Después de Tony Hawk’s Project 8 para Xbox 360 y Playstation 3, llega este Downhill Jam para Wii y Nintendo DS. En la portátil de Nintendo, Tony Hawk y sus amigos deciden aparcar los Grabs y los Flips para dedicarse a correr colina abajo con sus tablas en unas carreras por seis escenarios del mundo. Rápido, ¡ahí tienes un turbo!
Tony Hawk’s Downhill Jam es un juego de carreras. Sí, suena extraño si pensamos en lo que títulos como Tony Hawk’s Project 8 u otras versiones de la saga nos han ofrecido hasta ahora. Quizá por el hecho de ser una versión para portátil donde no contamos con sticks, los botones son pequeños y el control no puede estar tan trabajado como los desarrolladores hubiesen deseado, nos encontramos con un juego que nos ofrece un entretenimiento rápido, sin muchas complicaciones, con gráficos cell-shading correctos y una banda sonora de calidad.
Cell-shading y banda sonora de calidad
Visualmente, el juego destaca por sus gráficos tratados con la técnica Cell-shading, mediante el uso de bordes gruesos y colores vivos, que dotan a la imagen de un aspecto de dibujo animado, con una técnica habitual a dibujo a mano.
Con unos personajes bien diseñados aunque un poco poligonales, y unos escenarios tridimensionales, el juego cumple con nota en este apartado. La sensación de velocidad que vivimos al descender por las ciudades, saltando por las rampas, escaleras o barandillas está muy bien conseguida, y en un juego de carreras como este, es lo principal.
Las escenas de video, interludio a los desafíos, son de gran calidad y desde aquí lanzamos un mensaje a Activision para que las recopile todas y cree una serie de dibujos animados en Fox Kids o Cartoon Network con Tony Hawk como protagonista.
Mientras descendemos por la calles de San Francisco, Edimburgo, el Kilimanjaro, Hong Kong, Rio de Janeiro y la presa Hoover, escucharemos hasta quince temas de rock y metal, con bandas como Motor Head, The Bronx o The Loved Ones.
¿A qué te apetece jugar?
Tony Hawk’s Downhill Jam está dividido en cinco modos de juego, más el tutorial, donde aprendemos las reglas básicas del skate en un entorno libre. Completando cada lección podremos desbloquear un botón especial táctil que nos permitirá efectuar un movimiento especial.
En el modo principal del juego, Gira mundial, viajamos por el mundo junto a Tony Hawk para participar en una serie de torneos. Principalmente, estos torneos consistirán en desafíos contra otros skaters, en los que deberemos descender colina abajo (downhill) hasta llegar a la meta, mientras hacemos Grabs, Flips o Grinds para mejorar nuestra puntuación.
En Jam Session, deberemos marcar nuestro mejor tiempo en el descenso, superando la puntuación máxima y completando los desafíos de cada nivel.
El modo más divertido y frenético es sin duda el de Carrera rápida. En él nos enfrentamos a tres rivales para ver quien llega primero a la meta. Aquí también podemos hacer trucos de cara a la galería, pero lo importante es bajar lo más rápido posible encontrando caminos secretos y saltando por todos lados.
Con Skate libre, exploraremos los niveles que hayamos desbloqueado, al comienzo tan solo San Francisco, aunque más tarde se añadirán el resto de escenarios.
Por último, el juego dispone de juego multijugador a través de conexión inalámbrica local o Wi-Fi para poder jugar con nuestros amigos.
Mamá, cómprame unas zapas
En Tony Hawk’s Downhill Jam tenemos disponible una tienda de skate donde poder editar a nuestro skater ya creado, seleccionando una gran variedad de camisetas, pantalones y peinados. Es muy sencillo, todo lo hacemos a través del lápiz de nuestra Nintendo DS, y es posible cambiar el diseño de nuestras camisetas, pantalones o incluso tabla. Eso sí, hay que ser todo un virtuoso en el dominio del dibujo para poder crear algo que podamos vestir con orgullo y no como un hortera.
También es posible gastarnos el dinero obtenido durante el juego en logotipos, tablas, camisetas, peinados, trucos y skaters secretos, como un ninja, un pirata, un robot o una dulce abuelita.
Como comentábamos antes, existe la posibilidad de editar nuestras prendas, nuestro logotipo para usar en las carteleras del juego o en las partidas Wi-Fi e incluso grabar nuestra voz para que el skater la reproduzca durante las caídas, los especiales y los Gaps.
Tony Hawk’s Downhill Jam combina toda la velocidad de los juegos de carreras con los movimientos sobre la tabla que la saga Tony Hawk’s siempre nos ha ofrecido, aunque esta vez, en menor cantidad y libertad. Con unos gráficos cell-shading correctos, un más que completo editor y una banda sonora de calidad, estamos, como hemos dicho anteriormente, frente a un título que nos ofrece un entretenimiento directo, sin las complicaciones de control que las versiones mayores sí tienen.
