GTA Online ya está con todos nosotros. Pero en 3DJuegos nos hemos adelantado, viajando en exclusiva a las oficinas de Rockstar en Londres para jugar en primicia a los niveles más avanzados de este contenido sólo disponible para los propietarios de GTA V. Os contamos nuestras primeras locuras dentro de Los Santos.
Seguramente muchos de vosotros ya habéis comprobado lo que propone GTA V, un "sandbox" que pone al límite las consolas actuales al tiempo que da a la industria una auténtica lección de cómo diseñar un videojuego de mundo abierto cargado de mimo e infinita dedicación. Pero también habréis descubierto que la vida delincuente no acaba aquí. Dentro del menú del juego podemos encontrar el acceso a GTA Online, descargable a partir de hoy mismo y que es completamente gratuito para aquellos que se hayan hecho con la quinta entrega numerada de Grand Theft Auto.
Una experiencia que Rockstar Games considera de forma independiente al juego original, convirtiéndose en un añadido que hereda el mundo abierto y persistente de Los Santos, sólo que ahora con la posibilidad de disfrutarlo junto a amigos. 16 jugadores simultáneos en un entorno que se irá actualizando con contenidos específicos tanto diseñados por la compañía como por los usuarios, caracterizado por las mecánicas de la serie y que evolucionará en el futuro tanto a corto como a medio/largo plazo.
Es una apuesta de fondo, con miras hacia el género MMO, pero del cual ahora mismo sólo podemos contaros el presente, marcado por la creación de un propio personaje, personalizarlo, conseguir uno o varios coches, adquirir una propiedad y ponernos a completar tanto misiones cooperativas (distintas de la campaña individual) como eventos multijugador al estilo de carreras y Death matches. Todo lo que se puede hacer en GTA V se puede hacer en GTA Online, y esto es algo que hemos podido comprobar el pasado viernes en una demo exclusiva desde Londres, jugando antes que nadie las primeras horas de este prometedor juego en línea.
Delincuencia online
Ya comentamos largo y tendido todo lo que ofrece GTA Online en nuestras impresiones exclusivas. Ahora toca centrarnos en la experiencia real con el mando en las manos. Por ello, lo primero de lo que debemos hablar es del apartado de personalización, una de las claves que más dudas suscitó en nuestro pasado encuentro con el programa. Vamos a tener un avatar propio, le pondremos nombre y escogeremos sexo. A partir de ahí, ya nada será tradicional, al menos en lo que respecta a herramientas de edición. Rockstar North innova, dándonos algo atípico, que no nos esperábamos.
Para empezar, aquí no hay controles al uso, relacionados con modificar la forma de la cara, el tono de la piel o el color de los ojos. Todo esto está presente, pero de otra manera. Nuestra labor consiste en escoger entre 14 abuelos, 14 abuelas, 14 padres y 14 madres para dar lugar a nuestra imagen en el juego. Podéis hacer cálculos. Hay miles de combinaciones posibles, asegurando que no hay dos usuarios iguales en todo el globo. Es más, para los curiosos, comentar que podremos ser los hijos de personajes como Niko Bellic o John Marston.
En un segundo peldaño, ya fuera de la estética, tenemos un conjunto de atributos -resistencia, disparo, fuerza, sigilo o conducción- que no se moldean en función de los típicos puntos, sino a través de nuestras rutinas diarias. Ingenioso y original, este método consiste en asignar las 24 horas imaginarias que invierte el personaje en dormir, estar con amigos, practicar deporte, trabajar, hacer el vago, irse de fiesta o delinquiendo. En función de ello, las destrezas iniciales serán unas u otras. Pero que nadie se preocupe, porque pueden mejorarse con el tiempo.
Locuras en compañía
La edad, el pelo, la barba, accesorios para la cabeza e incluso las gafas son otros aspectos que podremos retocar justo antes de montarnos en un avión para aterrizar en la ciudad de Los Santos. Esta será nuestra entrada en GTA Online la primera vez que lleguemos, con un personaje de la campaña -cuya identidad no desvelaremos- que nos acompaña durante los primeros compases de esta aventura en línea, por eso de empezar a familiarizarnos con las mecánicas, idénticas y sin fisuras con respecto a las de GTA V (un gran punto a favor de este contenido).
Una carrera a todo trapo, una misión relacionada con las drogas y el atraco a una gasolinera son nuestras cartas de presentación, y lo mejor es que desde el primer momento estaremos conectados, con la posibilidad de que otros jugadores nos acompañen en este particular tutorial. Por tanto, una integración total que nos deja muy pronto a libre albedrío, con unas tareas a realizar que, a medida que incrementemos rango, irán poblando el mapa del juego.
En las oficinas de Rockstar lo probamos, nos subieron hasta el nivel 50 y así comprobamos la descomunal densidad de pruebas presente, con competiciones de todo tipo (nocturnas con bólidos, todoterreno, de motos acuáticas…) y eventos multijugador que van desde el clásico "deathmatch" hasta una modalidad de supervivencia en la que teníamos que aguantar las oleadas enemigas dentro de una región delimitada. La variedad no parece conocer límites, incluyendo combates de cazas, competiciones en caída libre, batallas entre helicópteros y un sinfín de locuras para un máximo de 16 jugadores simultáneos.
