Ori and the Will of the Wisps: El análisis de los lectores

Tolki74Hace 4 años1

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
10
Una obra maestra
Moon studio  demostró saber cómo superarse así mismo, el primero fue una obra magistral y el segundo rosa la perfección, diseño, narrativa, música y jugabilidad se combinan en una evolución impecable de una fórmula que ya era casi imposible de insuperar... imprescindible!!!!

Es la mezcla perfecta de súper metroid y castlevania symphony of the night pero manifestando su propia identidad, una historia con alma, nostalgia y espiritualidad que es posible que a nivel d guionista y estética vaya más allá de sus 2 inspiraciones del pasado.

Aikidoka905Hace 4 años2

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
10
Puro arte
Si el primer juego era un continuo desborde de arte audiovisual, con unos escenarios preciosos que quitan el hipo y una banda sonora que emociona cada minuto del juego sin hacerse repetitiva en ningún momento, esta secuela continua ese legado.

Pero a todo esto se suman mejoras y cambios en la jugabilidad, ahora más orientado al combate, que cambian la experiencia para no parecer un simple DLC de la primera parte.

No le he visto ni un solo fallo. Solo espero que Microsoft no tarde otros 5 años en el siguiente.

Juanmiguelo253Hace 4 años3

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
8,5
La luz siempre prevalecerá. 
La emocionante aventura entre los árboles empieza con un inicio inocente y emocional, pero tan pausado como el anterior. En un lejano lugar donde reina la calma y en el cual solo oímos el suave movimiento de las hojas empieza una nueva aventura para Ori. En 'Ori and the Will of the Wisps' dejamos por el momento a un lado sus aventuras con Naru para volcarnos de lleno en su nueva y alada compañera, la hija de Kuro, en el primer vuelo de la misma. Aunque no siempre el primer vuelo resulta sencillo y satisfactorio. La pequeña junto a Ori acaban envueltos en una terrible tormenta que los deja en algún lugar lejano del bosque.

Remarcando un ámbito continuista que se extiende a lo largo de todo el juego (en el mejor de los sentidos), 'Ori and the Will of the Wisps' convierte su historia en todo un tributo al inicio de su predecesor, partiendo de puntos similares y trazando una evolución que sigue de cerca los pasos que dimos junto a Ori en su primera aventura. Un bosque ajeno a la luz de los espíritus, que ha perdido su corazón y fuerza, siendo devorado por la oscuridad y sirviendo de perfecto escenario para que nuestro protagonista pueda poner a prueba sus habilidades sin romper la coherencia argumental del mismo. Así es como partimos a la nueva aventura. Porque 'Ori and the Will of the Wisps' es, ante todo, un título capaz de recuperar toda la esencia del trabajo de Moon Studios para volver con un imaginario renovado y un abanico de cambios muy notables que, sin embargo, no dejan de sentirse y respirarse como 'Ori'.

Un punto que se nota especialmente al poco de empezar a movernos por este nuevo paraje de ensueño que se ha visto abandonado por la bendición de los espíritus y devastado por la Podredumbre. Lo hacemos con la obtención de nuestra primera arma espiritual, una hoja de luz que se convierte en una de las principales columnas mecánicas de la obra. Y es que se hace notar el hecho de que sus desarrolladores hayan tomado nota tanto del feedback de su anterior entrega como de otros títulos del género a través de un sistema que se ha refinado y potenciado en todos los sentidos.

El más notable, quizás, es el combate, que se presenta como algo mucho más integrado en el juego. Más allá de las posibilidades que nos daba el orbe de luz en 'Ori and the Blind Forest', ahora nos encontramos un sistema que casa más con las ideas del juego, convirtiéndose en una herramienta constante, mucho más rápida y fluida y que suma al concepto general de kinestesia.

Algo que también aporta mucho al sentido más narrativo del juego, mostrando un Ori más fuerte y capaz, que ahora se atreve a empuñar armas, como la citada hoja de luz o el arco en vez de depender de otros. Por supuesto, esto también implica que los enemigos pasen a jugar un papel mucho más importante en el reto del juego, mimetizándose con el resto de mecánicas presentes y suponiendo nuevos retos constantes, con la adición de nuevos movimientos y cambios que nos pondrán contra la cuerdas una y otra vez. Contaremos incluso con retos especiales diseñados únicamente para poner a prueba nuestras habilidades.

