Análisis de Kane & Lynch 2 Dog Days

Análisis de Kane & Lynch 2 Dog Days
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Los dos criminales más peligrosos del mundo de los videojuegos tienen ya su nueva aventura lista en Xbox 360 y PlayStation 3. Tras el interesante aunque algo irregular en algunos aspectos Dead Men, Kane y Lynch se embarcan en esta ocasión en un accidentado periplo en la peligrosa y abigarrada Shanghái.

Lo confesamos. El primer Kane & Lynch se convirtió en un cruel tiro al blanco por parte de la crítica especializada, pero en 3DJuegos lo encontramos como un entretenimiento moderadamente disfrutable que alcanzaba unas notables cotas de interés gracias al carisma de sus dos protagonistas y a una historia con gancho, adulta, y que nos llevaba de punta a punta del mundo con unas misiones que tenían algunos puntos cumbre altamente estimables (homenajes a Heat incluidos).

Enormes expectativas teníamos con la segunda parte de las series puesto que parecía sencillo mejorar los elementos irregulares del original, especialmente los que tenían que ver con el control; y la ambientación oriental y el arriesgado enfoque estético lo dotan de enorme personalidad. Lamentablemente IO Interactive no acaba de sentirse totalmente cómoda con estos dos criminales, y no es capaz de reeditar los éxitos que sí ha conseguido con otras franquicias de relumbrón con las que cuenta su currículum como Hitman o Freedom Fighters.

Kane & Lynch 2 es premeditadamente más malcarado que su predecesor, y también mucho más desagradable. El original ya estaba lleno de momentos durísimos que no recordaremos para evitar spoilers, pero la secuela va todavía más lejos siendo mucho más áspera en su forma tan directa de exponer todo lo que pasa en pantalla. Esto, lejos de lo que pudiera parecer, no es una crítica y ha sido completamente inocuo a la hora de valorar el videojuego: Es más bien una advertencia, Dog Days es un videojuego para adultos en el más amplio sentido de la palabra.

Kane y Lynch se ven envueltos en una nueva aventura criminal. Una muerte inoportuna y toda la furia de la mafia oriental se desencadenará  sobre ellos.
Kane y Lynch se ven envueltos en una nueva aventura criminal. Una muerte inoportuna y toda la furia de la mafia oriental se desencadenará sobre ellos.

Malas Compañías
El videojuego de IO Interactive da comienzo con el ritmo que le va a acompañar durante toda la campaña: Implacable. Kane & Lynch 2 nos va a machacar inmisericordemente con tiroteo tras tiroteo, separados únicamente por breves secuencias cinemáticas narradas generalmente con enorme virulencia y acompañados por unos monólogos igualmente exiguos que nos harán más llevaderos los tiempos de carga.

Así pues la nueva aventura de estos dos peligrosos "fuera de la ley" no se prodiga demasiado en la narrativa. No es que el original fuera un prodigio en este sentido, pero sí hacía más por atraparnos con su historia gracias a un mayor tiempo en pantalla para desarrollarla y también gracias a que Kane, como protagonista, ofrece una mayor variedad de matices que el peligrosamente desquiciado Lynch.

Entre el arsenal de armas contaremos con las clásicas variaciones de pistolas, rifles recortados, ametralladoras y fusiles de francotirador.
Entre el arsenal de armas contaremos con las clásicas variaciones de pistolas, rifles recortados, ametralladoras y fusiles de francotirador.

Y es que, en efecto, el protagonista de Dog Days es Lynch, en contraposición al de Dead Men que era su compañero, Kane. En esta segunda epopeya criminal Lynch es un personaje mucho más relajado que en su videojuego predecesor, al menos en principio, y también menos interesante. Aquí descubriremos que este imposible calvo con melena tiene su corazoncito y que éste está ocupado por la joven local Xiu a la que aparentemente ha conocido en la grasienta Shanghái que se nos presenta.

No hay mucho de creíble en este radical cambio de un Lynch que ha pasado de ser un criminal maníaco, antisocial y tremendamente volátil, a un pobre diablo que llama entre nivel y nivel del juego constantemente a su media naranja para contarle cómo han ido sus andanzas e intercambiar frases cariñosas con ella. No resulta plausible semejante cambio en tan poco tiempo, y a pesar de que hay un giro hacia el primer tercio de videojuego (muy previsible, eso sí) ni su preludio ni sus consecuencias resultan verosímiles. La importancia de Kane, por su parte, queda reducida hasta prácticamente lo inexistente descubriéndonos que era un personaje mucho más interesante y tridimensional que su compañero, contrariamente a lo que hubiera podido pensarse.

