Su hogar se encuentra sobre las puertas del mismísimo infierno, pero es justo lo que quieren; son guardianes y se deben a la lucha contra las fuerzas del mal. Así de rotundo se presenta Children of Morta, una prometedora aventura roguelike con mucha acción, montones de historias que contar y un estilo retro de gran calidad. Lo hemos probado y aquí van nuestras primeras impresiones.
Cuando buscas cualquier excusa para "echar una partida más" es que algo bueno tienes entre manos, y eso es justo lo que nos ha ocurrido con Children of Morta, una prometedora aventura de acción y rol que nos ha atrapado de forma rotunda aun cuando todavía se encuentra en un estado de desarrollo prematuro. Algo tendrá; y ese algo son unos combates intensos y divertidos, una gran puesta en escena con un estilo pixel art que enamora y, sobre todo, una potente narrativa que te invita a profundizar más y más en los orígenes de la familia Bergson, los protagonistas de este desafiante roguelike en el que cada acción, cada gesta lograda ante las huestes del mal, tiene consecuencias en la historia que se cuenta. Y vaya si engancha.
El objetivo es siempre el mismo, ascender a lo alto de una montaña corrompida por monstruos y criaturas de pesadilla, pero el viaje nunca es igual. Cambia el diseño de las mazmorras, claro, también el tipo y cantidad de enemigos que salen a nuestro encuentro; pero sobre todo cambian las sensaciones. Algo tiene esta obra del estudio independiente Dead Mage que sabe cómo sorprender constantemente con desafíos cada vez más difíciles que lejos de amedrentarte, o siquiera de aburrir, consiguen el efecto contrario; te incitan a intentarlo cuantas veces sea posible con tal de avanzar en un videojuego que transmite como pocos una genial sensación de progresión. Cada partida, aun cuando acaba en derrota, te recompensa de algún modo con nuevas habilidades especiales, objetos únicos o simples lecciones de combate. Esto es vital.
Aprendiendo de los errores
Morir en Children of Morta supone el fin de la partida; toca empezar de nuevo sin todos esos amuletos, runas mágicas y poderes especiales que tanto cuesta reunir durante la lucha. Pero algo queda. La experiencia, para empezar, pues el nivel de habilidad de los seis héroes a los que podemos encarnar permanece intacto. También el oro y ciertos materiales con los que, una vez reunidos los planos, podremos fabricar nuevas armas, equipo defensivo, joyas y hasta pociones que, en una nueva partida, pueden venir genial. Es la progresión de la que hablábamos antes. El viaje es, en general, siempre el mismo; no así la forma en la que haces frente a sus desafíos.
Puedes hacer que tu guerrero sea más ágil, que esquive mejor los ataques enemigos, que golpee con mayor fuerza, que provoque sangrado, daño por fuego o hasta que lance pociones venenosas. Puedes hacer prácticamente de todo, pues las opciones de personalización son bastante generosas y en esta primera toma de contacto, siempre hemos encontrado algo nuevo con lo que experimentar. Por eso es tan adictivo. Si te derrotan, pero has subido de nivel, querrás volver a intentarlo desbloqueando alguna nueva habilidad especial, mejorando las ya presentes como en cualquier aventura de rol que se precie, o usando algún otro set de armas y amuletos. Y si vuelves a caer; volverás a intentarlo porque cuesta rendirse ante un videojuego como este, en el que el ritmo de la acción es tan trepidante y sus combates tan divertidos.
Se han trabajado muy bien las diferencias entre los seis héroes disponibles
Las batallas no son especialmente complejas, pues hay pocas habilidades especiales a las que recurrir de forma activa, y sin embargo son puro vicio gracias a una disparidad de enemigos que obliga a cambiar de estrategia constantemente y, sobre todo, por la importancia que tienen las esquivas y el bloqueo con escudo. Hay que actuar con una precisión milimétrica; más cuando aparece la élite de los monstruos, que no solo son más fuertes, también suelen modificar las condiciones del campo de batalla creando de la nada pozos de veneno, tormentas eléctricas o explosiones capaces de congelarte. Además se han trabajado muy bien las diferencias entre los seis héroes disponibles, que muestran estilos de combate radicalmente opuestos: tenemos a un caballero con espada y escudo, una arquera, un hechicero, un ágil asesino capaz de adentrarse en las sombras, un fornido guerrero con un poderoso martillo de guerra, y hasta una especie de karateka que aturdirá a los enemigos con puñetazos y patadas.
Todos ellos, lo decíamos antes, forman parte de la familia Bergson; un grupo de guardianes que no es que se hayan metido en la boca del lobo, ¡viven directamente sobre ella! Su vida se basa en combatir día tras día a los monstruos, y es un aspecto que parece dará mucho juego en lo narrativo. Al menos es original, pues antes de embarcarnos en una nueva cruzada, podemos interactuar con todos ellos en esa gran mansión que es a su vez el cuartel general desde el que fabricaremos nuevos objetos, aprenderemos más habilidades y demás, conociendo en todo momento qué piensan acerca de la misión a la que van a hacer frente. No solo eso. Si durante nuestras andanzas encontramos la cría de un lobo, o un simple juego de mesa por citar solo algunos ejemplos, al volver a la mansión disfrutaremos de varias escenas relacionadas con estos objetos especiales, pudiendo así conocer más a fondo a la familia.
Hay muchas historias que contar, y algunas de ellas las encontraremos de forma aleatoria en el interior de la montaña, como parte de las diversas misiones secundarias a las que también podemos hacer frente, incluyendo en ellas el combate contra jefazos o la resolución de sencillos puzles -está por ver si hay pruebas más complejas-. El resultado, os lo podéis imaginar, es un videojuego que sabe cómo sorprenderte, que siempre tiene algo nuevo que mostrar. Y es fantástico. Aunque todavía queda tiempo hasta que veamos terminado Children of Morta, estas primeras horas con el videojuego de Dead Mage nos han dejado un gran sabor de boca. Y eso que nos queda por probar el multijugador local, que nos enfrentará a otros jugadores, o las misiones cooperativas en las que tendremos que sobrevivir a incontables oleadas de monstruos. No parece por tanto que el videojuego vaya a estar falto de contenidos.
Nos ha encantado el diseño de personajes y monstruos
Además tiene otro punto a su favor: la vistosidad de sus gráficos de estilo retro. Nos ha encantado el diseño de personajes y monstruos, las animaciones de combate, el diseño de las mazmorras, la forma en la que recrean los hechizos y demás habilidades especiales y, en general, todo el conjunto. De verdad que es un placer explorar este oscuro mundo de fantasía que oculta en su interior tantos misterios. ¿Os resulta llamativo? A partir del 15 de septiembre se estrena su Acceso Anticipado en Steam, y con él de seguro llega un buen puñado de novedades para seguir disfrutando de una aventura de acción y rol verdaderamente prometedora que, por desgracia, todavía no tiene fecha de lanzamiento. Lo que sí sabemos es que gracias al éxito de su campaña en Kickstarter se estrenará en PC, Wii U, PlayStation 4 y PS Vita.