¿Vastas e ilimitadas extensiones exploradas en vehículos? ¿Acción online entre Stroggs y humanos? ¿Un shooter de nueva generación en el universo Quake?
Una de las mejores sorpresas del pasado año para personas como yo a las que les encantan los shooters, fue sin duda el anuncio de Enemy Territory: Quake Wars. Tras un Doom 3 que me hizo pasar momentos de gran tensión y al que una vez jugado le hubiera pedido un poco más en algunos aspectos referentes a su jugabilidad, resulta que sus desarrolladores, Splash Damage, en colaboración con id Software, llevan aproximadamente un par de años con Enemy Territory: Quake Wars, un juego que a juzgar por lo visto, promete dejarnos boquiabiertos tanto por su aspecto y tecnología, como por su peculiar estilo de juego basado en el universo Quake e inspirado en el gran shooter multijugador Wolfenstein: Enemy Territory.
Alien attack
Si más o menos has seguido el juego desde que se dio a conocer en la pasada E3 2005, sabrás que su desarrollo tiene lugar en el planeta Tierra, justo después del final del mítico Quake II, cuando la fuerza alienígena conocida como Stroggs se lanzan impunemente a la invasión de nuevos mundos. Pero tranquilo, no les va a resultar nada fácil, pues enfrente se van a encontrar con un ejército humano combinado conocido como EDF o Fuerza de Defensa de la Tierra y equipado con versiones futuras de armas y vehículos hoy convencionales.
Guerra de facciones y equipos
Precisamente una de las claves de Quake Wars es su clara orientación hacia la experiencia de juego multijugador por equipos entre dos facciones: los Strogg y el ejército EDF. Según sus creadores la fórmula de juego que sigue Quake Wars es más o menos la misma que utiliza Wolfenstein: Enemy Territory, pero con más énfasis en la captura y control posterior de los territorios conquistados. Es decir, cada mapa multijugador contiene unas misiones u objetivos dentro de un guión de juego, que cada facción debe ir completando para controlar un mayor número de territorios. Conforme contemos con nuevos territorios dispondremos de nuevas propiedades como bases de operaciones, un respawn en la zona, puentes de comunicación, etc., pero también nuevos problemas. Todavía no está claro del todo los diferentes modos con que contará, pero sí que se recompensará a los jugadores no solamente por tener una puntería excelente, sino también por contribuir a las metas del equipo, de la facción y también por ayudar a otros jugadores.
Una vez hayamos decidido la facción con la que jugaremos, deberemos seleccionar el tipo de clase o unidad entre las disponibles, como por ejemplo médico, ingeniero o fuerza de asalto entre otras. Tanto los Strogg como el EDF cuentan con las mismas clases, aunque su “modus operandi” variará notablemente. Como ya podrás imaginarte, cada clase dispone de unos atributos característicos que le confieren ventaja en ciertos aspectos, pero también desventajas en otros. Por ejemplo, el ingeniero es capaz de reparar o inutilizar vehículos, pero en combate abierto no es precisamente el soldado más poderoso.
Vehículos y exteriores
Los vehículos jugarán un papel muy importante de la acción en Quake Wars, hecho al que se le une los enormes y espectaculares decorados exteriores completamente abiertos en los que sucederá el combate. Tanto los ejércitos Strogg como los EDF contarán con diferentes tipo de vehículos característicos que podrán conducir, estando pensados algunos de ellos para usarse en modo cooperativo con dos o más pasajeros simultáneos. Labores de transporte, protección y porque no, de asalto, que denotan claramente las intenciones multijugador cooperativas con que contará Quake Wars.
Además de varias unidades de infantería, el EDF contará con jeeps, transportes armados, rápidos Quads, potentes tanques o el espectacular “Anansi”, un vehículo de aire altamente maniobrable con la velocidad propulsora de un jet de combate y la agilidad de un helicóptero. El ejército de los Strogg estará igualmente mecanizado con vehículos propios tales como el “hornet”, un vehículo de dos plazas con motor antigravedad, jetpacks personales o el temido y gigantesco “Goliat”, un lento pero letal vehículo que se desplaza gracias a dos especie de piernas y cuya potencia de fuego es realmente asombrosa, especialmente cuando se usa como torreta de ataque inmóvil.
La física y conducción con que contarán los vehículos promete imitar el modelo real, especialmente en temas de maniobrabilidad en función del tipo de terreno. Por ejemplo en suelos de arena los vehículos se notarán pesados y poco maniobrables, mientras que en tramos asfaltados los derrapes y trompos serán mucho más fáciles de realizar.
Ambiente épico, vasto y espectacular
Comentar algo sobre la ambientación y detalle gráfico de Quake Wars es tremendamente sencillo, y como una imagen o mejor dicho, un vídeo, vale más que mil palabras, os recomiendo que le echéis un vistazo para saber de que estoy hablando. Impresiona ¿eh? Los grandes y vastos exteriores abiertos sin la tediosa niebla que simula el horizonte, las columnas de humo, el agua, las expresiones faciales, la artillería pesada… el motor de Doom 3 había dado la talla en interiores, pero ahora que lo hemos visto trabajar también en exteriores es para alucinar. Por supuesto que el mérito no es sólo del motor y que Splash Damage parece estar haciendo un buen trabajo, pero cuando menos resulta curioso.
En conclusión, Enemy Territory: Quake Wars cuenta con un estudio de desarrollo experimentado, un apartado técnico excepcional, un universo plagado de incondicionales, unas visuales muy atractivas y un concepto de juego prometedor y muy ambicioso que lo convierten en un título muy tentador que presumiblemente llegará en verano. ¿Un shooter de nueva generación?