin embargo, en esta ávida búsqueda de la satisfacción general, se echa en falta algo de esa valentía de cada entrega, que le daba un carácter único y personal.


Conoce a la pandilla

Bienvenidos a Ventura Bay, una Los Ángeles ficticia donde la noche es (casi) eterna. Tu carrera personal comienza cuando te juntas con la élite local, un grupo de fanáticos del motor cada uno especializado en un estilo. Spike es un obseso de la velocidad, mientras que Manu prefiere el derrape. Amy es la mecánica, y busca la expresión a través de su vehículo tanto exterior como interiormente. Robyn prefiere la conducción en equipo mientras que Travis va un poco más por libre. Existen también las carreras fuera de la ley, que consisten en provocar a la policía todo lo que puedas.

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La cámara cinematográfica es altamente espectacular, ofreciendo la mejor perspectiva sobre todo en las curvas, aunque cuesta más adaptarse a ella.
La cámara cinematográfica es altamente espectacular, ofreciendo la mejor perspectiva sobre todo en las curvas, aunque cuesta más adaptarse a ella.


La historia está ahí de forma testimonial. En algunos momentos del título, a medida que vayamos cumpliendo misiones de cada estilo de juego, iremos a uno de los puntos de reunión del grupo y se nos marcará algún que otro objetivo. Sirve más de hilo conductor en tu ascenso a la fama que lo que podrías esperar de un argumento con principio, nudo y desenlace, pero logra el objetivo de mantener cierto interés en los acontecimientos gracias a tus nuevos colegas, más que a los iconos escogidos para la ocasión. De hecho, las celebridades asociadas a cada variante, esas que plasma la carátula del juego (Magnus Walker, Ken Block, Nakai san, los Risky Devils y Morohoshi san), tienen muy poca importancia y apenas realizan unas cuantas apariciones en los vídeos, dando el total protagonismo a los actores que hacen de tus nuevos compañeros.

Tampoco importa demasiado. Lo interesante aquí son las pruebas que nos proponen, y aunque Ghost Games ha querido diferenciar al máximo los cinco estilos, lo cierto es que en la práctica se pueden resumir prácticamente en dos: velocidad y derrape. Tienes las clásicas carreras, contrarrelojes, sprints, concursos de derrape tanto en solitario y en grupo, tougues y gincanas. Las que implican a la policía son algo más variadas, ya que en ocasiones no disponen de una misión concreta, sino que tienes que provocar a la policía para acumular multas o tiempo de persecución.

Need for Speed hereda todas las bondades del Autolog y las expande para hacernos competir con amigos, a costa de ser un juego que requiere conexión online permanente.
Need for Speed hereda todas las bondades del Autolog y las expande para hacernos competir con amigos, a costa de ser un juego que requiere conexión online permanente.


Lamentablemente, estas últimas no logran trasladar la emoción de una persecución policial, como sí hicieron otros juegos de la saga. En ocasiones, encontrarte con un policía es la parte más difícil, pues escasea en las calles de Ventura Bay y, para aguantar el tiempo o la multa deseada, es más sencillo dar vueltas a su alrededor que intentar escapar, ya que son muy fáciles de perder debido a una inteligencia artificial bastante pobre, sobre todo comparada con anteriores entregas donde presionaba muchísimo más.

Este Need for Speed es probablemente uno de los que mejor logran esa ansiada sensación de velocidad

El resto de pruebas poseen un desafío muy escalable, y sirven perfectamente para que nos habituemos a los distintos estilos de control hasta dominarlos. Poco a poco la dificultad irá en aumento, ofreciendo algunos desafíos de larga duración a los que le tendrás que dedicar entre cinco y diez minutos para recorrer todo el circuito. Y como ocurría en Rivals, aquí no hay pausa, una opción que tenía más sentido en la entrega anterior dada la forma en la que administraba la puntuación, teniendo que acceder a una guarida para depositarlos a riesgo de perderlos todos si nos pillaba la policía.

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Acelerando, derrapando y personalizando

Como ocurre desde Hot Pursuit, es el Autolog el que hace que estas pruebas pasen de lo interesante a lo desafiante, comparando tiempos y puntuaciones con tus amigos y dejando una clara marca en el mapa cuando algún conocido te ha superado. Es una tarea claramente enfocada a la parte final del juego, cuando hayas conseguido las mejores prestaciones y puedas hacer los mejores trazados.

Las velocidades que conseguirás con los coches más mejorados es de lo más impactante. Pero no pierdas de vista la guía y el mapa o terminarás empotrado.
Las velocidades que conseguirás con los coches más mejorados es de lo más impactante. Pero no pierdas de vista la guía y el mapa o terminarás empotrado.


