Análisis de Yakuza 5. Un sandbox a la japonesa

Análisis de Yakuza 5. Un sandbox a la japonesa
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Una de las series más queridas por un sector de jugadores muy especial, Yakuza, regresa con una quinta entrega que resalta los valores principales de toda la franquicia y se convierte en uno de los títulos más destacados de todo el año en PS3.

Es increíble lo que muchos jugadores hemos tenido que esperar para, por fin, poder disfrutar de esta quinta entrega de una de nuestras sagas favoritas de Sega… o al menos, de una de sus series que todavía permanecen "activas" para la compañía nipona. Y es que Sega no pasa por sus mejores momentos, eso está claro, algo que sucede con otras empresas japonesas como Konami. Por eso mismo, o eso creemos, el lanzamiento en Occidente de Yakuza 5 se ha dilatado tanto en el tiempo, ya que en Japón apareció hace justo tres años.

Este "gap" temporal entre su salida en Japón y su llegada a Europa no es para nada habitual. Puede que lo fuera hace años, pero en nuestros días se trata de una excepción. ¡Pero más vale tarde que nunca! Sí, porque hubiera sido una auténtica salvajada en el peor de los sentidos perdernos esta joya de PS3, uno de los últimos grandes lanzamientos que va a recibir esta gran consola.

Si por algo destacan todas las entregas de Yakuza es por presentar una carga narrativa importante. En este caso no estamos ante una excepción, siendo uno de los elementos más destacados de cuantos posee esta aventura.


Una historia bella en sí misma

El título arranca tiempo después de lo sucedido en el final de Yakuza 4, con el ínclito Kazuma Kiryu reconvertido a taxista y oculto tras el nombre de Suzuki Taichi. Junto a él encontramos a otros cuatro protagonistas más jugables, uno de ellos nuevo (Tatsuo Shinada, un ex jugador de béisbol y ludópata), destacando el papel que juega en esta ocasión Haruka Sawamura. Y es que esta joven ha madurado bastante en relación a lo vivido en la última entrega y, lo más importante, su personaje se diferencia mucho del resto en todos los apartados.

En esta ocasión se han añadido tres escenarios inéditos en los que podemos entretenernos: Tsukimino, Nagasugai y Kin´eicho.
En esta ocasión se han añadido tres escenarios inéditos en los que podemos entretenernos: Tsukimino, Nagasugai y Kin´eicho.


Sí, porque en lugar de situarse en el centro de una nueva guerra de clanes Yakuza (Tojo y Omi) como ocurre con la mayor parte del resto de protagonistas, en este caso vamos a seguir su intento por convertirse en una Idol, ya sabéis, el fenómeno cultural de moda en Japón ligado al mundo de la música y el espectáculo. Una forma de enriquecer aún más la trama y la jugabilidad, ya que en lugar de centrarse en otros elementos como las peleas, en este caso concreto tenemos que participar en minijuegos musicales, conceder entrevistas, etc. Un contrapunto tanto narrativo como conceptual y jugable que nos ha encantado.

Perderse en sus barrios es una experiencia sublime en sí misma, sobre todo cuando descubres algunos de sus tesoros

Siguiendo con la trama y el desarrollo de las diferentes personalidades de los protagonistas, también nos ha convencido el hecho de poder profundizar en la vida de los mismos gracias a las misiones secundarias personales vinculadas a cada protagonista. Dichas misiones vienen a ser minijuegos específicos ligados a cada uno de los personajes y sus trabajos o hobbies, pudiendo desde disputar carreras de coches a cazar animales, bailar o participar en pruebas relativamente similares a lo disfrutado en Crazy Taxi. Una forma muy divertida de expandir las miras de cada protagonista.