Con todo, y como decíamos, 'Ori and the Will of the Wisps' queda lejos de suponerse como un título totalmente innovador. Y es que sus desarrolladores apuestan fuertemente por la nostalgia y los elementos que lanzaron al estrellato a su obra original para ofrecernos un tándem que, si bien muestra múltiples cambios, también se aferra a sus conceptos más clásicos.

Pese a no ser las únicas protagonistas en esta nueva entrega, no faltarán las plataformas, que siguen ocupando la mayor parte del espacio del título y se conciben como algo incluso más orgánico y natural, expandiendo sus límites y dando paso a auténticos laberintos que se extienden a lo ancho y largo de un mundo enorme y que deberemos ir explorando poco a poco, según vayamos obteniendo nuevas habilidades.

Así el juego potencia constantemente el backtracking, abriendo caminos donde no los había antes y ofreciendo nuevas posibilidades que nos permiten redescubrir todo su mundo a través de constantes sorpresas. No solo eso, ya que además contaremos con un amplio abanico de habilidades activas (algunas ya conocidas, otras nuevas) y pasivas que nos harán nuestro paso por su mundo, si no más simple, mucho más fluido y divertido. Algo a lo que hay que añadir la valiosa decisión de estructurar su sistema de guardado a través de puntos de control, aunque eso no vaya a evitarnos morir más veces de las que podamos imaginar.

Pese a que el continuismo de 'Ori and the Will of the Wisps' se palpa en cada uno de sus puntos, lo cierto es que la nueva aventura cuenta con un factor nostálgico que recupera toda su magia y la eleva al cuadrado. El trabajo audiovisual que se esconde tras el título sigue siendo su mayor proeza, repleta de pequeños detalles, de juegos de luces y sombras o efectos de partículas que se ven acompañadas por la maestría de Gareth Coker y una composición musical capaz de robar el aliento y que van mucho más allá de suponerse como un simple trasfondo.

Un baile, mano a mano, entre su apartado artístico y musical que sirven como hilo narrativo, acompañado solo en momentos puntuales por la aparición de NPCs o la aparición del narrador para dar el más mínimo contexto a la obra. Pues el resto, sin necesidad de voces o historias, se ve constantemente narrado por los efectos de un apartado audiovisual sublime, bañado en magia y perlado de pequeñas novedades incapaces de dejar a nadie indiferente. Incluso así, la imaginación del jugador sigue siendo un punto importante en su elaboración narrativa, así como la aparición, ya comentada, de estos personajes no jugables, que ayudan a ofrecer nuevos matices e historias que quedan ocultas entre las ramas de estos árboles milenarios, solo al alcance de quien las busca y persigue su hilo, expuesto en forma de misiones secundarias.

'Ori and the Will of the Wisps' cumple con todo lo esperado como uno de los títulos abanderados por la gente de Microsoft para este año 2020. Hablamos de una entrega que toma tanto como puede de su obra original y, aunque puede resultar poco rompedora, consigue emocionarnos tal y como lo hizo cinco años atrás. Sus cambios son notables a cada paso que damos, destacando la fluidez de sus movimientos. Nos encontramos, sin duda, ante uno de los grandes lanzamientos del año. Una obra mágica y emocionante se mire por donde se mire, que se erige sobre sus raíces, mejorando sus puntos débiles y explotando los fuertes a través de una nueva forma de entender y jugar 'Ori'. Una nueva forma de vivir sus aventuras y emocionarnos a través de su historia tan sencilla como mágica.

Alrayes118Hace 4 años4

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
8,5
Ori, una historia como no habra otra igual
Después de terminarlo y haberle dedicado 14 Horas, os paso a contar mi valoración

Puntos positivos:
-Artisticamente es una obra maestra
-El plataformeo y el salto no podía ser mas divertido
-La historia emotiva con momentos que no olvidaras
-Pocos Bosses pero de una calidad pasmosa

Puntos Negativos
-La rueda de habilidades el quita ligereza al gameplay
-El combate con los minions es algo de relleno, con mucho menos habría sido mas agradecido el juego
-Bugs sonoros que molestan sobretodo cuando es tan bonita la banda sonora
-Han suprimido la mecánica de guardar en el momento que quisieras y para mi es algo que ha perdido, en los momentos de plataformeo mas complicados viene bien poder guardar para no tener que repetir todo el proceso.


