Análisis de Mario vs. Donkey Kong ¡Minilandia!

Análisis de Mario vs. Donkey Kong ¡Minilandia!
Facebook Twitter Flipboard E-mail

La eterna lucha entre Mario y Donkey Kong continúa, y no hay nada que nos alegre más, sobre todo sabiendo la calidad que desborda su última entrega: ¡Megalío en Minilandia! Dirige a los Minimarios a través de más de 80 niveles en un videojuego que destila el talento de Nintendo a la hora de crear experiencias jugables.

Aquel enfrentamiento entre un gorila y un fontanero, iniciado por Shigeru Miyamoto allá por el año 1981 en una máquina recreativa, sigue vigente aún 30 años después como testigo de una jugabilidad única, depurada y brillante en la que, por suerte, Nintendo sigue confiando.

La mejor prueba de ello la tenemos en el nuevo Mario vs. Donkey Kong: ¡Megalío en Minilandia!, título que lejos de seguir ampliando esta particular serie (ya por su cuarta entrega), pretende acercarnos una técnica artesanal y bidimensional que, siempre que sea divertida -como es el caso-, nunca pasará de moda. Mucho menos con un título que desborda simpatía puzlera y una muy ingeniosa acción plataformera dentro de Nintendo DS.

Aparte, para mantener la tradición y los principios de la compañía, gozamos de un argumento puramente anecdótico pero que justifica plenamente el ponernos a jugar. Mario, como presidente de su propia compañía de juguetes, ha inaugurado el parque de atracciones Minilandia, promocionando su apertura con el regalo de una "Minipauline" tan sólo a los 100 primeros visitantes. No habría ningún problema si no fuera porque el gorila Donkey se ha enterado tarde de la promoción, quedándose sin su regalo pero secuestrando -en cambio- a la Pauline de verdad.

Hay que salvar a Pauline, pero para ello deberemos encontrar el camino hasta la puerta de cada nivel. ¿Se te ocurre alguna idea?
Hay que salvar a Pauline, pero para ello deberemos encontrar el camino hasta la puerta de cada nivel. ¿Se te ocurre alguna idea?

¡Minimarios al rescate!
Por tanto, podéis imaginar cuál será nuestra tarea: rescatar a nuestra bella amiga dentro de un conjunto de ocho atracciones que dan para más de 80 niveles diferentes (enfrentamientos finales con Donkey Kong incluidos). En suma, una tarea digna de un fontanero que se enfrentará, con nuestra ayuda, a los crecientes en dificultad y muy adictivos retos que se nos planteen, aunque siempre agudizando el ingenio.

Con una curva de aprendizaje deliciosa, propia de la casa Nintendo, el nuevo Mario vs. Donkey Kong estructura su dinámica de juego en una premisa muy sencilla: llevar a nuestros pequeños juguetes (los MiniMarios) desde un punto A hasta otro B, superando obstáculos y teniendo en cuenta que nunca se pararán, además de que siempre irán en la misma dirección a menos de que se encuentren con una pared.

Teniendo estas simples reglas en cuenta, y contando con que -a medida que superamos niveles- van apareciendo nuevos elementos de jugabilidad (crear vigas para cruzar el vacío, usar muelles para alcanzar plataformas lejanas, usar cintas transportadoras, movernos a través de tuberías, subir escaleras o utilizar cañones), entonces podemos intuir que las cosas se complican -y mucho- con el paso del tiempo.

Los niveles están ambientados en ocho atracciones diferentes que, en algunos casos, recuperan escenarios del universo Mario.
Los niveles están ambientados en ocho atracciones diferentes que, en algunos casos, recuperan escenarios del universo Mario.

No obstante, el videojuego tiene esto en cuenta en todo momento, de manera que el reto es extraordinariamente progresivo (la curva de dificultad está excelentemente calibrada) y encima contamos con un botón -el gatillo L- para solicitar ayuda en cualquier momento de la partida.

