La saga Yakuza cuenta con 15 años de historias a sus espaldas, pero con Yakuza: Like a Dragon, sus responsables nos ofrecen un nuevo comienzo de la mano de nuevos protagonistas, un nuevo sistema de juego JRPG, y una ciudad hasta ahora inédita en la saga. Yokohama es una ciudad repleta de oportunidades, y a continuación, os contamos los 7 motivos por los que deberías visitarla incluso si no has jugado nunca a un Yakuza.
¿Dramas personales? ¿Disputas entre clanes de la mafia? Y… ¡¿Yakuzas vestidos de bebés?! Yakuza ha destacado siempre como una de las sagas más excéntricas y emocionantes de los videojuegos. Y, durante esta generación, su fama en Occidente se ha disparado gracias a esa mezcla de dramas criminales y mundos abiertos realistas, con personajes estrafalarios, situaciones absurdas, y un sentido del humor sin igual. Con 15 años de vida y una montaña de historias a sus espaldas, adentrarse en la saga Yakuza sin conocimientos previos puede parecer imposible. Y aquí es donde entra en juego Yakuza: Like a Dragon.
La nueva aventura de Sega y Ryu Ga Gotoku Studio estará disponible el 10 de noviembre en Xbox One, Xbox Series X y S, PS4 y PC, siendo así la primera entrega que estará disponible de estreno en una consola Xbox. Un juego que, además, supone un comienzo nuevo para todos: nuevo protagonista e historia, nuevo sistema de combate basado en los JRPG, y una nueva ciudad por descubrir, con el mayor tamaño de la historia de la saga, y rebosante de potencial. Porque Yokohama es una ciudad de oportunidades. Es el punto de partida de la nueva vida de Ichiban Kasuga, nuestro protagonista, tras salir de la cárcel.
Pero también es el inicio de una historia completamente nueva en la saga Yakuza. Una que abre sus puertas tanto a los más veteranos como a aquellos que no la hayan probado nunca. Y como sabemos que nunca es fácil iniciar una nueva vida en otra ciudad, os traemos aquí una guía de Yokohama con los 7 motivos por los que no deberás perderte Yakuza: Like a Dragon este otoño. Una aventura JRPG de mundo abierto fuera de toda norma, y que llega dispuesta a poner patas arriba todas las expectativas que tengas de este género.
Un nuevo comienzo para Kasuga (y los jugadores)
Nos encontramos con un protagonista bocazas dispuesto a meterse en problemas
Yakuza: Like a Dragon nos pone en la piel de Ichiban Kasuga, un antiguo Yakuza que, tras 18 años encarcelado por un crimen que no cometió, se ve traicionado por su antigua familia y disparado en el pecho. Días después, se despierta semidesnudo entre la basura, en medio del barrio de Isezaki Ijincho de Yokohama, sin saber qué hace ahí ni quién ha tratado sus heridas, pero dispuesto a descubrir la verdad tras lo ocurrido. Se trata de la primera entrega principal de la saga que no cuenta con Kiryu Kazuma como protagonista, una muestra de intenciones que deja claro desde el primer momento que se trata de un nuevo comienzo.
Ahora nos encontramos con un protagonista más extrovertido y bocazas, dispuesto a meterse en problemas si la situación lo requiere, y con un nuevo elenco de personajes variados que se unen a nuestro viaje. Aunque todavía queda por mencionar una característica muy curiosa de nuestro personaje. Porque resulta que Kasuga es un fan a muerte de cierta saga JRPG y como bien indica el nombre del juego, le gusta ver la vida "como si fuera un Dragon" (Quest), algo que nos lleva directos al cambio más radical de esta entrega.
La vida, como en un JRPG
Atrás quedan los beat 'em up callejeros y los combates en tiempo real. Ahora, la vida se experimenta como en un JRPG. Con Yakuza: Like a Dragon, Sega cambia por completo la jugabilidad de los combates para convertirlos en un juego de rol por turnos, con sus clases y niveles, sus ataques especiales y sus invocaciones. Pero eso no significa que se pierda la esencia de la saga, ni sus movimientos espectaculares.
Por ejemplo, durante el combate los personajes podrán hacerse valer de cualquier objeto cercano de la calle para aporrear a los enemigos, o ejecutar poderosos ataques especiales con los puntos de magia, tan repletos de espectáculo como acostumbra la saga. Incluso podemos aprovechar el posicionamiento para realizar ataques de área, o empujar a los enemigos contra obstáculos. Pero todo ello con un toque de humor gracias a la imaginación de Kasuga.
Nuestro personaje convierte las planchas para el pelo en hechizos de tipo fuego, los bolsos de diseño en armas terroríficas, o una balada con la guitarra en un ataque especial que acabe con los enemigos. Además… ¿Resulta que salvaste a unas langostas en una misión secundaria? Pues ahora las puedes invocar como una lluvia de crustáceos para que ataquen al enemigo. ¿Qué te gusta darle de comer a las palomas y ahora te conocen? Pues espera, que también puedes enviar una bandada a que picotee a tus enemigos. Y así con mil ejemplos, que tiran de imaginación para convertir luchas "cotidianas" en enfrentamientos sin igual.