Para hacer más variadas las carreras y aprovechar la red social fotográfica que Ghost ha creado para la ocasión, el tuning vuelve a ser protagonista tras unas cuantas entregas sin aparecer por la franquicia. Tendremos multitud de piezas, faldones, llantas, alerones, capós y demás accesorios que integrar, pero habrá que tener en cuenta que no todos los coches permiten acoplar todas las piezas, por lo que no podremos tunear nuestro Ferrari F40 (el coche más caro de todo el conjunto, sin ser el más veloz) al cien por cien. Se añaden además decenas de vinilos y pegatinas para crear el estilo de nuestros sueños, aunque si lo comparamos con otros títulos como la saga Forza que han puesto mucho empeño en este tipo de personalización, las opciones son algo más limitadas.

El tuning vuelve a ser protagonista tras unas cuantas entregas sin aparecer por la franquicia

Pero de entre todo el espectro de personalización, destaca por encima de todo el control. La tendencia al derrape o el agarre, con unas cuantas opciones a ajustar, vienen directamente del propio motor que utiliza Ghost Games para definir el estilo de conducción de cada entrega, sólo que esta vez han permitido al jugador que elija al gusto el equilibrio del vehículo. La intención es clara: contentar a todos los aficionados de la saga, aunque a lo largo de las distintas pruebas, tendremos que ir haciendo varios ajustes al vehículo si queremos superar las máximas puntuaciones de derrape o de velocidad, lo que hace que, más que una decisión personal, sea una cuestión de necesidad si queremos competir por las mejores puntuaciones.

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La estructura es también herencia de otros Need for Speed. Algunas para bien, como el registro de cada prueba y la mejora del mundo abierto que ahora nos permite teletransportarnos a cualquier lugar del mapa de forma casi instantánea. Y en este proceso, se entiende menos que se hayan conservado algunas costumbres como la de hacer que nos situemos en la línea de salida y tengamos que pulsar un botón para empezar a competir. Resta algo de comodidad a un conjunto que necesita ser cada vez más rápido y accesible.

Pero ya en carrera, este Need for Speed es probablemente uno de los que mejor logran esa ansiada sensación de velocidad. No sólo por su estabilidad, que es constante salvo en algunos momentos en que se muestran muchos vehículos en pantalla, sino porque logra introducirnos en estado de concentración total para tomar bien cada curva o lograr encauzar correctamente cada derrape. Las últimas etapas de cada estilo, con especial atención a las pruebas finales, son algunas de las más conseguidas de toda la franquicia: largas, variadas y donde un solo error puede hacer que pierdas valiosos segundos para tu SpeedWall. Si estás en carrera tienes la opción de reintentarlo de nuevo, aunque se echa de menos la misma opción una vez terminada la prueba, que ha desaparecido al igual que el famoso Easy Drive.

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Amigos a la fuerza

Hay muchos cambios en la nueva visión de Ghost Games. Quizá uno de los más notorios sea la importancia que le han dado a que la comunidad interactúe entre ella. El mundo abierto te sigue reuniendo con varios corredores, pero también tienes la posibilidad de formar parte de un equipo de amigos, y competir en las distintas pruebas en grupo. Gracias a ello, puedes conseguir más reputación en este apartado, pero quizá el precio a pagar para ello sea demasiado alto para algunos jugadores, y es que este Need for Speed requiere una conexión online permanente. Ghost Games ha tratado de explicar este hecho, aludiendo a que "tratará el juego con tus amigos como parte de la experiencia narrativa" además de incluir una especie de red social de fotografías "que toma fotos en diferentes momentos del juego y las sube a la red donde puedes valorarlas". Pero en nuestras horas de juego no hemos encontrado una gran justificación para este sistema de online permanente. De hecho, a través de las opciones del juego puedes acceder al modo "juego en solitario", donde no aparecerán otros jugadores, y sin embargo esta opción no puede ser utilizada sin conexión a Internet.

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Técnicamente, el resultado es de gran calidad siendo un título totalmente de la presente generación. Luce muy bien, aun con la noche como protagonista absoluto.
Técnicamente, el resultado es de gran calidad siendo un título totalmente de la presente generación. Luce muy bien, aun con la noche como protagonista absoluto.


Como el primer Need for Speed totalmente pensado para la nueva generación, el trabajo de Ghost Games destaca tanto en los buenos modelados de los vehículos, como en las calles de Ventura Bay y su iluminación. Se ha realizado un gran esfuerzo por integrar el coche que estés llevando en cada momento dentro de la propio secuencia de vídeo, con grandes resultados que sólo con algunos colores muy brillantes puede llegar a desentonar. Recorrer las calles ofrece una poderosa sensación de clandestinidad, y tanto los barrios más céntricos como las afueras están muy bien recreados, ofreciendo la variedad necesaria para todas las pruebas.

