Brothers: A Tale of Two Sons: El análisis de los lectores

Peddro19256Hace 6 años1

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
7
Una reseña más - Brothers: A Tale of Two Sons.
Brothers: A Tale of Two Sons es un videojuego de desarrollo independiente llevado a cabo por StarBreeze Studios en asociación con 505 Games, empresa encargada de ser distribuidora del producto publicado en el año 2013 en las plataformas de PlayStation 3, Xbox 360 y PC, arribando dos años después a consolas de nueva generación e inclusive a sistemas operativos de teléfonos móviles, como Android e iOS.
Particularmente conocido por ser dirigido por Josef Fares, director de cine que trabajó en películas que no han logrado un gran éxito, y personaje del cual últimamente se ha hablado mucho ya que en los pasados The Game Awards 2017 protagonizó el escándalo de aquella noche en Los Ángeles, tras haber menospreciado la entrega de los Oscars cuando se le dio la oportunidad de pronunciar unas palabras después de que su actual videojuego, A Way Out, aún en desarrollo, haya sido expuesto en la gala nuevamente tras su primera aparición durante el E3 del mismo año, siendo una esperada aventura cooperativa.
Si bien es un dato meramente curioso y de color me parecía interesante de resaltar, además de que durante la producción de Brothers: A Tale of Two Sons este hombre se encargó de vender su producto como un título que innovaría el catálogo de aquel entonces con sus mecánicas jugables y que se desenvolvería en "una especie de cuento de hadas", donde la historia tendría un peso fundamental en la valoración general de la obra. Tras haberme pasado el título puedo adelantar que a nivel de jugabilidad sí representa un soplo de aire fresco pero, a diferencia de muchas otras personas, para mí sabe a bastante poco dada su simpleza. Con respecto al argumento, es clarísimamente el punto fuerte del videojuego y el eje del mismo, pero en lo personal no llegó a impactarme tanto como quizás debió haberlo hecho. Por supuesto, todo esto lo explicaré conforme vayamos avanzando en el análisis.
Brothers: A Tale of Two Sons es una obra que no está hecha para todo el mundo, sino para aquellos que quieran disfrutar de una bonita experiencia de simples puzzles y plataformas, donde la linealidad propia de cada escenario, todos de magnífico diseño artístico, es la mejor manera que ha encontrado el estudio para desarrollar una trama y narrativa directas, mientras el resto de apartados prácticamente giran alrededor de estos dos últimos puntos. Estamos ante una historia dramática que se desarrolla mediante una jugabilidad ingeniosa, que tiene mucho más para dar.
Procedo a analizar este videojuego desde un punto de vista bastante frío, más que nada en comparación a otros análisis que he visto del mismo. Aun así, considero que Brothers: A Tale of Two Sons es una experiencia que vale la pena probar, disponible a un bajo precio en todas las plataformas.

Con respecto a su apartado gráfico es, simplemente, impecable. Todo el mundo de la obra de StarBreeze Studios se encuentra ambientado en una época medieval, dentro de un mundo de fantasía bellísimo. Si bien a nivel de texturas no estamos ante un gran portento gráfico, el diseño artístico y el mimo con el que cada escenario fue trabajado hasta el más mínimo detalle hace que el videojuego no necesite de nada más para verse tan bien como lo hace. Además, cada uno de los mismos es muy diferente al anterior, variedad que se agradece.
Es de resaltar que, aunque haya paisajes hermosos, nunca nos podremos desprender de ese sentimiento de melancolía que trasmiten las circunstancias por las que estos hermanos están pasando, lo cual suma muchos puntos a la inmersión del jugador dentro del mundo perteneciente al título.
Particularmente me gustó que en prácticamente todo momento el videojuego luzca su hermoso dibujado, haciéndonos pasar por lugares en los que podemos contemplar parajes increíbles y observar básicamente todo el escenario que aún nos queda por recorrer, con lo cual todo lo que vemos serán secciones que después deberemos atravesar. Todo esto podría resumirse diciendo que el título nos regala muy frecuentemente un fondo de pantalla genial, inclusive de un mismo fondo visto de distintas maneras, que igualmente sigue demostrando un resultado precioso.
A nivel sonoro encuentro un resultado bastante llano, sin mayores picos de calidad. Aun así, la música guarda cierta armonía con el entorno que nos rodea, cosa que nuevamente favorece a que nos sigamos metiendo en la atmósfera que StarBreeze Studios ha querido crear. Si bien pareciese que no busca tener mucha incidencia a lo largo de la aventura, sí es verdad que en momentos clave de la campaña encontramos las mejores pistas de audio, aunque son muy fugaces. Durante el resto de la experiencia habrá una ligera melodía combinada con escasos efectos de sonido, aunque bien implementados.
En mi opinión, hubiese sido fantástico que la banda sonora se haga sentir más en lo que envuelve al apartado técnico, ya que si bien como dije antes no es un factor que entorpezca al título, sí me dejó una sensación de insuficiencia.
Eso sí, el videojuego trae consigo todos los temas que fueron parte de su desarrollo, donde encontramos gran calidad. Sin embargo, es una opción que no forma parte del gameplay.
El juego, por supuesto, se mueve a 1080p y 60fps más que estableces, sin presencia de errores. Pulidísimo a nivel visual, siendo poseedor de un diseño artístico envidiable e importante y satisfactoria variedad de escenarios, y con un resultado justito en lo sonoro, Brothers: A Tale of Two Sons resulta un título que logra sumergirnos en todo momento en una historia de la que hablaré a continuación.

