Análisis de PES 2010

Konami presenta una nueva entrega en PC de sus series deportivas Pro Evolution Soccer con la promesa de reeditar los éxitos pasados. Tras unas últimas entregas francamente decepcionantes, Seabass y compañía demuestran propósito de enmienda y cuajan uno de los episodios más notables de los últimos años.

Pro Evolution Soccer y FIFA son como Real Madrid y F.C. Barcelona. Cuando uno está en la cumbre el otro generalmente pasa por un momento de crisis, y no se entiende una temporada en la que ambos salgan vencedores. En la primera mitad de esta década el dominio fue incuestionablemente de PES, mientras que en los últimos tres años las series futbolísticas de EA Sports han experimentado un disparatado crecimiento en términos de calidad y jugabilidad que ha coincidido con un deprimente estancamiento de la saga japonesa.

Si bien ya FIFA 08 fue un notabilísimo tirón de orejas para el estudio deportivo de Konami, la entrega 09 fue el toque de atención definitivo para que Seabass y sus chicos se pusieran manos a la obra y se decidieran a remozar notablemente una fórmula antaño brillante e insuperable, y actualmente caída en el descrédito más absoluto.

Para el episodio de este año Konami propone mejoras en tres campos muy obvios: Gráficos y tecnología, jugabilidad y manejo, presentación y menús. Tres pilares sobre los que fundamentar una experiencia que supone un importante impulso con respecto a lo que pudimos ver en su momento con PES 2009. ¿Es suficiente para alcanzar al sobresaliente FIFA 10? Descúbrelo con nosotros.

Sala de Trofeos -Modalidades de Juego-
Pro Evolution Soccer 2010 cuenta entre sus modalidades de juego con la práctica totalidad de las que ofertó en la entrega del año pasado. El gran reclamo vuelve a ser, una vez más, la presencia de la UEFA Champions League como principal trofeo licenciado. Aquí podremos disputar la competición con su formato real –fase de grupos y eliminatorias- o amistosos entre los equipos que la disputan. La lástima de este formato es que vuelve a adolecer de todos los clubs que lo conforman en la vida real y es que, por ejemplo, vuelven a faltar todos los participantes alemanes que no toman partido en ninguna de las modalidades por la ausencia de la licencia de la Bundesliga.

Por lo demás nuestra incursión en unos u otros modelos de juego dependerá básicamente de nuestros deseos y circunstancias. Es decir que si, por ejemplo, estamos acompañados físicamente por amigos lo más probable es que optemos por amistosos o torneos confeccionados para que todos puedan participar. En este sentido hay que dar la bienvenida a la presencia de una comunidad como la que ya contemplaban desde hace varias entregas los episodios de PlayStation 2. Con ésta podemos atribuir identidades a diferentes amigos, y disputar campeonatos con ellos asistiendo a un registro de estadísticas, porcentajes de victorias, títulos conseguidos y goles anotados francamente interesante y que disparará la competitividad entre nuestros conocidos.

Por otra parte si jugamos en solitario podemos mostrar interés por los amistosos, las ligas de los cinco países licenciados –Italia, España, Inglaterra, Francia y Holanda- y los torneos habituales como la Copa de Europa, la Copa de África, la Copa de América, la Copa de Asia y Oceanía y la Copa Internacional.

En otro orden de cosas con Ser una Leyenda tenemos, de nuevo, la oportunidad de disfrutar de una modalidad similar al Be a Pro de FIFA. Una vez más llevaremos de la mano a un jugador durante un largo camino desde los juveniles, pasando por hacernos hueco entre los titulares del primer equipo y recibir ofertas de otros clubes hasta tocar el cielo de las estrellas mundiales del deporte. El editor para el jugador es bastante similar al del año pasado, con la opción de importar fotos o crear la cara y el físico de nuestro deportista desde cero, aunque con la lógica evolución visual que todo el programa en sí mismo atesora este año.