Oportunidades laborales por doquier
Las vocaciones de nuestro personaje son muy variadas: hay más de 20 trabajos disponibles
Algunos viajan por disfrute, otros viajan por trabajo, y si algo tiene Yokohama, es que nunca faltan las ofertas de empleo. Como todo JRPG que se precie, Yakuza: Like a Dragon cuenta con un sistema de clases, o trabajos, que determinan las estadísticas y habilidades de los personajes. Pero, por mucho que le pese a nuestro protagonista, la vida no es un JRPG. Y eso significa que, para aprender nuevos trabajos, tenemos que hacer una visita a la ETT - Empresa de Trabajo Temporal - más cercana para buscar empleo.
Al principio, Kasuga comenzará su aventura como autónomo, aunque se salva de pagar las cuotas. Pero las vocaciones de nuestro personaje son muy variadas, y durante el juego podremos adoptar clases como Cocinero, Mendigo, Músico Callejero, Detective, Capataz de obra, Breakdancer… Hay más de 18 trabajos disponibles, todos ellos con aspectos propios, ataques especiales únicos y bonificaciones concretas, que le aportan profundidad rolera a la aventura sin dejar de lado el humor y las situaciones absurdas que abundan en la saga.
Una ciudad repleta de habitantes pintorescos
Isezaki Ijincho es un barrio como cualquier otro, repleto de gente de lo más normal: jefes yakuza vestidos de bebés, enemigos escondidos en bolsas de basura… Si algo caracteriza a los juegos de esta saga, son sus misiones secundarias y su elenco de personajes coloridos, por no decir absurdos. Y que el paso al JRPG no os engañe, Like a Dragon es un Yakuza hecho y derecho, tan repleto de humor como hasta ahora, y siempre dispuesto a superarse con cada nuevo encuentro.
Las calles de Yokohama ofrecen toneladas de misiones y encuentros especiales por descubrir, manteniendo siempre ese tono de humor que ha hecho tan querida a la saga. Y los enemigos… Digamos que no son los enemigos a los que estáis acostumbrados. Habrá matones callejeros y yakuzas en busca de gresca, como de costumbre, pero también gente disfrazada, otakus agresivos, militares y policías de patrulla, pacientes de hospital… Incluso gente en pañales y bolsas de basura andantes, como mencionamos más arriba. Uno de los elencos enemigos más variados y extravagantes que jamás os vayáis a encontrar.
Actividades por doquier
Si te aburres de pasear por la ciudad y enfrentarte a sus habitantes, en Isezaki Ijincho abundan las actividades con las que pasar el rato de la mejor manera. ¿Te apetece una partida en los arcades? Pues los salones recreativos de Sega te ofrecen multitud de juegos reales de la compañía con los que pasar el rato. ¿Qué lo tuyo es competir? Pues no te preocupes, las carreras de karts callejeras te dan ese subidón de adrenalina para que lo pases en grande.
Y luego tenemos las jaulas de bateo y las partidas de golf, las sesiones de karaoke dándolo todo, exámenes vocacionales "extremos", sesiones de cine clásico intentando no dormirse… ¡Incluso crear tu propia empresa y llevarla a lo más alto! Las actividades nunca acaban en Yakuza: Like a Dragon, y lo mejor es que traen recompensa. Cada actividad que hagamos ayuda a desarrollar la personalidad de Kasuga, permitiendo así desbloquear trabajos todavía más divertidos para los personajes.
Una ciudad que cobra vida con el Dragon Engine
La saga Yakuza siempre se ha caracterizado por su recreación precisa, siempre detallada, de las ciudades y barrios reales de Japón. Algo que ha ganado en enteros desde la introducción del Dragon Engine hace un par de entregas, capaz de mostrar los escenarios urbanos más realistas y vistosos de toda la generación, a la par que ofrece entornos dinámicos repletos de movimiento, con multitud de personas y de objetos interactuables, sin cargas de por medio.
Además, y como hemos mencionado antes, el nuevo barrio de Isezaki Ijincho supondrá el entorno más grande de la saga hasta la fecha, que promete exprimir al máximo las consolas actuales, y sacar partido a las máquinas de nueva generación con una versión mejorada. Eso sí, al más puro estilo de la saga, las mejoras que promete Sega abarcan desde una "IA crustácea de nueva generación" hasta un "optimismo optimizado" para los personajes.
Toda la emoción de Yakuza, en completo español
Yakuza: Like a Dragon llega a Occidente con una traducción completa al español en todos los textos
Visitar una ciudad extranjera puede ser intimidante si no conoces el idioma. Eso es algo que le ha pasado a muchos con la saga Yakuza, pero en esta entrega, Sega os tiene cubiertos. Yakuza: Like a Dragon llega a Occidente con una traducción completa al español en todos los textos, para el disfrute de todos aquellos que prefieran jugar en la lengua de Cervantes. Y las voces cuentan también con un doblaje al inglés, con nombres tan conocidos como George Takei.
Por supuesto, los más puristas podrán disfrutar de las voces japonesas originales ¡Todo sea por opciones! Con una historia y un elenco de personajes completamente nuevos, una ciudad abierta inédita hasta ahora en la saga, y un sistema de juego remodelado por completo, Yakuza: Like a Dragon es esa oportunidad que estábais buscando para adentraros en este universo. Un juego que estará disponible el 10 de noviembre en Xbox One, Xbox Series X y S, PS4, PC, y en marzo de 2021 para PlayStation 5.