Vin Diesel vuelve a protagonizar otro videojuego para, en esta ocasión, alejarse de la estética futurista de las Crónicas de Riddick. En Wheelman seremos un agente de policía infiltrado como intrépido piloto en una banda mafiosa en Barcelona. Producido por el propio Diesel y desarrollado por los creadores de Escape from Butcher´s Bay, Wheelman promete adrenalina, acción y velocidad a raudales.
Que el actor Vin Diesel está muy interesado en los videojuegos es algo que, a estas alturas, no escapa a nadie. Tras producir y protagonizar el sobresaliente The Chronicles of Riddick: Escape from Butcher´s Bay, el intérprete vuelve a recurrir a su desarrolladora de confianza Tigon Studios –empresa creada por él mismo, que ya trabajó conjuntamente con Starbreeze en su soberbio debut- para The Wheelman, la versión para consolas y Pc de la película homónima.
Midway, Mtv, Tigon y el propio Diesel unen sus fuerzas para uno de los proyectos más ambiciosos que estas partes han afrontado hasta ahora. Un título de acción y velocidad con profundas reminiscencias con la saga Driver; un juego en el que pilotaremos un coche a vertiginosa velocidad por las calles de Barcelona cumpliendo misiones para la mafia.
El Brazo del Crimen
En The Wheelman seremos Milo Burik, un agente de policía infiltrado en el mundo del crimen de Barcelona con la intención de desmantelar las bandas que operan en nuestra costa.
Actuando como conductor para preparar golpes con los gangsters, pilotaremos los más sofisticados coches a toda velocidad por las calles de la ciudad condal, cayendo progresivamente inmersos en un fuego cruzado entre los criminales y la policía del que será difícil salir. Con este interesante, aunque algo manido, argumento y contando con el escenario de excepción que supone Barcelona resulta difícil abstraerse de The Wheelman si somos amantes de los juegos de acción y velocidad.
El juego contará con 25 misiones que seguirán de cerca el arco argumental principal, y con otras 80 secundarias que no tendrán nada que ver con éste, pero que nos emplazarán a explorar el mundo que ofrece el título. Y es que el juego de Midway también aportará importantes dosis de libertad a la hora de deambular por Barcelona. Hay, como es lógico, una historia que encorseta las localizaciones y el orden de las misiones principales, pero el concepto Sand-Box tendrá también una fuerte presencia orientado a estos “encargos opcionales”.
Asimismo los objetivos también gozan de cierta variedad en su planteamiento, y es que no se desarrollarán todos a bordo de vehículos, sino que a menudo también nos apearemos para pegar tiros desde el suelo.
El Ciclón
Cada vehículo en The Wheelman tiene sus propias especificaciones, y conducir cada uno de ellos es una experiencia totalmente diferente gracias a las distintas características de todos ellos. Los habrá dotados de una fuerte resistencia pero lastrados por su lentitud, y habrá auténticos bólidos con pocas perspectivas de resistir un tiroteo. En nuestra mano quedará escoger el coche adecuado para cada misión, y deberemos tener todos estos parámetros en cuenta, pues los disparos están asegurados.
Los vehículos tienen una forma curiosa de moverse y responder en el título, eso sí, siempre marcados por la pretensión de lograr la mayor espectacularidad, muy por encima de cualquier aspecto relacionado con el realismo. Empleando la palanca izquierda manejaremos el coche, sin embargo si accionamos la derecha realizaremos imposibles maniobras laterales para colisionar contra los vehículos que traten de arremeter contra nosotros. Será como si nuestro automóvil se acercara a toda velocidad contra uno que esté a su lado, sin perder ni un ápice de velocidad y le golpee estruendosamente para sacarlo de su itinerario. Como una guerra de cuadrigas pero con motores.
Otra maniobra completamente inverosímil es el ciclón, muy recurrente últimamente en el cine de acción más irreverente. Gracias a este aparatoso movimiento podremos girar nuestro coche en marcha 180º para tener de cara a los coches que nos persiguen y poder dispararles sin perder velocidad; una vez vaciado el cargador sobre ellos volveremos a girarlo y seguiremos hacia delante.
Estas son sólo dos de las maniobras que podremos llevar a cabo en The Wheelman y es que contaremos con un grandísimo abanico. Sin embargo no podremos utilizarlas siempre que queramos sino que su uso estará restringido al uso de la “concentración”, barra del interfaz que llenaremos realizando otras peligrosas maniobras.
En definitiva The Wheelman parece, por ahora, un sólido título de acción y velocidad. Quizá su apartado gráfico sea de momento algo decepcionante, pero confiamos en que el progreso del desarrollo –todavía sin fecha de lanzamiento- ayude a mejorar sensiblemente este apartado. Por lo demás el programa parece tener la sana aunque dificultosa intención de llenar ese hueco que dejo en nuestros corazoncitos la saga Driver, caída en desgracia desde hace años.