Análisis de Lovers in a Dangerous Spacetime. Cooperación Espacial

Análisis de Lovers in a Dangerous Spacetime. Cooperación Espacial
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Pilotar una gran nave espacial en compañía de un amigo mientras salvas el universo. ¿Quién podría resistirse a algo así? ¡Muy pocos! Y menos con un videojuego de tanta calidad como Lovers in a Dangerous Spacetime; una divertida y desafiante aventura de acción con ligeros toques de roguelike en la que el concepto "juego cooperativo" cobra el mayor de los sentidos.

"¡Eh tú! Encárgate de los mandos de la nave que yo redirigiré los escudos defensivos". Y obedece. "¡Oh no! Mejor corre a esa torreta de allí y cárgate a unos cuantos enemigos". Y lo hace, "¡Espera! Voy a activar el ataque especial para limpiar la zona de peligros." Y sonríe. Porque esta escena, que a los ojos de un aficionado a los videojuegos podría sonar a puro teatro, es en esencia Lovers in a Dangerous Spacetime. Una gran aventura de acción espacial que nos propone compartir con un amigo los mandos de una nave de combate equipada con cuatro torretas, un cañón especial con el arma más poderosa de todas, un sistema defensivo basado en escudos móviles y, claro, el timón, que guiará nuestros pasos a través de los confines del universo. ¿Os gusta la idea? Pues su ejecución es incluso mejor.

Hay pocos juegos que te hagan sentir de verdad que pilotas un vehículo de estas características y la obra del estudio independiente Asteroid Base es una de ellas, pues aquí tú no controlas directamente la nave, sino que diriges los pasos de un simpático y adorable monigote que se moverá raudo y veloz por los compartimentos de la misma, buscando siempre el modo de contrarrestar los peligros que le rodean. ¿Qué hay enemigos atacando? Dirijámonos a cualquiera de los puestos de combate y disparemos las armas. ¿Qué una explosión está a punto de alcanzarnos? Corramos a la sala de máquinas y escapemos a toda prisa del lugar.


Una nave, dos tripulantes

A pesar del colorido y ese toque desenfadado que define los gráficos de Lovers in a Dangerous Spacetime, este es un videojuego complejo que requiere de nosotros y nuestro aliado gran precisión para gestionar todas las opciones a nuestro alcance. Que parecen pocas, es verdad, pero no lo son tanto porque progresivamente nos asaltarán nuevos tipos de enemigos que no sucumbirán tan fácilmente al fuego de nuestros cañones, ni mucho menos nos lo pondrán fácil quedándose quietos frente a la nave. Toca coordinarse, atacar y defender con una precisión pasmosa, e incluso en ocasiones salir pitando mientras bloqueamos decenas de misiles, bombas y rayos de colores con los escudos de la nave. ¡Y hay más! También los niveles, que se generan de forma aleatoria, son un obstáculo en sí mismo.

No todos los enemigos sucumbirán fácilmente al fuego de las torretas. En algunos casos, como este, tendremos que romper sus defensas para exponer su punto débil.
No todos los enemigos sucumbirán fácilmente al fuego de las torretas. En algunos casos, como este, tendremos que romper sus defensas para exponer su punto débil.


En algunos tendremos que lidiar con ventiscas heladas que desplazarán la nave hacia los cuerpos celestes, que por supuesto dañarán la nave si colisionamos con ellos, mientras que en otros encontraremos rayos láser que nos machacarán si nos quedamos quietos, espirales que crecen y decrecen de forma rítmica, también dañando nuestra nave… o explosiones que expandirán una ola de fuego por toda la pantalla obligándonos a escapar a toda prisa del lugar. Por haber, hay incluso zonas con agua que modificarán la forma de pilotar la nave, pues en esos entornos los movimientos son más lentos y podemos incluso sucumbir a la fuerza de las corrientes marinas.

Estamos ante una aventura de acción espacial francamente desafiante

Como decíamos, Lovers in a Dangerous Spacetime parece a primera vista un videojuego demasiado simplón; una de esas obras que se pueden completar sin demasiados problemas. Pero la realidad es que estamos ante una aventura de acción espacial francamente desafiante. Un videojuego con la esencia de los clásicos roguelike en el que moriremos una y mil veces más, pero que de alguna forma siempre nos motiva a intentarlo de nuevo; a probar fortuna haciendo frente a innumerables peligros en pos de rescatar a esos defensores del amor (lindos conejitos, ranitas y cosas del estilo), que han sucumbido al poder de las fuerzas del mal y ahora están desperdigados por todo el universo.

Cooperación Espacial


Nuestra misión principal consiste, por tanto, en dar con estos seres indefensos en escenarios de grandes dimensiones con montones de recovecos por explorar. Para facilitar la tarea, existen ciertos ítems que nos darán la posición exacta de algunos de estos monigotes, teniendo que usar claro el mapa galáctico de nuestra nave. También hay gemas de poder con las que podemos mejorar ciertos atributos de la nave, modificando por ejemplo el tipo de armas que usan las torretas, o incluso la forma de trabajar de los motores y escudos defensivos. Cuanto más nivel tengamos, y este se obtiene rescatando al mayor número de aliados posible –con cinco ya se puede completar una pantalla, pero en total hay siempre diez-, adquiriremos incluso la opción de combinar dos de estas gemas en un mismo puesto, logrando por ejemplo que una torreta dispare misiles guiados, o que otra use bolas de pinchos con rayos láser incorporados.