Como venía diciendo, la historia de Brothers: A Tale of Two Sons es lo más conmovedor del conjunto y la razón de ser del mismo. Hay varios puntos que analizar alrededor de la misma, como algún acontecimiento más que extraño y una narrativa original. Sin hacer demasiado spoiler, procedo a explicar resumidamente el argumento del videojuego que ya de por sí es bastante simple, y se puede entender perfectamente en la primera cinemática que da comienzo al modo campaña.
Brothers: A Tale of Two Sons nos cuenta la dramática, triste y melancólica historia de dos hermanos que pierden a su madre en un viaje en barco, la cual muere ahogada a ojos del hermano menor, que no pudo hacer nada para salvarla. Los chicos, por ende, se van a vivir solos con su padre a una pintoresca pero sin embargo humilde aldea. Allí, al cabo de un tiempo el padre de los niños se enferma gravemente y deben llevarlo a un médico, que les dice que la única cura es un líquido extraíble de un árbol mágico, cuyo camino para llegar a él es muy largo y lleno de peligros. Lógicamente, nuestros dos protagonistas se embarcan en una aventura llena de desgracias, con el fin de no perder al último eslabón de su familia.
La totalidad del título se desarrolla bajo un lenguaje ficticio, por lo que comprenderemos a cada personaje que nos vayamos encontrando a través de gestos, señas y expresiones. Sin embargo, más allá de los dos hermanos no existen claros protagonistas, sino seres que los ayudarán a superar ciertas dificultades de manera transitoria, pero ninguno es completamente de fiar en un principio. Si bien podemos tomar cariño con alguno, las dramáticas circunstancias que rodean al jugador hacen que permanentemente viva la sensación de que algo malo va a ocurrir, que ese personaje que nos está dando una mano tendrá un destino fatal, entre otros. Para mí ese es uno de los grandes aciertos de la trama, tendremos siempre la impresión de que la única persona en la que un hermano puede confiar es en su otro hermano, el resto de personajes nos despertarán cierta inseguridad que junto al diseño de algunos escenarios añadirán una incomodidad para el jugador que en mi opinión crea una inmersión buenísima, sintiéndonos bajo alerta al ir acompañados pero con la necesidad de dejar ese sentimiento de lado porque hay una vida en juego. Esto mismo es plasmado por nuestros dos protagonistas, aunque de vez en cuando se crean situaciones en las que no se ponen de acuerdo y existen pequeñas discusiones entre los mismos, lo cual es uno de los factores que hace a la distinguible personalidad de cada uno, siendo el hermano mayor el que suele ir más al frente, mientras que el menor suele ser más tímido y precavido.
Y, hablando de los dos personajes principales, el juego nos muestra cada tanto cómo cada uno asimila la muerte de su madre, y la enfermedad de su padre. El más pequeño siente una irremediable culpa por no haber podido rescatar a su madre en aquella tragedia, y muchas veces la ve a través de un espectro que intenta abrazar pero nunca lo logra, cosa que lo llena de fuerzas para seguir con su aventura y conservar a su padre, pero a su vez lo mata por dentro. Por su parte, el hermano mayor es quien asume la mayor responsabilidad y necesita mostrarse convencido de sí mismo para trasmitir seguridad a su compañero, además de protegerlo incondicionalmente. Aun así, cada tanto suele volver al pasado y recordar cómo todo antes era mejor, pero hace el mayor esfuerzo para reprimir esas sensaciones y seguir adelante.
Este me pareció otro punto acertado, el hecho de que cada protagonista sea diferenciado del otro también por su manera de ser, pero que ambos compartan un sentido de compañerismo y valentía admirable. Lamentablemente, lo de controlar a los dos hermanos, uno con cada joystick, hace que difícilmente empaticemos con ellos, cosa que StarBreeze Studios no ha sabido lograr en mi opinión. Terminamos sintiendo la existencia de estos dos personajes como una mera herramienta para resolver los puzzles y plataformas que se ponen en nuestro camino, y aunque la historia nos sitúa ante hechos realmente dramáticos, nunca llegamos a preocuparnos del todo por alguno de los protagonistas. Además, más allá de la unión evidente entre ellos, el videojuego nos pone en muy pocas situaciones jugables que desarrollen esta mutua solidaridad, cosa que de haber sido implementada con mayor énfasis y frecuencia hubiese sido un gran acierto.
Con respecto a la narrativa, la misma se desarrolla a través de los escenarios, ya que el título cuenta con muy pocas cinemáticas que además, son de corta duración.
Los escenarios, como ya dije antes, son muy variados y al relacionarlos con la historia, también crean una propia. Cada ambiente, con su simple visualización, cuenta la trama general del videojuego y también, qué está pasando en ese lugar o qué ha pasado. Sentimos que estamos en sitios llenos de vida, que no son simples escenografías para el desenvolvimiento de la jugabilidad ni muchísimo menos, y además de su gran diseño artístico nos interesará saber qué nos quiere trasmitir, cuestión que se me hizo más que agradable, ya que nuevamente la ambientación en todos sus aspectos está muy bien conseguida.
Sin embargo, los niveles a veces no tienen nada que ver. Me explico, prácticamente no existe armonía entre un escenario y otro, lo cual a veces nos saca un poco de la experiencia pero, a su vez, será muy difícil que nos demos cuenta evidentemente de este detalle, por lo que tampoco lo voy a tomar como un punto negativo.
Como podemos ver, Brothers: A Tale of Two Sons tiene una de sus principales virtudes en la historia, que se complementa muy bien con los tramos que el jugador deberá atravesar para llegar a su desenlace, creando una narrativa original y entretenida, pero que bajo mi punto de vista no representa nada nuevo para la industria.
Si bien trama, argumento y narrativa de Brothers: A Tale of Two Sons son aspectos muy bien trabajados de una historia llena de dramatismo, bajo mi punto de vista no logra un mayor impacto en el jugador. Principal causa de este hecho la encuentro en la falta de empatía con los personajes que aun así son entrañables, y con un giro argumental que no me quedó de terminar muy claro. Pero, globalmente, creo que lo que el videojuego nos quiere contar es muy bonito, y sin lugar a dudas vale la pena jugar. Recordá que esto no es más que una opinión personal, y creeme que es mucho más probable que la historia toque tus sentidos más sensibles a que sientas cierta indiferencia, cosa que me ocurrió a mí.