En cuanto al multijugador se observa un notable aumento de las posibilidades on-line del programa. En primer lugar por el añadido de modalidades, que ya no se limitan a los partidos de exhibición, sino que también cuentan con peso el modo leyenda –para jugar con más usuarios cada uno con un futbolista-, y los diferentes campeonatos que podremos disputar y que también debutan. Por lo demás hemos observado un conveniente pulido del código de red para hacer las partidas algo más fluidas que en entregas precedentes. Pese a ello el título no está completamente libre de lag, puesto que en ocasiones se sigue percibiendo cierto retardo en determinados encuentros.

La Soledad del Banquillo -Liga Máster –
La Liga Master vuelve a ser uno de los puntos fuertes de la experiencia off-line. En esta ocasión los cambios han sido más estéticos y artísticos que puramente prácticos, y es que la distribución de los menús ha cambiado de forma muy importante. Pese a ello, y como algo en lo que incidiremos más adelante, todo PES 2010 está pensado para usarse con Pad, y la maniobrabilidad de los menús incide precisamente en un diseño que tiene en mente, precisamente, la arquitectura de los mandos de consola.

Por otra parte, y como es costumbre en esta modalidad viviremos el día a día de un equipo a través de un número ilimitado de temporadas, siguiendo su progresión año a año y contratando jugadores y viviendo sus mejoras en términos de calidad hasta alcanzar su madurez, y su posterior ocaso hasta su retirada.

Se trata una vez más de la propuesta de más calidad del videojuego y la que realmente constituye el núcleo del título cuando lo disfrutamos en solitario. Vuelve a ser apasionante una vez más el crear la liga en la que participaremos con un equipo real y llevarle hasta conseguir los mayores triunfos. Se echa en falta en esta ocasión la posibilidad de crear un equipo desde la nada, escogiendo el nombre, el escudo y contando entre sus jugadores con los clásicos Minanda, Castolo, Ximelez, etcétera. Una grave pérdida, sin duda, y una francamente incomprensible puesto que el factor de comenzar nuestra andadura desde segunda división con un equipo al que ir, progresivamente, incorporando todos nuestros cracks favoritos era una de las mayores diversiones del título de Konami.

Por otro lado todo está dividido ahora de una forma muy clara en tres partes, Ciudad Deportiva, Aledaños del Estadio y Oficina; todo ello organizado desde un calendario que ahora contempla dos fechas por semana en lugar del clásico planteamiento jornada a jornada de pasados episodios. Así pues en la primera parte gestionaremos toda la parte táctica del equipo, en la segunda las opciones generales y en la tercera los fichajes y traspasos, pero vamos a concretar.

En la Ciudad Deportiva tendremos acceso a las formaciones del equipo, a la alineación y a las tácticas, todos ellos aspectos que detallaremos más adelante. De lo que sí debemos hablar ahora es del Entrenamiento, y el filial el resto de elementos que también están presentes en esta parte. El Entrenamiento, de hecho, es ahora mucho más complejo que en entregas anteriores, y lejos de observar impasibles cómo progresan nuestros futbolistas sin mayor mediación por nuestra parte, en esta ocasión podemos tomar parte activa de su desarrollo.

Así pues todos y cada uno de los deportistas que tengamos en plantilla –incluidos porteros- tendrán sus características divididas en seis parámetros: Disparo, Pase, Regate, Defensa, Condición Física y Portero. Todos ellos variables en torno a seis puntos, así pues Iker Casillas, por ejemplo, tiene 0 puntos en disparo, pero 4 en portería; mientras que Cristiano Ronaldo tiene 4 en disparo y 0 en portería. Pese a que suene algo confuso estos valores no están unidos a su calificación, que este año funciona de forma independiente, y es que son sólo sus puntos de desarrollo como profesional, es decir el margen de mejora que tenemos con unos u otros futbolistas al margen de sus diferentes calificaciones. ¿Ejemplo? Cristiano Ronaldo y Raúl pueden tener al máximo su desarrollo en disparo, y el primero continuará teniendo una calificación mucho más alta que el segundo pese a la mejora de ambos.

