Estamos a solo nueve días del lanzamiento de Battlefield 1, pero mañana mismo los suscriptores de EA Access y Origin Access podrán jugar la Prueba de Juego Anticipada, que les permitirá dar sus primeros pasos en la Gran Guerra participando en el prólogo y la primera Historia de guerra de la campaña. Pero también en varios mapas y modos multijugador entre los que se encuentra Operaciones, un modo de juego que transcurre a lo largo de varios mapas y que destaca por reflejar una escala épica superior a la del clásico modo Conquista. 3DJuegos ha viajado a Estocolmo para recordar lo que es el frío y poder contaros en qué consiste este primer acercamiento al título de DICE.
Se acerca un nuevo amanecer para los juegos de disparos en primera persona bélicos. En una época en la que millones de jugadores vivimos acostumbrados a la muerte como trámite para alcanzar la victoria, en la que la tecnología del futuro es un lenguaje más en nuestros juegos de guerra, en la que las historias que tratan de contarnos estos juegos son complejas marañas narrativas que acaban por confundir al jugador, hay un estudio que ha decidido volver la mirada atrás para encontrar las raíces de la guerra moderna. Cuando se anunció Battlefield 1 muchos nos sentimos sorprendidos, pero altamente interesados por el mundo de posibilidades que presentaba la posibilidad de luchar en la Primera Guerra Mundial . Después de participar en la beta abierta y de haber metido la cabeza más en este viejo (y nuevo) mundo, nuestras impresiones son cada vez mejores.
Lo primero que necesitamos destacar es el modo campaña. Con el paso de los años los modos historia han quedado relegados a un segundo plano para favorecer el juego multijugador, y eso es algo que ha quedado muy patente en la propia saga de Battlefield, con campañas en solitario que empezaban potentes pero se desinflaban rápidamente antes incluso de llegar a la mitad de la historia. Por otra parte, ya casi se ha convertido en costumbre el que el desarrollo narrativo depende de los mismos protagonistas omnipotentes cuyas acciones hacen cambiar el curso de conflictos internacionales en conjunto. Este año, DICE va a cambiar ligeramente el planteamiento de su campaña con algo que han llamado Historias de guerra, y con un prólogo con una puesta en escena muy peculiar que no tiene que ver con el resto del juego.
Guerra Épica
Ese prólogo, de nombre " Tempestades de acero", es, según DICE, una pequeña obra con la que quieren presentar sus respetos a la Primera Guerra Mundial y a las personas que lucharon en ella. Por lo tanto, su diseño dista mucho de la tónica de juego que se propone en el resto de la campaña, en el sentido de que el prólogo es de desarrollo lineal y, además, los personajes que controlamos perecen ante nuestros ojos uno tras otro para tratar de cautivar al jugador. ¿Consiguen lo que pretenden? Bueno, es un experimento curioso que funciona bien como prólogo, pero no dejaría de ser curioso ver ese planteamiento en alguna otra misión de la campaña. Una, por ejemplo, que transcurriera en un asalto multitudinario y caótico. De todas formas, donde realmente el juego comienza a expresar su concepto narrativo es en Barro y sangre, la primera Historia de guerra.
Como ya adelantábamos, las Historias de guerra buscan otra clase de protagonistas y otra forma de contar la historia. En ellas conocemos pequeñas partes del conflicto desde los ojos de varios personajes con sus intereses y capacidades personales. Así, en la primera historia encarnamos a un conductor que, en el contexto de la guerra, debe hacerse cargo de mover por el barro de la población francesa de Ribécourt a una mole de acero llamada Big Bess (un imponente tanque Mark V) para atravesar las líneas alemanas y acabar con toda la artillería que encuentre a su paso. La trama de esta historia recuerda a Corazones de acero, sobre todo por la forma en que se sitúa la interacción con la tripulación del tanque, formada por otros tres hombres con personalidades muy distintas. Es una visión muy cinematográfica que busca el dramatismo para involucrarnos. La propia misión tiene cierta variedad y nos presenta un primer segmento en el que avanzamos dentro del tanque a través de pueblos en ruinas, un segundo en el que toca guiarlo desde fuera atravesando un bosque plagado de campamentos enemigos tratando de ser muy sigilosos, y un último segmento en el que debemos infiltrarnos en un pueblo de noche para ubicar varias piezas que necesitamos.
Operaciones Multijugador
En lo que respecta al apartado multijugador, mañana estarán disponibles una variedad de mapas, en los que podrán probarse los ya conocidos modos de Conquista, Asalto y Dominación, y el potente modo Operaciones. Los mapas corresponden a la campaña de guerra de Kaiserslacht, que se compone de La herida de San Quintín y Amiens. Como ya todos sabemos de qué va cada modo clásico, vamos a centrarnos en lo que plantea Operaciones. Es un modo que no escatima en gastos, en el que 64 jugadores se enfrentan por tierra, mar y aire para avanzar por varios sectores controlando zonas y que sucede entre varios mapas.
Lo interesante de Operaciones es que a pesar de que un bando tenga las de ganar, durante el gran viaje que realizan los jugadores durante la partida existen muchas oportunidades de cambiar las tornas del conflicto. Por un lado, está el hecho de que el mapa propone nuevas zonas de control ubicadas en enclaves cuyo acceso puede poner las cosas más difíciles a alguno de los dos bandos, pero por el otro, también pueden entrar en escena los colosos, que actúan como dei ex machina al servicio de uno de los dos bandos. Es un modo de juego que, efectivamente, proporciona una sensación de viaje y que logra que nos contagiemos de la euforia de combatir en compañía de otros soldados.
Luego están los de la campaña del Sinaí, en los que conocemos otra parte del frente desértico que ya se presentó con la beta abierta. En la Fortaleza de Fao luchamos en un paisaje más rocoso con la presencia del mar, hasta que llegamos a la propia fortaleza. En Suez aprovechamos el cobijo de las dunas y de las trincheras antes de llevar el conflicto a las afueras de Kantara.
El cambio de rumbo de la saga parece definitivamente acertado y relativamente necesario
Las sensaciones que deja Battlefield 1 son intensas, cómo no. El cambio de rumbo de la saga parece definitivamente acertado y relativamente necesario, pero las sensaciones que nos deja este primer adelanto de lo que llegará en nueve días son generalmente positivas. Hay quien dice que no es más que un Battlefield más con una capa visual de la Primera Guerra Mundial, pero creemos que es un videojuego que trata de distanciarse de las anteriores entregas y las tendencias del género para desarrollar nuevas ideas que buscan la esencia de la guerra. Es verdad que a ratos resulta sorprendentemente rápido, pero claro, los tiempos cambian, y ¿quiénes somos nosotros para decir cuál es el ritmo real de una guerra? De todas formas, estamos deseando volver a este conflicto, quedarnos sordos con los sonidos tan potentes de esta guerra, recargar esas armas de cerrojo y desgarrarnos las cuerdas vocales mientras corremos berreando para acuchillar a nuestros contrincantes con la bayoneta. Es verdaderamente adictiva.