La jugabilidad de Brothers: A Tale of Two Sons es otro de los aspectos por los que el videojuego llama la atención, y en cierta forma logra innovar con un sistema de mecánicas poco frecuente, a la vez que muy sencillas.
¿Cómo jugamos al título? Con el analógico derecho del joystick manejaremos al hermano menor, y con el izquierdo, al mayor. Al pulsar RT interactuaremos con el hermano menor, y al presionar LT, con el menor. No hay más que explicar con respecto a los controles, literalmente nos pasaremos el modo campaña utilizando tan solo cuatro botones, simplicidad que si bien está implementada con éxito, en lo personal me dejó cierto "sabor a poco", porque creo que esta metodología de juego se pudo haber explotado bastante más añadiendo mayor número de opciones, deseo que mantendré en una hipotética segunda entrega. Sin embargo, puesto en práctica puede resultar un poco complicado y torpe el manejo de los dos hermanos, es probable que nos confundamos de analógico al querer desplazar a uno u otro sobre el escenario, pero lejos de disgustarme me pareció una lógica consecuencia de las mecánicas que la obra de StarBreeze Studios propone al jugador.
Como mencioné anteriormente, estamos ante una experiencia de puzzles y plataformas. Por su parte, los acertijos resultan ingeniosos, muy variados y entretenidos de realizar, ya que para muchos tendremos que llevar a cabo diversas acciones con ambos hermanos, tanto por separado como en conjunto, que prácticamente nunca se repiten, lo cual se agradece. Lamentablemente, el único punto negativo que les encontré fue su gran sencillez. A través de esta facilidad comprendemos que el videojuego no quiere que nos rompamos la cabeza o estemos mucho tiempo en un mismo lugar pensando cómo avanzar, sino que su intención es ponernos las cosas de manera tal que no resulte ni el más mínimo desafío, con el fin de contarnos su historia. Esto último es una decisión perfectamente entendible e incluso necesaria para el desarrollo de la idea de Josef Fares, pero creo que los rompecabezas podrían ser más difíciles, tan solo un poco, aunque nuevamente repito que, por cómo el título está pensando en general, es comprensible que no sea así.
Hablando de las plataformas, primero cabe destacar que se encuentran en mucha menor medida que los puzzles, y que prácticamente no comparten ninguna de las virtudes de estos últimos.
Estamos ante secciones jugables que se hacen muy repetitivas y aburridas, más allá de algún momento puntual del modo historia. Siempre constarán de agarrarnos de una cornisa, desplazarnos hasta otra plataforma, saltar de una plataforma a otra y etcétera. Si bien no resulta insoportable por la belleza de los escenarios, aquí no existe ni la más mínima dificultad porque la mayoría de saltos se realizan de manera automática, cosa que hace al plataformeo un camino recto, llano, y sin sobresalto alguno. Sería un extra importantísimo para la jugabilidad que este aspecto logre perfeccionarse aún más, porque es en estos momentos donde el jugador se da cuenta que está ante un videojuego sumamente "pasillero" en todos los sentidos que, con respecto a las plataformas, resulta aburrido. Estamos ante el que es, bajo mi punto de vista, la principal desventaja del título.
Otro detalle que creo trascendente en el análisis de este buen (y recalco, "buen") videojuego, es la duración del modo campaña. Claramente es dependiendo de cada quien, pero no va más allá de las cuatro horas. En lo personal, lo completé en la mitad de ese tiempo. Además, si bien es una linda experiencia no deja de ser un título que, tras ver los créditos, no incita para nada a la rejugabilidad, aunque podemos escoger el capítulo que queramos una vez completado, para volver a hacerlo. Cabe destacar también que no hay presencia de misiones secundarias (más allá de alguna ínfima excepción), ni coleccionables que recoger.

