Uno de los juegos más aclamados de todos los tiempos llega a Nintendo DS para conquistar su catálogo, inspirar a sus jugadores y marcar un nuevo destino. Toma la pluma, reescribe la historia, moldéala a tu gusto y ante todo conoce más en profundidad la filosofía que ha hecho grande a esta serie.
Lo que parecía muy complicado se ha hecho realidad. Nintendo DS ha conseguido plasmar en sus pantallas una herencia ideada para PC que poco a poco reclama un nuevo lugar. El hecho de contar con doble pantalla ha facilitado crear un Civilization que cumpla con sus mínimos exigibles para descartar un simple experimento y convertirlo en un buen juego. Además gracias al lápiz táctil, que tampoco será necesario usar en exceso, podremos navegar por el interfaz de juego sin desvirtuar aspectos como la velocidad en las decisiones o la disposición de las unidades sobre el terreno.
Un mundo de bolsillo
En la pantalla superior se mostrarán las acciones del juego y en la parte inferior, el mapa. Podremos seleccionar los distintos emplazamientos y las unidades mediante la cruceta direccional o el stylus, junto con los botones que nos servirán para tomar atajos o decisiones rápidas, aunque en sí al ser un juego por turnos tampoco deberemos preocuparnos por llevar un ritmo de juego lento. Los jugadores novatos con poca experiencia podrán apoyarse en unos inteligentes tutoriales sencillos de aprender.
Para dar mucha más variedad y realismo al juego, cada uno de los líderes con su Reino o Imperio específico, cuentan con características diferentes. Así por ejemplo la Reina Isabel la Católica será la líder de la facción de los españoles y desde un inicio contará con el saber de la navegación, lo que puede facilitar el descubrimiento de nuevos continentes antes que otros líderes que no cuentan con este saber inicialmente. Otro de los lideres Mao Zedong provocará que su facción comience con el saber de la escritura, hecho que favorecerá el florecimiento de la cultura y un menor coste de los edificios educativos. O sin olvidarnos de la hermosa Cleopatra y su enigmático Imperio, que tendrá gran facilidad para crear maravillas arquitectónicas. Además cada uno de los bandos es tratado de manera diferente con el trascurso de las épocas.
Desde el inicio y más allá
Empezaremos desde los albores de la humanidad, pasando cada turno primeramente en siglos, para después al entrar en los años DC, tomar un ritmo más pausado. Está claro que en el juego no todo es conquistar y para ello los distintos líderes podrán firmar acuerdos diplomáticos para colaborar. Estas colaboraciones pueden ser mercantiles e incluso bélicas. Si somos inteligentes podremos forjar alianzas para atacar a un Reino determinado o sobornar a los imperios más pequeños para que entren en conflicto con otros. Eso sí, otras facciones podrán declararnos la guerra, y la única forma de evitarla es facilitarles descubrimientos o incluso pagarles sumas económicas cada cierto tiempo.
Las distintas unidades que poseamos serán parecidas en cada una de las facciones, aunque guardarán ciertas diferencias, sobre todo en los nombres y en sus funciones. Tendremos desde las típicas unidades de tierra hasta las unidades navales y aéreas. E incluso podremos lanzar bombas nucleares sobre otras ciudades para limpiar una zona determinada. Está claro que para conseguir el éxito debemos guardar un equilibrio entre poder económico, científico y cultural, hecho que se verá reflejado en nuestras ciudades, verdadero peso del juego. A nuestro gusto podremos elegir el sistema de gobierno, desde el Despotismo, pasando por la Monarquía, el Comunismo, la República o la Democracia. Una u otra harán que cambien los comportamientos de las ciudades.
Si creamos unas ciudades elegantes, con buena ciencia y cultura, atraeremos a los personajes famosos que darán un cambio brusco a la misma, duplicando o triplicando sus beneficios. Además podremos absorber otras ciudades gracias al poder de la cultura. Es decir, si hay dos ciudades de distintas facciones muy cerca, una puede absorber a otra ya que quedaría prendada por su nivel.
Una Historia, varios rumbos
Los modos de juego que tendremos para jugar quedarán diferenciados respecto al número de jugadores. Si elegimos el modo para un solo jugador nos encontraremos con el modo Mapa aleatorio dónde de forma automática se nos creará un escenario con otras facciones también elegidas al azar. En este modo podremos alcanzar la victoria por varios caminos, sea por la vía de la dominación (donde tendremos que ocupar todas las ciudades enemigas), la vía tecnológica (llegar a un número determinado de descubrimientos), vía económica (alcanzar un nivel en las arcas considerable) o la vía cultural (reunir a una serie de personajes históricos y construir varias maravillas).
Otro de los modos para un solo jugador nos llevará a las partidas predeterminadas con una historia dada. Por ejemplo, en ellas se nos posicionará desde un momento dado de la historia y, ya con cierto rodaje, deberemos cumplir una misión específica. Así podremos entrar en un mundo sumido en el apocalipsis con todos los líderes en escena atacándose sin compasión. O bien entrar en la era centauri con los mayores descubrimientos científicos a nuestra disposición desde un inicio, o incluso situarnos en el futuro con los bárbaros abducidos por los seres extraterrestres intentando conquistar la Tierra.
Otro de los modos y que presenta una novedad a tener en cuenta es la llamada partida de la semana, y es que podremos descargarnos de Internet, mediante la conexión Wifi de Nintendo, un nuevo escenario para nuestro disfrute, y así todas las semanas.
Las partidas multijugador nos darán la posibilidad de jugar mediante conexión local o bien por la conexión Wifi de Nintendo. En la primera necesitaremos que cada jugador posea su determinado cartucho y en la segunda simplemente una buena conexión inalámbrica. Las partidas multijugador pueden ser personalizadas a nuestro gusto para así variar la duración de cada turno o los distintos hándicaps para equilibrar un poco la balanza. Sin duda la experiencia de juego queda situada en otra dimensión.
Entre los aspectos negativos que contiene el juego se le pueden achacar unos mapeados algo cortos y que a los jugadores profesionales les pueda parecer un juego muy rápido y directo de finalizar. En todo caso la mayoría de sus apartados están muy bien conseguidos, con multitud de opciones y vías para la experimentación bajo un compendio técnico de buen nivel que otorga una sensación compacta en su conjunto.
Sid Meier´s Civilization DS se convierte en una de las apuestas más serias en el terreno de la estrategia para Nintendo DS, rivalizando con los fabulosos Advance Wars. No desentona en ninguno de sus apartados y la experiencia de juego es muy profunda con multitud de caminos para resolver las situaciones. Un título que convencerá a los maestros de la estrategia, aunque se les quedará algo corto, y muy recomendable para todos aquellos jugadores que gusten de este género. Sin duda ésta vez la historia sí estará en nuestras manos.
Comprar Civilization Revolution