La saga musical de Activision abre sus miras al fenómeno de Rock Band, y despliega todo su potencial musical en PlayStation 3. Batería y micrófono se incorporan a la tradicional guitarra para conformar el más completo de los Guitar Hero hasta la fecha. ¿Significa esto que es el mejor? La respuesta es un "no" con pocos matices.
La saga musical de Activision abre sus miras al fenómeno de Rock Band, y despliega todo su potencial musical en PlayStation 3. Batería y micrófono se incorporan a la tradicional guitarra para conformar el más completo de los Guitar Hero hasta la fecha. ¿Significa esto que es el mejor? La respuesta es un “no” con pocos matices.
Los que ya estén algo cansados del fenómeno Guitar Hero –Guitar Hero Legends of Rock, Guitar Hero Aerosmith y Guitar Hero World Tour, lanzados en un solo año- pueden irse preparando, puesto que Activision, la distribuidora de la saga, ya ha anunciado que tiene planeado desarrollar un título al año más los consabidos spin-offs. El próximo, de hecho, protagonizado por Metallica.
Lejos de ser una mala noticia los aficionados a este nuevo subgénero de la música interactiva se frotan las manos, puesto que la franquicia de Harmonix siempre ha sido garantía de calidad. Esta cuarta entrega es la primera que no está desarrollada por el conocido estudio norteamericano, que ahora opera dentro de Electronic Arts, y en esta ocasión el trabajo ha corrido a cargo de los discretos NeverSoft Entertainment.
El resultado de este World Tour es bueno, pero sus nuevas incorporaciones nos han dejado un poco fríos, puesto que no aportan nada realmente revolucionario a la fórmula, y algunas incluso son ligeramente molestas. Los verdaderos protagonistas son los nuevos instrumentos, y es ahí donde el título se separa de lo que hubiera sido de otro modo, una mera expansión en forma de nuevos temas.
Too Much, Too Young, Too Fast
Lo primero que el usuario estará ardiendo en deseos de conocer será, con casi total seguridad, el listado de canciones que incluye este World Tour. Los temas que incorpora el juego en su versión retail son concretamente 86, aunque como es bien sabido, las descargas de contenidos extra estarán a la orden del día, y ya hay abundantes canciones para descargar a través de PlayStation Network con las que incrementar el potente track-list.
En cuanto a los cortes pueden ser consultados al completo desde este enlace, y presentan una heterogénea y completa amalgama de artistas y estilos. El heavy ha perdido algo de peso a favor de temas más rockeros y metálicos, pero aún así se trata de un conjunto de grupos que seguramente satisfarán a cualquier melómano contemporáneo.
Entre los temas destaca el rock ochentero de Jane´s Addiction, el clásico Jimmy Hendrix, el rap guitarrero de los Beastie Boys, el nuevo metal de KoRn, la locura de System of a Down y el brutalmente técnico metal de los siempre fascinantes Tool. También hay concesiones al pop con Tokio Hotel, Radio Futura o blink 182; aunque igualmente hay una escueta presencia de heavy y tras, encabezada por Metallica, Ozzy o Van Halen, aunque todos ellos muy lejanos a los melenudos desafíos de Dragon Force, Iron Maiden o In Flames vistos en entregas anteriores.
El funcionamiento para avanzar a través del videojuego es el mismo de siempre, comenzamos siendo unos aficionados a la música y vamos progresando y alcanzando la fama hasta convertirnos en músicos de éxito, desbloqueando al mismo tiempo nuevas canciones. En esta ocasión hay una sensación de libertad algo diferente, puesto que tras cada actuación se plantea la posibilidad de escoger un grupo de canciones para tocar ante el público en packs determinados, en lugar de ir escogiéndolas tema por tema como en entregas anteriores.
Por lo demás el sistema del modo campaña es virtualmente idéntico al que ha sido tradicional en la saga. Se nos premia con estrellas y dinero nuestras interpretaciones de canciones de otros artistas, y vamos progresando para tocar en público canciones de un nivel cada vez más difícil. Con el dinero que se obtiene se desbloquean nuevos ítems, instrumentos, vestuario e incluso otros temas… En esta ocasión el flujo de “cash” es algo más variable que en el pasado, puesto que se tienen en cuenta nuestra calidad en la interpretación, y una serie de parámetros extra para premiarnos con más o menos dinero.
Mundo On-line
Guitar Hero: Legends of Rock fue la bienvenida primera incursión de las series en el multijugador a través de Internet, y World Tour continúa profundizando en este extremo. Las modalidades no son demasiado profundas, y su carácter variado responde más a la abundante presencia de instrumentos que al hecho de que se hayan realizado importantes incorporaciones de tipo jugable.
Guitarra, bajo y batería son accesibles por separado en modos 1vs1, en modalidades Duelo y Duelo Pro. La única diferencia entre estos dos estilos es que en uno los instrumentos se tocan por turnos, mientras que en el otro los dos tocan a la vez. También está presente el clásico y siempre divertido Duelo de Guitarras, y la posibilidad de llevar a cabo temas en modo cooperativo también con la seis cuerdas junto con otro amigo.
En cuanto a la conjunción de una banda al completo hay dos posibilidades, la de buscar a otros miembros de una banda para formar un grupo, y tocar temas sin ningún afán competitivo; y también el denominado Grupo contra Grupo, donde nos enfrentaremos a otras bandas a través de Internet.
La posibilidad de que cada uno con su instrumento forme un conjunto a través de Internet es realmente atractiva, y era un detalle que el reciente Rock Band no contemplaba. Sin embargo cuando realmente brilla Guitar Hero World Tour es al juntarnos con otros tres amigos y llevar a cabo las actuaciones cada uno con su instrumento en juego local.