En lo que respecta a modos de juego, evidentemente solo contamos con el modo de un jugador, sin la posibilidad de un juego online ni multijugador, lamentablemente, de ningún tipo. Y tampoco contamos con "extras" más allá de la banda sonora completa que viene incluida con la compra del título, además de los bocetos con los que esta obra fue pensada en un principio.
Cabe destacar que Brothers: A Tale of Two Sons no cuenta con contenido descargable extra, ni de pago ni gratuito, por lo que obtendremos la totalidad del mismo con una única compra que será barata y además bastante rentable, por supuesto.

Brothers: A Tale of Two Sons terminó por parecerme un videojuego muy interesante pero sobre todo, emotivo. En todo momento busca tocar la fibra sensible del jugador y en más de una ocasión por supuesto que lo logra, aunque en mi caso no con la suficiente intensidad.
Poseedor de una jugabilidad ingeniosa y divertida, logra variados y entretenidos puzzles, pero falla muchísimo a la hora de abocarse a las plataformas. El sistema de mecánicas en general está bien implementado pero sigue siendo muy explotable todavía, por lo que tengo confianza de que StarBreeze Studios seguirá explorando en las vastas posibilidades del mismo.
Encuentra su mayor virtud en la historia, que se complementa perfectamente con los imponentes escenarios que atravesamos en toda nuestra acotada aventura, de excepcional diseño artístico pulido hasta el más mínimo detalle. En general, el apartado técnico logra una decente ambientación.
Recomiendo Brothers: A Tale of Two Sons por todo lo que redacté en este análisis, y ojalá sea la antesala a muchas otras obras que perfeccionen las ideas vistas en este videojuego que, aquel que sea sensible, lo deberá jugar con un par de pañuelos al lado. Muy bonito, muy, pero verde. Igualmente disfrutable.
¡Muy feliz 2018 para todos!
EDITADO EL 03-08-2019 / 20:14 (EDITADO 1 VEZ)

Edo2269225350Hace 3 años2

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
9
Corto pero intenso
Gran juego que todo amante de los videojuegos debería probar.
El juego en si es bastante corto pero eso no quita para que sea altamente disfrutable.
Mezcla plataformas con puzzles bastantes sencillos, la ambientacion, la musica y  los graficos estan a gran altura. Si no le doy mas nota es para la duracion pero merece la pena jugarle.
El final te queda tocado pero claro no todo en la vida es felicidad y color de rosa....