Un bonito juego, que aunque no es perfecto y ni siquiera llegar a ser tan buen como el primero en algunos conceptos, es muy recomendable y un juego que todo el mundo deberia jugar si le gustan los plataformas o los metroidvania.

KMCM12Hace 3 años5

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
9
Majestuoso¡
Títulos como este demuestra que los juegos en scroll horizontal están más vivos que nunca. Parece que hay una gran hornada de grandes títulos, brillantes graficamente, incluyendo títulos pixel art, que están satisfaciendo las expectativas de los jugones astiados de mundos abiertos en el que la acción se concentra a pantalla completa y frenético, como los antiguos arcades de los 90. Ori aunque ofrece una experiencia de juego más pausada, llena de dificultad, con mundos enormes pero sin que pierdas el sentido de la orientación, y visualmente digno de ser jugado, recomendado para los más peques de la casa, que trata la historia de amistad entre un buho y nuestro protagonista que por un accidente se pierden y quedan a su suerte. Jugabilidad increible, muy fácil de manejar al personaje que responde en todo momento a los mandos, adquiriendo nuevas habilidades mediante power ups. La música entona con el juego, melodías muy dulces sin sobresaltos. Graficamente es de lo mejor, una paleta de colores muy variada, desde entornos más oscuros a más luminosos. Este arcade plataformas es un título indispensable, que mejora al anterior. Lástima que tiene algunos bugs, aunque se lanzó una actualización que no sé si ha corregido todos los fallos. En mi caso sufrí el bugs de que la pantalla se puso negra, se veía el hud y sonaba la musica y los fx pero no se veía el escenario ni personajes.

Kalas51192929Hace 3 años6

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
9
Analisis Ori and the Will of the Wisps
Jugabilidad:	
Brillante. Igual que su precuela, Ori es un juego de plataformas de estilo Metroidvania con un excelentísimo nivel de detalle y un diseño de niveles espectacular.  Quizás el mapa me gustó más el original, por la manera de recorrerlo y de acceder a cada zona, pero en este juego sigue siendo maravilloso.

Gráficos:	
Mejorados respecto a la versión anterior. Con un nivel de detalle superior.

Sonido:	
De nuevo, la banda sonora es delicada y dulce. Una maravilla.

Innovación:
En esta nueva entrega han añadido más poderes, carreras a contrarreloj, combates contra jefes y algún coleccionable más. Lo que te da muchas más posibilidades jugables y profundidad estrategica en el momento de moverte por el mapa y enfrentarte a los enemigos.

Bonus:
La historia. No solo esta al nivel de la anterior entrega, si no que en los compases finales llega a brillar de una manera que te dejará alucinado, incluso sin pronunciar ni una palabra.

ZeikerPc74Hace 3 años7

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
10
Análisis Ori and the Will of the Wisps
Nota real: 5 estrellas
Duración: mas de 14 horas para el 96% en normal con mas de 200 muertes

Es muy gratificante ver como una secuela mejora a su predecesor en prácticamente todos sus aspectos. Esto es lo que pasa aquí ya que "ori 2" supera en todo al anterior y convierte al que era una gran juego, en uno excelente y en uno de los mejores metroidvanias que hay.

