Su nombre es Psychobot, y muy pronto vas a quedar prendado de sus encantos. ¿La razón? Es el protagonista de este excelente juego de puzles, secuela del divertido Blocks That Matter, que de principio a fin sabe cómo sorprender con ingeniosos y muy desafiantes rompecabezas. Una muestra más del enorme talento creativo que habita en el estudio independiente Swing Swing Submarine.
Tras el excelente Blocks That Matter, teníamos muchas ganas de probar el nuevo juego del equipo sueco de Swing Swing Submarine. Y lo cierto es que el resultado alcanzado con Tetrobot and Co. no decepcionado en absoluto. Muy al contrario. Estamos ante un brillante juego de puzles que si bien es verdad deja completamente de lado cualquier atisbo del género plataformero, seña de identidad del original, sorprende sobremanera gracias a unos rompecabezas verdaderamente ingeniosos.
Desafíos mentales que nos han hecho disfrutar una barbaridad durante las cerca de 10 horas que puede llevarnos completar esta simpática aventura de puzles, que constantemente se renueva a sí misma planteando pruebas cada vez más difíciles, complejas y diferentes entre sí, pero todas ellas con algo en común: son tremendamente divertidas. Y es que pocos títulos del estilo ofrecen un diseño de sus rompecabezas tan asombrosamente inteligente y audaz como el de esta obra de carácter independiente, que puede adquirirse por tan solo 8,99 euros. Una auténtica ganga.
Cosas de robot
Aprendiz de los ilustres Alexei y Markus, responsables de dar vida al simpático Tetrobot en Blocks That Matter, la joven científica Maya, y más concretamente su última gran creación, el Psychobot, protagonizan esta nueva aventura de puzles que nos llevará a explorar los circuitos internos de una gran variedad de robots estropeados, cada uno de los cuales planteará toda clase de retos, muy distintos entre sí, que pondrán a prueba nuestra habilidad para resolver rompecabezas cada vez más complejos e imaginativos.
Todos ellos basados en una idea tan simple como es la de recoger y apilar ordenadamente bloques de distinto tipo para así sortear infinidad de obstáculos en forma de rayos láser, barreras eléctricas, zonas anegadas por el agua e, incluso, algún que otro agujero negro. Vamos, algo parecido a lo visto en el título original, pero sin plataformas de por medio. ¿Qué hace, por tanto, tan especial a Tetrobot and Co.? Ni más ni menos que su brillante diseño de niveles, y su gran capacidad para sorprender constantemente al jugador con nuevos desafíos jugables.
Y es que una de las grandes virtudes del programa es que no tiene miedo alguno a reinventarse a sí mismo; a romper una y otra vez con las reglas establecidas previamente, añadiendo a la fórmula de juego inicial, esto es, recoger y apilar bloques, más y más elementos adicionales que no en pocas ocasiones os dejarán con la boca abierta por lo ingenioso e inteligente de sus planteamientos jugables.
Reconstruir tuberías, redirigir rayos láser con espejos, detonar ciertos obstáculos con dinamita, guiar los pasos de monstruos viscosos a través de escenarios cada vez más laberínticos… incluso se tiene en cuenta el tipo de material del que están compuestos los bloques, que reaccionarán de uno u otro modo a ciertos elementos del entorno, para superar algunos de los rompecabezas más complejos del programa. Así pues, por ejemplo, podemos hacer que un bloque metálico transmita la electricidad a ciertos dispositivos; del mismo modo que podremos fabricar nubes lanzando bloques de hielo a través de los rayos láser, que también tendrán la capacidad de quemar la madera, abriéndonos así paso a zonas previamente inaccesibles.
Las opciones resultan increíblemente altas, pero lo mejor es que la gran mayoría de estos rompecabezas responden a una lógica aplastante; algo esencial para disfrutar plenamente de un título de estas características. Cierto es que al principio puede que nos sintamos algo perdidos ante la falta de información que se nos brinda en la mayoría de estas pruebas, que a veces pueden ser algo caprichosas en sus mecánicas jugables. Pero muy pronto descubriréis que este es un título hecho por y para la experimentación; para que probéis toda clase de combinaciones imposibles mientras exploráis a fondo cada palmo de terreno hasta dar con la respuesta que os tenía bloqueados. Momento en el que sonreiréis al daros cuenta de lo tontos que habías sido hasta ese momento.
En este sentido, contamos con la opción de "rebobinar" la partida por si consideramos que hemos cometido un error que ya no tiene solución. Ideal para probar todas las opciones posibles sin temor a perder la oportunidad de obtener los tres lingotes dorados que se ocultan en cada nivel de juego (son opcionales, pero necesarios para desbloquear todos los contenidos del programa). ¿Lo malo? Que como en ningún momento se te avisa de si has cometido un error grave, como dejar atrás un bloque necesario para acceder a uno de estos objetos opcionales, en ocasiones nos tocará echar la vista muy atrás para dar con ese pequeño fallo.
Nada grave, por supuesto, aunque sí nos hubiera gustado que el título fuera algo más claro con algunas de sus mecánicas jugables. También hay cierta irregularidad en el diseño de los cerca de 50 niveles que plantea el programa, con rompecabezas increíblemente inteligentes que se mezclan con otros algo menos inspirados. Del mismo modo, nuestro Psychobot a veces se armará un lío él solito, siguiendo rutas totalmente ilógicas que lo llevarán a chocar contra los rayos láser o barreras eléctricas. Momento en el que nos tocará llevarle "de la mano" paso a paso para que vaya justo a donde queremos por el único camino posible.
Sin embargo, pese a este tipo de errores menores, la gran variedad de desafíos que propone el programa, y lo divertido que resulta perderse por los imaginativos mundos de Tetrobot, son una excusa más que suficiente para que os hagáis con este título a poco que os gusten los juegos de puzles. Más teniendo en cuenta que también a nivel audiovisual, el programa de Swing Swing Submarine también resulta bastante agradable a la vista, con unos escenarios no especialmente espectaculares a nivel gráfico, pero sí con un diseño muy llamativo y colorista que casa perfectamente con su estilo humorístico. Algo que también se ve perfectamente recreado en el tono sencillo y amigable del argumento, relegado a un segundo plano, o las divertidas recompensas con las que se nos premiará por conseguir todos los lingotes de oro en cada nivel.
El acompañamiento musical también resulta de lo más agradable, con un estilo muy animado que casa perfectamente con lo que se muestra en pantalla. Además, hay un buen puñado de composiciones para que en ningún momento sintamos que la música se repite una y otra vez. Los efectos sonoros, en cambio, son algo más discretos, con una presencia testimonial durante la partida. Por último, conviene destacar que el juego ha sido traducido al castellano, lo que se agradece enormemente aun a pesar de lo escueto del argumento.
Muy distinto al notable Blocks That Matter, pero tan imaginativo y divertido como este, Tetrobot and Co. es un gran juego de puzles con el que cualquier aficionado al género se lo pasará realmente bien. La variedad de rompecabezas que plantea, y el diseño inteligente de estos, lo convierten en una obra francamente recomendable que bien merece la pena probar.
- Gran variedad de rompecabezas.
- Diseño de la acción muy inteligente y casi siempre atendiendo a la pura lógica.
- Su simpático argumento y la vistosidad y colorido de su apartado audiovisual.
- Algunos puzles flojean.