Además, se trata de un mapa bastante más grande que en anteriores juegos, acrecentando esta sensación gracias a la cantidad de pequeñas calles que conectan toda la ciudad y sus distritos, algo que en Rivals, dadas sus amplias autopistas, causaba cierta sensación de repetición. ¿La pega? Las carreras son casi siempre nocturnas, volviendo de nuevo a la esencia de los Underground y Carbono. Será algo a lo que cada jugador dé más o menos importancia, pero sí es cierto que se echan de menos esos impresionantes paisajes de juegos como Rivals o Hot Pursuit, en los que el escenario era un gran protagonista.

Como ocurre desde Hot Pursuit, es el Autolog el que hace que las pruebas pasen de lo interesante a lo desafiante

En algunos momentos, sin embargo, veremos amanecer, pero esto no responde a un ciclo de día y noche, sino que hay algunos distritos donde siempre amanece y, cuando los abandonamos, vuelve a ser completamente de noche. Puede ser una decisión que se apoye en la narrativa, porque es por la noche cuando menos tráfico y policía encontraríamos, pero también hay algo de técnico en esta decisión de diseño, ocultando bastante los entornos alrededor de la carretera para dar mayor importancia y carga gráfica a lo que ocurre sobre ella. La solidez de sus treinta fotogramas está presente en una gran parte del juego, aunque cuando tengamos los coches más veloces, sí encontraremos algunos momentos con ralentizaciones bastante evidentes, al igual que en los puntos donde se muestran varios coches en pantalla. Son contadas las veces que han ocurrido durante las más de 16 horas que nos ha durado la campaña principal, y han sido en lugares y situaciones muy concretas, pero están ahí.

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Porque el espectáculo viene con esa gran sensación de velocidad y se apoya en unas cámaras bastante conseguidas. Seguimos sin vista de cabina, cuando su variante Shift introdujo una de las mejores, pero son más variadas que anteriores entregas. Destaca por encima de todas la cámara cinematográfica, que funciona de forma algo más libre y se sitúa casi a ras del suelo en los derrapes y giros más pronunciados. Aunque no es la más recomendada cuando quieres competir por tiempos, tenemos que reconocer que es perfectamente funcional y si eres capaz de acostumbrarte a ella aumenta muchísimo el espectáculo visual. Un añadido bastante original que esperamos venga para quedarse.

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El sonido ayuda a integrarse en las carreras, con efectos que, si bien no destacan, dejan entrever el poderío de los motores de nuestros vehículos. Para las escenas con actores, se ha contado con un doblaje a nuestro idioma bastante decente, sobre todo teniendo en cuenta la jerga callejera con la que han tenido que tratar a cada uno de los protagonistas, que son muy diferentes entre sí. La banda sonora apuesta por ritmos electrónicos, incluso cuando hay variantes al hip hop o el rock, y aunque no cuenta con temas muy conocidos y a veces puede resultar demasiado enfermiza, ayuda a integrarse en la competición.

Hay algunos claroscuros en este nuevo Need for Speed, sobre todo para ser tratado como aquél que redefine la franquicia. No se le podrá decir que se ha dejado por el camino el feedback de los fans, porque recoge todas sus vertientes y las integra dentro de la estructura que estábamos acostumbrados. Pero en ese afán de agradar a todos es imposible destacar en profundidad, con una historia poco inspirada, pero funcional, y unas pruebas que requieren demasiado de la participación de tus amigos para que sean realmente interesantes. La cuestión de la noche eterna nos aleja también de tener un Need for Speed preciosista, pero a su vez las opciones de personalización (tanto en el control como en lo estético) y la gran sensación de velocidad, lograrán poner de acuerdo por primera vez a muchos de sus aficionados. Como base, es suficiente; ahora es momento de volver a traer la innovación a la franquicia.

Bueno

Sin sello
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Need for Speed

Por: El equipo de 3DJuegos
Sin sello

Need for Speed recoge toda su herencia y la recopila en un juego donde encontrarás tanto lo que ya tenías como lo que echabas de menos. Esto lo hace un título con tendencias algo conservadoras, pero recupera buena parte de la esencia que ha hecho a la franquicia tener una vida longeva. Tuning, personalización en el control, una historia funcional y carreras callejeras nocturnas son sus grandes bazas para arrancar totalmente en la presente generación.

Comprar Need for Speed
  • Elección por bandera: tipo de control, personalización y mejoras
  • Gran sensación de velocidad
  • La historia, sin grandes alardes, ayuda como hilo conductor a la sensación de progresión
  • Que el juego sea casi siempre de noche puede no ser del gusto de todos
  • La inteligencia artificial de la policía es pobre y sus pruebas poco inspiradas
  • La interacción con el autolog, el garaje y la selección de pruebas podría ser más cómoda
Jugadores: 1-8
Idioma: Textos en español y voces en español
Duración: 15 horas (mínimo) + multijugador
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