Un sandbox a la japonesa


Libertad oriental

Uno de los aspectos más conseguidos del título es que, al igual que logró recrear Velázquez en muchas de sus obras, el juego consigue transmitir el "aire", la ambientación, lo que se respira en la realidad en cada uno de los lugares que visitamos en la aventura. Aquellos que hemos estado en zonas tan particulares como Kabukicho podemos dar fe de lo bien recreado que está dicho barrio de Shinjuku, consiguiendo transportarnos hasta lo más profundo de nuestra mente y sus recuerdos. Y esta cualidad no es nada fácil encontrarla en otros juegos, siendo uno de los factores que hacen de Yakuza una aventura tan especial.

Un sandbox a la japonesa


Es posible participar en una amplia gama de minijuegos y, también, disfrutar de alguna que otra recreativa clásica.
Es posible participar en una amplia gama de minijuegos y, también, disfrutar de alguna que otra recreativa clásica.


Pero claro, existen otros muchos ingredientes más no tan particulares pero igualmente válidos. Y el más destacado es su sistema de juego, el cual es tan distinto a lo habitual que atesora una personalidad inmediatamente reconocible.

La mecánica de juego que nos ofrece Yakuza 5 es muy similar a la vivida en anteriores ediciones de la saga, siendo un título muy continuista en este sentido. ¿Es esto algo necesariamente malo? Pensamos que no, dada cuenta de que Yakuza no es precisamente una de esas sagas que se dejan ver todos los años, más bien lo opuesto, por lo que casi nos parece una virtud el haber resistido a los cambios y a la influencia Occidental de otras aventuras tipo sandbox.

¿Sandbox? Sí, Yakuza 5 es un sandbox, y realmente cautivador. Pero a su vez es tan diferente a lo experimentado en obras como GTA, Just Cause, Saints Row, Batman Arkham o Assassin’s Creed que casi parecen géneros diferentes. La razón principal la encontramos ya no sólo en su ambientación y estética, realmente particulares en comparación con otros juegos similares, sino sobre todo en su sistema de juego y en su ritmo, mucho más centrado en la evolución narrativa de sus protagonistas que en la acción pura y dura. De hecho aquellos usuarios que deseen adentrarse en un festival de acción, tiroteos y espectáculo bélico ya pueden ir mirando hacia otro sitio: no hay nada más distinto a ese planteamiento que Yakuza 5.

En su lugar, lo que nos propone esta obra incunable de Sega es adentrarnos en la vida de sus protagonistas, con Kazuma Kiryu a la cabeza, y hacer de sus problemas, incertidumbres, cruzadas y sueños los nuestros. Y esto, una vez más, es algo que no demasiados títulos consiguen transmitir a los jugadores, ensalzando una vez más el trabajo de sus creadores.

Un sandbox a la japonesa


Un viaje por el Japón "underground"

Por esto mismo que acabamos de señalar el ritmo de juego que nos propone una vez más esta nueva entrega de la saga es muy tranquilo y pausado… o, al menos, puede llegar a serlo, aunque eso también depende bastante de nosotros y de nuestra forma y estilo de jugar.

Un sandbox a la japonesa


En esta aventura las charlas con otros personajes y la interactuación con cada uno de ellos, sea quien sea, tienen un peso mucho mayor que lo experimentado en otras aventuras de su misma naturaleza. De hecho es posible asistir y presenciar escenas y conversaciones que pueden tomarse más de 10 minutos en resolver. ¡Y esto es algo que sucede con cierta frecuencia! Gracias a estas secuencias y diálogos es posible ir "descubriendo" y haciéndonos una idea bastante nítida de las intenciones, personalidad, carácter y trasfondo de cada uno de los personajes, especialmente de los más importantes, aspecto que puede agradar a ciertos usuarios y no tanto a otros. Pero este elemento de juego es inherente a esta serie, así que no pillará a nadie por sorpresa, por lo menos a los que la conocen bien.

Eso sí, debemos indicar y poner de manifiesto que estas charlas transcurren en japonés con subtítulos en inglés. Y, como acabamos de afirmar, algunas de ellas son bastante extensas y hasta densas. Por eso mismo es aconsejable gozar de un nivel de inglés por lo menos medio para no perder detalle acerca de la trama conjunta, ya que si bien esto no es necesario para poder desenvolvernos con soltura por la aventura, sí que puede resultar dañino a la hora de comprender los matices narrativos que pone sobre la mesa.