Ahora bien, no todo es conseguir que nuestros Minimarios alcancen de manera exitosa la puerta de cada nivel. En efecto, si deseamos sacar el máximo partido de Mario vs. Donkey Kong: ¡Megalío en Minilandia!, entonces se recomienda hacer lo posible por recoger los objetos de cada nivel (monedas, medallas y tarjetas con las letras M-I-N-I-M-A-R-I-O) a fin de ganar trofeos y desbloquear hasta 20 niveles especiales y otros tantos minijuegos que prolongarán, sin duda, la duración total del producto, que no es para nada escasa.

Aún más si consideramos que, adicionalmente, se incluye una Zona de Construcción donde crear y compartir nuestros propios niveles por medio de un sencillo, pero a la vez potente, editor. Y que nadie se preocupe, que no hace falta hacer un "máster" para dominarlo. Realmente, sorprende que desde el primer momento seamos capaces de diseñar unos puzles plataformeros de tantas posibilidades.

Un Modo de desafío adicional permite competir para crear los mejores niveles (desde plantillas predefinidas) que el resto de usuarios podrá votar.
Un Modo de desafío adicional permite competir para crear los mejores niveles (desde plantillas predefinidas) que el resto de usuarios podrá votar.

Y esto no es todo, porque el programa nos permite subir los contenidos creados mediante la Conexión Wi-Fi de Nintendo, así como puntuar las creaciones de otros usuarios, otorgándoles estrellas. Será la propia desarrolladora la que se encargue de velar por el buen funcionamiento del servicio (retirando incluso niveles que puedan resultar ofensivos), pero tal vez lo que más vida pueda otorgar al videojuego sea el hecho de que, de manera quincenal, se van a celebrar concursos donde los propios usuarios serán los que premien la originalidad.

Sin duda, interesantísimas propuestas que se encuentran bañadas por un apartado tecnológico y audiovisual muy adecuado para las necesidades del producto. En primer lugar, porque es posible controlar el videojuego en su totalidad con el stylus (sólo empleamos la cruceta para desplazarnos por niveles grandes); y en segundo término porque los diseños de Yoichi Kotabe (animador manga) resultan limpios, alegres y con un especial colorido.

Por otra parte, los "fans" de la Gran N seguramente apreciarán el hecho de que los mejores temas de juegos como Super Mario 64, Donkey Kong Country o Super Mario Bros 2 estén aquí presentes, acompañando a unos escenarios de fantasía y simpatía que no se acaban ni cuando cerramos la tapa de la consola. Y es que escuchar a Mario gritar un "¡Oh, mi cabeza!" cuando esto ocurre, es buen ejemplo y conclusión del mimo que Nintendo ha aplicado sobre su más reciente lanzamiento para Nintendo DS.

Excelente

Recomendado

Mario vs. Donkey Kong: ¡Megalío en Minilandia!

Por: El equipo de 3DJuegos
Recomendado

Entretenido, adictivo y muy ingenioso, el nuevo videojuego de la serie Mario vs. Donkey Kong es una auténtica apología de una jugabilidad sobresaliente, solamente posible cuando sale de la factoría de Kyoto. Sus más de 80 niveles suponen argumento suficiente para disfrutar durante horas, pero sí a esto le añadimos una potente rejugabilidad y la posibilidad de crear niveles propios, entonces tenemos un título para Nintendo DS altamente recomendable para todo aquel que esté dispuesto a salvar -una vez más- a una joven damisela de las garras de Donkey Kong.

Comprar Mario vs. Donkey Kong: ¡Megalío en Minilandia!
Jugadores: 1
Idioma: Manual en español y textos en español
Duración:
Comentarios cerrados
VÍDEO ESPECIAL

4.527 visualizaciones

El AUTÉNTICO AAAA de Ubisoft FAR CRY 2

Hay revoluciones que pasan frente a nuestros ojos sin que apenas nos demos cuenta. Juegazos que, por la velocidad de la industria y lo rápido que muchos se suman a las modas, pasan inadvertidos o hacen algo de ruido para luego quedar completamente sepultados por secuelas o...