Las crónicas más oscuras de la corporación Umbrella siguen escribiéndose en Wii con balas de wiimote. La serie Resident Evil cambia el "survival horror" por los disparos a diestro y siniestro en un shooter sobre raíles que no da miedo, que no asusta, pero que tiene un poder de diversión terrorífico. Así que hazte con un amigo, que esta tarde-noche toca matar zombis.
El "shooter on the rails" se ha ido convirtiendo poco a poco en uno de los géneros más habituales de Wii. The House of the Dead: Overkill y otros títulos más recientes como el asombroso Dead Space: Extraction han supuesto excelentes y acertadas maneras de trasladar la esencia de grandes franquicias a la blanca de Nintendo.
No obstante, los primeros que se arriesgaron a poner sus pies sobre los raíles de Wii fueron los desarrolladores de Capcom, que con Resident Evil: The Umbrella Chronicles sorprendió a todos con un título entretenido, desafiante, largo y, ante todo, muy bien terminado. No había mucho de "survival horror" y ni tan siquiera sustos, pero suponía una gran excusa para que nuevos jugadores se introdujeran en la franquicia mientras que se daba la oportunidad a los veteranos para aprender el lado oculto de la corporación Umbrella.
Ahora, dos años después de aquello, la historia vuelve a repetirse, en esta ocasión con un videojuego que rescata las vidas de Leon y Claire en Raccoon City (Resident Evil 2), del presidiario Steve Burnside (RE: Code Veronica) y de Jack Krauser (antes de Resident Evil 4). Todo dividido en cerca de 25 capítulos con una dificultad de lo más ajustada, acción cooperativa para dos jugadores, una duración de al menos 6 horas (pueden alargarse a más de diez) e infinitos disparos dedicados íntegramente a todo lo que se mueva.
Nuevas crónicas "on the rails" para Wii
Los japoneses de Cavia y Capcom han preparado para la ocasión un videojuego más rico y dinámico que el anterior, tanto desde el plano jugable como visual. Tenemos algunos enemigos nuevos, escenarios altamente destructibles, frecuentes secuencias cinemáticas, más conversación en medio de la partida y, en definitiva, una experiencia mucho más peliculera que nos permite jugar con un wiimote en solitario, con la ayuda del nunchuk o mediante el uso del periférico Wii Zapper.
Sea cual sea nuestra elección vamos a contar tanto con un ajuste de sensibilidad como con tres niveles de dificultad seleccionables, idóneos para aquellos usuarios solitarios que no puedan disfrutar de Resident Evil: The Darkside Chronicles junto a un segundo jugador. Y es que, realmente, es aconsejable buscarse a un compañero de aventuras para no sufrir demasiado la estudiada pero, en ocasiones, casi imposible dificultad de una obra que pondrá en aprietos hasta al pistolero más curtido, ya que los enemigos finales de este nuevo Resident Evil llegarán a resultar épicos.
Por suerte, cada capítulo consta de varios "checkpoints", además de varios elixires (hierbas medicinales y sprays de primeros auxilios) para salvarnos de una muerte segura. Por supuesto, el armamento tampoco falta, con nuestra pistola de munición infinita, una escopeta, una ametralladora, una ballesta, granadas y hasta un lanzacohetes.
Balas de wiimote
Y ya que estamos hablando de armas, una de las grandes incorporaciones consiste en llevar hasta cuatro a la vez, cambiando en tiempo real entre ellas (gracias a la cruceta) o modificando su disposición entrando en el menú de pausa. Incluso se añade la oportunidad de mejorar el armamento, ya sea sumando potencia, velocidad de recarga, capacidad de munición o tasa de fuego a las balas que salgan por nuestro wiimote.
Un wiimote del que se ha vuelto a exprimir sus capacidades giroscópicas para que apuntemos a cualquier punto de la pantalla con una gran precisión, sirviéndonos de un puntero para no perder nunca la cabeza de los zombis que podremos llegar a hacer estallar (se nos da una puntuación adicional por "headshots", aunque son bastante difíciles de conseguir).
Una leve sacudida de nuestro controlador sirve para recargar, mientras que el nunchuk se utiliza para realizar cortes cuando no nos quede otra opción. No habrá mucho más, salvo en el momento en que lleguen los QTE (Quick Time Events) para obligarnos a mover el wiimote y librarnos así de un zombie al acecho de nuestra carne. De hecho, los QTE van a ser especialmente frecuentes en los "final bosses", así que se precisan buenos reflejos para acabar la partida de la mejor manera posible.
