Guía de Watch Dogs: Delitos detectados

Los delitos en Watch Dogs son eventos secundarios (no confundir con situaciones aleatorias en las que alguien comete un delito de pronto), que ocurren por las calles de Chicago. En realidad son muy sencillos y se basan siempre en lo mismo: una persona apunto de cometer un delito a la que tienes que interceptar antes de que lo haga. Estos delitos se activan o se desbloquean (por decirlo de alguna manera), hackeando los teléfonos móviles de las personas de la ciudad. Si hackeas móviles, descubrirás conversaciones que dan pie a dichos delitos.

De hecho no tienes por qué acudir al delito inmediatamente una vez sale en pantalla. Puedes dejarlo para más adelante y ya te saltará en otra ocasión si en ese momento no quieres hacerlo. Cuando aparece en pantalla, puedes pulsar el botón inferior de la cruceta en el mando, y se te marcará la posición del delito. Al acudir a la zona, debes buscar con el analizador del móvil a la persona que esté apunto de cometer el delito. Se te marcará en color amarillo, y no puedes dejar que te vea, porque si no huirá y perderás la ocasión. Tienes que observar a la persona y esperar a que la barra de porcentaje suba hasta que cambie a color rojo (lo que suele ocurrir en torno al 70% u 80%). Una vez en color rojo, corre para incapacitar a la persona y que no cometa el delito en cuestión.

Si incapacitas a la persona cuerpo a cuerpo conseguirás más puntos de experiencia y mejor reputación que si la matas usando un arma de fuego. Como otras veces, tú decides cómo hacerlo. En el progreso del juego hay marcados un total de 20 delitos diferentes.