Por último queda el entrenamiento individual para cada jugador, que nos permite hacer que trabajen para ser mejores en otras posiciones, o la incorporación de cartas de habilidades especiales a su perfil, otro aspecto que explicaremos más adelante.

Otros aspectos que podremos consultar son unas estadísticas para cada jugador mucho más detalladas. Se nos explica con precisión en la pantalla del informe el comienzo de su contrato y su final, sumado a sus estadísticas como máximo goleador, asistente, mejor jugador, cuántas veces ha formado parte del equipo ideal, cuántas veces ha sido parte de los mejores de la temporada en competición europea, o cuántas ha formado parte de la selección de su país. Todo ello acompañado, también, de una pequeña barra que mostrará en términos cuantitativos su felicidad, y un pequeño informe de nuestros ojeadores y técnicos asistentes.

El filial debuta en Pro Evolution Soccer 2010 ofreciéndonos de principio diez futbolistas a los que podemos ofrecer contratos para el primer equipo. Mindanda, Castolo, Espimas o Iouga no podían faltar a su cita con PES, y son algunos de los nombres que encontraremos en una cantera de lo más internacional.

Los Aledaños del Estadio, por su parte, no merecen mayor explicación, y son el lugar donde gestionaremos el salto de un partido a otro, el avanzar de las jornadas y las opciones generales como la duración de los enfrentamientos o el nivel de dificultad de cada encuentro.

En la Oficina del Equipo sí hay más carne en el asador y, en definitiva, muchas más cosas que contar. Por un lado en PES 2010 podemos gestionar los traspasos por nosotros mismos o encargárselos al ojeador; escojamos la opción que escojamos continúa notándose una cierta aleatoriedad en la resolución de todas las negociaciones, lo cual siempre ha sido uno de los lunares de las series en este sentido. Por lo demás en el campo de las renovaciones, ventas y traspasos todo continúa siendo idéntico a lo visto en episodios anteriores, con un interfaz decididamente más cómodo, rápido y accesible pero con la misma esencia y opciones.

Aparecen también entre las novedades los contratos de patrocinio que nos proporcionarán suculentos premios monetarios en forma de prima con la que engrosar nuestro presupuesto, ya sea por conseguir títulos o por quedar encuadrados en un puesto concreto de la clasificación. Lógicamente también habrá condiciones de cancelación, cláusulas que si no cumpliéramos darían el contrato por finiquitado.

El Arcade del Momento –Jugabilidad-
Uno de los aspectos que más llaman la atención al hacer frente a nuestros primeros partidos con PES 2010 es su remozado apartado táctico. Las formaciones y el resto de aspectos estratégicos se mantienen idénticos, con lo cual la sensación de familiaridad es latente. Cambia, sin embargo, la forma de representar la valoración de los futbolistas, que sustituye el clásico pentágono marca de la casa por una media numérica, algo más imprecisa pero definitivamente más a la moda.

Al hilo de las variaciones estratégicas con la opción Estilo de Juego del Equipo tenemos acceso a una serie de valores que nos explicarán con ejecuciones prácticas en la ventana superior y de forma muy clara, qué clase de instrucciones le estamos dando a nuestros diez jugadores de campo. Los valores son del 0 al 100, y abarcan aspectos como cuánto se ofrecerán para el pase nuestros futbolistas, las zonas donde lo harán, lo habitual de su permuta de posiciones, el estilo de ataque en cuanto a la apertura hacia las bandas, la cantidad de presión, la altura a la que se situará la línea defensiva, la distancia del defensa con respecto al atacante que lleva el balón y, por último, si deseamos que uno de nuestros centrales se sitúe por detrás de la línea para cubrir eventuales pases en profundidad.

