Quién iba a decirlo, pero Transformers: War for Cybertron se ha convertido por méritos propios en una de las más interesantes sorpresas de lo que llevamos de 2010. Una campaña muy entretenida y un muy buen cooperativo hacen del nuevo proyecto de los creadores de The Bourne Conspiracy un título a tener en cuenta.
No es habitual, pero podemos comenzar está review contra todo pronóstico anunciando que un videojuego de Transformers no es sólo para fans. De hecho es tan "para todo tipo de jugador" como su propio concepto le permite ser. Estamos ante un lanzamiento que hace volar por los aires el concepto del guión que tenía la saga de animación y cine hasta ahora, algo que puede irritar a los hardcores de las series, y también un juego sobre una licencia que desatiende la tradición de que todos los programas de este tipo son desechables.
War for Cybertron es un muy buen juego de acción al que hay muy pocas pegas que ponerle, quizá una falta de variedad algo molesta a medio plazo, pero por lo demás una propuesta francamente notable. Estamos ante un título recomendable para los fans de la acción en tercera persona, un lanzamiento que repara algo de lo que las decenas de espantosos videojuegos sobre Transformers han hecho a la franquicia en los últimos tiempos.
Mapa de las Estrellas
El primer, e ingenioso, paso del título que nos ocupa para diferenciarse del resto de ofertas de Transformers es el de ambientarse mil años antes del comienzo de los hechos recogidos por la serie de animación. Se trata de narrar los últimos días de la guerra entre Autobots y Decepticons, todo ello en el planeta Cybertron que da nombre al videojuego.
Las cinemáticas de War for Cybertron están inusitadamente cuidadas, con mención especial a la que abre el videojuego. Es un videojuego de Transformers, de modo que tampoco debemos esperar un guión digno de premio de la asociación de guionistas, pero lo que tiene que hacer lo hace muy bien, y a pesar de ser algo exiguo en ciertas partes de las campaña, lo cierto es que sirve como buen puente entre unas situaciones y otras siempre que tengamos en cuenta que estamos dentro del género de la acción. Eso sí, cabe matizar que algunos detalles y determinadas licencias que se toman los responsables del argumento puede que se les atraganten a los más puristas de la franquicia.
Lo que sí no admite objeción es el acierto de que la mitad de los capítulos que componen el Modo Historia sean para el bando de los Decepticons y la otra mitad para el de los Autobots. Con los primeros veremos la historia de Megatron tratando de hacerse con una nueva fuente de poder con la que pretende dar la vuelta al conflicto, mientras que en la segunda veremos a Optimus Prime y compañía tratando de sobrevivir en la superficie de un planeta devastado por las tropas Decepticons.
La campaña individual nos durará algo más de 10-11 horas si sumamos los dos bandos, y se compone de un puñado de misiones al comienzo de cada cual escogeremos al Transformer que desearemos interpretar de entre las tres opciones que se nos ofertan. Cada uno tiene sus habilidades únicas, y el juego hace un buen trabajo premiando el probar cada uno de ellos al ofrecer diferentes logros/trofeos y desbloqueables por superar las misiones con unos u otros. Estas misiones pueden resultar algo genéricas en cuanto a diseño y patrones argumentales, puesto que en ningún momento de la aventura abandonamos el planeta que da nombre al juego ni esta guerra civil entre los dos bandos, pero la jugabilidad no se resiente en demasía puesto que se asienta en bases de acción muy sólidas.
A esto hay que sumar que el videojuego atesora mucho ritmo. El primer nivel, de hecho, puede recordar de alguna manera al que abría también Ratchet & Clank: Armados Hasta los Dientes, pues ambos toman impulso con un mapeado enorme ambientado en una ciudad futurista que se derrumba fruto de un ataque y que recorremos a toda velocidad en abundantes autopistas intercaladas con arenas en las que acabar con nuestros enemigos. Todo ello, en ambos casos, con un muy buen sentido del tempo de la acción.
Lucha entre Hermanos
El juego de Transformers, al contrario que el protagonizado por los simpáticos Ratchet y Clank, es un título de acción en tercera persona puro y duro, de modo que también hay alguna parte de plataformas, pero fundamentalmente es un tiroteo constante detrás de otro.
Lamentablemente algo de la frescura y el ritmo del que hemos hablado se pierde por el camino con el paso de las horas de la campaña, y a medio plazo el videojuego puede dar la sensación de que estamos encadenando escenas de acción unas con otras. Por lo demás el juego es un shooter en tercera persona muy notable, sin dinámicas de coberturas ni algunas de las técnicas que se han sumado al género en los últimos tiempos y que ciertamente echamos en falta, pero con mucho carácter y con los elementos distintivos que aportan los propios Transformers como su, obvia, capacidad de transformarse.
