El devorador de almas llega a PS Vita, un hechicero creado por el maestro Keiji Inafune (artífice de Megaman) para darnos una jugabilidad "hack 'n slash" dispuesta en convertirse en lo mejor de la portátil para este año. Viscerales sacrificios, tanto de enemigos como propios, en un título que acabará convirtiéndonos en auténticos monstruos. Desde el E3, te contamos en qué consiste esta diabólica aventura.
Eclipsada por auténticos fenómenos interactivos como The Last of Us o Beyond: Two Souls, lo cierto es que PS Vita no ha tenido su mejor E3, con tan sólo la presencia de algunos títulos interesantes como Soul Sacrifice, el action-RPG que nada más y nada menos que el creador de Megaman, el japonés Keiji Inafune, está conceptualizando para que salga a la venta en algún momento entre finales de 2012 y principios de 2013.
El libro mágico
Un videojuego francamente prometedor con el que hemos podido estar una media hora desde el "meeting room" privado de Sony, lugar ideal para adentrarnos en las fauces de un original planteamiento narrativo. Estamos encerrados, somos un esclavo a punto de ser sacrificado, pero antes recibiremos una visita un tanto demoníaca en la que un libro nos conseguirá embaucar para protagonizar -en el papel de un poderoso hechicero-, la cantidad de batallas pasadas que contiene entre sus páginas.
Una colección de historias cuya narración parece haberse tomado muy en serio, con una presentación muy lograda (pasaremos incluso las páginas con nuestros dedos mediante la pantalla táctil) y una voz en off de tono tan oscuro como misterioso.
Lo más llamativo de todo es que cada capítulo en el libro será como un particular nivel en el que deberemos enfrentarnos a un conjunto de bestias -que fueron una vez humanos- hasta llegar al jefe final de turno. Todo insertado en un esquema "hack 'n slash" en tercera persona repleto de acción y con elementos roleros incluidos, que nos permitan obtener experiencia al tiempo que adquirimos nuevas habilidades.
En estado de furia
A este respecto, Soul Sacrifice basa su sistema de combate en tres botones frontales (con acciones completamente personalizables en virtud a las técnicas de las que disponemos), además de un botón adicional que no usaremos poco, y que servirá para esquivar las ofensivas enemigas. Y no os creáis que lo tendréis fácil. Por nuestra propia experiencia, os podemos asegurar que los rivales gozan de unas pautas muy estudiadas. Inafune no es un creador que suela dejar este tipo de aspectos al azar, así que podéis esperar un gran desafío, donde seguir una estrategia para derrotar a jefes será simplemente obligatorio.
El ajustado equilibrio entre ataque y esquives fue uno de los aspectos que más nos entusiasmaron de un título con un espíritu combativo muy bien ajustado. Además, nos alegró saber que no todo será apretar botones sin más, sino que podremos entrar en un estado de furia que hará emanar grandes puños de nuestros brazos, así como un aura de fuego y poder insusitados contra nuestras enemistades.
Y para que no quede ningún tipo de dudas, esto no es un Monster Hunter, a pesar de que muchas veces pueda parecerlo debido a otro de los rasgos más importantes del videojuego: dispone de cooperativo para cuatro personas. No habrá grandes cambios con respecto a la campaña, pero las misiones sí que se adaptarán al número de usuarios que participen, proponiéndonos mayor cantidad de rivales en pantalla.
Sacrificio y redención
No obstante, hay todavía un rasgo diferenciador que nos queda por comentar, probablemente el más importante de la obra: la capacidad para realizar sacrificios. En efecto, nuestro hechicero vivirá momentos realmente dramáticos en los que tendrá que escoger si absorber el alma de enemigos caídos o simplemente liberarlas. Y lo más fascinante es que, según estas decisiones, la aventura se desarrollará en una u otra dirección: llevándonos hacia un lado humano u otro más monstruoso (con cambios orgánicos incluidos).
De hecho, la posesión o no de determinadas técnicas dependerá de lo que hayamos escogido en cada momento. Es más, los sacrificios no serán sólo sobre terceros, sino también propios, con lo que podremos experimentar secuencias realmente viscerales en las que nos despojemos de nuestra humanidad para realizar una determinada ofensiva.
En consecuencia, no hace casi falta decir que nuestras impresiones con el título conceptualizado por Inafune son excelentes. Dentro del catálogo para PS Vita mostrado en el E3 consideramos que es lo más interesante, incluso puede que un poco más después de haber conocido que Yasunori Mitsuda (compositor de títulos tan emblemáticos como Chrono Trigger o Xenogears) se encuentra tras el plano musical. A ver si tenemos suerte y para finales de año ya podemos convertirnos en monstruos con esta fascinante aventura.