Los niveles de dificultad, por otra parte, han cambiado de nomenclatura, pero en esencia continúan siendo las cinco modalidades con diferentes grados con las que podemos medir la oposición del rival: Alevín, Cadete, Juvenil, Profesional y Estrella. El mayor problema de las opciones de este campo es que no repercuten en si el oponente juega mejor o peor, sino que más bien lo que hacen es que el árbitro se muestre más o menos riguroso con sus entradas, o que su portero detenga un mayor porcentaje de disparos.

El tipo de control es otro de los aspectos que ha sufrido un profundo lavado de cara, para ampliar las limitadas posibilidades de antaño. En su momento sólo podíamos disfrutar de ocho direcciones, con lo cual muchos jugadores se sentían más cómodos jugando con las crucetas de sus pads que con los sticks analógicos, o que incluso podían disfrutar de la poco recomendable opción de emplear el teclado. Esto en PES 2010 se convierte en inviable, puesto que uno de los grandes reclamos es precisamente su aumento de precisión.

De igual modo debemos ser muy críticos con la falta de respeto que supone para los usuarios de PC el que todos los elementos del interfaz aparezcan representados con los símbolos del mando de Xbox 360. El emplear el periférico de la consola de Microsoft es decisión del usuario, y si bien desde aquí recomendamos encarecidamente el disfrutar del juego con algún tipo de pad, no podemos estar de acuerdo con que los propios menús estén portados directamente de la consola sin ningún tipo de cambio para una representación visual de sus botones mucho más cómoda.

Así pues ahora tenemos entre nosotros algo más del triple de posiciones disponibles a la hora de desplazarnos, en una maniobra que recuerda tremendamente al similar aumento de posibilidades que ha experimentado un FIFA 10 que, sin embargo, es algo más completo en este campo. No sólo el juego de EA Sports responde mejor y de forma más natural a estos movimientos, sino que todos ellos se traducen en mejoras en el sistema de disparos y regates que no están disponibles en PES 2010.

Y es que una vez más volvemos a ver que no hay un sistema estandarizado de fintas en la nueva entrega de Pro Evolution Soccer. De nuevo el mejor quiebro es el que podemos hacer con el stick izquierdo gracias a los propios movimientos del jugador que sacan partido de la falta de reacción que habitualmente tiene el oponente –humano o no-, y lo cierto es que si bien hay algunos regates nuevos, éstos son algo pobres y ciertamente palidecen ante el descomunal abanico de su máximo rival en el mercado de los juegos de fútbol.

El aumento tampoco se traduce particularmente bien en los disparos, que una vez más vuelven a tener un cierto componente aleatorio en su ejecución. De nuevo elegimos la potencia y, más o menos, la colocación, pero una vez más el juego deja mucho en manos de una IA demasiado intrusiva.

¿Estas pegas quieren decir que PES 2010 es un mal juego? En absoluto, de hecho es una de las mejores entregas de los últimos años, y la primera que de verdad comienza a recuperar algo del espíritu que las series tenían en el pasado. En contraposición al estilo de simulación de las series FIFA, el nuevo “Pro” sigue siendo un título decididamente arcade, pero esto no tiene absolutamente nada de malo. Al contrario que el fútbol sesudo y marcado por el control del mediocampo y del tempo y los pases del título de EA Sports, en el de Konami todo es mucho más vertiginoso. Aquí los centrocampistas se diluyen en el campo y los equipos, empleemos la táctica que empleemos, acaban separados en dos y dividiendo a los once jugadores entre los que atacan y los que defienden. Esto hace que las transiciones sean de lo más veloz, y que el partido de una sensación de “correcalles” mucho mayor que en episodios precedentes, apoyado por una velocidad algo más acusada en esta ocasión.

Realización del Siglo XXI –Gráficos y Tecnología-
Los chicos de Konami llevaban tanto tiempo prometiendo mejoras visuales e incumpliéndolas que muchos aficionados habían perdido la esperanza en lo que hacía referencia a PES 2010. En los últimos años habíamos visto modelados dignos de PlayStation 2 en las versiones Next-Gen, caídas imperdonables en la tasa de imágenes por segundo y otros atropellos visuales de diversa índole.

