Muerte. No hay quien escape de ella... y menos en el frío mundo de The Long Dark, una desafiante aventura de supervivencia que tras años de desarrollo, de crecer junto a los aficionados gracias a su Acceso Anticipado, estrena su versión final con los dos primeros episodios de su ansiado Modo Historia. ¿Qué tal la experiencia? Te lo contamos en estas primeras impresiones de The Long Dark.
Sobrevivir no es un juego de niños y The Long Dark lo demuestra con una implacable crudeza. La muerte está al acecho, ¡siempre amenazante!, en esta aventura de supervivencia que nos traslada a las frías montañas de Canadá. Hay lobos y osos, feroces enemigos que desgarrarán nuestra carne sin contemplaciones dejándonos a merced de la negra parca... y aun así, puede que sean el menor de nuestros problemas. Busca alimentos, purifica el agua, remienda tu ropa, fabrica herramientas para mejorar tus posibilidades de éxito y, ante todo, protégete del frío invernal porque la madre naturaleza no va a tener piedad alguna. Morir, ¡qué agonía!, cuánto sufrimiento; pero qué bien lo hace el videojuego de Hinterland Studio para que, pase lo que pase, nunca te rindas. Sufrirás lo indecible, sí, y a veces incluso la ira se apoderará de ti, pero esta aventura te atrapa de tal modo que pasarán horas y horas antes siquiera de empezar a notar los efectos del cansancio. Así de bueno es el trabajo realizado por este estudio independiente formado por antiguos creativos de Volition, BioWare o Ubisoft entre otros.
A aquellos que han disfrutado del Acceso Anticipado de The Long Dark no les descubro nada nuevo. Te sueltan en mitad de la nada, en un ambiente hostil, con incesantes tormentas de nieve y una acuciante falta de alimentos... y a ti te toca buscarte la vida, solo, sin que nadie te diga qué hacer ni cómo actuar. Esto es supervivencia, en mayúsculas, y pronto descubrirás lo duro que puede ser. Especialmente por el concepto de muerte permanente. Si pierdes la vida ¡se acabó la partida!, tendrás que volver a empezar luchando contra desafíos totalmente distintos porque aquí, cada partida se siente a su modo distinta gracias a las variables que afectan al entorno y la fauna. Esta no es sin embargo una experiencia revolucionaria.
El videojuego de Hinterland Studio apuesta por el realismo y lo hace con gran acierto
The Long Dark sigue a pies juntillas las bases jugables propias del género, proponiéndonos recolectar toda clase de materias primas con las que, posteriormente, fabricaremos diversos útiles, medicinas o ropa con la que sobrevivir al invierno canadiense. Insisto mucho en ello porque, al final, las bajas temperaturas serán nuestra peor pesadilla. No podéis pasar la noche al raso ni mucho menos quedaros inmóviles en mitad de una tormenta pues, en cuestión de minutos, vuestro cuerpo se comenzará a helarse y poco tardaréis en morir. Usar ropa de abrigo es, por tanto imprescindible para moverse con cierta seguridad por las montañas de Canadá, aunque aquí también hay trampa. Si llevamos demasiadas prendas nos moveremos con mayor lentitud; sin contar con que la ropa mojada, o incluso congelada, puede convertirse en un arma mortal si no entramos en calor cerca de una hoguera.
Por supuesto será imprescindible cocinar los alimentos para no sufrir enfermedades, o hervir el agua contaminada para eliminar impurezas. El videojuego de Hinterland Studio apuesta por el realismo y lo hace con gran acierto, dejando fuera de la ecuación los elementos paranormales tan habituales en otras aventuras del estilo, sin perder por ello la capacidad de crear miedo en nuestros cuerpos. Hay misterio, mucha intriga alrededor de ese cataclismo que ha llevado a la humanidad a malvivir en un mundo helado. Algo en lo que se profundiza en el ansiado Modo Historia de The Long Dark, que acaba de estrenar dos de los cinco episodios que lo conforman. ¿Primeras impresiones? De momento positivas aunque... con matices. Me gusta que esta aventura no sea un simple tutorial con el que prepararse para los desafíos del Modo Supervivencia, pero el relato y el modo de plantar la historia no siempre resulta tan interesante como cabría esperar.
La relación con otras personas es, hasta ahora, en exceso simple. Muestran su desconfianza hacia ti, pero enseguida te están encargando tareas no especialmente originales sin profundizar demasiado en su vida personal ni tampoco en la catástrofe que ha sumido al mundo en el caos al que te enfrentas. Se siente como una oportunidad perdida, aunque todavía hay mucho margen de mejora, pues la historia sigue su curso. En este sentido, el desarrollo de la acción es francamente interesante. Empiezas en una zona pequeña, sin mucho que hacer, y poco a poco el mundo de juego se abre más y más hasta que te sientes libre de explorar todo a tu ritmo. Hay una gran variedad de localizaciones, también situaciones de juego muy dispares entre sí, y lo mejor es que terminas empatizando con el protagonista de la aventura.
Y aquí me tenéis, esperando que la historia continúe; que el videojuego siga creciendo, esta vez ya lejos de su Acceso Anticipado. Quién lo iba a decir. La espera ha sido larga pero el resultado está a la altura de las expectativas. Resta confiar en que Hinterland Studio sepa cerrar con buen tino la historia a la que justo ahora acaba de dar comienzo.
Nos ha Gustado
- El realismo de su acción y la sensación de soledad
- Fácil de aprender, difícil de dominar. ¡La muerte está al acecho!
- Su forma de gestionar el frío, el cansancio, el hambre o la sed. Te sientes muy vulnerable
- Una historia interesante y gran ambientación
- La presencia de mods en PC. También los desafíos adicionales que incluye el juego
No Nos ha Gustado
- En el modo historia no se saca mucho partido a los personajes secundarios
- La gestión del inventario no siempre es tan cómoda como desearíamos
- Algunas escenas de la aventura son muy artificiales