Explora, expande tus dominios y lánzate a la guerra en el nuevo videojuego de estrategia por turnos de Paradox, un título de ciencia ficción que atrapa con su emocionante acción e interesante trasfondo argumental. En el análisis de Age of Wonders: Planetfall te hablamos de un juego que te hará disfrutar a lo grande en los meses de verano.
Aguardas expectante tras una cobertura, con el arma lista, preparado para una lucha que promete ser devastadora. Y frente a ti una delirante versión futurista de las amazonas… ¡a lomos de dinosaurios! Fieras guerreras que cargan con fuerza, ¡que van con todo!, usando armas biológicas capaces de infectar y exterminar a todas tus unidades. Es un caos; una emocionante guerra contra ejércitos de lo más variopintos que una y otra vez te obligan a cambiar tu forma de proceder. Es una de las virtudes de Age of Wonders: Planetfall, el nuevo episodio de esta veterana serie de estrategia por turnos que abandona la fantasía para entrar por la puerta grande en la ciencia ficción. Y lo mejor es que estas batallas al más puro estilo XCOM son solo una parte de todo lo que ofrece el nuevo trabajo de Triumph Studios y Paradox, pues más allá de la guerra también hay mucha gestión; decenas de tecnologías que investigar, colonias que construir y tropas a las que adiestrar.
Razón por la que cuesta muchísimo no recurrir al ya típico "un turno más y termino" que alargas hasta altas horas de la madrugada para describir la emocionante acción estratégica de este nuevo capítulo de la saga Age of Wonders. Una vez comienzas la partida ya no piensas en otra cosa más que en las nuevas armas que puedes investigar, en la ubicación de tu próxima gran colonia, o en las medidas drásticas que tomarás para derrotar a un rival que no para de molestar. Porque sí, hay bombas atómicas y otras armas de destrucción masiva que ayudan a que las partidas sean si cabe más emocionantes. ¿No te valen las buenas palabras? Pues aquí tienes el juicio final; disfrútalo. Y sigues, y continúas pasando turnos mientras descubres nuevas formas de acabar con tus rivales, de expandir tu imperio relacionándote con otras facciones a las que no necesariamente debes aniquilar para alcanzar la victoria… aunque al final es la guerra la que se lleva el protagonismo.
Y de repente… la guerra
A diferencia de otros videojuegos de estrategia 4X, Age of Wonders: Planetfall presenta un interesante modo historia que es la excusa perfecta para aprender a liderar a las seis facciones protagonistas. La esencia es la misma para todas, sí, pero hay sutiles diferencias que de una u otra forma te obligan a adoptar tácticas de combate bien distintas. Los Kir’ko, por ejemplo, son insectos que se abalanzan rápidamente sobre los rivales vomitando ácido, al estilo de los Zerg en la serie StarCraft, mientras que los humanos de la Vanguardia se apoyan en las coberturas y sus armas de fuego para exterminar a todo aquel que se ponga en su camino. Hay ejércitos capaces de tomar el control de los enemigos, de desplazarlos de aquí para allá con una tecnología increíble, o los que envisten y arrasan con todo a su paso llevándose por delante las incluso coberturas. ¡Nada está a salvo en lo nuevo de Paradox! Y eso me gusta.
Los combates en Planetfall son divertidos y emocionantes porque te permiten ser creativo a la hora de batirte en duelo con los ejércitos rivales. El número importa, claro, pero aquí la diferencia la marcas tu. Incluso en situaciones de desventaja puedes salir victorioso si juegas bien tus cartas. ¿Qué opciones tienes? De entrada, puedes personalizar a todas y cada una de tus unidades de combate modificando el tipo de munición, su equipo defensivo, el rango de ataque, la precisión… o hasta puedes equiparlas con una mochila propulsora que les permita desplazarse por el campo de batalla a gran velocidad. Conforme investigues nuevas tecnologías crecerán las opciones de personalización de tu ejército, pero no acaba ahí la cosa pues también tendrás acceso a las llamadas operaciones especiales, que son acciones estratégicas muy limitadas que pueden marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso.