Libertad para decidir
Las pruebas son accesibles desde Los Santos en puntos específicos, pero también existe un menú que se activa justo después de terminar la primera prueba multijugador. ¿El objetivo? Que nos quedemos para seguir jugando. Así, el sistema nos plantea una lista de eventos escogidos aleatoriamente con el fin de continuar con la diversión, permitiendo a los usuarios votar por lo que desean. Una solución muy democrática que también incluye las propuestas más complejas.
Nos referimos, por ejemplo, a una que nos resultó especialmente divertida. Crooked Cop divide a los usuarios en dos equipos, ambos con la misión de obtener una evidencia y llevarla a un punto objetivo del mapa. Parece sencillo, pero nada más lejos de la realidad. Una modalidad con tintes tanto cooperativos como competitivos donde la IA media a través de la policía. Podéis imaginaros el resto. Persecuciones en coche, tiroteos y momentos de absoluta locura en un escenario que no se limita en nada. Todo está permitido, significando sólo un pequeño ejemplo de lo que supone GTA Online.
Nuestra es la decisión de si continuar con los modos multijugador (realmente no parecen conocer límite) o de seguir con la particular campaña cooperativa que propone el título. Como nos explica el director del juego, Leslie Benzies, no hay una historia como tal, pero sí un "flujo" de personajes que a través del teléfono nos van sugiriendo nuevos trabajos, cada vez más grandes y complicados. Se pueden hacer en solitario -como robar un coche y llevarlo a un punto del escenario-, pero lo más divertido es completarlos en compañía. Sea como fuere, la decisión final es del usuario, el cual tendrá más de 500 misiones a su disposición. Aquí hay juego para rato…
Todo por la pasta
La otra característica que nos quedaba por esclarecer era la monetaria, y no la referente a las microtransacciones (que ya sabemos que habrá). El dinero "in-game" lo será todo en GTA Online, y por ello los chicos de Rockstar nos prepararon una partida con 2 millones de dólares para gastarlos en lo que quisiéramos. Así que fuimos directos a resolver una de las dudas más preguntadas en nuestra charla digital: ¿Podrán dos jugadores tener la misma propiedad? Afirmativo, ya que en un mismo edificio pueden ser adquiridas infinitas propiedades.
Podremos tener la casa más modesta o el ático más exótico, así como adquirir deportivos de lujo, todo tipo de aviones e incluso vehículos militares al estilo de tanques. Invitar a nuestros amigos a un paseo a toda velocidad o llevarlos surcando los aires es algo posible en un título que rompe muchos límites. Hasta se ha considerado la posibilidad de contratar un seguro para que nos repongan el vehículo en caso de robo o siniestro. Incluso es posible asignar los amigos a los que dejamos conducirlo, todo un detalle.
Eso sí, no hay que olvidarse de guardar bien nuestro dinero en el banco, porque uno de los problemas que nos encontraremos es que cualquier malintencionado podría acabar con nuestra vida. A este respecto, no se nos ha asegurado cómo se limitarán las malas conductas, pero parece que existirá un sistema de reputación para castigar a los usuarios más conflictivos. La convivencia online es clave, así que esperamos que Rockstar sepa resolver estas situaciones de la mejor de las maneras.
Un GTA… ¿para siempre?
La última faceta que nos quedaba por comprobar en esta demo tenía que ver con el apartado tecnológico y visual. Para la ocasión, los desarrolladores nos habían preparado una versión que mostraba los "frames" por segundo, tal vez por lo seguros que estaban sobre la fluidez y robustez de su producto. El título corre a 30 FPS realmente estables, sólo con leves caídas en los momentos más peliagudos, pero sin nunca desfallecer. Es todo un logro, más considerando que se mantiene la ciudad tal cual la vemos en GTA V.
A este respecto, que nadie se espere la misma calidad gráfica de la campaña. Se ha reducido el número de polígonos y la resolución de las texturas, pero el sacrificio ha merecido la pena. Sin ello, GTA Online no hubiera sido posible, algo realmente inmenso. Tanto, que es es previsible que durante sus primeras horas y días de funcionamiento no esté exento de problemas. Es algo muy común, pero el reto y mérito de Rockstar estará en afrontar las dificultades, volcándose en ofrecer la mejor experiencia al usuario.
He aquí la clave de este lanzamiento, considerado independiente de la campaña pero sin coste adicional para los que hayan adquirido la última obra de Rockstar North. Un contenido disponible a partir del 1 de octubre que deberíais probar por vosotros mismos y dejar de leer. Nosotros haremos lo propio para evaluar su propuesta, así como para descubrir el Creador (el editor de misiones todavía sin fecha concreta de lanzamiento), con lo que os citamos para un futuro no muy lejano si queréis saber si este particular mundo abierto en línea os interesa. Nos vemos en la ciudad de la delincuencia virtual.