La pantalla se divide en partes al igual siguiendo la estela del mencionado Rock Band, y mientras el cantante sigue sus entonaciones y sentido del ritmo en las burbujas que acompañan a la letra, el resto de usuarios ven sus notas y golpes de batería en los dibujos de los trastes que corren hacia nosotros.
No obstante y pese al atractivo del on-line, la gran novedad en cuanto a modalidades de juego de World Tour la presenta el estudio de grabación. El procedimiento es bastante complejo, y requiere de superar los tutoriales para comenzar a hacernos una idea de lo que tenemos delante.
Lamentablemente el resultado final dista muchísimo de lo que esperábamos encontrar. No hay presencia vocal en los temas, y el procedimiento de grabación es tedioso, fundamentalmente por una serie de decisiones de diseño y concepto muy cuestionables relacionadas con las escalas, las notas, y el propio registro de la música. Si queremos componer un riff de guitarra con el mínimo de complejidad exigible, la tarea va a ser increíblemente ardua, principalmente debido a que estamos tocando con una “guitarra de PlaySchool” que tiene cinco botones. No decimos que haya que incorporar más botones a la guitarra, y tampoco creemos que el trabajo de NeverSoft con los materiales de los que dispone sea malo… Sólo sostenemos que quizá la presencia de un creador de canciones de este calibre sea demasiado ambiciosa para los instrumentos que Guitar Hero puede poner a nuestra disposición.
Guitar Hero Tunes es donde podemos acceder a las pistas que otros usuarios crean y posteriormente cuelgan en la red. Aquí podemos ordenarlas por puntuación, novedad, estilo, etcétera; para hacernos una idea de qué estamos bajando antes de tener los temas en el disco duro.
Instrumentos y Tecnología… Caminando de la Mano
Lo que más llama la atención de este World Tour es, obviamente, la presencia de la batería, de diseño más realista que la de Rock Band. La batería de Guitar Hero tiene tres timbales, dos platos y un bombo, contraviniendo el diseño del juego de EA, que planteaba todo lo relacionado con los brazos en los cuatro timbales. El instrumento del título de Activision es, además, algo más silencioso; aunque en esta ocasión requiere de golpear dos timbales al mismo tiempo para disparar su propia energía estrella. Suena fácil, ¿no? El jugador comprobará en sus propias carnes que no lo es ni remotamente.
Nada que objetar al funcionamiento de la batería que ofrece la misma precisión y eficacia que otros periféricos de títulos similares. Sin embargo todo Guitar Hero atesora la misma ligereza a la hora de reconocer nuestras interpretaciones. Si en Rock Band debemos mostrar más precisión, en este World Tour las partes más complicadas dan la sensación de ser algo más condescendientes con nuestras habilidades, tanto en la batería como en bajo y guitarra.
Por otra parte la propia guitarra presenta algunos cambios. Cerca de la barra de púa encontraremos un botón para ahorrarnos mover bruscamente la guitarra para activar la energía estrella, opción que está presente también si deseamos emplearla. Además se incorporan los controles para el wah-wah, y algunos detalles más aparte de los botones tradicionales. Son aditivos interesantes sobre el papel, pero que no acaban de funcionar de la forma precisa que esperábamos.
El micrófono, por último, tiene muy poco que comentar. Recoge con acierto nuestros registros de voz, y funciona a modo de percusión de forma idéntica al que ya pudimos comprobar en Rock Band, es decir golpeando suavemente su superficie.
En otro orden de cosas poco que alegar con respecto al apartado gráfico, que sigue una línea muy continuista con respecto a entregas anteriores. Las animaciones de los personajes han mejorado mucho, y se nota el esfuerzo a la hora de lograr una sincronía labial entre los cantantes y la música que interpretan. Su modelado continúa presentando el aspecto paródico y “cartoon” que es tradicional en las series.
Asimismo hay algunas alternativas extras que se derivan del nuevo abanico de movimientos de los miembros de la banda. Una nueva sección, de hecho, se abre en el menú para personalizar a nuestro músico. No aporta tantas posibilidades como la de Rock Band, pero si que permite escoger animaciones cuando triunfamos o fracasamos, por ejemplo.
En cuanto al apartado sonoro éste brilla con luz propia ofreciendo la que es posiblemente la mejor mezcla de cuantos Guitar Hero ha habido hasta la fecha. La presencia de todos los instrumentos resta peso al volumen de la guitarra, y los graves suenan más potentes y equilibrados, aportando un conjunto más robusto y sólido. Lamentablemente la puntuación general se resiente por lo mal que suenan las canciones que creamos con en el editor del estudio de grabación. Algunas críticas exacerbadas de los usuarios han llegado a compararlas con la música MIDI, y quizá esta afirmación sea un tanto exagerada, pero definitivamente queda a caballo entre ese vetusto formato musical y los tonos de móvil.
Quien creyera que los atropellos del cambio de dólares a euros en el tema de los periféricos son exclusivos de Rock Band, anda meridianamente equivocado puesto que Activision también ha seguido una política similar. El pack completo de Guitar Hero que incluye juego más instrumentos cuesta algo más de 200 euros en nuestro país, cuando en Norteamérica se puede adquirir por cerca de 190 dólares. ¿Aranceles? ¿Transporte? Se aducen decenas de razones para justificar semejante aumento de precio, pero el caso es que acaban pagando justos por pecadores.
World Tour será bienvenido por todos los fans por su cuidada selección de temas, y por contar con nuevos instrumentos como principales incorporaciones a la fórmula. El resto de matizaciones jugables son mucho más discutibles, y hacen que el título quede prácticamente como un mero añadido de canciones. Lejos queda la sorpresa de las primeras entregas de Guitar Hero, y hay que comenzar a exigir a Activision más novedades para justificar su política de lanzar un episodio cada año.
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