El japonés quedó sorprendido por las demostraciones de VR y sus numerosas incógnitas.
En Nintendo siguen viendo el lado positivo de su show en el pasado E3. Ahora es Shigeru Miyamoto el que sale a la palestra para asegurar que “aunque se decidió que el Nintendo Direct estuviese protagonizado por juegos que salen antes de que acabe el año, el catálogo en general pareció pequeño. El hecho de no incluir un buen número de juegos de third-parties también acabó dando la impresión a la gente de que no son muchos los títulos que hay por lanzar en nuestras plataformas”.
Parece que la carta futura, con un Zelda del que ya se dijo que no estaría en el E3 hace unos meses, no ilusionó a la gente. El padre de Mario ofrece su visión al respecto del presente tema “para títulos de futuro, solo mostramos los juegos que aparecerán a principios del próximo año. Sabemos de las críticas de los fans: fallamos en sorprenderlos con nuevas propuestas”. Sin embargo, y como pensaba nuestro compañero Alberto Pastor tras acabar el pasado E3, Miyamoto piensa que los profesionales que visitaron el stand de Nintendo “quedaron satisfechos” con lo visto.
“Los otros desarrolladores de hardware, Sony y Microsoft, también tuvieron sus propios stands, y tengo la impresión general de que lo mostrado, no solo del presente año, también del próximo y del otro, por lo que muchas de esas muestras solo se podían hacer de forma visual, no jugable” criticó. Sobre la realidad virtual, expresa sus razonables dudas: “En el E3 había un montón de demostraciones de ensueño para elementos de formato y comercialización que todavía hoy son un misterio” y lamentó que “el software para esos dispositivos de realidad virtual no pueden ser jugados de forma simultánea por más de una persona”.
Miyamoto es consciente de la situación: “Reconocemos que hemos bajado el número de espectadores en línea en el E3 del presente año, sobre todo en el campo de los fanáticos de Nintendo por no mostrar lo que esperaban”.