United Front Games está desarrollando una nueva franquicia en la que Square-Enix tiene depositadas muchas esperanzas: Sleeping Dogs. Ya hemos podido probar una nueva beta bastante avanzada y desde luego el título no va a pasar desapercibido.
Los juegos de acción en tercera persona de gran libertad de acción (cada vez más conocidos como sandbox games) cuentan con un apoyo brutal por parte de los usuarios. Y es que este género se ha convertido -con permiso de los shooters, por supuesto- en el favorito de las masas, por lo que cada compañía quiere tener su propia (o propias, como es el caso de Rockstar con GTA y Red Dead Redemption, por ejemplo) franquicia. Sleeping Dogs pretende convertirse en el purasangre de Square-Enix dentro de este tipo de producciones, por lo que están cuidando hasta el último de sus detalles. Y eso lo hemos notado en esta nueva toma de contacto con el título, que ha mejorado bastantes aspectos en relación a pasadas experiencias jugables.
Policías infiltrados
De entrada parece que United Front Games, los desarrolladores de la criatura, están perfilando un guión bastante interesante que incluso podría llegar a convertirse (si consiguen recrearlo con el acierto e inspiración suficientes) en uno de los principales reclamos del juego.
Nosotros asumiremos el papel de Wei Shen, un policía infiltrado que se verá metido hasta el cuello en todo tipo de asuntos turbios. Y es que el tipo tendrá que vérselas con asesinos, ladrones, traficantes de todo tipo y demás "chusma" que operará en los diferentes barrios de la ciudad de Hong Kong, urbe que acogerá toda la aventura.
Como es menester en el género, durante las primeras misiones principales el título nos irá poniendo en antecedentes. Dichas misiones serán bastante sencillas de materializar y servirán como tutoriales prácticos, al tiempo que nos irán metiendo en la piel de Wei y nos darán una idea del tipo de "trabajos" que tendrá que ir llevando a cabo a lo largo de toda la aventura. Proteger a objetivos determinados, escapar de la policía, llevar "material" a puntos concretos de la ciudad y objetivos de esa misma índole serán el pan nuestro de cada día en Sleeping Dogs.
Pero como es costumbre en el género, siempre que así lo deseemos será posible salirnos un poco de la trama principal de la aventura para aventurarnos en numerosos objetivos secundarios. Y es que la ciudad entera estará a nuestros pies para hacer lo que nos venga en gana en el momento que así lo deseemos, pudiendo ejercer de policías de verdad y aplacar a pequeños criminales por nuestra cuenta, participar en peleas callejeras para ganar experiencia y dinero, participar en carreras de coches clandestinas, investigar cada recoveco de Hong Kong en busca de estatuas de Jade, aprender nuevas técnicas de artes marciales en la escuela de turno… Las posibilidades serán muy amplias y, por supuesto, nos reportarán beneficios.
Buenas experiencias
A medida que superemos misiones principales y secundarias, participemos en los numerosos minijuegos que nos ofrecerá la aventura, vayamos encontrando objetos de valor y demás, Wei podrá ir mejorando sus habilidades paulatinamente que se concentrarán en cinco campos determinados: policía, salud, triada, cuerpo a cuerpo y prestigio.
A nuestra disposición tendremos un árbol de habilidades de generosas proporciones (teniendo en cuenta las características del título) y bastante completo, donde será posible ir invirtiendo la experiencia ganada en aquellos campos y áreas concretas que más nos interesen. ¿Queremos ser un policía más eficiente? Pues nos vendrán bien aptitudes como desarmar a los civiles sin tener que pelear, aumentar nuestra precisión o poder hacer acopio del armamento pesado depositado en los maleteros de los coches patrulla. ¿Nos interesa más nuestra vertiente como miembros de la mafia china? No hay problema, podremos mejorar varios aspectos relacionados con esto. Este mundo de posibilidades conferirá al título una flexibilidad pocas veces contemplada en otros títulos similares, dotando a Sleeping Dogs de cierto grado de personalidad.
Acción desenfrenada
Otra de las grandes cualidades que presentará esta producción de United Front Games será los altos niveles de acción que proporcionará a los jugadores. Y es que ya desde las primeras horas de juego será posible participar en excitantes persecuciones por toda la ciudad en las que seremos testigos de múltiples choques y accidentes, siendo éstas una de las bases sobre las que se apoyará la aventura. El control de todos los vehículos (lanchas, furgonetas, autobuses escolares, deportivos, motos, camiones, etc.) será en plan arcade, si bien cada uno poseerá sus propias características de maniobrabilidad, potencia y velocidad punta.
