BioShock: Avance 3DJuegos

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Los creadores de System Shock 2 nos transportan a las profundidades oceánicas para hacernos partícipes de una aventura de acción en primera persona, con tintes de investigación, rol y misterio.

Bioshock ha creado una expectación espectacular a su alrededor, y eso que hasta 2007 no se espera su lanzamiento para Xbox 360, PC y quizá PS3. La calidad de la demo probada en el E3, unido a los espectaculares detalles acerca del juego que nos van llegando con cuentagotas, no pueden ser mejores señales. Todo esto unido al hecho de que viene abalado por una compañía de la calidad y el renombre de Irrational Games, dispara nuestras esperanzas. A Bioshock le queda todavía un año de desarrollo, pero no puede ir por mejor camino.

En 1999 surgía System Shock 2, un revolucionario First Person Shooter que dejaba una brillante impronta en el género, y que a ojos de las masas elevaba a la categoría de genios a sus desarrolladores, Irrational Games. En pleno 2006 y tras la semi-absorción de la compañía por parte de Take-Two, había muchas dudas sobre sus futuras creaciones, y sobre la posible “mano” que pudieran meter los nuevos y conocidos distribuidores; pero tras el fiasco comercial del interesante Tribes: Vengeance parecía obvio que resultaba fundamental llevar a cabo cambios drásticos.

Bioshock ha tenido una brillante presentación en el último E3. La casi totalidad de las revistas especializadas le han tenido en cuenta a la hora de premiarlo como lo mejor de la convención, o citarlo entre las menciones de honor. La física, los entornos, la interacción con todos los elementos, el diseño artístico… todo parece hecho para deslumbrar, y desde luego que lo consiguieron.

Sucesor espiritual
Si bien Bioshock no es una tercera parte de la saga System Shock, si que podríamos calificarla de heredera por algunos aspectos que tienen que ver con el desarrollo del juego y con algunas coincidencias temáticas. El título combinará a la perfección la acción en primera persona con la investigación, ciertos elementos de rol y el terror.

Bioshock se desarrolla en una desolada ciudad submarina llamada Rapture, en la que sus habitantes han perdido el juicio y sufren todo tipo de mutaciones.
Bioshock se desarrolla en una desolada ciudad submarina llamada Rapture, en la que sus habitantes han perdido el juicio y sufren todo tipo de mutaciones.

La ciudad de Rapture, erigida en las profundidades oceánicas, es un experimento casi utópico en el que habita una suerte de élite genética de seres humanos, en un intento por desafiar los preceptos de la naturaleza. Nuestro personaje llegará a la ciudad cuando todo comience a desmoronarse. Sin ánimo de desvelar detalles importantes del apasionante argumento del videojuego, podemos señalar que el desorden se origina al descubrir que un material genético, conocido como Adam, en principio pilar fundamental de esta sociedad, empieza a ser utilizado para otros fines tales como mejorar las habilidades o el aspecto de los ciudadanos. Su uso acaba descontrolándose y termina por alterar el armónico equilibrio de Rapture, convirtiendo a esta utopía social en una pesadilla.

Siniestro ecosistema
La inteligencia artificial sigue un curioso discurrir al que poco estamos acostumbrados. Según Irrational Games, el comportamiento de los habitantes de Rapture sigue unos patrones basados en una especie de ecosistema del que todos sacan algún provecho. Apenas conocemos detalles de los personajes que vamos a encontrar, pero si que sabemos de algunos matices. Por ejemplo, al inicio del juego nos toparemos con unas siniestras niñas que forman un peligroso tándem con unos seres enfundados en un sobrecogedor traje de buzo, por así decirlo un “hermano mayor”. Las niñas procesan la sustancia genética de los cadáveres, y sus compañeros las protegen de sus enemigos en ese brutal mundo. Para los chicos de Irrational Games, el interés por el servicio que las niñas prestan a los buzos es el que les empuja a protegerlas. Esperemos que esto no sea en realidad un simple tic de programación para agrupar a los NPCs por parejas, y que no quede reducido finalmente a una mera relación entre personajes del tipo “acabas con mi aliado-acabo contigo”. Ojalá que esto se expanda en todas las direcciones que una premisa tan innovadora como esta parece prometer.

Poderío gráfico
Lo tecnológico es uno de los puntos fuertes de Bioshock. El juego hace uso del potente hardware de Xbox 360 y, aunque está por confirmar, casi seguro que de los brutales recursos del inminente Directx10, para ofrecer unos entornos y unos personajes con un nivel de detalle salvaje.

El sensacional diseño artístico que mezcla la decoración de los años 50, con artefactos científicos de claro aspecto retro, ofrece una atmósfera única y un lugar inmejorable para ambientar un juego de estas características.

Los efectos han sido muy bien cuidados. El fuego está brillantemente recreado, y el agua hay que verla para creerla. Se trata auténticamente de otro personaje más, y en una ciudad sumergida aporta un cariz claustrofóbico al desarrollo del juego verdaderamente dramático.

Poco conocemos todavía de todo lo que puede ofrecer Bioshock, pero lo que hemos visto no puede ser tener mejor aspecto. Una pequeña demo que sólo se pudo ver en el E3, escasas screens in-game, y algunas imágenes del art-work del juego. Pero lo que está claro es que este título no se queda en el vulgar shooter, va mucho más allá. Incluye exploración, terror, personalización de las aptitudes del personaje, acertijos y puzzles, una música soberbia y posiblemente la mejor dirección artística que hemos visto nunca en un videojuego. Bioshock es todo eso y mucho más. Su lanzamiento, si nada se tuerce, se espera para el primer trimestre de 2007.

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