Así todo responde a lo que podríamos esperar. Con el gatillo izquierdo apuntamos, con el derecho disparamos y haciendo click en el stick izquierdo nos convertimos en el vehículo que vaya asociado a nuestro personaje. Además hay algunos extras como, por ejemplo, apretar el botón superior izquierdo para lanzarnos hacia delante en maniobras evasivas o el de apretar el stick derecho para llevar a cabo los ataques cuerpo a cuerpo -Optimus Prime, por ejemplo, saca una descomunal hacha para golpear a los enemigos.
El equilibrio entre combates a media distancia -disparos- y de cuerpo a cuerpo se mantiene en todo momento con habilidad por parte de High Moon, sus responsables, sin embargo en la parte de mezcla de estilos que más destaca el videojuego es en la de la posibilidad de simultanear los combates en forma de vehículo o a pie. El cambio se realiza con gran agilidad, y tenemos acceso a forma de tanques, coches, camiones y jets. El título, además, tiene la habilidad de ofrecer tantas alternativas que casi sin darnos cuenta estaremos probando infinidad de combinaciones diferentes, y ahí reside su principal atractivo.
A todos estos factores debemos sumar tres puntos primordiales, todos ellos relacionados con la experiencia multijugador. El primero de ellos es que la campaña podemos superarla en modo cooperativo para tres jugadores, es decir nosotros y otros dos más. Así mismo el modo Escalation ofrece un plus de entretenimiento plantándonos a nosotros y a nuestros amigos contra oleadas de enemigos al más puro estilo del modo Horda de Gears of War 2. Por si fuera poco a todas estas alternativas hay que sumar la presencia de un multijugador competitivo que no resulta particularmente original en cuanto a modalidades, pero que sí es muy llamativo al incorporar sus dinámicas de mutaciones de aspecto a su experiencia jugable. 10 jugadores pueden disfrutar de los estilos PVP con partidas frenéticas, rápidas y divertidísimas; mención especial a Conquista, la mejor de ellas.
Cybertron Como Nunca lo Habías Visto
Gráficamente Transformers: War for Cybertron es, con mucha diferencia, el juego más avanzado sobre la franquicia que hemos visto hasta ahora. El modelado de sus protagonistas es, lógicamente, la estrella y ahí el título no decepciona en absoluto.
Todos los Transformers están cuidadísimos, con detalles sencillamente geniales como los de sus mecanismos, una texturización francamente buena, una carga poligonal notable y unas animaciones de sobresaliente. Lo mejor de todo es que se trata de rediseños de los personajes originales, con lo cual su apariencia es fresca e innovadora. Se podía haber caído en lo fácil y recurrente utilizando modelos vistos una y mil veces, sin embargo High Moon ha tomado el camino difícil y su trabajo ha sido recompensado con unos resultados extraordinarios.
Los escenarios también rayan a buen nivel, con unos diseños futuristas muy interesantes y con algunos fondos en constante movimiento dando una sensación de vida y actividad muy interesante. Lamentablemente hay que reseñar también que éstos se repiten de forma abusiva, y que a pesar del esfuerzo de sus creadores por lograr cierta sensación de variedad lo cierto es que a medio plazo acaban pagando su reciclaje.
En la faceta tecnológica el título se mueve con fluidez casi todo el tiempo, salvo algún momento muy puntual en el que la tasa de imágenes por segundo se resiente ligeramente con mucha actividad en pantalla. Por lo demás el videojuego funciona francamente bien en este sentido con buenos efectos visuales, con unas animaciones que, como hemos comentado, son francamente buenas y con las escasas físicas que pueden observarse en su estático escenario que cumplen su trabajo con sobrada habilidad.
Por lo que respecta a la parte del audio hay que destacar que la banda sonora es francamente buena, que los efectos de audio resultan sobresalientes y que el título llega a nuestro país doblado a nuestro idioma con un buen trabajo aunque todavía alejado del majestuoso trabajo de voces con el que cuenta su versión original.
Transformers: War for Cybertron recupera el pulso de la franquicia con el primer buen videojuego sobre la IP en años. Más allá de ser un producto destinado a los fans, el título de High Moon conseguirá contentar a unos y otros con su poderosa acción en tercera persona y su dilatada vida útil gracias a sus abundantes modalidades.
Comprar Transformers: La guerra por Cybertron