Un concurso de televisión en la década de los 60, un misterioso asesino en la ciudad de Los Ángeles, y una pasión enfermiza por el mundo de los puzles. Pon a prueba a tu materia gris resolviendo hasta 140 rompecabezas asesinos.
Resolver crímenes mientras damos con la respuesta a un gran número de rompecabezas es algo que se ha puesto muy de moda, contando con grandes títulos que han sabido darle una sólida base argumental al clásico género de los juegos de puzles. Algo que también ha intentado conseguir Ubisoft con este discreto James Noir’s Hollywood Crimes 3D, que pese a contar con un importante número de rompecabezas, con algunos verdaderamente ingeniosos, se ha quedado algo lejos de los más grandes al ofrecer muy poca variedad en el tipo de desafíos a los que tendremos que enfrentarnos a lo largo de las cinco o seis horas que puede llevarnos completar la partida.
El asesino del puzle
La historia de este Hollywood Crimes nos sitúa en la ciudad de Los Ángeles en 1961, donde nos convertiremos en un concursante de un peculiar programa de televisión, The Incredible Puzzle Masters, donde tendremos que enfrentarnos a otro participante en una sucesión de pruebas puntuables basadas en la resolución de diversos rompecabezas de creciente dificultad. Pero pronto, aparecerá en escena un viejo conocido, ahora agente del FBI, que nos pedirá ayuda para resolver unos misteriosos crímenes provocados por un asesino con una pasión enfermiza por los puzles y cierta relación con el programa en el que participamos. Una buena forma de guiarnos a través de una historia de cine negro, argumentalmente algo pobre salvo por un giro inesperado en el tramo final de la misma, que no logrará tapar una de las principales pegas del juego: su falta de variedad.
Y es que aunque hablamos de 140 rompecabezas, la mayoría se limitan a expandir un mismo patrón jugable sin ofrecer demasiados cambios más allá de su estética, y esto último no siempre. Por tanto, y a pesar de estar ante algunos puzles bastante ingeniosos que juegan con aspectos como la agudeza visual, la memoria, las matemáticas, geometría e incluso los desafíos secuenciales, al final sentiremos estar repitiendo una y otra vez el mismo tipo de rompecabezas, lo que le resta bastante atractivo al juego.
Nuestras andanzas por el programa de televisión tienen como punto positivo el que no se nos limita a unos pocos rompecabezas, ya que siempre contamos con doce opciones de dificultad variable -cuanto más difíciles más puntuamos-, que consiguen que quedarse bloqueado sea algo prácticamente imposible. Pero también, cuando investigamos los crímenes, con un desarrollo lineal, el juego presenta un curioso sistema de pistas basado en cartas de nuestros admiradores -es lo que tiene salir por televisión-, que llegado el caso pueden hasta resolver los rompecabezas con el coste de perder un buen número de ellas.
En cuanto a los puzles, estos se aprovechan de algunas de las funciones más interesantes de 3DS como el sensor giroscópico, que nos obligará a inclinar la portátil hacia uno u otro lado en algunos de los rompecabezas; la posibilidad de apuntar notas en muchos de los puzles memorísticos o secuenciales, y en menor medida, el efecto 3D estereoscópico, que sin ser el más espectacular visto en la portátil, si consigue transmitir correctamente el efecto de tridimensionalidad, ganando muchos enteros en algunos de los puzles de agudeza visual. No es un título que use como santo y seña este efecto 3D, pero como decimos, sin sobresalir en ningún aspecto, Hollywood Crimes consigue al menos crear desafíos realmente ingeniosos que nos harán sentirnos orgullosos al superarlos sin ningún tipo de ayuda.
El problema, como hemos apuntado a lo largo de este análisis, es que existen muy pocas variantes en los puzles, por lo que llegará un momento en el que sentiremos que estamos repitiendo una y otra vez el mismo tipo de pruebas. Y aunque la historia es interesante y nos incitará a seguir jugando hasta el final, se nota que este es uno de esos videojuegos que podría haber dado mucho más de sí con una mayor variedad de misterios y un uso más inteligente de las características técnicas de la portátil. Algo que se nota por ejemplo a nivel tecnológico, con una peculiar mezcla gráfica que apuesta por introducir a actores de carne y hueso en un mundo virtual, pero que se ha quedado a medio camino con un resultado bastante discreto.
No en vano, estos actores muestran unos movimientos excesivamente limitados y repetitivos que le restan bastante atractivo a un título que, pese a sus esfuerzos por crear una atmósfera de cine negro, se queda corto. Pero lo importante es que la interfaz de usuario resulta clara y los puzles suelen mostrar, por norma, un apartado visual vistoso y agradable, lo que facilita mucho las cosas cuando se trata de resolver crímenes. Además, Hollywood Crimes cuenta con un acertado doblaje al castellano –aunque la música no le anda a la zaga-, tiene detalles tan curiosos como el empleo de la cámara interior de la portátil para mostrar nuestra cara en espejos y demás, y nos permite seguir resolviendo puzles una vez se ha completado la aventura, alargando un par de horas más su vida útil.
Con unos puzles muy ingeniosos y desafiantes, a Hollywood Crimes le ha faltado algo más de variedad en sus rompecabezas para codearse con los más grandes del género. Aun así, su apuesta por crear una historia de cine negro consigue incitar lo suficiente a resolver el misterio tras los crímenes del asesino del puzle.
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