Tras un par de entregas sin mucha velocidad, Codemasters se fija el objetivo de adelantarse a sí misma con un F1 2016 cargado de evoluciones y novedades. Más real, más detalles, más espectáculo… Nos subimos a su monoplaza para comprobar cómo acelera este nuevo videojuego.
Con la F1 de Codemasters ha tenido lugar el peor de los pronósticos, que se conformara con mantener la posición en una carrera sin competidores cercanos. Por suerte, en la propia compañía se han dado cuenta de ello y están trabajando en revertir la situación, en hacer que F1 2016 sí que sea un videojuego del que puedan enorgullecerse.
La primera gran medida que van a tomar tiene que ver con el modo carrera, consistente en 10 temporadas que por supuesto ponen gran énfasis en la acción de los domingos, pero también en los clásicos fines de semana de puestas a punto y clasificaciones. Y esto incluye lo que ocurre fuera de la pista en el motorhome. Es decir, sentirte como un piloto, pero esta vez con un grado de profundidad nunca antes visto, incluso si hablamos de un juego de F1 en general.
Se quiere por ejemplo recrear el sistema de investigación y desarrollo que emplean los equipos durante los entrenamientos, con "tests" de pilotos que nos premian con puntos para invertir en mejoras aplicables a nuestro bólido. Puedes empezar en una escudería mediocre e ir escalando gracias a tu propio esfuerzo, a estas pruebas con las que ingenieros y tú mismo vais aprendiendo a hacer cada vez mejor el monoplaza.
Imitar a la F1 Real
Este es el objetivo al final, y para ello nada mejor que obtener una personalidad. Podemos escoger un avatar, un número, un casco… Hay más opciones y variedad que antes. Pero es sólo un detalle. Lo que importa es que ahora, según la selección de equipo, vamos a notar que nuestros superiores tienen mayores o menores expectativas, y eso se verá reflejado en los objetivos que nos propongan para cada competición.
Y luego está la gran decisión: pasarnos de un equipo a otro, o ser fieles a aquellos que confiaron en nosotros para tratar de llevarlos más lejos. Es como la F1 en sí misma. Hay que tomar importantes decisiones. Por supuesto, está de vuelta el tema del compañero de equipo, que vuelve a ser nuestro mayor rival. A este factor quieren darle incluso más presencia en F1 2016, puesto que está demostrado que es uno de los puntos claves en el desarrollo de cualquier piloto profesional.
Otro de los aspectos que más nos han gustado de esta toma de contacto es que se haya integrado el "motorhome", la vida del piloto fuera de la pista. Hay uno para cada equipo y actúa como nuestro centro de operaciones. Se trata de reflejar el espectáculo de esta competición, tanto dentro como fuera del monoplaza. Veremos a personajes icónicos del mundillo y tendremos contacto con dos figuras fundamentales: nuestro ingeniero y nuestro manager.
Los vehículos se comportan de una forma más realista que nunca
Por supuesto, no podemos olvidarnos del propio control del coche, una de las prioridades del estudio. En Codemasters sentencian haber escuchado atentamente a los fans, focalizando la atención en dos puntos: los neumáticos y la suspensión. Hemos sido conscientes de que los vehículos se comportan de una forma más realista que nunca, ofreciendo sensaciones diferentes con respecto a otros juegos de la compañía. Realmente vemos una evolución, y nos parece muy acertada.
Atacar los pianos se vuelve una experiencia única, con una sensación de adherencia potenciada. Y una cosa muy importante, diríamos que crucial, es que tenemos numerosos gráficos de telemetría para que los más profesionales estudien en qué punto del circuito pueden mejorar su rendimiento. Este simple detalle ya marca una gran diferencia con respecto a otras entregas, puesto que era además uno de los aspectos más demandados por los usuarios.
A todas estas novedades se suma la llegada del nuevo circuito de Azerbaiyán, que promete ser el circuito urbano más rápido de la temporada, y también el equipo Haas F1, el primero estadounidense en tres décadas. Así que ya sólo queda esperar. El motor ruge en la parrilla de salida y nosotros estamos deseando que las luces se pongan en verde. Esta vez, sí que sí, parece que Codemasters ha preparado un monoplaza con el que ofrecernos un espectáculo a la altura. Lo comprobaremos el próximo 19 de agosto.