Cooperación Espacial


Probar todas estas opciones es sin duda uno de los aspectos más divertidos de la obra, pues incluso podemos hacer que nuestro reactor lance minas mientras avanza por el espacio. Pero hay más. Porque con estos puntos de habilidad también se pueden desbloquear nuevos tipos de nave, que sorprendentemente son muy distintas de la principal. En especial si hablamos de la nave chicle, que como principal ventaja será inmune al daño por colisión contra planetas y asteroides, a cambio de presentar un sistema de control bastante peculiar. Porque a diferencia del resto de naves, en las que el motor se maneja de forma independiente, al girar el timón toda la nave en bloque rotará en la misma dirección, haciendo muy difícil o por lo menos más costoso moverse por las estancias de la misma. ¡Que no es fácil caminar cuando el arriba y el abajo cambian constantemente!

Es un videojuego complejo que requiere de nosotros y nuestro aliado gran precisión

¿Y qué pasa cuando no hay un amigo cerca con el que jugar? Tranquilos, que Lovers in a Dangerous Spacetime también incluye la opción de dar órdenes a nuestro aliado, en este caso una mascota, para que desempeñe la labor del segundo jugador. No es lo mismo, claro, porque no hay nada como tener a otra persona al lado para coordinarse a la perfección. Pero hay que reconocer que este aliado responde de manera efectiva a las tareas que se le encomiendan –ataca bien y defiende mejor-, con la salvedad de que no puede pilotar la nave. Lo que es una pena porque al final, si jugamos en solitario, nos sentiremos un poco como un chófer, moviendo la nave de aquí para allá sin muchas más alternativas de colocarnos en las torretas o el escudo.

Para derrotar a los jefazos hay que conocer bien sus patrones de ataque, pues los despistes nos pueden salir caros. Algunos de estos enfrentamientos son geniales.
Para derrotar a los jefazos hay que conocer bien sus patrones de ataque, pues los despistes nos pueden salir caros. Algunos de estos enfrentamientos son geniales.


En cuanto a la variedad de misiones, se echan en falta objetivos adicionales distintos a los de rescatar aliados, pero en el fondo, gracias a la variedad de enemigos y lo mucho que cambia el pilotaje de la nave dependiendo de la galaxia en la que nos encontremos, este no es un aspecto que haga mella en el resultado final. Obviamente, más misiones habría estado genial; pero tampoco se puede criticar en exceso a un videojuego que divierte tantísimo durante las cerca de cinco horas que puede llevarnos completar la aventura en un primer intento (luego quedan desbloquear contenidos y mejorar las puntuaciones).

Cooperación Espacial


Sin olvidar tampoco que el adorable apartado artístico de la obra también nos incitará a jugar una y otra vez para gozar de ese mágico colorido que da vida al universo de Lovers in a Dangerous Spacetime. Incluso la música, con ese ritmo tan cañero, crea un ambiente perfecto que hará que mucho tiempo después de haber completado la obra, queramos volver a revisitarla junto a un amigo más. Porque de verdad, hay pocos juegos cooperativos que motiven tanto como esta obra independiente.

Excelente

Recomendado
Cooperación Espacial

Lovers in a Dangerous Spacetime

Por: El equipo de 3DJuegos
Recomendado

Si algo nos gusta de Lovers in a Dangerous Spacetime es lo bien que integra el concepto de "juego cooperativo" dentro de una desafiante aventura de acción espacial con tintes roguelike. Coordinarse nuestros movimientos con los de un amigo, o si se tercia incluso con la propia inteligencia artificial del juego, es una de las experiencias más divertidas y emocionantes que hemos tenido el gusto de probar en los últimos años; y solo por eso, por tener la sensación de estar pilotando de verdad una nave, ya merece la pena.

  • Compartir el control de la nave con un amigo. ¡Hay pocas cosas mejor que eso!
  • Desafiante y con un buen puñado de extras por desbloquear
  • El diseño de niveles, los enemigos y los combates contra jefazos
  • Aunque el cooperativo local está genial, se echa en falta la opción del online
  • En solitario no es tan divertido y además su acción se puede tornar algo frustrante
  • Misiones más variadas habrían hecho de él un videojuego tremendo
Jugadores: 1-2
Idioma: Textos en español
Duración: 7-10 horas
Ver requisitos del sistema
Comentarios cerrados
VÍDEO ESPECIAL

12.876 visualizaciones

100 DETALLES OCULTOS de RED DEAD REDEMPTION 2

¿Qué detalles ocultos guarda Red Dead Redemption 2? En el video de hoy os presentamos más de 100 curiosidades distintas acerca de la aventura de Arthur Morgan y de John Marston que nos presentó Rockstar Games en 2018.