Análisis de Battletoads 2020. Battletoads, un inconsistente revival del clásico de Rare

Análisis de Battletoads 2020. Battletoads, un inconsistente revival del clásico de Rare
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No exageramos si decimos que el regreso de los Battletoads lleva siendo esperado desde la mera compra de Rare por parte de Microsoft. Cada uno se hizo una idea de lo que podía esperar de su hipotético regreso, pero pocos podían esperar lo que hemos terminado recibiendo. ¿Ha estado a la altura? Te lo contamos en el análisis de Battletoads.

¿Cuántos han pasado de la infame segunda pantalla del clásico? El pensamiento generalizado, y apoyado por la existencia de Battletoads en arcade y el no menos decepcionante Battletoads Double Dragon, es que Battletoads es un beat'em up, cuando para nada es así: el juego original se las ingenió para mezclar una cantidad ingente de géneros en un mismo título, pasando por el yo contra el barrio, las plataformas o las pruebas de velocidad con una dificultad absolutamente endiablada. ¿A qué se debía? Básicamente a que Rare, una de las más célebres desarrolladoras de la época de los microordenadores, no dudó en plasmar en su clásico de NES la dificultad clásica que caracterizó a los juegos que firmaban como Ultimate en los Spectrum, Amstrad y ordenadores de Commodore. Spoiler: lo lograron.

Viajamos a 2019, al Microsoft Theater justo después de la estupenda conferencia de Microsoft del pasado año en Los Ángeles. Estoy probando xCloud con Alejandro Pascual y miro a una esquina: ¡Allí está Battletoads! Pero no hay nadie jugándolo. ¿Cómo es posible? Me acerco y lo entiendo en el primer vistazo: parecía un beat’em up mediocre, algo que los propios desarrolladores tuvieron que detectar, puesto que el resultado final, sin ser la invención de la rueda, está muy por encima de lo que jugué entonces. Debo reconocer, no obstante, que me preocupé: pensé que DLALA no entendió la clave multigénero del original y se centraron en Battletoads como el que se centra en un proyecto de segunda categoría, pero preferí aguardar con paciencia hasta tenerlo en mis manos.

¿Qué hemos recibido en el Battletoads contemporáneo? Un intento de rescate de su espíritu original, ciertamente, pero con unos cuantos elementos discutibles que nos llevan a pensar que, definitivamente, ha sido un proyecto menor para los implicados, más preocupados en el contenido postlanzamiento del pujante Sea of Thieves que en brindar un homenaje acorde a los sapos de batalla. ¿Es todo malo y decepcionante? ¡En absoluto! Pero sí se han tomado decisiones y rumbos incoherentes y que no ayudarán a hacerse un hueco entre los nostálgicos o los dispuestos a dejarse abrazar por los fornidos y pegajosos brazos de Rash, Zitz y Pimple.

BattleCalArts

¿A quién va dirigido un revival como Streets of Rage 4, Sonic Mania o Windjammers 2? Al nostálgico, ¿verdad? Supongo que estaremos de acuerdo en que, productos de calidad, como los dos primeros citados y ya estrenados con gran éxito en múltiples plataformas, se las han ingeniado para atraer a dichos amantes de lo antiguo y una nueva audiencia que, por su incontestable bondades jugables, visuales y sonoras, acaban atrayendo al curioso. Pues bien, puede que Battletoads no tenga suficientes ingredientes para atraer a nuevos jugadores, pero toma una decisión en lo gráfico que es un auténtico repelente de usuarios clásicos: su apuesta por la estética de los dibujos animados contemporáneos, la que muchos aficionados etiquetan como estilo CalArts.

Battletoads, un inconsistente revival del clásico de Rare


El diseño de los personajes me resultó uno de los aspectos más cuestionables del juego.
El diseño de los personajes me resultó uno de los aspectos más cuestionables del juego.

¿Qué es el estilo CalArts? Naturalmente, no todos los egresados de la California Institute of Arts dibujan con el molde de los últimos éxitos de Cartoon Network o Nickelodeon, ya sabéis, pero sí se ha detectado una tendencia en los últimos tiempos en la que las series de éxito han cambiado el estilo realista de sus personajes por caricaturizar aún más las caricaturas. El estilo de los J.G. Quintel (Regular Show), Pendleton Ward (Adventure Time), Alex Hirsch (Gravity Falls) o el polémico Victor Courtright y su peculiar visión de los ThunderCats en su ThunderCats Roar. No creo que Battletoads y su apuesta por su nuevo diseño esté a la altura de las propuestas de Quintel, Ward o Hirsch; es más una amalgama de pésimas ideas y una puesta en escena pobre como la de Courtright. No he sido capaz de conectar en ningún momento con su historia o personajes.