Premio al gatillo fácil
Otro aspecto a destacar es que al final de cada capítulo se nos puntúa en función de cómo lo hayamos hecho (tiempo empleado, enemigos abatidos, daños recibidos y disparos en la cabeza realizados). Según nuestra actuación y de cómo hayamos explorado el nivel obtendremos más dinero y archivos ocultos en forma de perfiles de personajes, modelados de enemigos, documentos secretos, secuencias de vídeo o grabaciones de voz.
Por tanto, las 6-10 horas de juego pueden convertirse en muchas más gracias a la rejugabilidad de un producto donde cabe la oportunidad de subir puntuaciones a Internet gracias a la Conexión Wi-Fi de Nintendo.
Por desgracia, va a ser la única característica online del título, que se conforma con un plantel de novedades jugables que no sólo alcanza a la trama y los aspectos ya mencionados. En Resident Evil: The Darkside Chronicles hay que hablar además del apartado visual, que recoge el buen hacer del anterior y lo suma al motor Havok para crear una experiencia de juego mucho más dinámica. Los zombis se mueven con animaciones cuidadas y verosímiles, con una pausada rapidez que contrasta violentamente con el empleo de una cámara que se mueve de manera casi exagerada. Mala idea tuvo el empleado de Capcom que decidió incorporar el efecto "shake" propio de las videocámaras sin estabilizador de imagen.
Los zombis se ponen de gala
Aunque ofrezca mucho más dinamismo, el efecto de sacudida sobre la imagen puede llegar a ocasionar la frustración del jugador en determinadas ocasiones, debido a que se dificulta su capacidad para apuntar. No obstante, esto no ocurrirá siempre, con lo que tendremos momentos de auténtico éxtasis visual gracias al mayor trabajo en texturas, al especial empeño que se ha puesto sobre la iluminación (habrá niveles con linterna), al brillo de los modelados y especialmente a la capacidad de destrucción de los decorados.
Mobiliario, cuadros, lámparas, estatuas... En Resident Evil: The Darkside Chronicles no nos vamos a divertir solamente disparando a zombis y extrañas criaturas, sino también descargando plomo contra todo tipo de objetos que responderán con físicas realistas, cayendo al suelo y rebotando hasta que la fuerza de la gravedad (gestionada por Havok) deje de actuar.
Pero no todo son puntos positivos. A pesar de que el título haya pulido la técnica para trabajar en Wii con el modelado, las texturas, el modelado y la animación, se sigue fallando en lo más básico: la variedad de los enemigos, ese simple factor que mancha los numerosos escenarios existentes, tanto interiores como exteriores: mansiones, poblados, sótanos, paisajes nevados, laboratorios... y todos con el detalle que facilita cualquier "shooter" sobre raíles guiado de una manera lineal y controlada.
Sin terror, sin sustos... pero con mucha inmersión
Después de todo, Resident Evil: The Darkside Chronicles aspira a ser un "Gun Survivor" y por eso debe de tener una ambientación específicamente trabajada. A ese aspecto contribuye de manera crucial el apartado sonoro, donde han participado veteranos de la serie Resident Evil en la composición de temas que han contado con coros y una orquesta de música clásica. Capcom ha tirado la casa por la ventana.
No obstante, el título se merecía (como tantos otros) un doblaje al castellano, en este caso inexistente, aunque no nos perderemos ni un ápice de la historia gracias a los correctos subtítulos en castellano.
Por otra parte, son de aplaudir los diálogos "in-game" de los protagonistas, que añaden tensión al ambiente de incertidumbre que los desarrolladores han sabido calcular gracias a la incorporación de silencios y tonos de alerta para llevarnos desde la calma hacia la acción constantemente. Y es que The Darkside Chronicles es precisamente eso, una montaña rusa de disparos sobre raíles que aunque no tenga mucho de "survival horror" y sustos muy poco pronunciados, va a propiciar que tanto seguidores como nuevos usuarios se líen a tiros con todos los zombis que infesten sus pantallas.
La serie Resident Evil sigue explorando su lado más oculto en Wii con un "shooter" sobre raíles que mejora en todos los aspectos proponiéndonos mejoras visuales, gráficas y sonoras, de la mano de una nueva historia y más personajes. Si te gustó el anterior, con The Darkside Chronicles expandirás con éxito tu experiencia. Si no, será imprescindible siempre que seas de esos que son incapaces de soltar el gatillo del wiimote.
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