Empezando por la jugabilidad. El plataformeo sigue siendo excelente y mas aun ahora gracias a tener el dash desde un comienzo, el triple salto mas fácilmente y nuevas habilidades como el lazo espiritual, el deslizamiento en arena y agua, etc. El combate por otro lado cambia radicalmente y pasa de ser un añadido insípido a uno de los pilares del juego. Es mas entretenido, mas directo y mas variado, y la mayor variedad de enemigos no hace mas que amplificar la increíble mejora que supone. La disponibilidad de diferentes armas y golpes hace que nos preocupemos por el combate y que tengamos ganas de utilizarlo, sobre todo en los santuarios de desafío y en los bosses que aunque pocos, están muy bien diseñados y son muy divertidos. Las mejoras del anterior juego son reemplazadas aquí por un sistema de skills pasivas seleccionables muy similar al de hollow knight, con el cual podremos hacer diferentes combinaciones y no nos veremos obligados a comprar una mejora anterior que no queremos para obtener otra posterior que si, lo cual esta muy bien. La mayoría de habilidades que vamos obteniendo son muy buenas y sirven para mas de un propósito salvo excepciones y una habilidad del anterior juego que me parecía inútil, la escalada, aquí se reemplaza por una pasiva seleccionable, lo cual se agradece. La estructura en esta ocasión es mas metroidvania ya que podemos llegar a distintas áreas del juego para encontrarnos con una "puerta cerrada" que requiere una habilidad que debemos conseguir. Ademas en cierto punto del juego podremos elegir 4 caminos diferentes sin un orden especifico lo cual da una sensación de libertad que su predecesor no tenia. La exploración aquí tiene mucho mas peso ya que podremos encontrar no solo vida, energía y monedas sino también pasivas únicas, desafíos únicos de velocidad o combate, e incluso completar misiones secundarias. Con esto y al ser mas grande el mapeado tenemos una duración de unas 15 horas en comparación a las 10 de ori 1.Incluso es mejor en detalles mínimos como por ejemplo, no te spoilean las futuras habilidades en el menú de pausa, te permiten enfrentar nuevamente a los bosses o jugar determinadas secciones de la aventura, te ofrecen mas estadísticas como los enemigos que mataste, el daño infligido y recibido, etc.

Artisticamente es incluso superior a su predecesor que ya era excelente, gracias a una paleta de colores mas viva, mas variedad de escenarios y una ost ambiental para cada área que se te quedara en la cabeza.

Lamentablemente en el apartado técnico es donde flaquea ya que tiene bajones de fps recurrentes, es como si cargara texturas, una vez que lo hace corre fluido pero al primer momento cae el rendimiento. También el sonido falla a veces. Por suerte no encontré bugs ni tuve crashes. Espero que con parches lo solucionen y no lo dudo que lo harán, es de las pocas cosas negativas del juego.

En cuanto a la historia es bastante similar a la anterior aunque el añadido de npcs logra un mundo mas vivo e interesante. Lado a lado diría que esta es mejor pero puede perder un poco la novedad habiendo jugado al primero. De todos modos es estupenda, tiene momentos muy emotivos y el final me encanto.

En definitiva, el juego no es perfecto, echo en falta mas jefes, mas desafíos, mas endgame en general ya que tanto el combate como el palataformeo dan espacio para desafíos muy duros, y al no haber mucho de esto se siente algo corto. Las irregularidades en la dificultad siguen estando, producto de haber dificultades seleccionables y no una fija. Las pasivas no están a la altura de su inspiracion, hollow knight, pero aun así son interesantes. Algunas habilidades me parecen poco inspiradas, precisamente los deslizamientos en agua y arena y la linterna, que no tienen otro uso aparte de las secciones en donde se utilizan, el salto cargado siento que llega tarde y no nos da suficiente tiempo a disfrutarlo (nuevamente el tema de la duración), pero aun así aunque parezcan varios errores, no empañan la experiencia final que para mi es excelente. Y justamente eso representan mis dieces, juegos excelentes, que en notas de otros pueden variar del 8.5 al 10. En fin, recomendado para todo el mundo, excelente juego y excelente metroidvania.

Emideadman4971Hace 3 años8

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
9
El excelente diseño de niveles de esta secuela
Video análisis: https://www.youtube.com/watch?v=xMga_JyuCdk

(Aviso: Hola! Este es el texto de mi video sobre el diseño de niveles de Ori and the will of the wisps. Solo analizo este aspecto y algunos otros de la jugabilidad, por lo que se profundiza más que en un análisis general. Quien desee ver el video, genial! Y a los que no, les dejo el texto)

