Sepherim / 31 de agosto de 2014 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

7,5 Bueno

Interesante descenso a la locura
Anna es una aventura gráfica en primera persona de terror, aunque más que sustos lo que da es una ambientación tétrica y lúgubre y algo de tensión. La ambientación está muy lograda, y la historia de sectas y ritos antiguos resulta creíble y bien construida, centrada en el misterioso molino que debemos investigar y que va cambiando a medida que el protagonista se acerca a la verdad. A nivel de jugabilidad se trata sobretodo de puzzles de combinar objetos o de usar unos objetos en sitios concretos, aunque algunos de ellos son, cuando menos, bastante crípticos. No hay PNJs como tales, sino que el desarrollo de la trama se hace por medio de la investigación y los numerosos textos que vale la pena pararse a leer tanto por ambientación como porque dan pistas muy útiles sobre los puzzles.

A nivel gráfico Anna tiene un muy buen nivel, aunque una cierta escasez de localizaciones (por mucho que cambien, siguen siendo básicamente las mismas), y estas son además muy estáticas. El sonido tiene muy buen nivel, con numerosos efectos sonoros que capturan el molino a la perfección y una buena voz narradora; la música tiene poca presencia, pero cuando aparece si que cumple bien su papel.

Como crítica habría que señalar su brevedad (y es que los diferentes "finales" son, en realidad, fracasos a la hora de llegar al final) así como la posibilidad de llegar al final y que falte una pista que ya no es alcanzable (a mi me ha pasado), dejándote atascado inevitablemente. Con todo eso dicho, sin embargo, sigue siendo una aventura gráfica muy interesante, que aborda una ambientación poco frecuente en el género.

Bosc / 23 de septiembre de 2012 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

7 Interesante

Dreampainters deja su tarjeta de visita
Según se puede leer en su página http://dreampainterssoft.com, Dreampainters “es una casa de software italiana nacida en 2012 sobre la experiencia del game designer / periodista videolúdico Simone Tagliaferri, cuyo objetivo es crear una nueva realidad de alto nivel en el desarrollo de los videojuegos en Italia y en Europa, combinando innovación y amor por el medio El primer juego de la empresa ha sido “Anna”, realizado en Julio de 2012. Se trata de una aventura de horror de tono fuerte, ambientada en un asserradero del Valle de Aosta. Actualmente Dreampainters está trabajando en un nuevo título: trasladar el juego de rol de naipes “Sine Requie”.

Esta novísima desarrolladora ha conseguido que Kalipso y Steam confíen “Anna”, su primer trabajo, gracias a lo cual han obtenido una plataforma mundial de primer orden. Y sinceramente se pude decir que este producto cumple bien como tarjeta de presentación, pero nos deja a la espera de algo más sustancioso.

Y es que “Anna”, si bien tiene una factura audiovisual excelente, como juego nos deja algo insatisfechos. Cierto, los gráficos lucen muy bien, son de un realismo fotográfico muy convincente. Y el apartado sonoro está a la par o incluso por encima: los efectos de sonido contribuyen de forma eficaz a crear la atmósfera siniestra del interior del aserradero, y a veces a producir auténticos sobresaltos. La música es simplemente deslumbrante, por lo general bien dosificada. Sin embargo, el hecho de no poder graduar la luminosidad, sino simplemente a activarla o desactivarla, nos puede obligar a jugar con demasiada luz (si la activamos) o demasiado a oscuras (si la desactivamos). No se entiende que el menú no tenga un apartado que permita al jugador modificar a su gusto está opción. Y el uso de efectos de sonido para sorprender y asustar al jugador a las pocas veces deja de ser efectivo, ya que se convierte en previsible.
En lo relativo al juego en sí, se trata una “aventura gráfica”, basada en el típico “apuntar y clicar”, aunque el movimiento subjetivo es libre por los diferentes escenarios a explorar. Esta libertad de movimiento es lo que da el toque de novedad respecto al género, del cual, sin embargo, conserva uno de los peores vicios: el de obligarnos a resolver puzles con combinaciones de objetos muy poco (o nada) lógicas, lo que dificulta su resolución más de lo debido. Como consecuencia, el tedio termina por hacerse notar.

La historia es muy breve, aunque va asociada a un simbolismo bastante rico y bien trabado, cosa que termina por animar al jugador a resolver el misterio de este personaje y de este paraje, y a explorar los diferentes finales.

"Anna" se presenta con subtítulos al español (voces en inglés), los cuales presentan notables errores: en el menú, para guardar la partida tenemos que "Ahorrar", y al protagonista a veces se le refiere con el género femenino (debería ser siempre masculino). Además, determinadas pistas escritas no tinen traducción española (en este sentido, puede ser mucho más asequible poner el juego en el original italiano).

El juego, en suma, se podría pasar en menos de una hora en su variante más extensa una vez que sabemos los pasos a dar para resolver los puzles. Tal vez sea demasiado poco, aunque el precio de salida (6,29 euros en Steam) parece adecuado. Como tarjeta de presentación sirve, pero quedamos a la espera de ver algo más completo.