En algunas ocasiones podremos interactuar directamente con el escenario por medio de partes rompibles como ventanas, parapetos, etcétera.
En algunas ocasiones podremos interactuar directamente con el escenario por medio de partes rompibles como ventanas, parapetos, etcétera.

Una vez diseccionado el apartado de los personajes, al que no solemos prestar tanta atención en otros lanzamientos de acción pero que es de capital importancia en un título tan centrado en éstos como es Kane & Lynch, toca hablar de la narrativa: un punto donde el juego no acaba de brillar como de él esperábamos.

Dog Days es un videojuego algo negligente en el sentido más puramente narrativo del término. Kane llega a Shanghái para un trabajo del que nunca se nos llega a hablar con mucha precisión, y Lynch le espera en la calle para recibirle y decirle que antes de ir al hotel debe arreglar un pequeño asunto con alguien del que no se nos dan mayores explicaciones. Ni cortos ni perezosos nuestros dos protagonistas se dirigen maleta en mano (sic) al lugar donde reside el sujeto y, como no podía ser de otro modo, el encuentro sale mal y acaban asesinando a alguien que no debían, desencadenando la furia de las mafias locales que peinarán la ciudad para acabar con ellos.

No sólo todo lo que pasa es muy obvio, sino que además es tan directo y fácil que no tiene nada que ver con el complejo entramado de localizaciones, personajes y golpes del que se componía la primera entrega. No es que la primera parte fuera un prodigio de argumento, pero antes de desbarrar en su tercio final, sí hilaba con suficiente habilidad un buen puñado de momentos espectaculares en lugares muy variados como el golpe al banco, el descenso en rapel por el rascacielos o la huída del edificio por el distrito comercial oriental. Apenas hay momentos memorables en este Dog Days salvo, quizá, la nada cómica huída de los dos protagonistas desnudos por el centro de Shanghái.; Sin embargo lo peor no es esto, sino la sensación de monotonía y falta de variedad en entornos y situaciones de esta segunda parte.

De acuerdo en que localizarla íntegramente en una sola ciudad resta posibilidades en este sentido, pero también hay que apuntar que una urbe de sus dimensiones parece sobradamente capacitada para ofertar muchas más alternativas que el abanico de grises almacenes y avenidas comerciales de las que se compone el juego.

Por lo general los niveles de Dog Days son extremadamente lineales y planos, sin embargo algunos de ellos tienen cambios de altura y rutas alternativas.
Por lo general los niveles de Dog Days son extremadamente lineales y planos, sin embargo algunos de ellos tienen cambios de altura y rutas alternativas.

Dog Days are Over
Si bien en los aspectos narrativos el videojuego ha perdido empaque con respecto a su primera entrega, en la faceta jugable el título sí ha mostrado signos de querer progresar, aunque quizá no lo suficiente como para justificar de cara a los más exigentes los tres años de diferencia que separan a primera de segunda parte.

El original tenía algunos problemas serios de control y apuntado, aunque se compensaban sobradamente con una historia con gancho y con algunos momentos cargados de épica criminal como los descritos anteriormente en el texto. En esta ocasión sí percibimos una mejoría en el manejo de los personajes, especialmente en lo que respecta al uso de coberturas, aunque no así en el empleo de armas, que vuelve a ser algo tosca y poco precisa.

Empezamos por lo positivo para recalcar que si bien el manejo de los dos protagonistas sigue siendo algo particular, los problemas con el posicionamiento de éstos tras las coberturas han desaparecido ya por completo. En el original todo el proceso se llevaba a cabo pulsando dos veces el control de desplazamiento cerca de un parapeto, lo que solía traer consigo serios problemas. En esta ocasión todo se realiza pulsando un único botón destinado a la interacción con elementos, lo que convierte el proceso en algo mucho más lógico y, especialmente, cómodo.

Para superar la aventura será  fundamental emplear las coberturas. La segunda parte de Kane & Lynch emplea un sistema mucho más cómodo para parapetarnos que el del original.
Para superar la aventura será fundamental emplear las coberturas. La segunda parte de Kane & Lynch emplea un sistema mucho más cómodo para parapetarnos que el del original.

Y es importante, puesto que en un juego en el que las mecánicas de cobertura son tan importantes como en este, el ser preciso en este tipo de funcionalidades es primordial. Sin embargo donde el videojuego no es tan exacto es en el apuntado, algo vital en un shooter en primera o tercera persona. Las balas en Kane & Lynch 2 se disipan en exceso, haciendo que el hecho de que cualquier disparo a una distancia media alcance un blanco sea algo peliagudo en ocasiones, ya sea realizado con pistola, ametralladora o rifle.

