La industria portátil ha acompañado al juego en casa desde prácticamente sus inicios. Muchos incluso afirmaban en su momento que era el futuro de los videojuegos. Pero desde la vorágine del juego en dispositivos móviles, lo que pocos preveían es que las portátiles tradicionales podrían ver peligrar su hegemonía. Pero, ¿es de verdad la situación tan grave como para pensar que los móviles sustituirán un día a las portátiles de toda la vida?
"Esta es posiblemente la última generación de portátiles de la Historia". Así de rotundos se muestran algunos analistas a la hora de ver el mercado de las consolas portátiles. En los últimos dos años, el debate ha estado candente tras cada nueva estadística. Cada nuevo juego lanzado. El mercado de los móviles es mayor año tras año, y los últimos resultados muestran que tanto las ventas como el mayor porcentaje de desarrollo se centra en los smartphones y tablets.
Esta es posiblemente la última generación de portátiles de la Historia
Si viéramos el panorama desde las frías cifras, el resultado sería bastante esclarecedor. Muchas compañías ven el mercado móvil más atractivo que trabajar para Nintendo 3DS o PlayStation Vita. Peter Moore comentaba: "En el pasado hemos apoyado tanto a PS Vita como Nintendo 3DS. Pero cuando tienes recursos limitados y tus propios equipos te dicen, 'Creemos que en los próximos dos o tres años [los móviles] son las plataformas donde la gente consumirá videojuegos' la decisión parece clara".
Pero esto no es la historia de un puñado de números. Es la historia de un puñado de juegos portátiles que que no tienen cabida en el mercado de los móviles.
Los porqués, tanto por parte de las compañías como de los consumidores parecen claros: ¿Por qué llevar una portátil que cuesta un par de cientos de euros y que sólo sirve para jugar, cuando puedes tener un dispositivo que sirve para navegar, leer el correo, trabajar y, además, jugar? ¿Por qué gastar en un juego más de cuarenta euros cuando puedes gastar cuatro? Y la más desafiante: ¿Por qué comprar una consola portátil cuando deberían ser Sony y Nintendo las que lleven sus juegos a mi smartphone?
La respuesta a todos estos porqués parece también clara: el control. Mientras que las tabletas y los dispositivos móviles se han esforzado en demostrar que pueden igualar o incluso superar gráficamente a Nintendo 3DS y PS Vita, el control sigue siendo la tarea pendiente. No en vano, son los llamados "arcades de un sólo botón" los verdaderos triunfadores de las listas de ventas, pero lo cierto es que a día de hoy el mercado móvil no puede traspasar con éxito un género de los videojuegos tan clásico como el de las plataformas sin perder la precisión necesaria por el camino. De hecho, son los juegos naturales de ordenador y de ratón, como las aventuras gráficas o la estrategia, los que mejor se han amoldado a las nuevas tecnologías móviles.
Para ello, se inventaron los controles táctiles. Un pad virtual se acopla en la pantalla para mover al personaje, ya sea en un juego de plataformas, un FPS o un RPG, por ejemplo. Sin embargo, la precisión en los controles así como tus propios dedos ocupando la pantalla siguen entorpeciendo la experiencia. Muchas compañías, como PowerA, aprovecharon esta circunstancia para aportar soluciones como los mandos MOGA, que llevan el control de un pad tradicional a nuestros smartphone. De hecho, no hace falta recurrir a un mando especial: nuestros propios mandos de Xbox 360, PS3, Xbox One y PS4 son perfectamente compatibles con el smartphone a través de una conexión Bluetooth o un cable microUSB a USB OTG.
Con todo, estos accesorios no son capaces de resolver el problema latente: la portabilidad. Si ya es difícil encajar una 3DS o una PS Vita en el bolsillo, acompañar tu teléfono de un pad tradicional es totalmente imposible y algo incómodo de configurar para una partida rápida en el autobús de camino a la escuela o el trabajo. Muchos juegos portátiles son compatibles con este tipo de mandos, como Dead Trigger 2 o RavenSword. Incluso clásicos de consola, como GTA San Andreas o Caballeros de la Antigua República. Pero, ¿han supuesto estas mejoras un cambio en el jugador tradicional? La realidad es que no. El jugador más asiduo prefiere seguir utilizando una Nintendo 3DS o una PS Vita para jugar.