Más allá del diseño contemporáneo, creo que mucha culpa la ha tenido el nulo ritmo de los acontecimientos y los distintos cambios realizados en los héroes y villanos. Destaca, naturalmente, el de la Dark Queen, que ha pasado de una voluptuosa villana digna de los clichés anticuados de los 90... a un pésimo personaje que pretende ser gracioso pero no lo es en absoluto. El corte autoparódico de las animaciones y el propio juego, de hecho, son un mal chiste que esperan la complicidad del jugador en algún momento, pero lejos de arrancar alguna carcajada a mí, personalmente, me ha dado en algunas ocasiones algo de vergüenza ajena. No le pido a Battletoads ganar un Annie Award, pero sí espero que aprovechen sus animaciones para contar algo coherente y divertido. No es el caso.

Battletoads, un inconsistente revival del clásico de Rare

Además, ¿esperaban atraer a los antiguos jugadores con la nueva estética? Ya pensé cuando vi el juego en el E3 que no se podía tomar una decisión peor para el rediseño de los sapos, y tras jugarlo puedo mantenerme en mis trece: la apuesta estética de los nuevos Battletoads difícilmente atraerá a los jugadores clásicos y su pobre puesta en escena difícilmente atraerá a los nuevos. ¿Y sabéis qué es lo que más me atormenta? Que, en realidad, no puedes echarle en cara a DLALA que no haya hecho un trabajo imponente en la animación: hay mucho trabajo ahí, con una gran cantidad de enemigos y un buen puñado de ataques para los protagonistas. No obstante, el problema no está en el trabajo del equipo, está en la elección del estilo. ¿Era lo que esperábamos o preferíamos un homenaje más acorde al visto por Iron Galaxy en Killer Instinct? Francamente, soy más del segundo.

BattleSimplón

Battletoads, un inconsistente revival del clásico de Rare

Jugablemente el único aporte es la lengua, que funciona como un gancho

Acabada con la parte más polémica de Battletoads, vale la pena aclarar que lo jugable está lejos de lo visual... pero también queda lejos de lo que podríamos haber esperado en los estándares actuales del género, salpicados con buenas intenciones y mejor puesta en escena con propuestas como el reciente Streets of Rage 4, que apostó por un renovado apartado visual y una mejora consistente de las mecánicas de juego con algunas novedades interesantes para el propio beat'em up. Battletoads no aporta mucho más allá que la lengua: una suerte de gancho que podemos utilizar para atraer enemigos y una técnica que permite lanzar un esputo que paraliza enemigos de forma temporal en las fases de yo contra el barrio.

Todo se resume al esquema típico de tres personajes, uno fuerte, uno rápido y otro equilibrado. Un botón de salto y tres para golpes: flojo, medio y fuerte. Combinar los tres movimientos para mejores combos y algún que otro ataque aéreo en el que combinar los golpes de los sapos con su habilidad de atraer enemigos. Con una caja de impacto coherente y funcional, se encuentra en la circunstancia de abusar de los enemigos con ataques a distancia que restan una incoherente cantidad de vida como única forma de complicar la batalla. Los niveles son algo largos en muchas ocasiones sin aportar demasiado al juego, y el ritmo se corta entre sección y sección con insípidos y anticuados rompecabezas de circuitos eléctricos y hackeos que desentonan por completo con la acción.

Solo he sido capaz de reírme con un chiste de Sea of Thieves. El resto… silencios incómodos. Desconexión total
Solo he sido capaz de reírme con un chiste de Sea of Thieves. El resto… silencios incómodos. Desconexión total

¿Qué ha quedado del contenido multigénero del primer Battletoads? ¡Está presente! Hay secciones a bordo de motos, alguna sección de plataformas, insípidos minijuegos deportivos, un cutre Piedra Papel y Tijeras y un minijuego de naves, pero gran parte del desarrollo pasa por el yo contra el barrio. Es inevitable comparar la sección del trineo con las pruebas musicales de los últimos Rayman, y claro, las comparaciones son odiosas. De hecho, alguna como las pruebas deportivas son pobres y nada imaginativas, añadidos con una intención humorística tan ausente como su creatividad, por lo que el trámite de pasarlos no deja poso alguno en la experiencia del usuario. Destacaría, sin duda, la sección de naves, un anárquico y breve danmaku occidental.