A diferencia de otros videojuegos de estrategia 4X, Age of Wonders: Planetfall presenta un interesante modo historia
Actúan de forma similar a la magia en los Age of Wonders tradicionales, esto es, una vez superado el primer turno podrás usar estas operaciones especiales para bombardear a los enemigos, enviar tropas en auxilio de los heridos, crear escudos protectores, invocar aliados de gran poder o hasta abrasar a los rivales con llamaradas y ataques orbitales. Existe una gran variedad de estas tácticas de guerra; un as bajo la manga limitado en usos pero esencial para superar los enfrentamientos más difíciles. No solo eso. También en el mapa estratégico podrás recurrir a estas medidas especiales para, por ejemplo, espiar a los enemigos; descubrir zonas ocultas del mapa o hasta provocar revueltas en las colonias de los ejércitos rivales. Si es que por poder puedes acusar a otros de cometer atrocidades para justificar la guerra… ¡siendo mentira!
En la línea de la serie Civilization, a la hora de gestionar tu imperio en Planetfall tendrás que tener en cuenta recursos como la productividad, la ciencia, energía o alimentos para lograr que todas y cada una de tus colonias prosperen sin riesgo de sufrir revueltas o golpes de estado. Con el paso de los turnos aumentarán las opciones, ¡tendrás que elegir!, permitiéndote especializar tus ciudades en la producción de un recurso concreto, o bien mejorarlas para que sean más efectivas adiestrando un tipo de soldado específico, como todos aquellos equipados con modificaciones de serie. Porque esa es otra. Si antes decía que puedes personalizar a las tropas, la buena noticia es que podrás crear una plantilla que te dará acceso inmediato a soldados con esas mejoras de serie. Así ahorras tiempo, y se nota, pues el ritmo de la acción es bastante ágil con unos turnos rápidos que contribuyen a que la acción se mantenga interesante de principio a fin.
Con montones de misiones secundarias a las que hacer frente durante el transcurso de la partida, raro será el momento en el que os veáis pasando turnos sin hacer nada, a la espera, buscando ese momento para asestar el golpe definitivo. Una y otra vez las facciones independientes solicitarán vuestra ayuda, lo que os permitirá ganar confianza con unos ejércitos que podréis terminar uniendo a vuestro imperio si sacáis buen partido a la diplomacia. En este sentido, las opciones se quedan algo cortas en comparación con otros videojuegos del estilo; puedes establecer alianzas, pactos de no agresión o abrir fronteras para explorar las tierras de las naciones vecinas, pero a la larga comprobarás que si bien existen varias condiciones de victoria, es la guerra la que termina imponiéndose; son las batallas las que tienen mayor protagonismo en Age of Wonders: Planetfall.
Los combates en Planetfall son divertidos y emocionantes porque te permiten ser creativo
Más de la mitad de las tecnologías que investigas están directamente relacionadas con la guerra, lo que obviamente limita las opciones estratégicas sobre el tablero de juego. Incluso para alcanzar la victoria científica debes luchar con uñas y dientes pues se trata de investigar y producir el dispositivo del juicio final, que una vez has construido tendrás que proteger con tesón durante varios turnos. Como digo, todo es guerra, y es una pena, porque si bien los combates son emocionantes y por momentos también espectaculares, llegará un punto en el que termines optando por resolverlos de forma automática, sin pelear directamente, ya que a estos les falta algo más de variedad; situaciones de combate que te obliguen a cambiar tu forma de proceder. Hay zonas con peligros ambientales como el fuego, sí, y por supuesto la historia cambia mucho dependiendo del ejército contra el que peleas, pero le falta esa pizca de variedad extra para alcanzar el nivel visto en la obra de Firaxis Games. Tanto en gestión como en los combates por turnos.