La pérdida de terceros
Independientemente de si usan los móviles para jugar, el jugador tradicional prefiere una portátil. Opta por un control preciso en una plataforma dedicada. Como decíamos anteriormente, esto no va de ventas, sino de videojuegos, pero el nuevo mercado que suponen las tablets y los smartphones ha supuesto un nuevo paradigma para las compañías third-parties. PSP y Nintendo DS supusieron el auge del juego portátil; no sólo las consolas gozaban de buena salud y cuidado por parte de Sony y Nintendo, sino que muchos desarrolladores brindaron experiencias únicas en estos dispositivos.
Pongamos a Nintendo DS como ejemplo. En el tiempo que lleva 3DS en el mercado, DS dio luz a juegos como Another Code: Two Memories, Castlevania Dawn of Sorrow, Contact, Lost in Blue, Meteos, Trauma Center... Todos ellos de third-parties y muchos se convirtieron rápidamente en iconos de la consola. A día de hoy, incluso con la buena salud que goza Nintendo 3DS, para elaborar una buena lista de juegos hay que recurrir a títulos de la gran N, como Super Mario 3D Land, Mario Kart 7, Luigi's Mansion o el más reciente The Legend of Zelda: A Link Between Worlds. Esto no quita que la consola goce de grandes juegos third-parties. Monster Hunter sigue siendo el gran apoyo de Capcom a la máquina, junto con Street Fighter IV, Phoenix Wright y Resident Evil Revelations. Konami también apoyó la máquina con Castlevania Lords of Shadow: Mirror of Fate, y Sega ya destina sus Sonic exclusivamente a plataformas de Nintendo. Pero de todos ellos, es quizá Bravely Default el que mejor representa el espíritu de DS: una IP nueva diseñada específicamente para 3DS.
Entonces, ¿por qué no vemos también los equivalentes en 3DS a títulos como Meteos, Ouendan o Trauma Center? ¿Dónde están sus desarrolladores? Cing, por ejemplo, creadores de Another Code y la saga Hotel Dusk, se declararon en bancarrota en 2010. iNiS (Osu! Tatakae! Ouendan, Elite Beat Agents) cuenta como algunos de sus últimos desarrollos juegos para iOS y Android. Muchos otros desarrolladores parecen estar migrando al mercado móvil, algunos con ports de sus juegos conocidos, otros con nuevos títulos adaptados al mercado. Pero, incapaces de llevar mecánicas profundas a los smartphones, la creatividad de estas compañías parece quedarse en tierra de nadie.
Por mucho que los días de Nintendo DS hayan pasado de largo, a 3DS le acompañan los juegos y las ventas. Nintendo ha demostrado que ella sola es capaz de sostener un buen catálogo de juegos para su portátil, lo cual atrae a más consumidores y hace que en los últimos años apoyos importantes como Square-Enix o Bandai Namco hayan incrementado su producción en la portátil.
No obstante, con un mercado portátil tan fragmentado, ¿llegará Nintendo 3DS a gozar de un catálogo tan amplio y variado como supuso la edad de oro de Nintendo DS? La respuesta sigue en el aire, pero pase lo que pase en el futuro, Nintendo está tomando medidas para que el negocio continúe durante más allá de esta generación, sin tener que pasar por las plataformas móviles. La preocupación está ahí, tal y como reflejaba Miyamoto en sus palabras: "Tengo un cierto miedo de que estos ‘smartphones regalados’ se estén convirtiendo en sistemas de hardware en los que jugar videojuegos debido a sus precios, que son más bajos que los de nuestros videojuegos más baratos de toda nuestra historia".
En la última reunión con los accionistas, Iwata afirmó que existe una reestructuración en su división de i+D, habiendo reunido los equipos de desarrollo portátil y de sobremesa bajo un mismo techo: "El año pasado, Nintendo reorganizó sus divisiones de I+D e integró los equipos y desarrollo de portátil y sobremesa en una división bajo la supervisión del señor Takeda. Anteriormente, nuestros videojuegos portátiles y de sobremesa tenían que ser desarrollados por separado, debido a las necesidades tecnológicas de cada sistema. El hecho de ser un dispositivo con batería o adaptador de corriente los hacía muy diferentes, dando lugar a arquitecturas opuestas y, por tanto, a desarrollos de software divergentes. Sin embargo, a causa de los grandes avances tecnológicos, se hizo posible lograr un buen grado de integración arquitectónica. Hemos discutido este punto, y llegado a la conclusión de que era el momento adecuado para integrar los dos equipos."
Las últimas palabras de Miyamoto logaron todo tipo de especulaciones "A medida que avanzamos, estamos buscando maneras en las que podamos unificar entornos de desarrollo de consolas y portátiles". ¿Significa esto que Nintendo está llevando a cabo una consola a su vez portátil y de sobremesa? ¿O está, por el contrario, creando un ecosistema compatible, similar al Cross-Play de PlayStation? Sea como fuere, los planes de Nintendo son contrarios a las opiniones de los analistas: esta no será la última generación de portátiles.