PES 2010, sin embargo, es el primer Pro Evolution Soccer de PC que es digno del hardware de los equipos de la actualidad en términos visuales. Esto, comparado con episodios anteriores, es un salto verdaderamente impactante, y sitúa a lo nuevo de Konami a un nivel muy similar de lo visto en FIFA 10.

Hay aspectos en los que salen vencedores uno u otro videojuego en función de en cuál nos centremos. Así, por ejemplo, en las animaciones de giros o regates el incontestable ganador es el simulador de EA Sports, mientras que en el número y calidad de los rostros representados de futbolistas famosos el que sale triunfante es Pro Evolution Soccer 2010.

Del título que nos ocupa rescataremos, como decimos, la calidad y la mejoría que se percibe en todas las caras, impactante el avance con respecto a la mediocre entrega anterior; y también debemos destacar la vida que transpiran por todos sus poros, con interesantes cambios de expresión para remates de cabeza o pases que ayudan a que no parezcan tanto muñecos como futbolistas.

No obstante lo cierto es que continúa haciendo buena falta un rediseño total de un motor gráfico que hace ya años que muestra los estragos del paso del tiempo, sin embargo las mejoras son francamente sorprendentes, y tan sólo ha faltado un plus en términos de iluminación, carga poligonal y animaciones para lograr las calificaciones de sobresaliente en los apartados de gráficos y tecnología.

Otro de los aspectos positivos del engine en su versión PC es su francamente buena optimización. Con un equipo que alcance los Requisitos Recomendados, que puedes consulta desde este enlace, los resultados serán francamente buenos, permitiéndonos maximizar las opciones visuales –no particularmente detalladas- obteniendo unas tasas de imágenes por segundo muy altas. Por otra parte con un equipo más limitado lógicamente deberemos sacrificar algo de la espectacularidad visual del videojuego, a costa de obtener una fluidez acorde con la precisión que requiere un título deportivo.

Por otra parte tampoco podemos olvidar que ha mejorado profundamente el tratamiento de los estadios y también las texturas de uniformes, rostros y, por qué no decirlo, también del césped. En los aspectos no tan positivos rescatar una vez más las irregulares animaciones para determinadas circunstancias, aparte de otros aspectos como un tratamiento del antialiasing francamente irregular y unos problemas de clipping en ocasiones totalmente desmesurados.

PES 2010 supone el debut en las tareas de locución de Carlos Martínez, el habitual locutor de los partidos de Canal +, que sustituye al francamente ineficaz Juan Carlos Rivero. El videojuego se beneficia notablemente del cambio y experimenta una mejoría pese a que las líneas, en esencia, continúan siendo las mismas o muy parecidas. El tono de Martínez es mucho más adecuado que el de Rivero, y las pocas frases nuevas de locución ayudan a darle un tono algo más fresco a la narración. Maldini vuelve a hacer las labores de acompañamiento con mera corrección, aunque falta compenetración entre las dos voces, notándose en demasía que en este tipo de procedimientos son grabadas por separado. Por otra parte el timbre de los dos comentaristas vuelve a ser mucho más grave que sus voces reales en un fallo del que ya tomamos nota en nuestras impresiones con la beta. Confiemos en que el problema se solvente en los días que quedan desde la grabación de nuestra copia a la llegada a las tiendas de la versión final.

El irreverente y absurdo Andrew W.K., los alternativos Klaxons, los populares Chemical Brothers o los conformistas Hoobastank forman parte del ecléctico apartado musical del título. Una auténtica bendición la presencia de una banda sonora de temas licenciados de bandas profesionales, con la que se podrá estar de acuerdo o no, pero que supone un avance en términos de calidad tan necesario como bienvenido, puesto que los habituales scores musicales de la saga eran un atentado contra el buen gusto.

En cuanto al audio general los gritos de los aficionados vuelven a ser tremendamente repetitivos en función de determinadas configuraciones, y los golpeos de pelota acusan un reciclaje terrible que hace que prácticamente suene igual un potente chut a portería que un pase raso.

