Análisis de The UnderGarden

Análisis de The UnderGarden
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Alejado de la acción más frenética, con The Undergarden podremos sumergirnos en un enigmático mundo en el que la música relajante y un sinfín de formas multicolor creciendo a nuestro alrededor, serán la tónica predominante. ¿Quieres vivir una de las experiencias más bellas del año?

Siguiendo la tónica de otros títulos como Flower de PlayStation Network, The Undergarden es un sencillo videojuego de puzles que basa prácticamente todo su atractivo en su apartado audiovisual. Y es que nuestro objetivo principal no será otro más que el de recorrer una serie de niveles cavernosos bajo el mar, repartiendo polen a diestro y siniestro para que la flora de nuestro alrededor cobre vida con sus intensos colores. Así, más que desafíos basados en la ejecución de movimientos rápidos o la resolución de rompecabezas complicados, en esta obra tan personal nos dejaremos llevar siguiendo las rutas hasta alcanzar el final del nivel. Relajado, sin excesivas complicaciones pero, eso sí, con mucho colorido.

El colorido y la vistosidad de los niveles una vez los hemos polinizado resulta fantástico, de ahí que pararse a observar sea algo muy habitual.
El colorido y la vistosidad de los niveles una vez los hemos polinizado resulta fantástico, de ahí que pararse a observar sea algo muy habitual.

Polinízalo todo
La idea sobre la que se cimenta The Undergarden es la de recorrer niveles de grandes dimensiones, que por norma serán bastante lineales, superando sencillos puzles basados en su mayoría en el juego con la física. Así, y aunque los primeros escenarios resultarán de lo más sencillos, progresivamente veremos cómo enormes muros de piedra bloquean nuestro paso, o cómo rústicos mecanismos generan molestas corrientes de aire que nos obligarán a buscar rutas alternativas. Y unido a esto nos encontramos con el principal atractivo del juego: la polinización de la flora. ¿Qué significa esto? Básicamente, que nuestro peculiar protagonista –una especie de hada submarina- deberá recoger el polen de unas esporas para poder dar vida a las plantas que le rodearán de forma automática. Si nos quedamos sin el polen, ya sea por haberlo invertido en la polinización o por perderlo de forma brusca al chocar contra algunos obstáculos, por mucho que nos movamos ninguna planta crecerá a nuestro paso, lo que significa que deberemos ir en busca de otra espora para recargar energías.

Pero como decíamos, este proceso no se queda en lo meramente estético. Y es que aparte de las flores que están simplemente “de bonito”, hay otras que ofrecen frutos con características especiales que deberemos usar para sortear los obstáculos. De este modo, habrá semillas que pesarán tanto que serán capaces de hundir los grandes mecanismos de piedra que nos cierran el paso, mientras que otras harán lo propio pero subiendo hacia arriba. También las habrá explosivas, luminosas… en definitiva, las suficientes como para dotar de algo de variedad al desarrollo de la aventura.

Aunque en los primeros niveles la dificultad será muy baja, progresivamente se irán añadiendo nuevos desafíos realmente interesantes.
Aunque en los primeros niveles la dificultad será muy baja, progresivamente se irán añadiendo nuevos desafíos realmente interesantes.

Explora y recolecta
Con unos desafíos no excesivamente complicados, The Undergarden apuesta también por potenciar la exploración de los entornos, en busca de una serie de ítems especiales; algo que únicamente repercutirá en la valoración final de nivel, que después podremos comparar con los resultados de otros usuarios. En este sentido, el polinizar todas las plantas del escenario, recoger diamantes y localizar flores especiales, serán los aspectos a tener en cuenta, y no tanto el tiempo que tardemos en completar el nivel, algo tan secundario que ni siquiera se contabilizará. Y es que como decíamos, éste es un juego sensorial creado para hacer disfrutar a nuestros sentidos; algo que logra con creces.

Y no podemos olvidarnos de los simpáticos músicos que se encontrarán repartidos por cada nivel. De forma individual, los temas que interpretarán serán muy discretos porque hablamos de un ser con un único instrumento pero… junta a varios y empieza a disfrutar de los cambios de música dinámica mientras, además, toda la flora que nos rodea reacciona a la melodía cambiando de color o forma. Al finalizar cada nivel, si hemos conseguido reunir a todos los músicos, obtendremos también ese reconocimiento en la tabla de resultados.

Lo poco exigente que resulta y que los buenos rompecabezas escasean le restan cierto valor a este título que apuesta más por lo visual que por lo jugable.
Lo poco exigente que resulta y que los buenos rompecabezas escasean le restan cierto valor a este título que apuesta más por lo visual que por lo jugable.

Pero más que el desafío de encontrar estos ítems o superar los sencillos rompecabezas, lo que de verdad motiva a seguir jugando es ver cómo el mundo que nos rodea cambia a nuestro paso y se llena de color. Y es que el apartado audiovisual de The Undergarden es realmente bueno, con una vistosidad y un acompañamiento musical que logrará que de verdad nos relajemos y nos dejemos llevar. ¿El problema? Que basar todo el atractivo de un juego en esto tiene el inconveniente de que puede cansar rápidamente a más de uno, amén de que no supone un desafío demasiado elevado superar los rompecabezas. Además, el cooperativo que se ha incluido no aporta ningún aliciente más allá del poder compartir la aventura con otro, ganando además problemas de cámara por centrarse ésta en el jugador número 1 –muchas veces se deja vendido al acompañante-.

Interesante

Sin sello

The UnderGarden

Por: El equipo de 3DJuegos
Sin sello

Muy bello y relajante pero poco exigente a nivel jugable y con ciertos problemas con las cámaras y el control de nuestro protagonista, The Undergarden es uno de esos juegos tan personales que atraparán a algunos jugadores y dejarán con cierta cara de indiferencia a otros. Sus cinco horas de juego no suponen un desafío demasiado importante, pero sí garantizamos que nuestros sentidos disfrutarán viendo crecer la flora a nuestro alrededor.

Jugadores: 1-2
Idioma: Textos en inglés
Duración:
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