[CRÍTICA] Yuri!!! on Ice, uno de los animes más sonados del año pasado

Aquí tenéis otro de esos animes deportivos donde todo el mundo habla japonés, hasta un español nacido en Albacete usa palillos para comer, el público internacional se comporta como los asistentes de un concierto de idols, los deportistas hacen gestitos raros y son jóvenes andróginos de mirada intensa. Estamos, pues, ante otro spokon genérico que busca hacerse con el público femenino... ¿o no?

[b]Yuri!!! on Ice[/b] es una perfecta muestra de cómo se tienen que hacer las cosas si buscas destacar dentro de la industria del anime. A poco que estés metido en el mundillo habrás reparado en la existencia de esta serie, ya sea porque te la han comentado, por el ruido que genera su inmensa legión de fans o por su opening, que ha arrasado en Youtube. 

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[size=10]Personalidades de todas las edades del mundillo del patinaje han sucumbido a los encantos de Yuri!!! on Ice[/size][/center]
La obra es un hit cantado. Gran tema de apertura, un primer capítulo sorprendentemente bien animado, chicos guapos, tensión sexual masculina, buen ritmo... llega a aparecer antes y a lo largo del año supera en notoriedad a [b]Re:Zero[/b], pero por suerte para este último hablamos de un anime que debutó en Octubre y terminó hace nada, a finales de Diciembre.

Para opinar en profundidad sobre un anime que ha dado tanto de que hablar no me he limitado a ver el anime. En este caso he profundizado sobre su desarrollo, su recepción entre el público y lo que, según algunos, ha aportado a la industria (sí, Wikipedia). Dicho esto, toca analizar los diferentes apartados que conforman uno de los animes más sonados de 2016.

Como anime deportivo, [b]Yuri!!! on Ice[/b] empieza de forma bastante rompedora. El punto de partida no muestra a un joven con talentos especiales que empieza desde lo más bajo para finalmente alcanzar la cúspide de su disciplina, sino a un deportista curtido, parte de la élite, que fracasa estrepitosamente en el momento álgido de su carrera.

Sin embargo, esos poco convencionales primeros compases dan paso a un desarrollo algo más genérico (que algunos han calificado como "rompedor", pero ya comentaré eso más adelante), donde el protagonista, Yuri, acaba siendo entrenado por su ídolo, Victor, en una vorágine constante de ambigüedad sexual que hará las delicias de miles de féminas.

Esto lo digo porque, según numerosas fuentes, [b]Yuri!!! on Ice[/b] es el primer anime deportivo que muestra abiertamente una relación homosexual... y yo no lo veo así. Lo que muestra el anime es un coqueteo con el shonen-ai donde no se concretan realmente los sentimientos de los personajes y simplemente se busca dar a entender que "puede haber algo".

Es gracioso, porque si leéis declaraciones de los responsables en diferentes contextos (respondiendo críticas homófobas, aclarando escenas intencionalmente ambiguas) os daréis cuenta de que el anime ha sido concebido como un romance entre dos patinadores profesionales. Sin embargo, en el plano sentimental se siente como una serie de situaciones que se limitan a sugerir, que destacan una realidad que no se materializa en la trama (algo típico del fanservice femenino).

Lo que tenemos son escenas de tono evidentemente homosexual que no se traducen necesariamente en una relación. Momentos que en cualquier otro medio hubiesen dado paso a una relación amorosa aquí se quedan en terreno de nadie y no trascienden la anécdota. "¿Debería darte un beso?", ¿Debería ser tu novio? Creo que podría conseguirlo", "Usaremos anillos de compromiso como amuletos porque no se me ocurre nada mejor"... todo está abierto a la interpretación, todo puede traducirse en bromas insistentes o coincidencias descaradas.