Reanimando la Vita
Sony con PlayStation Vita tiene otro camino por recorrer. Las ventas de su consola suponen algo más del 15% del mercado portátil y el propio apoyo por parte de Sony es incierto. A la pregunta del medio Polygon sobre si recibiría menos juegos first-party en el futuro, Suhei Yoshida afirmó: "Diría que sí, que es correcto". Sin embargo, un mes después matizó a la revista GameReactor: "La pregunta que se me consultó fue la siguiente: '¿serán menos el número de proyectos first-party en PS Vita?' A lo que contesté que sí. Nunca dije que no fuera a haber más juegos para PS Vita, continuaremos haciéndolos... Acabamos de lanzar un juego llamado Freedom Wars en Japón, y ha sido recibido muy bien".
Exceptuando Freedom Wars, que en Europa llegará a finales de año, el último gran juego exclusivo triple A por parte de Sony se lanzó en septiembre del año pasado: Killzone Mercenary. A la espera de la próxima Gamescom, donde Sony puede arrojar algo de luz sobre el futuro de la portátil, la compañía japonesa relegó su portátil a un segundo plano durante su conferencia del E3, donde destacó algunas características de la máquina como su compatibilidad con PlayStation 4 o el lanzamiento de PlayStation TV en Europa, un dispositivo que nos permitirá jugar a juegos de la portátil en la televisión.
¿Significa esto que PS Vita posee un catálogo pobre? Muchos usuarios no estarían tan seguros. Juegos como TearAway, Soul Sacrifice, Gravity Rush o Uncharted: El Abismo de Oro se cuentan entre los grandes títulos first-party de la portátil, ayudado por terceros exclusivos como Persona 4 Golden o Ys: Memories of Celceta. A ellos se le suman grandes multiplataformas que se ajustan perfectamente a PS Vita como Dragon's Crown, Muramasa: Rebirth o Rayman Origins/Legends. Sus indies, una de las grandes bazas de las consola, son incontables, y son los que mantienen el catálogo en funcionamiento en los meses más escasos de la consola.
Volviendo a la pregunta inicial, muchos afirman que de seguir este ritmo de ventas, PS Vita sería la última portátil de Sony. Pero, habiendo abierto una brecha en el dominio de Nintendo sobre este tipo de consolas, ¿sería capaz Sony de renunciar al mercado? Las posibilidades de Sony son muy diferentes a las de la gran N, ya que el ecosistema PlayStation no tiene tanto miedo al de las plataformas móviles. De hecho, una de las divisiones de la marca, PlayStation Mobile, aúna estos conceptos, teniendo en cuenta que Sony ya participa en el mercado de las tablets y smartphones con su marca Xperia.
Por tanto, uno de los posibles futuros de la compañía podría pasar por integrar su concepto de portátil en sus futuros móviles, compatibilizando, por ejemplo, todo el catálogo de PS Vita y PSP en estos dispositivos, donde podrían coexistir con el ya vasto catálogo de juegos para Android. Sin embargo, volveríamos al problema inicial: el control, que obligaría a la compañía a lanzar una línea de teléfonos similar al concepto de Xperia Play, o compatibilizar sus DualShock con sus smartphones. Dos caminos que, si bien son ya explorados en el mercado móvil, no parecen encajar ser la opción más escogida por los consumidores a la hora de disfrutar del videojuego en su smartphone.
De hecho, la posibilidad de que Sony se pase por completo al mercado móvil no tendría por qué suponer el fin de Vita, gracias a su fuerte enfoque en la tienda digital. Si bien en el futuro se podría perder la distribución física, PS Vita podría ser perfectamente compatible con una nueva gama de juegos para smartphones y tablets y prolongar su vida mucho más allá de su ciclo.
Otra de las opciones a explorar por parte de la compañía es el uso del streaming fuera del ecosistema del hogar. Ya hace un año, Sony comercializaba su PS Vita mostrando la posibilidad de jugar a títulos de PS4 como Knack en su portátil en cualquier lugar a través de una conexión de datos. Sin embargo, debido a las dificultades de las coberturas en distintos países y zonas, así como la necesidad de estar siempre conectado a la red para jugar, hacen de esta opción extremadamente difícil.
