Análisis de Trials Rising, "venga, un intento más y lo dejo"

Análisis de Trials Rising, "venga, un intento más y lo dejo"
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Nueva entrega de una de las sagas de motocross más alocadas de los videojuegos, que sigue demostrando ser capaz de ofrecer nuevos desafíos y enganchar como la primera vez que lo probaste. Más físicas, más dificultad y espectacularidad en el análisis de Trials Rising.

A veces, la inclusión de una pequeña mecánica o característica lo es todo. Para mí, en Trials Rising, es el nuevo sistema de fantasmas que ha introducido Red Lynx para la ocasión. Parece una tontería y no es nuevo, ya que esta forma de mostrar a otros jugadores lleva entre nosotros mucho tiempo, pero cuando lo aplicas bien, puede llegar a cambiar toda la experiencia. En el caso de la nueva edición del juego de Motrocross de Ubisoft, te insta a ser mejor. Parece algo básico, pero necesitamos alicientes para mejorar en todo en la vida. De hecho, es una de las razones por las que me cuesta sumergirme incluso a día de hoy en los Battle Royale. No encuentro ese equivalente a las tablas de clasificaciones para mejorar, más allá de un conjunto de recompensas estéticas. En juegos como Trials Rising, cuando ves tu nombre en las primeras posiciones entre tus amigos, o incluso a escala global, sientes que todas esas horas intentando dominar el circuito han merecido la pena. Cuando un juego consigue eso, ya te ha ganado.

Así, Trials Rising no solo aporta las novedades propias de una nueva entrega, sino que lo centra todo en ese alma competitiva hasta la máxima expresión. Al poco de comenzar la aventura, me sorprendió ver una serie de desafíos que varían el esquema jugable. Se trata de pruebas específicas con intentos limitados. Es decir, tenías que superar a la IA en tres pistas, pero solo tenías tres "vidas". Si logras superar a los tres, consigues la caja. Si no... bueno, se acabó. Esta mecánica, que casi parece heredada del concepto de muerte permanente, me recordó mucho a las Arenas de Hearthstone, en las que superar 12 rivales en tres intentos y, esté inspirado o no en él, lo cierto es que me gustaría ver más pruebas de este tipo, porque es la expresión más auténtica del riesgo y la recompensa. Es algo que tenemos asimilado desde la época en la que teníamos solo tres monedas de 25 pesetas para jugar a la recreativa de turno. Cada una era una vida y cuando se acababan, Game Over.


No solo aporta las novedades propias de una nueva entrega, sino que lo centra todo en ese alma competitiva hasta la máxima expresión

Trials Rising, por su planteamiento, no puede sorprender más de lo que ya lo ha hecho. Es difícil añadir más originalidad a la fórmula clásica, que tenía una buena base, pero con la que es difícil innovar, lo cual puede provocar una cierta fatiga en el jugador más ávido. Pero sí es cierto que Red Lynx ha exprimido la fórmula a la perfección. Aun así, tiene una capacidad única para intentarlo, con algunos de los circuitos más espectaculares que ha visto la saga hasta la fecha. En esta ocasión pasamos del futurista Fusion a un viaje por todo el globo en busca de los paisajes más representantivos de cada región. Bueno, en algunos casos, que de España sólo se ha recogido la Tomatina. Pero sí habrá oportunidad de recorrer con nuestra moto lugares tan imposibles como la Torre Eiffel, el Himalaya, los Estudios de Hollywood o las pirámides de Egipto.

Los estadios sirven para medir tu temple con el acelerador y pasar a la siguiente liga.
Los estadios sirven para medir tu temple con el acelerador y pasar a la siguiente liga.


La progresión está muy medida, comenzando con el nivel Principiante y pasando por Fácil, Medio y Difícil, donde las cosas se ponen intensas de verdad. Todo lo que puedes esperar de anteriores Trials está aquí, solo que con unos circuitos más elaborados y diría que muy medidos, tanto en los saltos y los atajos como los tiempos para conseguir las medallas. Sacar el oro en cada competición es motivo suficiente para picarte, pero gracias al añadido de los fantasmas siempre tendrás la oportunidad de descubrir nuevas rutas y formas de mejorar tu marca. Con la cantidad de circuitos que hay, más de 120 en total, todo el contenido ya anunciado post-lanzamiento y las pruebas de entrenamiento y desafíos extra, creo que va a tener una vida muy larga. En donde habría metido más esfuerzo, sin embargo, es en la competición con los amigos. Aunque el juego te avisa de que un amigo ha superado tu récord, no indica en qué pista, por lo que tienes que ir buscando una a una hasta encontrarla.

Análisis de Trials Rising, "venga, un intento más y lo dejo"


Afán de superación

Sin ser el mayor fan de jugar a un Trials en el modo multijugador, reconozco que estas mecánicas pasivas le dotan de un carácter más competitivo y desafiante, pero eso no quita que las otras aristas de jugar con otros jugadores no estén presentes. Tanto el Multijugador online como el privado te permiten configurar desafíos con los que competir con amigos y jugadores de todo el mundo con las presiones de hacerlo en tiempo real y sin reintentos infinitos. La verdadera novedad, no obstante, radica en el Modo Fiesta, uno especializado en la diversión local hasta cuatro jugadores. Hay modos que no me han convencido tanto, como las carreras normales, ya que el hecho de compartir cámara coloca al jugador estrellado en el siguiente punto de control, lo cual quita toda la esencia competitiva.

