The Coalition, el estudio al mando del regreso de Gears of War a Xbox, ha asumido el riesgo de luchar contra una trilogía querida y venerada por usuarios de la generación pretérita. Hay trabajo, y aunque puede parecer que es un poco conservador en su puesta en escena, con lo que hay y aportando sorpresas en su lanzamiento puede ser uno de los grandes videojuegos del año.
El gris de Gears of War está de vuelta. Gears of War 4 es una larga noche en la que una nueva amenaza pretende acabar con la humanidad en Sera, y lo peor es que parece que están a punto de lograrlo. Cooperativa y con varios niveles de dificultad, no nos cabe la menor duda que los amantes de los logros van a hacerse trizas a sus mandos a finales del presente año en Xbox One y Windows 10.
Las sensaciones nostálgicas a sus mandos son magníficas, pero sí gustaría que hubiese alguna sorpresa. Es obvio que The Coalition no se va a quedar en algo tan superficial y conservador, pero de momento parece que la firma se guarda ases en la manga de cara a su llegada al mercado. Jugamos un rato pensando que faltaban los Locusts, pero los nuevos Drones han venido dispuestos a ocupar su lugar. El último tramo de la pantalla jugada es estupendo.
Presentado en la conferencia de Microsoft, sus desarrolladores quisieron sorprendernos con una grata sorpresa para los seguidores de la franquicia: Marcus Fenix está de vuelta, vivito y coleando, y parece que tiene asuntos que arreglar con su hijo JD. Una reunión familiar que estamos deseando vivir lancer en mano. The Coalition se reserva el modo horda y más detalles del multi para futuras ferias. ¿Próximo destino Colonia? ¡Nos vemos en la Gamescom!
Puntos claves
- Sin Locust, pero la nueva amenaza llegada de la colmena parece igual o más temible.
- Cooperativo al que le vamos a dar muchas vueltas en cada una de sus dificultades. También habrá horda.
- Jugar con y contra usuarios de Xbox One es estupendo; ampliar las miras contra los de PC, mejor aún.