Ori and the will of the wisps es excelente. No voy a dar ninguna vuelta y dejarlo claro desde el comienzo. Ori and the blind forest también lo fue, pero Moon studios ha logrado que esta secuela sea igual de hermosa, divertida, compleja y desafiante que su predecesora. Incluso puede que hasta superior en ciertos aspectos. Disfruté cada minuto que pasé en ella como hace mucho no lo hacía, pero hoy no quiero hacer un análisis completo, sino centrarme en uno de sus mejores aspectos: el diseño de niveles. Ori tiene un planteamiento metroidvania, con un mapa que explorar lleno de recovecos y secretos, también tiene combates y bosses finales, pero, sobre todo, Ori es un juego de plataformas, y uno que brilla por sobre muchos otros gracias al gran trabajo detrás de cada uno de sus componentes. Uno de ellos es el control, el cual es preciso, ágil y con animaciones que hacen que manejar al pequeño protagonista sea un placer. Luego está el amplio número de habilidades, responsables de dotar de gran atractivo a la progresión y cambiar constantemente las situaciones que se nos proponen. Y, por último, el diseño de niveles, que sabe sacarle partidos a estos dos elementos de todas las formas posibles, pero sin descuidar nunca ese fluir entre experiencias que hace tan variado al videojuego. Fue difícil elegir, pero, para ejemplificar esto, quiero hablar de dos escenarios que creo que demuestran bastante bien el nivel que alcanza Will of the wisps. Puede parecer sencillo al ver el resultado final, pero requiere un enorme despliegue de minuciosidad, testeo y experiencia. Y los elegidos son “El manantial” y “El dominio de Baur”.

El primero de estos escenarios, “El manantial”, es uno al que acudimos antes de las tres horas de juego. Pero, dada la constancia con la que la obra nos da habilidades, para ese entonces ya tenemos el salto doble, el deslizamiento y el impulso, siendo este último el movimiento más característico de su predecesor y nuevamente de esta secuela. Además de, por supuesto, habilidades ofensivas como nuestra espada o arco. En fin, nos ponemos en marcha hacia nuestro objetivo y es en el camino que nos presentan estas nuevas flores con las que, aunque lo intentemos, no podemos interactuar. Y luego estas otras, que tampoco reaccionan. Finalmente llegamos al molino, la construcción por la que deberemos ascender para restablecer el agua pura. Lo primero que tenemos que hacer es sortear estas enormes ruedas usando las enredaderas, las cuales sabemos cómo funcionan porque las conocimos horas atrás. Cuando rompemos esa cosa rara y llamativa, las ruedas resultan ser engranajes y la puerta se abre. Entramos y vemos otro mecanismo inmóvil. Habrá que ponerlo en movimiento, ¿no? Lo hacemos y un mensaje nos avisa de una nueva mecánica: Podemos usar la fuerza centrífuga para impulsar a Ori hacia la dirección deseada con solo soltarnos. Algo genial que se hace para mantener el interés y dotar de personalidad a los escenarios, es proponer situaciones jugables a través de ellos. A diferencia de otros videojuegos donde estos sirven más como un telón de fondo que es ajeno a la jugabilidad y va cambiando cada cierto tiempo, acá es fácil recordarlos gracias a sus características distintivas. La primera mitad del molino nos pone a prueba en el manejo de los recursos que ya poseemos. Secciones de plataformas donde usar nuestras habilidades, rayos que evitar, postes para trepar o impulsarnos y los engranajes. Mientras tanto vamos destruyendo esos bultos que evitan que los mecanismos funcionen y avanzando hasta que encontramos la nueva habilidad que tanto venían anticipando las zonas inaccesibles: el gancho. Ahora, por fin, las flores que veíamos cobran sentido y los lugares inalcanzables ya no lo son. Y es interesante, las flores en las paredes nos permiten engancharnos a ellas, las colgantes funcionan como un impulso sobre el que influye desde donde lo iniciemos y también podemos engancharnos a las enredaderas. Así, el desplazamiento adquiere otra velocidad, alcance y dimensión. No creo que sea una habilidad innovadora, en realidad es parecida al impulso, pero es un complemento genial al repertorio. Ya con esta nueva adquisición en nuestras manos, el molino replantea sus desafíos. Espacios más grandes que superar, rayos o engranajes más rápidos, redirecciones en el aire e incluso una enorme habitación que debemos girar en su totalidad y que reposiciona sus plataformas al hacerlo. Una vez superado el molino, con combates de por medio, llega el momento del final, del clímax, de poner tus habilidades y reflejos a prueba. Hablo de un escape. Un monstruo enorme empieza a perseguirnos mientras un torrente de agua nos pisa los talones y para escapar tenemos que usar saltos, desplazamientos, impulsos y el gancho, en una secuencia de poco más de un minuto. Esquivamos los obstáculos sin tocar el agua, nos movemos entre los engranajes y realizamos saltos imposibles, todo con esta música de fondo… Es épico y superada la escena, la sensación de realización es total.