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[size=10]La autora da a entender que fue un beso, pero la relación no cambia tanto como para indicar eso[/size][/center]
La evolución de la relación entre Yuri y Victor no avanza de manera natural, hay escenas sugerentes concretas (la menor parte) que soportan todo el peso del supuesto romance. Y es que las escenas del anime no se diferencian demasiado de lo visto en [b]Free![/b] y otros tantos animes donde los heterosexuales, por alguna razón, gustan de emular sentimientos o escenas gays.

Todo lo dicho anteriormente es una verdadera lástima, porque el dúo Yuri-Victor abordado desde una perspectiva amorosa da para mucho más. Como bien he dicho creo que el desarrollo de la relación es irregular y ambiguo, y aún así ha conseguido conmoverme en según qué momentos. Si se hubiesen centrado en desarrollar el romance con sinceridad en vez de darle un trato confuso y compaginándolo con fujoshit que no aporta nada, podría haber salido algo redondo.

El fanservice femenino no es que mejore el resultado, pero si algo tengo claro es que es un contrapunto justo entre la vorágine de culos y tetas con la que nos bombardean todas las temporadas. Entre tanto ecchi pedorro, un poco de desnudo masculino no hace daño (sobre todo si hablamos del culito respingón de Victor ).

El anime sabe crear un equilibrio entre lo deportivo y el desarrollo de personajes, que se retroalimentan mutuamente. Las competiciones dan lugar a diálogos internos que sopesan lo personal y en los momentos más distendidos desarrollan lo que veremos sobre el hielo. Para mí los números de patinaje de Yuri son lo mejor del anime, aportan más a su relación con Victor que toda las insinuaciones vacías del mundo (dando lugar también a los momentos más intensos de la serie).

No soy ningún amante del patinaje artístico, pero a veces lo sigo a través de la televisión francesa y creo que, si bien [b]Yuri!!! on Ice[/b] no profundiza en los aspectos técnicos de la disciplina, sí consigue reflejar con bastante acierto los dilemas y limitaciones de un patinador, así como los fundamentos más básicos.

Las cosas como son, el anime es predecible. Yuri se pone una meta, y sabes que, como en cualquier anime deportivo, necesita alcanzarla porque así es como se refleja su progreso, por lo que sería lógico pensar que el anime no transmite inquietud. Yuri pone el piloto automático a la hora de ascender, está claro, la manera con la que encadena éxitos se siente artificial y apresurada, pero eso no eclipsa la brillantez de algunos números.

Las emociones que tan torpemente se reflejaban en tierra firme sobre el hielo se tornan intensas, sinceras. Hay patinadores que piensan auténticas gilipolleces durante sus números, pero cuando hablamos de Yuri y de la reacción de Victor al contemplarlo la cosa se pone seria y es capaz de emocionar (el último capítulo me hizo gastar algún que otro clínex).

[center][size=10]Tres minutos en los que fui fujoshi[/size][/center]
Suspiro, conmovido, cuando veo que el esfuerzo de Yuri da sus frutos. Aprieto los dientes cuando falla un salto. Disfruto como un niño pensando qué será lo siguiente, porque aunque el final del camino es predecible ello no me impide dejarme llevar por el trayecto, y es que cuando el anime se pone los patines demuestra que es mucho más que fanservice y que los sentimientos del protagonista se viven más por sus gestos durante las competiciones que por los momentos mundanos.

Cabe mencionar también el peso que tiene Internet dentro del anime. Redes sociales, Youtube... [b]Yuri!!! on Ice[/b] hace un gran esfuerzo por demostrar las tendencias del mundo actual y dotarlas de sentido y coherencia dentro de la ficción que propone (aunque a veces se pasan un poco), hasta tal punto de que su historia no sería posible sin la presencia de la globalización.

La comedia no me hace ninguna gracia, es tremendamente básica y rompe con el tono en varias ocasiones, aunque a favor del anime debo decir que no empalagra ni se lleva demasiado protagonismo (y que se suele mezclar con el fanservice, por lo que está bien diferenciado y no se lleva otro porcentaje de la extensión de la serie).

