Con ánimo de ofrecer algo diferente se presenta Sniper: Ghost Warrior. Bajo su propuesta se encuentra un estilizado videojuego de acción para PC y Xbox 360 en el que el francotirador es el principal protagonista y no sólo una clase de apoyo.
Los más aficionados a los shooters seguramente recuerden el notable Sniper Elite, un videojuego desarrollado por Rebellion y ambientado en la derruida Berlín de la recta final de la Segunda Guerra Mundial. El videojuego tenía interesantes dinámicas como una cámara de bala realmente espectacular.
Hoy nos acercamos por vez primera a Sniper: Ghost Warrior un nuevo acercamiento a esos solitarios héroes de guerra que eran los francotiradores, y a un videojuego que repite algunos de los conceptos que aquel videojuego ofreció durante aquel lejano mes de septiembre del año 2005.
Pese al discreto currículum de los responsables de Sniper: Ghost Warrior, lo cierto es que hay muchos motivos para sentirse optimistas de cara a su lanzamiento. En primer lugar no hay muchos shooters que se acerquen a la figura de los francotiradores, y por otro lado se alternarán las visiones del combate de dos soldados: el propio francotirador y otro más especializado en el combate tradicional.
En el Punto de Mira
Sniper: Ghost Warrior se ambienta en una república sudamericana que ve cómo un despiadado dictador se hace cargo de ella y siembra el caos y el desorden en todo el país. Los gobiernos del resto del mundo, conscientes de la gravedad de la situación, toman cartas en el asunto y envían un equipo de operaciones especiales con la intención de acabar con su terrorífico yugo.
Ahí es precisamente donde entramos nosotros, que tomaremos el mando de dos personajes simultáneamente en un acercamiento que unirá de la mano la sesuda planificación del francotirador, con la acción directa y sin tapujos del soldado. La mezcla no se produce directamente dentro de las misiones o por intercesión del jugador, sino más bien dividiendo el grupo de capítulos que componen su campaña individual entre las de uno y otro.
Los niveles en los que Sniper es un shooter más tradicional tienen una mecánica más que obvia, con lo cual no tiene mucho sentido hablar de ellas en el Primer Contacto. Lo que sí resulta más interesante es acercarse a todo lo que tiene que ver con el francotirador, es ahí donde Ghost Warrior introduce sus elementos más interesantes.
El medidor de visibilidad será uno de los más importantes en nuestro interfaz, puesto que como es obvio marcará muy claramente si estamos expuestos a los ojos de los enemigos. Esta parte es fundamental porque el sigilo y el ser ilocalizable resulta primordial en el trabajo de todo francotirador que se precie. En el momento en que la barra se llene significará que estamos visibles, las alarmas sonarán y el enemigo nos apuntará y disparará.
Por otra parte también encontraremos en el HUD un indicador que medirá nuestro pulso cardíaco. Con éste valoraremos la precisión de nuestro disparo, ¿en qué se verá afectado? Por ejemplo si acabamos de realizar un gran sprint seguramente llegaremos jadeando y temblando al punto deseado, y tendremos que esperar unos minutos hasta que nuestro avatar se relaje y podamos llevar a cabo el disparo con cierta garantía de éxito.
El videojuego, por otra parte, volverá a la aplicación de botiquines y a la presencia de una barra de salud en el formato más tradicional del género. Esto supone una agradable vuelta a los orígenes tras la casualización que ha experimentado la acción en los últimos años gracias al fenómeno Halo, y su forma de hacer popular un sistema por el que si durante unos instantes no nos exponíamos al fuego enemigo acabaríamos recuperando la salud.
Sniper: Ghost Warrior incorporará también, por último, una cámara de disparo. Algo parecido al Sniper Elite que mencionamos con anterioridad. Así pues si una bala ha sido extraordinariamente bien disparada por nuestra parte a una distancia respetable, seguiremos su trayectoria desde nuestro fusil hasta el cuerpo del enemigo con una cámara situada a la espalda del proyectil para comprobar de primera mano sus devastadores efectos.
Los creadores del título prometen una campaña de 16 misiones que rondarán las 10 horas en total, y que ofrecerán gran variedad dados los dos personajes que lo protagonizan. El videojuego se lanzará a finales de año a precio reducido.