Nam-Ek2518Hace 3 años3

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
8
 Cuentística de hermandad 
Brothers: A Tale of Two Sons es un juego independiente pero profundamente emocional. Nos relata la Historia de dos hermanos que deben emprender un viaje a través de un entorno mágico, que cuenta con todos los matices de un cuento de hadas; una estética más bien medieval y fantasiosa; pequeñas aldeas, grandes montañas, páramos grises, amplios glaciares; mundo mágico de humanos que hablan una extraña lengua, y de orcos gigantes que habitan una tierra de fantasía, repleta de un aire de cuentística infantil. Gráficamente es un juego bastante modesto, comprensible por el corto presupuesto de la desarrolladora, pero artísticamente es precioso; los escenarios son variados y su diseño es muy lindo estéticamente. El juego tiene el tono de un dibujado caricaturesco, tanto de los personajes como los entornos que vamos recorriendo. 
 La Historia que relata el juego me gustó mucho. No tiene demasiadas complejidades, por qué de hecho los personajes no hablan un idioma comprensible. Esto no es un punto negativo, sino por el contrario; los autores transmiten una historia con un mensaje profundo sin la necesidad de emitir una palabra. Por supuesto que el desarrollo es lineal; el viaje de los niños hacia el árbol de la vida. A lo largo del título, podemos sentir una conexión con los dos hermanos, particularmente como se gesta la relación entre ellos. El juego transmite un claro mensaje que se aprecia hacia el final de la obra; un desenlace bastante triste pero conmovedor. Como cada cuento, todo parece revestirse de un aire inocente e infantil, pero en realidad nos deja una enseñanza reflexiva, qué incluso, si leen las entrevistas del Director del título, tiene un latente sentido personal (las vivencias de una horrible guerra civil, y el profundo significado de la hermandad)
 La breve Historia se ve acompañada por un soundtrack muy lindo, una composición orquestal con un tono triste e incluso trágico, aunque por momentos se vuelve más trepidante. La melodía principal se compone de una presencia coral que imprime una línea distintiva a las escenas más emotivas e importantes del juego. En este sentido, hay un trabajo sonoro dedicado que otorga al juego de una marca autoral distintiva.
 En tanto a lo más importante, la jugabilidad, he de decir que es divertida e ingeniosa. El juego en sí es de puro plataformeo, pero con la innovación de que aquí manejamos a dos personajes en simultáneo; un hermano con el stick izquierdo, y el otro con el derecho. Se trata, por lo tanto, de una historia individual pero bajo una experiencia cooperativa. De este dualismo surgen escenas innovadoras y con mecánicas bastante ingeniosas, que requieren de la necesaria cooperación entre los dos personajes. La unión de los hermanos no es en definitiva sólo a nivel Historia, sino también en lo jugable. El recorrido se hace muy divertido aunque breve; el juego no supone ningún tipo de dificultad. Todas las escenas se resuelven muy fácilmente, incluso las que nos enfrentamos a enemigos. Quizás en algún que otro lugar tengamos que pensar un poco la interacción con el entorno, por que no se hace tan evidente, pero tampoco es que tengamos que hacer frente a puzzles o acertijos; sino encontrar cómo funciona la mecánica para seguir avanzando en el escenario. 

 En CONCLUSIÓN. Recomiendo ampliamente Brothers: A Tale of Two Sons. Es un trabajo pequeño pero que merece una oportunidad; jugabilidad ingeniosa, historia intrigante, y apartado artístico fenomenal, tanto por el soundtrack como por la ambientación de "Fairy Tale" que el juego nos otorga. A pesar de ello, es notorio que estamos ante un producto independiente; gráficamente no es notable, por momentos se vuelve algo tosco, y la experiencia de juego es MUY breve, quizás demasiado corta. No es la mejor aventura que alguna vez jugué, pero la conservo como una experiencia notable.