Por otra parte, otra de las tareas más gratificantes de todas las que nos ofrece este título es, sencillamente, perdernos por los cinco entornos principales que se han plasmado en esta producción. Y no hablamos de lugares cualesquiera sino de barrios reales que, por motivos evidentes, han sido rebautizados. Kabukicho (Kamurocho), Dotonbori (Sotenbori), Susukino (Tsukimino), Nakasu (Nagasugai) y Sakae (Kin´eicho) son las cinco zonas que el título incorpora, siendo las tres últimas nuevas, convirtiéndose así en una de las grandes novedades que presenta esta entrega.

Todos los escenarios poseen numerosos elementos que rebosan vida

Lejos de ser lugares más bien "neutros" y meramente funcionales, lo cierto es que todos ellos poseen vida a destajo y, lo más importante, ¡albergan numerosas tareas por hacer! En este sentido se trata de una producción que tiene poco que envidiar al también reciente y excelso Fallout 4, en el sentido de que todos estos escenarios poseen numerosos elementos que rebosan vida. Minijuegos, misiones secundarias, personajes importantes con los que interactuar, tiendas a las que acceder, algún que otro detalle estético realmente llamativo, etc. son algunos de los alicientes que nos depara cada zona de juego.

Perderse en alguno de estos barrios es una experiencia sublime en sí misma, sobre todo cuando descubres algunos de sus tesoros, como recreativas íntegras emuladas o minijuegos tan viciantes que podrían convertirse en títulos DLC por sí mismos. Nos morderemos la lengua y vamos a optar por no ejemplificar todo lo que nos gustaría comentaros en este aspecto por miedo a reventar el factor sorpresa para los seguidores de esta saga, que sabemos que es uno de los ingredientes más apetecibles… Pero creednos que en este sentido el título va sobradísimo y, de hecho, nos parece la versión más completa de toda la serie en este aspecto concreto, así que disfrutadla como se merece y haceos un favor explorando al máximo cada uno de los escenarios. Merece la pena.

Un sandbox a la japonesa


Pero también podemos disfrutar de verdaderos momentos de acción, más esporádicos que los habituales en los sandbox tradicionales, pero igualmente destacados e importantes dentro de su esquema de juego. Y es que las peleas son santo y seña de esta producción, las cuales nos han parecido más dinámicas y mejor recreadas que las vividas en las pasadas ediciones de la serie. La cantidad de movimientos que es posible efectuar con cada personaje, muy diferentes entre sí, es más que loable, así como lo devastadores que siguen resultando los "finishers" que son capaces de realizar todos ellos.

Es una de esas aventuras atípicas y exóticas, destinadas a satisfacer a un tipo de usuario muy particular


Además a medida que avanzamos es posible ir aprendiendo nuevas técnicas y golpes especiales con cada uno de los personajes, aspecto RPG que también ostenta esta producción. Gracias a su adición el título gana en complejidad y profundidad, añadiendo más sentido al hecho de no rehuir ninguna pelea en la que podamos participar.

Por todo esto Yakuza 5 es una de esas aventuras tan atípicas como exóticas y atractivas, destinadas a satisfacer a un tipo de usuario muy particular. Tal y como sucedió con otros títulos inclasificables "de época", como el propio Shenmue, la saga Yakuza no puede ser comparada con ninguna otra. Lo único que debéis tener en cuenta es que su desarrollo es más pausado de lo que suele ser habitual en esta clase de aventuras "abiertas", y que el tema del idioma puede suponer un serio inconveniente para aquellos que quieran seguir la historia al dedillo. Pero de lo que no cabe duda es que se trata de un verdadero juegazo y que su extensión es difícilmente cuantificable, si bien garantizamos que nos extrañaría que alguien la completara en menos de 25 horas. Pero esta cifra puede aumentar muchísimo en función de lo que deseemos disfrutar del abundante contenido que ostenta el juego, tened esto en mente. Más de 20 gigas de descarga lo atestiguan.

