Uapito / 17 de julio de 2018 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

8 Muy Bueno

Simple pero adictivo
A primera vista no parece gran cosa: un simple arcade sin demasiada ambición. Una vez que juegas y profundizas tu visión cambia radicalmente, la lograda jugabilidad, que nunca se hace repetitiva, te hará desear seguir jugando hasta acabarlo. Nosotros controlamos un guerrero escandinavo al que un dios por cierto muy aburrido le concede una arma(una especie de lanza), nuestra misión consiste en 'entretenerle' acabando con todo lo que se nos ponga por delante. El modo de control es el siguiente: estamos generalmente en el lado izquierdo de la pantalla y portamos una especie de lanza, con la que debemos apuntar y acabar con todos los monstruos antes de que nos alcancen y nos quiten la vida. Hay una variopinta cantidad de enemigos: zombis, aves, cíclopes, guerreros con escudo, magos, pingüinos asesinos, peces voraces ect(todo relacionado con la mitología escandinava). Cada uno tiene una particularidad diferente: unos son más rápidos, otros más erráticos, otros requieren más golpes o ser más certeros(darle en la cabeza p.ej), otros nos aturden temporalmente ect. También existen jefes finales que nos complicarán más las cosas, cada uno con mecánicas diferentes que aportan variedad a la experiencia.

Dispondremos también de una gran variedad de armas especiales, además de la lanza, dispondremos de armas de ataque y defensa que pueden sacarnos de más de un apuro. Desde una lanza que se divide en tres, un rayo que fulmina a todo lo que esté por delante, un muro que contiene a los enemigos y muchas más. El problema es que necesitan ser recargadas por lo que debemos elegir bien el momento en que utilizarlas. Estas armas especiales se consiguen con los créditos que conseguimos acabando con los enemigos(unas evidentemente requieren un mayor número de créditos que otras). Los créditos aumentan si tenemos más puntería, es decir si acertamos en la cabeza o encadenamos varias muertes sin fallar.

El apartado gráfico y sonoro, sin ser una maravilla, cumple bien. Los gráficos son sencillos y minimalistas, recrean un mundo nórdico adecuadamente y la banda sonora es repetitiva pero correcta, en cambio los efectos sonoros son algo simples. En cuanto a la dificultad decir que está bien ajustada, ni muy fácil ni desesperante. Aconsejo jugar a este juego con teclado y ratón ya que con el mando resulta muy lento el apuntado y no es muy eficaz.

En definitiva un arcade más profundo y complejo de lo que puede parecer al principio, la mecánica de apuntar con la 'lanza' no nos resultará repetitiva y da más de sí de lo que podamos imaginar, divertido. variado y una ganga en cuanto a precio. Recomendado para los gamers que gusten de este tipo de arcades.