Red Dead Redemption 2: *Pequeño spoiler* Crónicas de Arthur #01

Alcé la mirada al cielo. Era una bonita y cálida noche estrellada. La luna llena arrojaba una luz clara sobre la pequeña casa de madera. El viento arrancaba de las hojas del bosque un susurro continuo, casi tranquilizador.

Hacía unos días que me había tropezado con un preso fugado. Llevaba grilletes y estaba en un estado lamentable. Aún no sé por qué le ayudé a liberarse. Quizá me vi reflejado en él, y pensé que podría ser yo. La cuestión es que me dio un soplo. Sólo era un rumor sobre una casa al sur de Rhodes, en el bosque. Parece que podía encontrar un buen botín allí. ¿Qué diantres? ¿Por qué no? No perdía nada si lo comprobaba.

Y allí estaba, observando si había movimiento. Llevaba un rato moviéndome alrededor de la casa, cuando oí un fuerte gruñido a mi derecha, acercándose rápidamente. Intenté volverme al tiempo que echaba mano de mi Schofield, pero un fuerte golpe en las costillas me tiró al suelo dejándome sin respiración.

Rodé varias veces sobre mí mismo, tratando de alejarme. Trastabillando, conseguí hincar una rodilla y sacar mi segundo revólver, apuntando en todas direcciones desorientado. Una sombra oscura 
despareció entre los arbustos, con unos característicos gruñidos.

Me puse en pie, sacudiéndome la ropa. Recogí mi sombrero con una sonrisa en mis labios. Puñetero jabalí. ¡Menudo susto, el cabronazo! Jajaja.

Este juego se hace aún más grande por detalles como este.