A esto, además, debemos sumar lo caprichoso que es el videojuego a la hora de reflejar en daños los impactos de bala sobre nuestros enemigos. Habrá ocasiones en las que, por ejemplo, veremos cómo necesitamos hasta media docena de impactos claros sobre un oponente para derribarlo, algo especialmente difícil de asimilar teniendo en cuenta que algunos incluso le alcanzarán en la cabeza. En otras ocasiones, sin embargo, bastará con un certero disparo en cualquier parte del cuerpo para acabar con ellos definitivamente.

En la modalidad Alianza Frágil deberemos recoger el dinero y llegar al punto de extracción donde, por ejemplo, nos recogerá un helicóptero.
En la modalidad Alianza Frágil deberemos recoger el dinero y llegar al punto de extracción donde, por ejemplo, nos recogerá un helicóptero.

La campaña puede ser superada en la dificultad media en unas cinco horas, una cifra que a muchos usuarios les resultará incomprensible. En 3DJuegos hemos defendido videojuegos con duraciones similares como Modern Warfare 2, entre muchos otros, y lo hemos hecho destacando la intensidad que puede conseguirse con esa duración y la presencia de modalidades alternativas que justifican su compra. IO Interactive, lamentablemente, confunde el concepto de una intensidad mal entendida, y convierte el modo historia del juego en una sucesión de tiroteos, algo monótona a medio plazo, sin grandes lazos que unan unos capítulos con otros y sin elementos de variación que contribuyan a crear una experiencia diversa.

Donde el videojuego encuentra su redención es en la faceta multijugador, donde no ofrece grandes alternativas en cuanto a modalidades, sólo tres, pero donde sí da en el clavo nuevamente con una experiencia divertida y cargada de emoción.

Alianza Frágil vuelve a ser "la reina del cotarro", con un planteamiento prácticamente idéntico al del Kane & Lynch original. Los cambios responden a que ahora el dinero se nos proporciona al comienzo del nivel en lugar de tener que robarlo durante el transcurso de la partida, y obtenemos bonus por acabar con los policías que vayamos encontrando a nuestro paso. Al igual que en el Alianza Frágil precedente podemos cooperar todos los jugadores, o revelarnos contra ellos y actuar a modo de traidor para acabar con el resto y llevarnos el dinero. Lo mejor del on-line es, sin duda, esa sensación constante de paranoia entre usuarios que no conocemos y que en cualquier momento pueden o no traicionarnos.

Por otra parte debutan en esta ocasión dos estilos jugables totalmente inéditos en el original: Poli Infiltrado y Policías y Ladrones. En el primero uno de los jugadores es un traidor en forma de policía infiltrado, del que los demás usuarios no sabrán su identidad hasta que él mismo se desenmascare tratando de acabar con el resto de criminales. En Policías y Ladrones, por último, la modalidad es la que se deduce de su propio nombre. Hay un respawning cada cierto tiempo para ambos bandos encarnados por jugadores humanos; y si los agentes de la ley deben evitar que los delincuentes lleguen a la furgoneta de huída, éstos deben tratar de conseguirlo antes de que el tiempo se agote.

En última instancia cabe destacar que el videojuego presenta el modo historia en cooperativo tanto a pantalla dividida como a través de internet, funcionalidad que debuta tras la primera parte. Lógicamente las carencias de la campaña siguen presentes en la experiencia de juego acompañados, aunque como es obvio resulta más divertido superar su breve hilo argumental con algún amigo a nuestro lado.

La posibilidad de agarrar a un enemigo y utilizarlo como escudo humano es una de las incorporaciones del título a nivel jugable. Podremos ejecutarlo o lanzarlo sobre nuestros enemigos.
La posibilidad de agarrar a un enemigo y utilizarlo como escudo humano es una de las incorporaciones del título a nivel jugable. Podremos ejecutarlo o lanzarlo sobre nuestros enemigos.

Suciedad Premeditada
Kane & Lynch 2 es premeditadamente sucio, feo y desagradable; pero contra todo pronóstico esos adjetivos descalificativos se convierten en la mayor baza de un videojuego que encuentra la faceta que le hace destacar sobre el resto en su dirección artística e innovación.