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Algunos escenarios, como las pirámides de Egipto, son francamente espectaculares
Algunos escenarios, como las pirámides de Egipto, son francamente espectaculares


Aunque bueno, si quieres competir desde el sofá siempre puedes pasar el mando en una buena contrarreloj. Pero creo que, en el fondo, los chicos de Red Lynx sabían que no era suficiente con esto, y por ello han creado dos aspectos más. El primero, la posibilidad de jugar con las reglas de las físicas para alterar el comportamiento de la moto e incluso la gravedad. El segundo, y el más divertido de todos, es el tándem, una moto para dos personas en las que tenemos que coordinarnos con nuestro compañero, ya que los dos pueden acelerar, frenar e inclinarse. E incluso uno puede chocar, pero el otro seguir vivo. Indispensable probarlo.

La guinda viene con la personalización, tanto del piloto como de la propia moto mediante una gran cantidad de accesorios a desbloquear. No os voy a mentir, entiendo que esto sea vital para algunos jugadores pero para mí, más allá de ponerle unas llantas futuristas a la moto, que es lo que más destaca, me es bastante indiferente. Hay suficiente material aquí para que puedas crear al piloto más excéntrico y la moto de tus sueños, y la forma de conseguirlo pasa por las clásicas cajas de botín que desbloquean aleatoriamente objetos y materiales según rareza. Se consiguen cumpliendo desafíos, subiendo de nivel y completando pruebas, pero también pagando con dinero real. Como siempre (ya estaréis acostumbrados a leerlo) todo es puramente estético.

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La guinda viene con la personalización, tanto del piloto como de la propia moto

Más interesante me parece el completo editor de niveles que incluye el juego. No es nuevo, ya que ha sido siempre una constante en la saga, pero sorprende ver un editor tan completo que no tiene ningún impedimento en añadir un buen número de assets que utilizar para crear las pistas más alocadas y que tampoco tiene complejos en ser intrincado para ofrecer todo lo que necesitan los jugadores que quieran pasar un buen número de horas creando las mejores pistas. Lo mejor, ya sabéis, poder disfrutar de todas las creaciones, algunas muy divertidas, de toda la comunidad de Trials.

No te acostumbres a lo fácil, a partir de la dificultad media las cosas serán mucho más.
No te acostumbres a lo fácil, a partir de la dificultad media las cosas serán mucho más.


Técnicamente, el juego se comporta como es de esperar para un juego de estas características, que no pretende ser el más puntero ni lo necesita, pero siempre mantiene la fluidez necesaria para ser preciso en todo momento. Y sin embargo, se permite muchas florituras como cuando pasamos por un estudio de Hollywood con chroma y la imagen se convierte en una película de ciencia ficción en plena guerra o pasamos por los bellos paisajes que nos dejan los molinos holandeses, la muralla china o el sol naciente japonés. La versión que he probado ha sido la de Xbox One X y la experiencia ha sido gratificante, con unos sólidos 60 frames por segundo y buen acabado técnico, salvo quizá algunas cargas extrañamente largas. No dudo de que la versión de PS4 y PC serán muy parejas, pero lo que he podido probar con la Beta Abierta de la versión de Switch queda bastante por detrás en cuanto a resultado. No solo las texturas son de mucha menor calidad, sino que se han eliminado muchos detalles y decorado de los fondos. La pérdida más importante, la tasa de cuadros por segundo que se reduce a 30 frames y se nota en el manejo de la moto y a la hora de ajustar los aterrizajes y maniobrar en los momentos más difíciles. Eso sí, todas las versiones de Trials Rising vienen acompañadas de una banda sonora licenciada, muy cañera y rockera, bien seleccionada y que casa perfectamente con el estilo que Trials pretende transmitir.

Análisis de Trials Rising, "venga, un intento más y lo dejo"


Hay un momento en Trials en el que un nuevo equipo, KTM, te ofrece un contrato. En él tienes que superar de nuevo una serie de tres pruebas, en un modo de dificultad algo más desafiante. La primera debes clasificarte entre los cuatro mejores, luego entre los dos, y luego llegar el primero. En la primera prueba, como es habitual, tanteas la pista, cometes unos cuantos errores, reinicias y poco a poco vas dominando el terreno hasta clasificarte. Cuando llegas a la segunda, pretendes hacer lo mismo: reiniciar las veces que haga falta hasta superar la prueba, pero la primera vez que le das al botón de reinicio aparece un mensaje. En esta ocasión, no te van a permitir reiniciar. Si lo haces, lo harás desde la primera prueba. Aquí no hay reintentos. Este carácter duro y poco permisivo está presente en todo Trials Rising y, lejos de ahuyentarte, te incita a la superación. A currártelo. Porque, ya que te pones con algo, qué menos que aspirar a ser el mejor sin que nadie te regale nada.

Excelente

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Trials Rising

Por: El equipo de 3DJuegos
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Trials Rising es la más completa entrega de la saga Trials, y también la más espectacular. El tour mundial que ofrece está lleno de belleza e imaginación, pero también de una filosofía del desafío que se basa en no regalar nada. En conseguir todo por tu propio esfuerzo y dedicación, para que luego te enfrentes con los mejores jugadores. Su carácter online tanto local como en línea y sus grandes posibilidades de personalización, así como el completo editor lo hacen una entrega que, pese a no ser ya tan sorprendente como antaño, sigue divirtiendo como siempre.

Comprar Trials Rising
  • Más de 120 pistas muy cuidadas y con algunas realmente espectaculares.
  • La implementación de desafíos únicos con intentos limitados.
  • Completo multijugador y editor de niveles.
  • Algunas pruebas del modo fiesta son muy anecdóticas.
  • Todo resulta familiar, sin novedades de peso en sus físicas y mecánicas.
Jugadores: 1-4
Idioma: Textos en español
Duración: Incalculable
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