Esta forma de plantear sus escenarios no es nueva en la saga, Ori and the blind forest ya lo hacía y tenía algunos memorables, como el “Árbol Guinso”. El molino es uno de los primeros escenarios, por eso es entendible que parezca simple en comparación, pero van a tener que creerme cuando les digo que la dificultad y complejidad van en aumento. Si por algo me encantó esta secuela es por como toma las bases existentes, agrega muchas más y crea interesantes e inéditas situaciones jugables. No quiero profundizar demasiado, pero sí creo que vale la pena hablar sobre uno en especial. En determinado momento de la historia, se nos encarga ir a cuatro lugares en el orden que prefiramos y, por supuesto, cada uno alberga una nueva habilidad, pero en este caso su uso es contextual, es decir que dependen completamente de elementos del escenario que son quitados de los otros para mantener las cosas bajo control. Excepto por una, la que conseguimos en “El dominio de Baur”. Al llegar a esta zona helada, nos reciben obstáculos con los que podemos lidiar, saltos, impulsos, postes resbaladizos, y demás. Sin embargo, rápidamente aparece la mecánica propia de este lugar, el redirigir bolas de fuego para encender altares y descongelar el entorno. Ahora los postes son retractiles, las plataformas plantas que se cierran y el suelo, agua. Recorrer un mismo camino cambia dependiendo del estado en el que se encuentre, pero, como dije, lo más interesante viene de la mano de la habilidad que se nos da luego: la “Ráfaga de luz”. Esta es una bola de fuego que podemos lanzar para derretir hielo o encender los altares, pero si la cargamos funciona como proyectil. Y como es un proyectil, sí, podemos usar el impulso en él. A partir de este momento, el desafío de manipular las bolas de fuego es reemplazado por el de sortear espacios más grandes durante las plataformas. En mi experiencia, este fue uno de los poderes más interesantes ya que nos invita a sumar un nuevo tipo de razonamiento, el de poder crear puentes por nuestros propios medios sin depender completamente del escenario o los enemigos. El que deba ser cargada por 2 segundos evita que abusemos de ella, pero aun así es sumamente útil. Nos preparamos, calculamos la trayectoria y saltamos en el momento justo para llegar al objetivo. Es un arma ofensiva y de movilidad al mismo tiempo, crea sinergias con nuestro impulso y expande aún más las posibilidades de Ori. Esta capacidad para crear un abanico de tantas habilidades diferentes y lograr que las asimilarlas todas, es una de las mejores cualidades del videojuego. Y el diseño de niveles tiene gran culpa de esto, ya que dibuja curvas de aprendizaje graduales y bien marcadas que nunca resultan abrumadoras, pero que sí exigen un perfeccionamiento de nuestra parte. Un último ejemplo vino, en mi caso, luego de completar “El dominio de Baur”. Me dirigí a otro de los tres posibles destinos y a los pocos minutos empecé a usar mi nueva e increíble “Rafaga de luz” para superar las plataformas. Sin embargo, algo llamó mi atención, unas burbujas sobre las que podía rebotar e incluso manipular con viento para llevarlas donde las necesitara. No lo descubrí al instante, pero el escenario tomaba en consideración el que poseyera o no esa habilidad y me ofrecía dos formas de superar algunos de sus retos. Es un detalle, pero uno que solo me demostró una vez más el excelente trabajo que exhibe Ori en este sentido y porque es tan especial.