Como ya hemos adelantado en los diferentes avances con los que hemos cubierto, el mayor triunfo de Dog Days es el de encontrar personalidad en un look que quiere homenajear a las grabaciones cámara en mano y al estilo amateur de vídeos presentes en redes como YouTube. ¿Cómo se traslada esta apuesta al videojuego? En primer lugar con una cámara inquieta que tiembla con constantes sacudidas, y que roza la incomodidad de la visión en los sprints cuando nos sigue a toda velocidad como si realmente una persona la portara siguiendo también nuestros pasos.

Por si fuera poco los colores están continuamente degradados o alterados en función del tipo de iluminación que tenga cada estancia, lo que puede traducirse en que al pasar de una habitación a otra estos cambian ligeramente o incluso se den momentos de cegera durante unas centésimas de segundo. Todo esto, junto a una velocidad de refresco de imagen altísima, contribuye a acrecentar la sensación de que estamos ante grabaciones caseras; la verdadera intención de IO Interactive.

A menudo el escenario estará  despoblado y algo desierto, sin embargo en ocasiones encontraremos extintores y objetos explosivos que podremos arrojar sobre nuestros enemigos para hacerlos estallar.
A menudo el escenario estará despoblado y algo desierto, sin embargo en ocasiones encontraremos extintores y objetos explosivos que podremos arrojar sobre nuestros enemigos para hacerlos estallar.

A esto hay que sumar detalles curiosos como el hecho de que determinados aspectos de la violencia o el sexo se difuminan en pantalla con un pixelado que cubre las partes sensibles como si de censura se tratara. Se trata de una decisión puramente estética y que nada tiene que ver con la censura real, aspecto que nunca ha preocupado particularmente a un equipo tan aficionado a tratar con la acción y la dureza como IO Interactive.

El acierto artístico enmascara algunas deficiencias gráficas que sufre el título, y es que por lo que respecta a lo puramente tecnológico y a facetas como los modelados o la calidad de las texturas el salto con respecto al original no ha sido tan grande como se esperaba. El trabajo sobre Kane y Lynch es algo mejor que el que traen consigo el resto de personajes, pero no particularmente llamativo. El trabajo sobre carga poligonal y texturas de éstos es interesante, aunque se ve lastrado por unas animaciones toscas en ciertos momentos. Los caracteres secundarios, por su parte, acusan problemas de reciclado y son mucho más pobres.

Gráficamente el videojuego destaca por su poderosa dirección artística. Lamentablemente los aspectos técnicos y más puramente relacionados con el acabado no están a la misma altura.
Gráficamente el videojuego destaca por su poderosa dirección artística. Lamentablemente los aspectos técnicos y más puramente relacionados con el acabado no están a la misma altura.

La misma sensación se puede extraer de los escenarios, bastante irregulares. Algunos de ellos parecen hechos con mucho cariño y cuentan con abundantes partes destructibles, otros por el contrario son más pobres y poco inspirados. Las físicas son casi todo el tiempo inexistentes, salvo algunos pequeños matices ya mencionados.

Por lo que respecta a lo puramente relacionado con el rendimiento, Kane & Lynch 2 se mueve con una fluidez encomiable casi todo el tiempo salvo algunas caídas en la tasa de imágenes por segundo de las versiones de Xbox 360 y PlayStation 3.

En última instancia hay que mencionar el apartado del audio. La banda sonora es prácticamente inexistente de forma deliberada para reforzar el sentido amateur del juego, y los efectos cumplen su labor con eficiencia. Las voces repiten del original con el mismo nivel, francamente notable.

Interesante

Sin sello

Kane & Lynch 2: Dog Days

Por: El equipo de 3DJuegos
Sin sello

Kane & Lynch 2 es una oportunidad perdida para lograr un gran shooter con unos mimbres a nivel argumental y de concepto francamente apasionantes. No es que Dog Days sea un mal videojuego, de hecho tiene aspectos muy interesantes, pero con una campaña a la altura de su potencial y del frenético multijugador que exhibe estaríamos hablando de un imprescindible dentro del género.

Comprar Kane & Lynch 2: Dog Days
Jugadores: 1-12
Idioma: Manual en español, textos en español y voces en español
Duración:
Comentarios cerrados
VÍDEO ESPECIAL

4.527 visualizaciones

El AUTÉNTICO AAAA de Ubisoft FAR CRY 2

Hay revoluciones que pasan frente a nuestros ojos sin que apenas nos demos cuenta. Juegazos que, por la velocidad de la industria y lo rápido que muchos se suman a las modas, pasan inadvertidos o hacen algo de ruido para luego quedar completamente sepultados por secuelas o...