Los combates a cara de perro también tendrán una relevancia capital durante el transcurso de las misiones. Wei demostrará ser un experto en artes marciales, pudiendo ejecutar golpes y combos de todos los colores. Además dichas peleas poseerán un alto grado de interactividad con los decorados, ya que será posible estampar a los rivales contra paredes y muros, electrocutarles, lanzarles al vacío desde lo alto de un edificio, arrojarles de cabeza a vertederos, quemarles tras exponerles al fuego que encontraremos en el interior de las cocinas domésticas… Las posibilidades serán excelsas y nos reportarán unas cotas elevadas de satisfacción.
Además durante los combates será posible recoger cualquier objeto que se encuentre en nuestro área de acción ya sean cajas, navajas, bates y un largo etcétera, incluyendo aquellos que dejen caer nuestros adversarios, por supuesto.
¿Pero qué sería de un título de este porte sin sus correspondientes tiroteos? Precisamente esta faceta de Sleeping Dogs es la que menos habíamos tenido el placer de experimentar, pero gracias a esta nueva demo ya hemos podido hacerlo… y a base de bien.
En este tipo de situaciones el juego tomará el rumbo de los clásicos shooters en tercera persona que asolan el mercado actualmente. O lo que es lo mismo, que en estos casos podremos hacer uso de un nutrido abanico de armas como ametralladoras, pistolas o granadas, será posible utilizar cajas, paredes y muros para protegernos del fuego rival, viviremos secuencias a cámara lenta de lo más espectaculares (haciendo uso de la habilidad de tiempo bala de la que hará gala el protagonista) y el control se adaptará a lo usual en este tipo de producciones. Por lo que hemos podido comprobar dichos enfrentamientos serán bastante numerosos y, lo más importante, divertidos, siendo otra de las piezas principales de la jugabilidad que nos ofrecerá este título.
Todos estos elementos (combates, tiroteos, exploración, toque RPG, persecuciones, libertad de acción, minijuegos, etc.) harán de esta aventura una de las más variadas en su género, siendo este precisamente uno de los objetivos fundamentales de los desarrolladores.
Excelencia oriental
La puesta en escena de Sleeping Dogs será bastante llamativa y espectacular, gracias al buen trabajo gráfico y sonoro que United Front Games está llevando a cabo hasta el momento.
Como ya os comentamos en pasadas impresiones la ciudad de Hong Kong no estará modelada de manera totalmente fehaciente, ya que los desarrolladores han buscado algo de flexibilidad en su diseño para adaptarla a la jugabilidad que atesorará Sleeping Dogs. Lo que sí que están consiguiendo es transmitir las sensaciones que ofrece la ciudad a quienes la visitan (o viven en ella): luces de neón por doquier, calles superpobladas, mucha actividad tanto diurna como nocturna, calles repletas de locales, impactantes rascacielos que contrastan vivamente con las desangeladas casas de apartamentos y residencias… El grado de detalle que ofrecerá esta aventura en materia gráfica será muy elevado, mostrando además una solidez notable.
Al impecable aspecto de la urbe se unirán unos personajes bien modelados, donde destacará la figura de su protagonista, Wei. Este joven policía infiltrado poseerá un surtido de animaciones sorprendentemente variado, quizá más de lo habitual en el género, que le permitirán llevar a cabo una cantidad inagotable de acciones como pelear, saltar por encima de paredes y demás objetos, correr, cubrirse, pilotar vehículos, dialogar con multitud de personajes secundarios, cambiarse de ropa, dormir, esconderse… Será un tipo polifacético de veras.
Además de esto será posible personalizar a Wei hasta cierto punto, pudiendo ataviarle con la ropa y complementos que más nos gusten.
Este despliegue visual estará apoyado por una banda sonora bastante cañera que contará incluso con varios temas licenciados y unos diálogos bastante convincentes (en inglés y chino con subtítulos en nuestro idioma) entre los personajes.
Sin duda Square-Enix está poniendo todos los medios a su alcance para dotar a esta nueva IP de la calidad suficiente como para que se convierta en una franquicia de éxito. Por lo pronto presenta un buen puñado de cualidades y buenas ideas que, si llegan a buen puerto, harán de esta aventura una de las sorpresas más atractivas de este año.