Battletoads, un inconsistente revival del clásico de Rare

Llama la atención la nula identidad de los enemigos o su banda sonora. En el caso de los rivales, aunque hay algún rescate destacable de los clásicos del pasado de Rare, no es menos cierto que no parece haber una línea clara entre los diseños de unos y otros enemigos... parece más un batiburrillo de ideas locas que se pusieron en común sin preocuparse demasiado en su presencia. Eso sí, es cierto que es variado en cuanto enemigos y la inevitable sensación de repetición de villanos tan típica de los beat'em ups no es tan marcada como en otros títulos del género. La música apuesta por bandazos de guitarra y heavy metal, pero es demasiado genérico para lo que se espera de una banda sonora de un juego rescatado de Rare. Una pena.

BattleRamplón

El juego no son solo golpes, sino que contiene bastante variedad de situaciones.
El juego no son solo golpes, sino que contiene bastante variedad de situaciones.

¿Qué esperabas tú de un revival de Battletoads? En mi caso, si se acababa dando un remake como tal, sí fantaseaba un desarrollo más grande y más épico; una suerte de hack and slash multidisciplinar que fuese capaz de sacar partido a la tecnología actual y que fuese capaz de coger los elementos más icónicos de la creación de Rare. Naturalmente, pedí muchas peras al olmo, pero lo recibido no puede ser más antagónico a mi fantasiosa idea: un beat'em up 2D ramplón con un diseño incoherente para su público objetivo y sazonado con otros géneros en los que a veces acierta y otras planta escenas jugables prácticamente inanimadas y de ejecución jugable burda. ¿La suerte? Que son escenas cortas, sencillas y fáciles de olvidar.

Me apena el resultado del nuevo Battletoads, porque estamos viviendo un momento dulce para el género beat'em up


Battletoads, un inconsistente revival del clásico de Rare

Me apena, porque estamos viviendo un momento dulce para el género beat'em up con referentes como el excelente Streets of Rage 4 o el para muchos desconocido Fight'N Rage. Battletoads, sin llegar a la mediocridad de The Takeover, queda lejos de lo que se podía esperar de un regreso soñado por muchos aficionados al clásico de Rare. ¿La buena noticia? Puedes probarlo en Xbox Game Pass y despejar tus dudas por ti mismo. No dudes en darte un paseo por la tienda y dar un tiento a la última entrega de la saga Bare Knuckle para entender las diferencias entre un proyecto ambicioso apoyado en la nostalgia y uno desgraciadamente ramplón como Battletoads.

Sin embargo, tiene elementos disfrutables en cooperativo (local, por ahora… no hay on-line para Battletoads en su estreno, pero sí soporte Remote Play Together en Steam) y puede ser satisfactorio en buena compañía, pero como homenaje se queda corto y como nuevo juego es decepcionante. La implicación de Rare en el proyecto ha sido la misma que en Killer Instinct en su día, pero es obvio que Double Helix (los desarrolladores originales de Killer Instinct 3 antes de ceder al testigo a los no menos talentosos Iron Galaxy Studios) mamaron y entendieron qué quería el nostálgico del instinto asesino y cómo adaptarlo a los tiempos contemporáneos con gran éxito; DLALA, por su parte, ha hecho una apuesta por lo que les apetecía hacer y les ha salido rana... o sapo. No importa.

Regular

Sin sello
Battletoads, un inconsistente revival del clásico de Rare

Battletoads 2020

Por: El equipo de 3DJuegos
Sin sello

Battletoads no es el regreso esperado para un juego icónico de Rare. Aunque termina siendo un videojuego disfrutable en cooperativo siempre que sea local (no hay online), la realidad es que toma decisiones incoherentes en muchos apartados, lo que acaba relegando al revival lejos de la estela de las entregas originales. Incapaz de arrancar una carcajada a antiguos o nuevos jugadores, su apuesta por un diseño animado contemporáneo digno de los nuevos clásicos de Cartoon Network o Nickelodeon supone una arriesgada decisión capaz de alejar a veteranos y noveles. Es, a la vez, incapaz de aportar algo a un género como el beat'em up, por lo que no pasará de anécdota de una tarde en el Xbox Game Pass. Rash, Zitz y Pimple merecían más.

Comprar Battletoads 2020
  • Disfrutable en compañía para una tarde de mamporros
  • Guste o no el diseño, la realidad es que hay un trabajo enorme en cuanto a personajes y animación
  • Ha respetado la identidad multidisciplinar del Battletoads original
  • Incapaz de aportar algo interesante al género beat'em up
  • Algunos minijuegos son banales
  • Sin identidad musical o jugable: un batiburrillo de ideas sin ton ni son
  • Sale a la venta sin cooperativo en línea
Jugadores: 1-3
Idioma: Textos en español y voces en inglés
Duración: 6-8 horas
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