En términos de animación no tengo mucho que decir. El primer capítulo tiene una animación alucinante, pero pega un bajón (un clásico lo de poner toda la carne en el asador al principio para captar la atención de la audiencia y, posteriormente, bajar el nivel) en el que destacan transiciones mucho menos fluidas y planos más conservadores y simples, aunque no deja de cumplir.

[center][size=10]El viejo truco de reciclar secuencias pasadas para ahorrar trabajo[/size][/center]
Se nota a kilómetros qué números de patinaje priorizan, descuidando al resto. Entiendo que animar un número de patinaje artístico lleva mucho tiempo dada la complejidad de los gestos y transiciones, pero claramente hay secuencias que pedían mayor mimo. En cualquier caso hay que ver muy poco anime para considerarlo el mejor animado del año.

Su apartado sonoro es incuestionable, un total y absoluto acierto. El [spoiler="opening"]
[/spoiler] es excelente, el [spoiler="ending"]
[/spoiler] es jodidamente adictivo, la BSO se encuentra a un gran nivel (cuenta con la participación de compositores del ámbito del patinaje). Destaco el [spoiler="tema homónimo"]
[/spoiler], muy conmovedor.

Las voces también están a un grandísimo nivel, pero necesito destacar a cierto reportero francés que me dejó mosca. Su voz estaba desincronizada y su labor parecía propia de un fandub. Me parece fantástico que contraten a un auténtico francés (su acento era impecable), pero coño: que le ponga algo de emoción.

Me gustaría que por un momento olvidaseis todo lo que he escrito anteriormente (si tenéis el síndrome del lector de 3Djuegos os será mucho más fácil, ya que posiblemente habréis empezado por aquí) y que os quedéis con lo que digo a continuación: incluso si eres de los que no se interesan por la temática que propone este anime, os lo recomiendo.

No es perfecto, ni siquiera lo catalogaría como un gran anime (está muy lejos de ser malo, ojo), pero creo que tiene algo especial capaz de conmover y una intensidad a la hora de transmitir emociones alucinante en determinados momentos. No es un anime para todo el mundo (parece mentira, dado su éxito), pero si te gusta el romance [b]Yuri!!! on Ice[/b] no te dejará indiferente.

Viene lo gordo. ¿Es uno de los mejores animes de 2016? Para mí sí, tanto por su calidad notable como por demérito del año pasado, cuyos animes tampoco es que fuesen la gran cosa. No está en el podio, pero desde luego si alguien me pide que le recomiende algún anime reciente, el que nos ocupa tendrá sus papeletas. Como siempre digo, una cosa es la nota con la que reflejo una valoración global y otra son las sensaciones que me produce una obra, y os aseguro que han sido buenas.

He sido muy duro con el anime al principio de la crítica, pero es que me frustra ver cómo deslucen un potencial gran romance con fanservice cutre y una ambigüedad que no le hace ningún bien a la serie. Espero que los responsables de la hipotética segunda temporada aborden la relación de los protagonistas con más seriedad, el anime lo merece.

[b][color=red]Lo mejor:[/color][/b]

[list][*] Intenso y conmovedor por momentos.

[*] Buen ritmo, no te suelta.

[*] La relación entre Victor y Yuri engancha y tiene mucho potencial.

[*] La animación es muy digna y a veces sorprende.

[*] Gran BSO, combina muy bien con el anime.

[*] Buen spokon en términos generales, con un interesante punto de partida.[/list]

[b][color=red]Lo peor:[/color][/b]

[list][*] La animación pega un bajón tras el primer capítulo y prioriza demasiado ciertos momentos.

[*] Es tremendamente predecible.

[*] El ascenso de Yuri es muy apresurado, le ves triunfando en tres países distintos de un capítulo a otro.

[*] La ambigüedad sexual desluce la relación entre los protagonistas.

[*] Hay mucho secundario de mierda.[/list]

Yuri on Ice, Crítica, Reseña, Review y Anime