Ori and the will of the wisps tenía la difícil tarea de traer algo de valor tras un primer videojuego excelente, y lo logró. La gran calidad en el diseño de niveles de la saga se mantiene, pero esta vez se apuesta por ampliar el repertorio de situaciones y dar vida a una experiencia capaz de mantenerte genuinamente interesado por cada descubrimiento. Por cada nueva habilidad y cómo cambia nuestra relación con el entorno, por cada nuevo poder de combate o por cada nuevo escenario y lo que tiene para proponer jugablemente. Este es uno de los principales motores de la experiencia y el que nunca decaiga se debe al increíble ritmo que posee. Ritmo que no solo no se vuelve abrumador, sino que además se las ingenia para no olvidarse de ninguna de esas habilidades e ir poniéndonos a prueba de diferentes e interesantes maneras. Y también es bueno que otorgue cierto margen de error al permitirnos curarnos o que obstáculos como los pinches no nos maten instantáneamente, o que podamos realizar viajes rápidos para revisitar zonas que dejamos atrás. No es una obra perfecta, por ejemplo, su combate aún tiene margen de mejora, pero el viaje es maravilloso, hermoso, épico y emotivo. Una vez que lo completamos, la pantalla se funde a negro y los créditos corren aun con las emociones a flor de piel, sentimos que somos nosotros quienes lo dejamos todo para triunfar en esa aventura. Quienes aprendimos y superamos las adversidades. Y al hacer la vista atrás y ver el camino recorrido, queda claro que uno de los responsables de ello es el excelente diseño de niveles.

Sepherim408Hace 3 años9

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
9
Espectacular aunque muy continuista
Ori and the Will of the Wisps es probablemente el mejor metroidvania que hay en estos momentos. Quizás es muy clásico e innova poco en cuanto a mecánicas jugables, pero el estilo de juego está tan pulido que funciona con una perfección de reloj que quizás sea mejor no tocar. La historia es tierna, bonita, triste por momentos, contada con ese peculiar estilo que ya caracterizó al primer Ori. El mapa del mundo está dividido en varias zonas y cada una tiene sus propias mecánicas, retos y secretos, lo cual hace que el juego se mantenga fresco y variado durante toda su duración, aunque sin duda no es el juego más largo del mundo (20 horas para hacerlo al 100% en dificultad Dificil). 

Estéticamente, el juego es simplemente una preciosidad. Desde los escenarios a los personajes y sus animaciones, el apartado visual del juego brilla con luz propia incluso más que en el juego anterior. El apartado sonoro no se le queda muy atrás, si bien los efectos sonoros son relativamente discretos, la banda sonora acompaña al juego con un estilo que le encaja muy bien, con unos tonos casi mágicos propios de la fábula que nos cuenta el juego. Y, al menos en mi experiencia, el juego no ha tenido bugs.

EL resultado de todo ello es un juego que simplemente es impresionante. Podría haber innovado más y añadir algunas cosas nuevas, y podría ser un poco más largo, pero la calidad de lo que tiene compensa todo eso de sobra. Un 9.

Larax78508Hace 2 años10

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
9,5
Bonito hasta el infinito
Sin duda ori the blind forest >( la primera parte ) fue un gran juego y el listón estaba muy alto , pero moon studios no solo lo han igualado si no que creo lo han superado en todo y es que este " ori and the will of the wisps" o ori 2 para abreviar mejora en todo a su predecesor .
Nos encontramos con un metroidvania que continua con el estilo que tan buen resultadoi les dió en el primero , con un sistema tipco ir recogiendo habilidades / poderes que mas adelante nos permitiran abrir otros caminos para conseguir objetos o llegara ubicaciones que antes no podiamos alcanzar . 

Graficamente se ve mejor que el 1 , y eso ya me parecia complicado , si buscara una palabra para describirlo seria BONITO todo se ve muy bien y aunque estamos en un juego 2D bueno podriamos decir que 2,5D se ve genial , la verticalidad que tiene el escenario y lo bien que se mueve hace que todo luzca genial.

La jugabilidad para mi es una parte muy importante , el juego es dinamico y muy rapido y aunque tengas muchos poderes que asignar se manejan bien con el mando , se maneja bien y el combate se ve muy bien siendo muy intuitivo . El hecho de haber incluidos bosses a este juego es un plus mas y algunos te pondran las cosas dificiles , el juego en ningun momento lo he considerado dificil , si hay algun boss o alguna zona que tiene un poco mas de dificultad pèro no lo considero ninguna locura.

No puedo olvidarme de la banda sonora una maravilla que acompaña perfectamente a la acción que se ve en pantalla , con muy buenas melodias y bien realizadas .

La historia no esta muy allá pero tampoco creo que en este tipo de juegos sea lo que mas importe , esta bien sin más acompañando la aventura con ori .