La inteligencia artificial de los enemigos resulta sorprendente durante las batallas, saben dónde golpear para hacer más daño, pero sobre el mapa estratégico se muestran algo más torpes. Aunque la amenaza del juicio final esté en ciernes en la mayoría de casos les cuesta reaccionar a tiempo, mostrando una actitud en exceso pasiva. Cierto es que a la hora de proponer acuerdos son inteligentes y siguen una lógica aceptable, no muestran disparatados cambios de actitud (¡ahora la guerra! ¡Ahora firmemos la paz!), pero les falta algo más de iniciativa para ponernos en serios aprietos. Menos mal que ahí tenemos el multijugador para competir contra otros jugadores, que es donde de verdad sacas provecho de todas las opciones tácticas del videojuego.
Combina de forma inteligente los combates propios de XCOM con la estrategia y gestión de la saga Civilizacion
Que el mapa se divida en provincias contribuye también a crear interesantes disputas territoriales que nos llevarán a negociar con otras naciones, o las facciones independientes, por el control de tierras con importantes ventajas estratégicas. Toca ganarse la confianza de otros, complacerles con misiones, ofrecerles regalos o directamente usar los puntos diplomáticos para endulzar sus oídos. ¿Prefieres ir directo al grano? Sáltate las normas de cortesía, construye tus edificios sobre territorio en disputa y verás qué divertido cuando te declaren la guerra. Así de emocionante puede ser la acción de Planetfall, un videojuego que además cuenta con un fantástico trasfondo argumental. No es que la historia sea una genialidad, es interesante y poco más, pero se nota que el equipo de Triumph Studios se lo ha pasado en grande dando vida a las civilizaciones que controlamos.
Aún basándose en clichés cuesta resistirse a los encantos de un enjambre de insectos que ansían la libertad, o a esos cyborgs que buscan carne fresca para seguir expandiendo su poder y alcanzar un nuevo estado evolutivo. Cada nación posee rasgos distintivos suficientes como para que ansíes explorar sus ventajas tácticas en las más de 10 misiones del modo historia, con decenas de horas de juego por delante. Si esto te sabe a poco, también puedes jugar escenarios o bien dedicarte al multijugador; sin olvidar, claro, el soporte para mods en PC, que obviamente nos va a brindar la oportunidad de ampliar la experiencia de juego con innumerables contenidos creados por los propios aficionados. En este sentido, destaca el gran trabajo realizado en lo artístico, con unos escenarios de gran belleza que sorprenden por su colorido y variedad de entornos.
El diseño de los ejércitos también resulta llamativo aún no siendo especialmente original. ¿Las batallas? Lucen francamente bien, con escenarios que sufrirán las inclemencias del combate, lo que nos va a permitir ver cómo las coberturas y otros elementos del entorno saltan por los aires ante la lluvia de explosivos. Aunque a veces la acción puede resentirse con algunas ralentizaciones, y en estos momentos hay ciertos errores que entorpecen algo la partida, en general Planetfall funciona de mil maravillas tanto en PC como en consolas. ¿Te gusta la estrategia? Entonces tienes pocas excusas para no hacerte con este videojuego de Paradox, que combina de forma inteligente los combates propios de XCOM con la estrategia y gestión de la saga Civilizacion. ¡Un cóctel genial!
Con la ciencia ficción como telón de fondo, Age of Wonders: Planetfall es un gran videojuego de estrategia por turnos que combina con acierto la gestión de imperios con los combates por turnos al estilo XCOM. Su acción es emocionante, la variedad de ejércitos resulta digna de elogio, y además incluye un interesante modo historia para profundizar en su trasfondo argumental. Con opción de moldear y personalizar los ejércitos a tu gusto, una vez comience la partida te engañarás a ti mismo repitiendo el ya mítico "un turno más y termino". No hay mejor halago que ese.
Comprar Age of Wonders: Planetfall- Seis facciones con las que resulta muy divertido jugar y combatir
- Gran equilibrio entre combates por turnos y gestión del imperio
- Amplias opciones de personalización para héroes y unidades de combate
- Los combates pueden terminar resultando algo repetitivos
- La diplomacia se queda corta de opciones en comparación con otros juegos