PES 2010: Recuperando el Mando del Partido –Conclusiones-
PES 2010 es un notable arcade de fútbol, y la decidida y acertada reformulación que requerían las series de Konami para retomar el pulso al género y a una actualidad deportiva a la que no había sabido coger el ritmo.

En primer lugar, en la conclusión, cabe destacar que el videojuego tiene, en esencia, las mismas licencias con respecto a la entrega anterior, salvo algunas incorporaciones. Puedes consultar los equipos de las cinco grandes ligas que aparecen en PES 2010 siguiendo este enlace, sin embargo el lector deberá tener en cuenta también que hay un puñado de equipos al margen de ellas como pueden ser Benfica, Oporto, Sporting de Portugal, Zenit de San Petersburgo, Galatasaray, Shacktar Donetsk, River Plate o Boca Juniors. Para completar el tema de las licencias debemos señalar que tenemos constancia por parte de Konami del hecho de que pocos días después del lanzamiento del videojuego se pondrá a disposición del aficionado la actualización de plantillas con los últimos fichajes, y la presencia en UEFA Champions League de cuatro de los equipos que superaron la ronda previa: Atlético de Madrid, Olympique de Lyon, Olympiacos y Fiorentina.

Hemos encontrado también muy positivo el sistema de las cartas, una incorporación a la entrega de este año que etiqueta a los jugadores con una serie de características que nos harán darnos cuenta rápidamente y de un veloz vistazo de sus cualidades. El máximo de cartas que puede tener cada futbolista es de 12, y en el modo Liga Master podremos entrenarlos para que tengan nuevas que consideremos necesarias. Así si nuestro estilo es el del primer toque puede interesarnos buscar futbolistas que encajen en este corte, o entrenar a los nuestros para que atesoren este tipo de características. Las cartas son de muy diferentes tipos y pueden ser tan obvias como las de experto en Pases de Gol, Búsqueda de Huecos o Uno contra Uno, o tan concretas como la de provocar bien el fuera de juego o ser duchos en el manejo del exterior del pie.

Sin embargo no todo son buenas noticias en PES 2010, y algunos de los factores que mencionamos a continuación son los que hacen que el título no alcance la nota de sobresaliente en el apartado de jugabilidad, lo que hubiera aumentado considerablemente su calificación final.

Entre otras cosas vuelve a ser excesivamente sencillo romper las defensas rivales con pases en profundidad por alto, una táctica contra la que el rival poco podrá hacer; por otra parte y siguiendo con el corte defensivo también es difícil hacer frente de forma ordenada al rival que ataca, puesto que los equipos tienden a hacer gala de un rigor táctico francamente escaso. En lo que se refiere al juego sin balón también hay quejas que formular, aunque éstas de menor importancia, la mayoría de ellas tienen que ver con lo estático de algunos de nuestros compañeros dirigidos por la IA cuando nosotros tenemos el balón, y también de su falta de inteligencia y de iniciativa a la hora de doblarnos por las bandas aunque les emplacemos a hacerlo desde las opciones tácticas.

Así pues, y con ánimo de resumir, Pro Evolution Soccer 2010 es un digno regreso del antaño campeón. La distancia con respecto a FIFA 10 sigue siendo amplia, pero esta vez sí da la sensación de que Konami ha hecho un notable esfuerzo que, de seguir este ritmo de progresos, puede culminar con un juego sobresaliente en una o dos entregas. Si el videojuego de EA Sports vuelve a ser la apuesta de la profundidad, la seriedad y la necesidad de invertir decenas de horas en su manejo para un dominio aceptable, el título de Konami es una vez más el lado accesible y amable del fútbol: Golazos a enormes distancias, ritmo vertiginoso, ocasiones constantes y la agradable sensación de que cualquiera, por escaso que sea su nivel, puede hacer un partido serio o tener un golpe de suerte y plantar cara a un experto. Y es que el fútbol también tiene algo de todo eso…