Tras el relativo éxito que cosechó la primera parte de Aura, todos los indicios apuntaban a una segunda, con mejores planteamientos en su estructura. La aventura aún sigue viva, y 3djuegos te lo cuenta todo.
Dependiendo del nivel aventurero que tengas, irás logrando los diferentes puzzles de esta aventura gráfica en primera persona; puzles tan intrincados que harán que hasta el más templado se convierta en un manojo de nervios. ¿Por qué digo esto?, pues a causa de la dificultad de los acertijos, la poca precisión de los enigmas y la clara falta de buenas pistas para llegar a la obtención de una solución.
La aventura parte de un nivel bastante elevado, sólo apto para expertos en estas lides, con grandes conocimientos en este tipo de aventuras. Para un jugador primerizo la tarea será ardua, pues la mayoría del tiempo se encontrará perdido y sin un rumbo que seguir.
Un argumento no muy eficaz
Es un fastidio tener que comenzar esculpiendo este análisis con una frase tan directa y sentenciadora, pero es la pura realidad. El argumento de Aura 2 no es la panacea del género y no llegará, con toda seguridad, a ganar ningún premio de la crítica a la mejor historia jamás contada. Aún así se defiende y, aunque no innove, intenta de forma procelosa erigir un guión que nos mantenga enganchados las suficientes horas como para que veamos bien invertidos los euros gastados en él.
La historia radica en una pugna entre clanes, donde se disputan la tenencia de los anillos sagrados. Estos no deben caer en poder de las fuerzas del mal, en caso contrario el mundo se sumiría en el caos y todo lo conocido devengaría en la más pútrida de las suertes. En nuestros comienzos portamos los anillos sagrados y debemos llevarlos, como misión, al clan de los Custodios, pues ellos son los únicos que pueden salvaguardar la paz y la prosperidad.
Un sistema ya visto
El sistema de juego que utiliza este Aura 2 es el ya utilizado en numerosas aventuras del estilo, es decir, el point & click, en castellano, apuntar y pulsar. Toda la partida transcurrirá bajo las premisas de este sistema, por lo tanto abstenerse aquellos usuarios acostumbrados al gatillo fácil y los pads de control.
Dependiendo del objeto que tengamos delante de nuestros ojos el puntero del ratón cambiará para mostrarnos si éste es accesible o no. La mayor parte del juego la pasaremos inspeccionando los alrededores para ver si nuestro puntero nos deja clicar en algún lugar. También veremos cómo cambia cuando tengamos que desplazarnos en cualquier dirección, en este caso aparece una especie de flor de lis indicando donde vamos.
Lo que si hubiera sido muy necesario es un sistema por el que pudiéramos examinar los objetos con mayor detalle. Por ejemplo se podía haber dispuesto un detalle en 3D con un zoom que mostrara cada recoveco del objeto, de esta forma se extraerían más conclusiones acerca de su uso. En fin, a ver si en una futura versión de este juego…
En más de una ocasión tendremos que revisar las habitaciones y parajes para poder averiguar los puzzles que se proponen en cada rincón. Será de vital importancia poder escudriñar los libros, notas y jeroglíficos que están diseminados por doquier, pues en ellos está la solución a los variados enigmas. En más de una ocasión nos tiraremos de los pelos para superar cualquier escollo, ya que es una aventura realmente difícil. Con tesón y gallardía se superan todos los obstáculos, aunque no estaría de más que te hicieras con una guía para superar tan ardua aventura.
Si de gráficos hablamos…
De un tanto limitada en ciertos aspectos se la puede tachar a esta segunda parte de Aura. Sus escenarios pre-renderizados no es que estén obsoletos, ¡en absoluto!, lo que pasa es que en los tiempos en los que estamos se echa de menos un mayor número de efectos adaptados a las maneras actuales. Será muy normal encontrarse ciertos objetos móviles que, de vez en cuando, nos sacan de la rutina de ir observando decorados sin vida, lo que se agradece enormemente, sobre todo hoy día, donde los frames por segundo están tan sobrevalorados.
De cualquier forma el aspecto general luce bastante bien, pues se han creado con mucho mimo las estancias y lugares naturales a la perfección, haciendo un gran trabajo artístico y recreando lugares de fantasía con una imaginación desbordante. Especial mención tienen la recreación de un castillo al estilo medieval llegados a un punto de la aventura, donde nos encontraremos como sumergidos en leyendas de guerreros y princesas. La ambientación, por tanto, ha sido un gran acierto, aunque la sensación de soledad no nos abandone en ningún momento.
Existen ciertas escenas cinemáticas que le dan al juego un carácter no tan inmovilista. De vez en cuando veremos un cortometraje con personajes animados, cuyas influencias en la aventura serán más que notables. Por el contrario, el nivel de detalle de las imágenes pierde en calidad, observándose en pantalla que la pixelación, aún en nuestros días, sigue estando más que presente. Esto no es ningún problema que afecte a la jugabilidad, pero sí que impacta y desluce el aspecto general de este producto, haciéndole descender unos cuantos enteros.
Un título con buen acabado
Aunque en los comienzos del análisis se haya hecho hincapié a ciertos aspectos negativos del juego, no hay que tirarlo todo por la borda. Estamos ante un programa que técnicamente no es la octava maravilla, pero que si tiene ese sabor añejo y clásico que todos los aventureros estábamos esperando. Una de sus mejores señas de identidad es la inclusión de los subtítulos en castellano, además de las traducciones al completo de todos los textos escritos que encontramos por toda la aventura.
Las voces de los personajes se han quedado en inglés, cosa que a un aventurero con tablas no le ha de importar, ¿quién no recuerda esas cientos de horas jugando al gran King´s Quest, con todo en la lengua de Shakespeare? Si, ya lo sé, esa era una aventura que iba por otros derroteros, pero era solo un ejemplo. En fin, que el verdadero “catador” de aventuras lo va a disfrutar en demasía, sobre todo gracias a los intrincado de la trama.
No solo el aspecto lingüístico ha sido cuidado, si no que las ondas musicales también se llevan su buena parte del pastel. Todas las melodías que podemos escuchar componen un placer auditivo, no llegan a cansar en ningún momento y además sirven de relax para nuestros oídos. Como se nota que ya iba haciendo falta una aventura para relajarnos, ¿eh?
Una aventura gráfica como las de siempre, con algunos altibajos en su desarrollo que no implican un salto al vacío de los desarrolladores. Sigue la senda iniciada por la primera parte, pero limando ciertos contenidos argumentales. No resurgirá una revolución en el mundo aventurero debido a este juego, aunque si se percibe como una continuidad de historias estilo Myth (salvando las diferencias) y reafirmando el género con sus valores más conservadores.