Un sandbox a la japonesa


Ambientación excepcional

Parece mentira que estemos ante un título que tiene a sus espaldas más de tres años desde su salida. Y, también, que en plena era Next Gen, muy asentada ya, se trate de un título de PlayStation 3, consola que como es ley de vida, cada vez tiene más cerca su jubilación.

Pero Sega es una compañía que siempre ha demostrado sentir una especial devoción por esta saga, destinando muchos recursos al desarrollo de la misma. Y eso se deja notar en su conseguido apartado gráfico, que nos parece realmente sensacional teniendo en cuenta los dos factores de los que os acabamos de hablar.

Un sandbox a la japonesa


El juego puede dar de sí durante muchas horas de juego. Todo depende de lo que queráis explorar y deteneros en cada partida.
El juego puede dar de sí durante muchas horas de juego. Todo depende de lo que queráis explorar y deteneros en cada partida.


Lo más destacado es, sin duda, la recreación de todos los escenarios, sobre todo en lo que tiene que ver con la ambientación que ofrecen. Es increíble deambular por todos ellos y descubrir sus pormenores, barrios repletos de lugares y personajes de interés que han sido recreados con bastante mimo. Se nota que es un juego de PS3 en varios aspectos, como su resolución, la calidad de algunas de las texturas que recubren los decorados y los bordes de sierra que afean un tanto el aspecto visual. Pero si nos ceñimos al hardware que los soporta, nos parece un trabajo muy próximo al sobresaliente, calificativo extensible al modelado de los protagonistas.

Pocos títulos de PS3 pueden presumir de incorporar personajes que gozan de un tratamiento facial tan sublime, de animaciones tan variadas y de una expresividad tan brillante. Y a esto se añaden otros elementos como una iluminación muy conseguida, buenos efectos especiales, una tasa bastante estable (salvo en ocasiones puntuales) y un a colorido magníficamente plasmado.

El aspecto sonoro se encuentra a un nivel similar, destacando por encima de todo las innumerables conversaciones habladas (reiteramos, en japonés con textos en inglés) entre los personajes, con una sensacional interpretación por parte de los actores, faceta que queda bien secundada por una banda sonora tan notable como ya es habitual en esta franquicia.

Excelente

Recomendado
Un sandbox a la japonesa

Yakuza 5

Por: El equipo de 3DJuegos
Recomendado

Sega nos trae (tarde, pero lo ha hecho) la quinta entrega de una de sus sagas más queridas y exóticas. Yakuza 5 no decepciona y se postula como uno de los últimos grandes lanzamientos que va a recibir PS3. Una aventura adictiva, muy variada y excelentemente recreada que puede mantenernos pegados a la pantalla durante semanas. Es cierto que llega sin traducción y que, en cierta forma, no resulta tan dinámica como otras producciones similares. Pero Yakuza es casi un género en sí mismo y, como tal, debe ser disfrutado.

  • Su sistema de juego: es un sandbox realmente distinto
  • La recreación de los cinco escenarios principales es imponente
  • La gran oferta de máquinas recreativas, minijuegos y misiones secundarias que integra
  • Poder indagar y profundizar más aún en la vida de los protagonistas
  • La personalidad de Haruka añade diversidad al título, se agradece su contribución
  • No ha evolucionado demasiado en relación a las pasadas entregas
Jugadores: 1
Idioma: Textos en inglés y voces en japonés
Duración: 25 horas (mínimo)
Comentarios cerrados
VÍDEO ESPECIAL

12.876 visualizaciones

100 DETALLES OCULTOS de RED DEAD REDEMPTION 2

¿Qué detalles ocultos guarda Red Dead Redemption 2? En el video de hoy os presentamos más de 100 curiosidades distintas acerca de la aventura de Arthur Morgan y de John Marston que nos presentó Rockstar Games en 2018.