FIFA propone una de sus entregas más ambiciosas en un año verdaderamente inolvidable para el futbol español. Continúa el progreso y mejora de la saga deportiva de Electronic Arts, de la mano de cerca de 250 incorporaciones que resultarán clave en el aspecto jugable.
A nadie se le escapa que la mejoría experimentada por FIFA desde la entrega de la temporada 2006-2007 ha sido impresionante. Especialmente en sus versiones de Xbox 360, y más tarde de PlayStation 3, un escalón por encima del resto de plataformas y con un apabullante apartado gráfico.
La visita de FIFA a la temporada que comenzará en agosto se enfrenta al durísimo reto de la consolidación de sus virtudes, y al de su reafirmación en su intención de mejorar sus defectos. En esta ocasión se mejora la IA, la presencia e influencia del clima, el apartado táctico y, por supuesto, el sistema de colisiones.
Undisputed Attitude
Algo imprescindible de reparar en la saga FIFA era el mencionado e insuficiente sistema de colisiones, uno de los escasos puntos negros del videojuego en sus últimas entregas. Desde la torpeza de los jugadores a la hora de chocarse y salir repelidos, por ejemplo, o el nulo realismo de que un futbolista diminuto gane en el salto a un central de dos metros, todos estos aspectos no tendrán cabida de ahora en adelante.
De este modo, y según palabras de David Rutter uno de sus productores, “sentiremos la diferencia del físico entre Ronaldinho y Ronaldo, y Wayne Rooney y John Terry, y Drogba”. Añadiendo en referencia al futbolista marfileño que “en el juego es una auténtica bestia”.
Por otro lado también se ha mejorado muchísimo la reacción de los atacantes y defensores en los regates, teniéndose por fin en cuenta aspectos importantísimos como la posición de los pies en el momento de accionar los controles. Así en función de cual sea la pierna de apoyo del atacante podremos salir de un uno contra uno con un regate con mayor facilidad, dependiendo también de las habilidades de nuestro jugador con sus piernas zurda y diestra. Los defensores, por su parte, dependerán mucho de sus calificaciones en velocidad y entradas a la hora de hacer segadas o robos, resultando el hecho de robar un balón una tarea mucho más compleja en esta ocasión. Resulta igualmente sorprendente y agradecido el detalle de que si el defensor golpea en la pierna de apoyo del delantero, éste caerá, pero si lo hace en la otra que no lo sea, el atacante simplemente perderá el equilibrio por unos segundos y luego podrá proseguir su carrera.
La velocidad de respuesta es otro de los aspectos más trabajados. Se está mostrando a la prensa FIFA 09 en comparación con FIFA 08, haciendo especial énfasis en comparar versiones a cámara lenta de los diferentes jugadores haciendo idénticas maniobras. Se puede comparar de esta forma que en esta entrega los deportistas realizan muchos menos toques de balón a la hora de pasar el balón o chutar, repercutiendo este aspecto en una respuesta prácticamente instantánea.
Los progresos con la física de balón continúan imparables su camino, y en Electronic Arts se sigue con un arduo proceso para perfeccionar sus reacciones. Se mejorará la veracidad de los disparos a distancia, y también la reacción en los botes y rechaces para hacer las recuperaciones mucho más aleatorias.
Por último cabe destacar que Be a Pro (Conviértete en Profesional), que comenzó como una más que prometedora adición en la pasada edición, comienza a alcanzar su estado de madurez, gracias fundamentalmente al formidable peso que recibió con UEFA Euro 2008. En esta ocasión vuelve a asemejarse a un modo carrera donde progresar con nuestro futbolista, y lograr sus mejoras gracias a puntos de experiencia a lo largo de cuatro temporadas en el equipo que escojamos.
FIFA 09 con todos estos cambios y los que todavía no se han hecho públicos presenta su candidatura al trono de mejor videojuego de futbol de la temporada 2008-2009. La guerra con un Pro Evolution Soccer repetitivo y venido a menos que intentará recuperar su fuerza en la próxima entrega se presenta cruenta. ¿La cita con ambos? Entre los meses de septiembre y octubre.