Parches, contenido de relleno, spin-offs de dudosa calidad...
Después de décadas disfrutando de los videojuegos y estando al día de toda la actualidad de la industria, estamos acostumbrados a ver ciertos elementos como las constantes actualizaciones, los spin-offs de dudosa calidad y otros males que algunos usuarios cuestionan como el exceso de efectos especiales o el contenido irrelevante a modo de alargamiento artificial.
Sin entrar a valorar su calidad, hemos visto quejas en títulos como No Man's Sky o Metal Gear Solid V: The Phantom Pain, entre otros. Y también hemos vivido casos muy similares en el mundo del cine, ya que ambas industrias no solo comparten licencias; también muchos de sus vicios adquiridos. Así que hoy repasamos algunas de las manías que comparten videojuegos y cine.
El famoso parche día 1 - Estamos acostumbrados a que los desarrolladores corrijan errores y modifiquen elementos una vez que ya tenemos el juego en nuestras manos. Bugs, glitches, ajustes de cámara o control... Esto es algo que ya hemos visto en el mundo del cine. El último ejemplo es Cats, ya que Universal ha enviado nuevas copias a los cines en las que los gatos se muestran ligeramente diferentes.
La maldición del spin-off - Secuelas innecesarias o spin-off cuyas cotas de calidad se alejan de la franquicia principal hemos visto de todos los colores. Incluso las licencias más prestigiosas cuentan con algún que otro desliz, como por ejemplo Star Wars y su cuestionada Caravan of Courage: An Ewok Adventure. Algo que en el videojuego dejó de sorprendernos hace tiempo, y que es habitual en el cine.
Más no siempre es mejor - Títulos muy bien considerados como Alien Isolation, Death Stranding o Metal Gear Solid V: The Phantom Pain fueron criticados porque algunos de sus tramos están demasiado estirados, algo que pudimos ver en Twin Peaks, la mítica serie de David Lynch y algunos capítulos de la segunda temporada que muchos usuarios califican incluso como "relleno innecesario".
Los artificios como protagonista - Abusar de escenas CGI, efectos especiales y otros elementos más enfocados a mostrar músculo que otra cosa es algo habitual en el videojuego moderno. Las empresas apuntan a un público concreto cuando toman decisiones y esta es una que no siempre convence a los usuarios. Lo hemos visto en algún capítulo de Juego de Tronos y en películas como Linterna Verde.