En resumen un gran juego , que se pone en el top del genero , muy bonito para la vista y muy entretenido , recomendable sin duda si no jugaste al primero y si lo jugaste igual de recomendable , un must have .

Hawks81Hace 1 año11

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
9
Ori and the Will of the Wips
Ori and the will of the wisp es la secuela del primer Ori, una nueva IP que debutaba y sorprendía a todos por su diseño artístico , banda sonora , jugabilidad fluida y desafiante.

Esta nueva entrega toma todo lo bueno del anterior , lo mejora y agrega grandes novedades.

Su apartado visual sigue siendo increíble, cuenta con un diseño artístico digno de llamarse “arte”. Tiene una paleta de colores muy variada y bellísima. También cuenta con un juego de iluminación que realza y da mucha vida a los escenarios y enemigos.

Respecto a lo jugabilidad es sublime. Dentro de lo que es su “género” me parece algo insuperable. Es extremadamente fluido , nos incita a hacer saltos combinando varias habilidades y diversas plataformas, todo esto a una gran  velocidad.

Sin duda mi parte preferida son las persecuciones , estas ponen a prueba todo lo aprendido y nos exigen dominar todas las habilidades que tengamos hasta ese momento.
A lo anterior agregarle que no contamos con margen de error , ya que nos estarán persiguiendo bestias que no superan muchas veces en tamaño.

Por otro lado tendremos que enfrentarnos a varios jefes finales , cada uno con sus propias mecánicas y sus propias fases. El nivel de desafío planteando es bastante alto , pidiendo alguno tomarnos varios intentos.

Los escenarios son laberintisicos y muchas veces estarán bloqueados hasta que encontremos una habilidad específica.
La lista de habilidades es bastante grande superando la docena. La mayoría de ellas nos sirven para superar distintos obstáculos , así como también para enfrentar a los jefes finales .

Sobre  su banda sonora, la misma  acompaña en todo momento , llenánandonos de emociones según la parte de la historia en la que estemos.

En conclusión Ori and the Will of the Wisps entra en la categoría de obra maestra , superando con creces su primera entrega. Estamos ante de unos lo mejores plataformas y Metroidvania que puedo recordar.

Chunling3Hace 1 año12

Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
9,5
Una obra maestra
Ori And The Will of the Wisps es una secuela de la primera entrega, la cual ya nos había dejado sorprendidos por su calidad y enorme creatividad en lo artístico e incluso su historia. Esta nueva entrega una vez más demuestra con gran precisión el trabajo impecable y casi perfecto de Moon Studios, quienes han logrado qué este juego pueda considerarse una de las grandes obras maestras de los últimos años indudablemente.

Su sistema de combate fue muy criticado en la primera entrega 'Ori and the Blind Forest', pero parece que esta empresa tiene claro lo que es aprender de los errores, porque su sistema de combate y armas/habilidades es excelente, ofreciendo variedad de ataques y elementos útiles a lo largo del juego. Su plataformeo y exploración sin buenísimos, no solo es cómodo y fluido en cuanto a jugabilidad, sino que la cualidad del juego de ser intuitivo y complejo a su vez, hace que gustes bastante de explorar todo lo posible en cada zona. Su animación es posiblemente lo mejor que se puede encontrar sin lugar a dudas, es fluida, artística, creativa y pulida, haciendo un deleite visual cada detalle del juego. Los personas que encuentras durante el juego (hasta el mismo villano!) son de vital importancia y generan al jugador variedad de sentimientos, siendo este juego uno el cual se sumerge en los sentimientos del jugador y llegando hasta lo más profundo de su corazón. Su música es de otro mundo, es tan perfectamente bien hecha qué combina con el momento. 

Concretamente, este videojuego es una maravilla sin dudas. Su animación es una belleza, su jugabilidad es cómoda y desafiante, su historia es emocionante e impactante, y su banda Sonora es de lo mejor posible. Tiene una qué otra carencia, como pocos jefes o el poco uso qué le dan a muchos personajes, pero aun así, no le quita el merito de ser un juego de una empresa que supo aprender de los errores, para convertir un gran juego en una obra maestra del género, y siendo este uno de los más grandes videojuegos de los últimos años, deja la vara muy alta.