La franquicia atemporal de SNK, Metal Slug, vuelve en su séptima entrega numerada a Nintendo DS con un juego que sigue el planteamiento clásico y que no pierde ni un ápice de su humor desenfadado. Balas, tanques, granadas, y muchos enemigos en pantalla, el arcade directo por excelencia en los circuitos de la pequeña de Nintendo.
De las pocas series que quedaban por llegar a la portátil de Nintendo, una de ellas era Metal Slug, un trotamundos en lo que a consolas se refiere, con versiones en plataformas tan dispares como GBA, Sega Saturn, y como no, Neo Geo Pocket. En todo caso los más experimentados recordarán sus años de adolescencia en los salones recreativos, donde un juego sencillo y totalmente adrenalítico consumía nuestras monedas de cinco duros que guardábamos para el bocadillo. Eso fue en aquel 1996, donde se estrenó la serie en los salones recreativos, todo bajo los circuitos de la poderosa Neo Geo MVS (Multi Versión System), la versión arcade de esta máquina.
Los más afortunados pudieron llevarse la recreativa directamente a casa con la Neo Geo AES (Advance Entertainment System), la versión doméstica de esta máquina, que a día de hoy impera en el mercado del coleccionismo. SNK Playmore, tras el auge de las consolas domésticas, decidió volcarse definitivamente con multitud de conversiones del juego. Prácticamente todas las consolas han recibido su particular ración de Metal Slug. En Nintendo DS este es el primer referente, hecho que se ha hecho de rogar y que nos trae de nuevo un desarrollo de avance lateral lleno de acción.
Fiel al original
Esta versión sigue las mismas premisas ya sabidas de la franquicia, de hecho no aporta ninguna novedad sustancial ni tampoco hace uso de las características específicas de la consola, de hecho el uso del lápiz táctil está limitado a arrastrar el mapa. Tampoco se incluye ningún modo multijugador, ni online, ni local, con lo que parte de esa experiencia multijugador de las recreativas se pierde. Además el juego sigue haciéndose muy corto -en apenas un par de horas puede ser superado- con sólo 7 misiones, como en la mayoría de los Metal Slug. Entonces, ¿qué hace atractivo a este juego?
Básicamente la esencia, el hecho de que estamos ante un Metal Slug de toda la vida, y que esta vez podremos experimentarlo en cualquier lugar. Es un juego ideal para descargar adrenalina, para dejarse llevar, para matar esos tiempos muertos donde no sabemos qué hacer o aguantar los clásicos viajes en metro o en autobús. Es el mismo juego que muchos hemos jugado una década atrás en los salones pero mucho más accesible.
Ármate hasta los dientes
A lo largo de las 7 misiones disponibles que podremos superar bajo 3 niveles distintos de dificultad, llevaremos a 6 personajes a través de unos decorados bélicos con mucho humor y multitud de sprites en pantalla. Unos sprites 2D que funcionan francamente bien con unas animaciones casi idénticas a las que se movían por los circuitos de Neo Geo. Los cuatro personajes clásicos de la serie estarán de nuevo presentes, como son Marco Rossi, Eri Kasamoto, Tarma Roving y Fio Fermi; sumándose otros dos reconocidos de King of Fighters e Ikari Warriors, Ralf Jones y Clark Still. Cada uno de ellos tendrá una serie de particularidades distintas en combate; por ejemplo Marco puede ejecutar ataques especiales Salvo; Eri posee el doble de granadas que los demás; Tarma duplica la resistencia y la munición cuando usa un Slug (un vehículo de combate); Fio tiene un 50% más de munición y suministros; Ralf es mas rápido en el combate cuerpo a cuerpo; y Clark puede lanzar a los enemigos por los aires. De nuevo una lucha encarnizada, de lo más divertida, en busca del general Morden que yace escondido en la isla de los residuos.
Tendremos muchas armas a nuestra disposición, y también podemos conseguir añadidos para ellas. Si vamos rescatando prisioneros en el transcurrir de las batallas podemos conseguir objetos valiosos, unos nos darán puntos mientras que otros potenciarán nuestro arsenal. Hasta 10 añadidos diferentes como misiles teledirigidos, lanzallamas o incluso un láser. También podemos hacer uso de los clásicos Slugs, desde tanques, aviones e incluso algún mecha.
Cierto que el modo campaña principal se hace corto, muy corto, aunque la experiencia es rejugable y bastante excitante. En todo caso como el juego está dirigido a una consola doméstica, cierto es que se precisa incluir más elementos para justificar su compra. Por ello SNK ha incluido también el modo Escuela de Combate, donde podemos superar una serie de retos que nos va proponiendo la instructora Cynthia. Estos retos serán de 5 tipos: la eliminación de blancos, la recogida de objetos, el rescate de prisioneros, el asalto a bases y el entrenamiento especial. Todas ellos muy entretenidos, aunque quizás no suficiente para aumentar la durabilidad del juego.
Metal Slug 7 lleva a Nintendo DS la esencia clásica que ha hecho grande a esta ya emblemática franquicia. Carece de multijugador, no presenta ningún añadido especial respecto a otras versiones y la duración de la campaña es muy ajustada, aunque el juego lo suple con su excitante acción de corte clásico y experiencia rejugable. Recomendable para los seguidores de la serie, asiduos de los salones recreativos de antaño y jugadores que busquen un buen arcade de disparos sin igual.
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