Al menos estarán con nosotros cinco años, puede que algunas diez.
Aunque no es determinante ni mucho menos, el posible ciclo de vida de una consola es un dato importante a tener en cuenta que, junto a otros como su precio, potencia y características, puede influir en la decisión de compra de muchos usuarios. Por suerte, en el mundo consolero no sucede como con los ordenadores de sobremesa, cuyo ciclo vital es prácticamente de un año o año y medio aproximadamente, sino que al menos, suelen rondar los 4 o 5 años, o incluso 10 como la actual PlayStation 2.
Con la nueva generación de consolas no iba a ser menos, y si hacemos caso a las palabras provenientes de Sony, Microsoft o Nintendo, al menos estamos hablando de una cifra de cinco años.
Fils-Aime, presidente de Nintendo América comentó en una entrevista que su recién estrenada Nintendo Wii estará en el mercado al menos 4, 5 o 6 años, como es tradicional en cualquier consola. También es cierto que para el año que viene ya hay anunciada, de momento no en Europa, un rediseño de Wii que incluirá una unidad DVD “de serie”, aunque no es precisamente una nueva consola.
Por su parte, Microsoft y su Xbox 360 ya llevan un año en el mercado, y según palabras de Neil Thomson, director regional de Microsoft para el norte de Europa, el ciclo de vida estimado de Xbox 360 será mucho mayor que, por ejemplo, el de la Xbox original, cuyo tiempo de permanencia en el mercado fue de 4 años, por lo que podemos deducir que estará entre los 5 y 10 años.
Sony en cambio, ya anunció desde el principio en boca de Kaz Hirai, presidente de la división americana de Sony Computer Entertainment, que la vida de PlayStation 3 será de 10 años, poco más o menos como el de PlayStation 2.
La posibilidad actual de actualizar la consola a través de la red ampliando sus capacidades y mejorando las existentes, es una importante baza para prolongar su ciclo de vida, aunque siendo objetivos, una cosa son las previsiones y otra la realidad, siendo los juegos los verdaderos “culpables” de que una consola pueda disfrutar de más o menos tiempo de existencia. La experiencia nos dice que 5 años es un tiempo razonable para explotar las posibilidades tecnológicas de una máquina, pero también nos muestra que cada vez los jugadores queremos más y nos acostumbramos antes al salto tecnológico, ya sea referente a las consolas, a las nuevas tarjetas gráficas de PC, los procesadores o incluso a los periféricos de juego.