Alternativas portátiles
Pero espera, hay una tercera en discordia: el PC. Son muchos los intentos de minimizar el hardware de PC hasta el punto de crear algo portátil. Hay ejemplos de todo tipo, pero quizá algunos de los más importantes de los últimos años sean NVidia Shield, una portátil creada por la fabricante de tarjetas gráficas, que pretendía mezcla en universo del juego Android con su chip Tegra 4, el confort de un pad tradicional y el streaming de tu completa biblioteca de Steam a través de la red interna de casa. El proyecto no fue muy del gusto del usuario, ya que su opción más interesante (hacer streaming de juegos de PC) quedaba relegada dentro del hogar, todo unido a un precio demasiado abultado para un aparato no muy cómodo de llevar contigo.
La compañía creadora de tarjetas gráficas, sin embargo, volverá a intentarlo de nuevo. La nueva NVIDIA Shield nos ofrece una tableta especialmente destinada a jugadores, con un poderoso chip Tegra K1 y una pantalla de 8 pulgadas, todo unido a un mando para poder trasladar la experiencia de consola a este nuevo tipo de dispositivos. Al igual que con la primera Shield, podremos hacer streaming desde la red doméstica de nuestros juegos de PC, y gracias a su nuevo mando se pretende mantener el control tradicional de consola. ¿Será esta la solución para el juego móvil? Difícil de predecir, ya que como hemos explicado al principio del artículo, ya existen soluciones en forma de mandos que son perfectamente compatibles con una tablet o smartphone. Incluso nuestro mando de Xbox o PlayStation de anterior o nueva generación es compatible con cable o bluetooth.
De hecho, el streaming de juegos es uno de los aspectos con los que más se está investigando en el mercado móvil. Aplicaciones como Limelight, para Android, son capaces de hacer streaming de tus juegos de PC a tu smartphone, aprovechando la tecnología de NVIDIA y haciendo creer a la plataforma que tu teléfono es una NVIDIA Shield, sin embargo, requiere de una potente red doméstica y sigue estando relegada al juego portátil en casa.
Las dos opciones más interesantes presentadas para el juego de PC fuera de casa (descontando, por supuesto, los portátiles de alta gama) son la Razer Edge Pro, de Razer: una tableta de altísima gama con sistema operativo windows y el proyecto SteamBoy. La Razer Edge es, en el fondo, un ordenador en forma de tablet con un hardware capaz de mover hasta juegos como Crysis 3 sin despeinarse. A través de unos accesorios con forma de pad o, simplemente conectando uno tradicional, es posible disfrutar del juego portátil todo lo que dure su batería. Sin embargo, sigue siendo una opción demasiado grande para el gusto de muchos y demasiado cara para la mayoría de consumidores. SteamBoy, por su parte, pretende ser la primera Steam Machine portátil de su género. Con un procesador Quad-Core, 4GB de RAM y una tarjeta gráfica integrada, el proyecto no pretende ser una máquina de última generación, sino que apunta a mover en su pantalla de 5 pulgadas la mayoría de juegos presentes.
El futuro, en Stand-By
Todavía queda un largo camino para que las portátiles actuales lleguen al fin de su ciclo, pero los factores del presente están influyendo mucho en las decisiones de estas dos grandes compañías a la hora de trazar su futuro. Los analistas siguen concluyendo que el mercado móvil es el futuro, los accionistas tampoco parecen ver clara la respuesta y muchas third-parties parecen haber emigrado al desarrollo móvil, mientras que otras siguen apostando por Nintendo 3DS y PS Vita, sobre todo en territorio japonés.
En el caso de Nintendo, con 44 millones de consolas vendidas, es difícil afirmar que 3DS vaya a ser la última de su especie, pero su competidor en los últimos años ya no es sólo PS Vita, sino los miles de millones de smartphones y tabletas vendidos en todo el mundo. Nintendo parece tener un plan para el futuro, mientras que Sony todavía no parece haberse pronunciado al respecto, teniendo muchas opciones todavía que explorar.
En cuanto a juegos, el futuro es esperanzador, pero parece que la edad de oro del juego en portátil será difícilmente tan prolífica como lo fue con PSP y Nintendo DS, con decenas de títulos cada mes y muchos equipos de desarrollo concentrados casi en su totalidad en este tipo de máquinas. "Esta es posiblemente la última generación de portátiles de la Historia", dicen. Piensa en la primera vez que sostuviste una Game Boy en tus manos. O una Game Boy Color. O una Game Boy Advance. O una Nintendo DS. O una PSP. El jugador ocasional puede jugar con su móvil un año sí, un año no. El tradicional seguirá siéndolo y, mientras que exista, seguirá habiendo mercado para él. Un puñado de números más altos o más bajos pueden suponer más o menos cantidad, pero mientras que haya jugadores, habrá juegos para ellos.
LA PREGUNTA