La gran mayoría usaba software de terceros para trampear las partidas.
La popularidad de World of Warcraft, a pesar de pasar por "horas bajas" por las que otros MMO desearían pasar, hace que muchos jugadores no duden hacer trampas para conseguir ventajas en el software sin mover un dedo. Muchos son los usuarios no dudan en usar malas artes para tener ventaja. Blizzard tampoco ha dudado en sacar el martillo y hacer una oleada de baneos importante, llevándose por delante a 100.000 usuarios que no podrán jugar en los próximos seis meses.
Los baneados son jugadores que disfrutaban de ayuda de programas third-party en el PvP del juego. La empresa ha comunicado el movimiento en las últimas horas que "las trampas, sin importar del tipo que sean, no están toleradas en World of Warcraft". No es la primera vez que la empresa lleva a cabo un baneo de las presentes dimensiones. La recomendación obvia es disfrutar del MMO sin hacer trampas.